OTRA AVENTURA
Despu�s de que mi marido haya contado su parte de la historia
con Claudia me he decidido a escribir otra parte m�s de nuestras er�ticas
aventuras.
Tras bastante tiempo d�ndome el co�azo para que nos
mont�ramos otro tr�o con Claudia en Barcelona y despu�s de no haber accedido a
ello me decid� a prepararle una sorpresa.
Aprovechando la visita que tuve que hacerle a una amiga que
hab�a sido hospitalizada en Gerona a causa de un accidente, nada grave por
cierto pero si muy aparatoso, me las ingeni� para pasar por Barcelona y quedar
con Claudia, tras nuestro encuentro el a�o pasado nos intercambiamos los
tel�fonos pero no nos hab�amos hablado desde entonces, qued� con ella en un
disco-bar muy famoso y tras alojarme en un hotelito de la Barceloneta me fui a
su encuentro.
Llegu� bastante pronto y ella todav�a no hab�a llegado al
local y el ambiente empezaba a estar caldeado, muy pronto me di cuenta que el
ambiente era "ambiente" de verdad, las parejas de chicos y chicas eran muy
evidentes y tomando mi primer mart�ni estaba cuando una preciosa chica se me
acerc� y me invit� a otra copa, era bastante joven e iba muy sexy, falda
cortita, un top muy ajustado y brillante que resaltaba sus grandes tetas, y una
carita de angel deliciosa, yo desde nuestra aventura con Claudia ve�a a las
mujeres de diferente manera y llegu� incluso a reconocer cierta bisexualidad,
Intent� negarme a la invitaci�n pero ella era muy insistente
y ante la tardanza de Claudia al final acept�.
Sara, que as� se llamaba se sent� en el taburete junto a m� y
comenzamos a hablar, me pregunt� si ven�a mucho por all�, y tras varios minutos
de vanal conversaci�n me pregunt� si estaba casada se�al�ndome el anillo y que
si hab�a cambiado de acera, en tono gracioso, yo le dije que no que estaba
esperando a una amiga y que era muy feliz en mi matrimonio.
Sara se extra�� un poco pero sigui� con la conversaci�n
directa al grano pregunt�ndome si lo hab�a hecho con alguna chica alguna vez, yo
me sonre� ante el descaro de esta cr�a a la que seguramente le pasaba quince
a�os, y le contest� que ese pod�a decir que si� Justo entonces apareci� Claudia,
espectacular, impresionante, Sara y yo la miramos con la boca abierta, el
ajustad�simo vestido corto que llevaba se ajustaba como un guante a su cuerpo
resaltando sus curvas, Claudia me dio dos sonoros besos y un fuerte abrazo, le
present� a Sara, la cual una vez la present� hizo adem�n de irse y dejarnos
solas pero Claudia, reaccionado antes que yo la agarr� del brazo y le dijo que
no se ten�a porque ir que est�bamos entre amigas y pod�amos cenar las tres
juntas, Sara acept� encantada, pedimos otro mart�ni y nos pusimos a hablar de
todo un poco, hasta la hora de cenar en un restaurante cercano.
La cena fue de lo m�s distendida, re�mos y hablamos sin
parar, parec�a como si nos conoci�ramos de toda la vida, incluso Sara se
compenetr� con nosotras enseguida.
Le coment� a Claudia que quer�a darle a mi marido una
sorpresa, y le pregunt� si estaba dispuesta a venirse conmigo un par de d�as y
repetir lo irrepetible de aquella noche en Barcelona. Sara estaba flipando e
incluso me recrimin� que antes le dije que no hab�a tenido relaciones con otra
chica y Claudia le respondi� que no era lo que parec�a riendo a carcajadas.
Sara lo cogi� al vuelo y mirando a Claudia con los ojos como
platos no se pudo reprimir y por debajo de la mesa meti� su mano entre sus
muslos alcanzando su delicioso caramelito, Sara para ser lesbiana, estuvo
durante varios segundos palpando el paquete de Claudia mientras esta se re�a y
excitaba cada vez m�s. Yo me anim� tambi�n y me un� a Sara en los tocamientos,
la polla de Claudia estaba cada vez m�s gorda y estuve a nada de sac�rsela del
tanga y empezar a masturbarle, pero el camarero lleg� con los segundos platos y
nos pill� in fraganti, las dos sacamos las manos de debajo de la mesa
r�pidamente y comenzamos a re�r a carcajadas mir�ndonos con ojos lascivos.
Durante los postres le contamos a Sara nuestra aventura con
todo tipo de detalles con lo que nos confes� que se estaba poniendo a cien y que
ten�a el tanga completamente mojado, Claudia propuso que nos fu�ramos a un local
muy �ntimo que conoc�a y del que Sara dio buena cuenta, cojimos un taxi y nos
fuimos.
La verdad es que el sitio era una especie de casa de citas de
alto standing, nos recibi� una especie de Madamme y tras hablar Claudia un
momento con ella nos hizo pasar a una sala decorada exquisitamente con una cama
redonda gigantesca, una mini barra de bar, sof� y cojines por todos lados.
Claudia abri� una botella de cava y las tres con una sonrisa
en los labios brindamos por los buenos tiempos.
Yo no ten�a previsto acabar la noche as� pero despu�s de
conocer a Sara y lo calentita que se hab�a puesto la noche no tuve ning�n reparo
en pasar un buen rato con las dos, la idea me puso a cien, no me lo pens� y
decid� que era un buen d�a para unirme a estas dos bellezas.
Claudia nos pidi� que nos sent�ramos en el gigantesco sof�,
puso m�sica suave y lentamente empez� a contonearse al ritmo de la m�sica.
La verdad es que Claudia, como ha descrito mi marido es un
bellez�n, Sara se relam�a solo de verla moverse, Claudia se acariciaba por
encima de vestido las tetas, el culo, las piernas y su entrepierna lentamente y
poco a poco dej� al descubierto su generoso pecho, mir� a Sara y ya se hab�a
comenzado a sobar el chumino por encima del tanga, decididamente se acerc� a mi
y me beso en la boca posando sus manos sobre mis recien operadas tetas, (al
final me decid� y me oper� el pecho aunque ahora pienso que me pas� un poco
porque pas� de una talla 90 a la 105, mi marido no puso reparos pero yo todav�a
no me he acostumbrado), yo le correspond� al beso ofreci�ndole mi lengua y mi
mano se pos� sobre su tanga apart�ndolo h�bilmente a un lado insert�ndole un
dedito en su mojad�simo conejito.
Claudia totalmente desnuda se acerco a nosotras y con su
enorme polla completamente erecta nos dio un toquecito en la cara, Sara se
sobresalt� y se dej� caer sobre el respaldo del sof� y yo sin pens�rmelo me la
met� en la boca, a�n recordaba el curioso sabor de la polla de Claudia, la
recorr� desde la punta hasta la base y me met� uno de sus depilados test�culos
en la boca, succion�ndolo hasta casi morderlo.
Sara continu� recostada, mir�ndonos, con una mano dentro de
su top pellizc�ndose un pez�n y la otra en su delicada vulva, masturb�ndose como
una loca, relami�ndose, con una cara de viciosa que har�a levant�rsela a un
muerto.
Mi boca recorr�a la polla de Claudia sin parar, todo su
grosor, su gordo glande, las potentes venas que la recorren, eran suavemente
ensalivadas por mi lengua, en un momento le ofrec� la polla a Sara, y ella
acerc�ndose a nosotras nos dijo que nunca hab�a probado una de verdad, yo la
dije que ya era hora y delicadamente poso sus carnosos labios sobre la punta del
capullo, abriendo su boca se lo envolvi� y haciendo un esfuerzo se la meti� todo
lo que pudo en la boca, yo la masturbaba mientras Sara se la segu�a mamando.
Los lametones fueron cada vez m�s intensos y yo me un� a Sara
en la mamada recorriendo cada una a un lado la polla y uniendo nuestras lenguas
en la punta, saboreando su liquido preseminal, Claudia agarr� nuestras cabezas y
con una gran tensi�n se corri� en nuestras bocas, donde nuestras lenguas
luchaban por hacerse con el dulce manjar de sus test�culos, las dos nos unimos
en un h�medo beso, intercambiando semen y saliva hasta que Claudia se uni� a
nosotras ofreci�ndonos su lengua entre nuestras bocas.
Acto seguido, Claudia me recost� sobre el sof� y se puso
entre mis piernas, su lengua alcanz� mi cl�toris justo cuando Sara se termin� de
desnudar y a horcajadas me ofreci� su conchita justo a la altura de mi boca.
Mi lengua prob� por primera vez el sabor de una vagina que no
fuera la m�a y la lengua de Claudia se habr�a paso entre mis labios,
electriz�ndome cada vez que su punta rozaba mi sensible cl�toris.
Me resultaba bastante dif�cil concentrarme en mi lamida al
co�ito de Sara, ya que la lengua de Claudia recorr�a toda vulva y la entrada de
mi ano de forma vertiginosa, las sensaciones eran muy intensa y Sara agarraba mi
cabeza centr�ndomela en su co�ito, mi lengua entraba y sal�a de su vagina y la
recorr�a de arriba abajo, no tard� en llegar al orgasmo y entre convulsiones
sent� como Sara se corri� cuando me aplast� la nariz contra su chochito, sus
jugos recorrieron mi garganta y cuello, las tres quedamos rendidas sobre el sof�
y Claudia propuso que nos meti�ramos en la ba�era redonda del ba�o.
Las tres completamente desnudas, nos metimos en la ba�era y
antes de que Sara se pudiera sentar con nosotras nos apoderamos de sus caderas
haciendo que pusiera una de sus piernas sobre el borde de la ba�era, Claudia por
el agujerito de su chochito y yo por el de su culito le comenzamos a lamer como
posesas, nuestras lenguas se un�an en uno u otro y Sara empez� a decir que se
corr�a y que se meaba, que nos apart�ramos, que se meaba, se meaba, se meaba y
se me�, en un glorioso orgasmo en el que chillaba y chillaba, su vejiga no
aguant� y se me� sobre nosotras (conocidos son los gustos de Claudia y ahora
m�os tambi�n) con fuerza, Claudia fue la primera que recibi� la dorada lluvia
del conejito de Sara, luego yo me un� a ella dejando nuestras caras a su merced,
la orina nos recorr�a el cuello y las tetas y nos unimos en un h�medo beso con
todo el chorro en nuestras frentes.
Sara no sal�a de su asombro ante nuestra reacci�n, nos
coment� que nunca le hab�a pasado nada igual, y le parec�a incre�ble que
hubi�ramos hecho eso con tanto gusto y placer, las tres nos unimos en un gran
beso y nuestras lenguas empezaron a jugar por nuestros cuerpos.
Claudia nos coloc� a cuatro pata, apoyadas sobre el borde de
la ba�era y con el culo en pompa nos empez� a lamer el agujerito del culo
mientras nos bes�bamos Claudia nos met�a la lengua alternativamente en el ano,
las dos est�bamos mojad�simas cuando sent� apoyar la punta del rabo en la
entrada de mi agujerito, de un solo empuj�n entr� pr�cticamente entera, sus
bombeos eran muy fuertes y Sara me masturb� a la vez, el orgasmo no tard� en
llegar y entre espasmos me corr� brutalmente mientras Claudia no paraba de meter
y sacar su poll�n de mi culo.
Sara le pidi� a Claudia que la penetrara por detr�s pero con
cuidado porque pr�cticamente era virgen, solamente un peque�o vibrador hab�a
pasado por su agujerito anal.
Sara se volvi� a colocar a cuatro patas y fui yo quien le
termin� de preparar para la enculada, agarr� la polla de Claudia y se la dirig�
al ano, Sara se agarraba los cachetes con las dos manos mientras yo apuntaba y
Claudia lentamente empujaba su cuerpo contra Sara, la polla empez� a entran
lentamente y los gritos de Sara iban convirti�ndose en gemidos a medida que
entraba dentro de ella, Claudia empuj� hasta el final y cuando sus huevos
tocaron su vulva Sara pidi� a gritos que no parara que quer�a m�s y m�s, Claudia
sigui� empujando, y el mete saca fue bestial, Sara no paraba de gritar y yo la
masturbaba por debajo como hab�a hecho ella conmigo, se pudo correr dos veces
antes que Claudia sacara la polla de su culo y nos la ofreciera en la boca a
Sara y a m�, la corrida de Claudia fue bestial y las dos la recibimos con pasi�n
relami�ndonos de gusto, el semen corr�a por nuestras bocas y su polla parec�a no
tener fin cuando nos la volv�amos a meter en la boca con todo su semen por
nuestra lenguas y gargantas.
Las tres terminamos en la cama para toda la noche, volvimos a
comernos la polla de Claudia por la ma�ana antes de salir de la habitaci�n y
despidi�ndonos de Sara nos dispusimos para el viaje y poder darle la sorpresa a
mi marido llegando dos d�as antes de lo que el esperaba�