Como hac�a mucho calor decid� bajar a comprar algunas
cervezas para refrescar la tarde y guardarle unas fr�as a mi cu�ado cuando
regresara de trabajar.

Al subir mi hermana se estaba ba�ando, met� las cervezas en
el refrigerador y se sent� en el sof� a leer una revista que esta all�. Hasta
ese momento todo estaba bien.

Cuando miraba la revista apareci� una publicidad de "yahoo" e
inmediatamente vino a mi mente "Maby" una chica de "" y comenc� a
recordar todos y cada uno de los mensajes que nos hemos enviado, sent� que mi
pija se levantaba y que estaba algo excitado. Como estaba en casa ajena cambi�
mi pensamiento y decid� escuchar m�sica. Mis sobrinos estaban cada uno en su
cuarto. Maby regres� a mi mente y me trajo una morbosa idea.

Fui a la cocina a buscar una cerveza y decid� llev�rsela a mi
hermana que ya hab�a salido del ba�o y se encontraba en su cuarto. La puerta
estaba cerrada pero no ajustada. Respir� profundo y entr� sin avisar, del susto
y la sorpresa la toalla que ten�a mi hermana cay� piso, r�pidamente se agach� y
la recogi�. Le ped� disculpas por lo sucedido, pero le dije que se quedara
tranquila porque total yo era su hermano. Eso la tranquiliz�. Le ped� permiso
para ver un poco de TV mientras ella se vest�a y le dije que se olvidara que yo
estaba all�. Ella se puso de espaldas a mi con su toalla alrededor de su cuerpo,
solo pod�a ver sus enormes muslos y espor�dicamente el borde se sus nalgas. (Mi
hermana tiene 40 a�os, se ve muy conservada, es morena, tiene un lindo rostro,
cabello negro largo y una muy buena figura).

Como ella estaba frente al espejo el reflejo dejaba ver sus
hermosas y provocativas tetas, talla 36, firmes y con sus largos pezones
parados, mientras yo me hacia el disimulado, pero aquella imagen ya me hab�a
trastocado los sesos, mi pija ya estaba totalmente parada y comenzaba a brota el
liquido seminal, lo sent�a, cre�a que iba a reventar la cremallera, decid�
salirme de su habitaci�n.

Me dirig� a la cocina a buscar otra cerveza y regres� de
nuevo al cuarto, como mi hermana pensaba que yo no entrar�a de nuevo estaba
totalmente desnuda, cuando entr� qued� boquiabierto al todo su hermoso cuerpo y
le ped� que no se preocupara por mi, pero yo no pude contener mirada morbosa y
fij� mis ojos en su concha, estaba peluda y le coment� que si no se depilaba,
ella se sonroj� y me dijo que no, y que le daba pena que la viera, pero la
tranquilic� de nuevo record�ndole que yo era su hermano.

Para suavizar la cosa le comente que a pesar de su edad ten�a
un hermoso y provocativo cuerpo y que seguro era la envidia de muchas mujeres y
el deseo de muchos hombres, aprovech� para decirle que yo estar�a muy orgulloso
si mi esposa tuviera un cuerpo parecido al suyo.

Ante aquel espect�culo y para no cometer una locura decid�
salirme definitivamente. Me sent� nuevamente en el sof�, pero el pensamiento
morboso no me dejaba concentrarme en nada, fue cuando entonces decid� hacerme
una paja. Me met� en el en ba�o de visitantes, que tiene el cerrojo da�ado, baj�
mis pantalones hasta al piso y comenc� a empalmarme la pija, estaba gruesa,
grande, caliente y totalmente lubricada por la cantidad de l�quido que hab�a
brotado por la cabeza, lo sobaba lentamente pensando en la concha de mi hermana,
en chup�rsela, en mamarle los pezones, mi cuerpo se estremec�a cada vez que la
recorr�a con mi mano, ten�a los ojos
cerrados, pero repentinamente sent� que alguien espiaba, estaba en lo cierto,
era mi hermana que me miraba a trav�s de la entrepuerta. Me sorprendi� y deje de
pajearme (nunca antes nadie me hab�a pillado), pero ella muy tranquilamente
entr� al ba�o ajust� la puerta y me pidi� que continuara porque nunca hab�a
visto a un hombre masturb�ndose y que le produc�a mucha curiosidad y morbo
pensar que era porque la hab�a visto desnuda. No dud� en hacerlo, volv� a
agarrar mi pija ahora mas caliente y aceler� el ritmo hasta hacer brotar toda mi
leche caliente. Mi hermana me mir� fijamente, sonri� y se sali� del ba�o.

Yo me qued� all� parado, me sent�a como un imb�cil, pajeado,
con mi mano llena de semen sin saber que hacer, luego reaccion�, me limpi� y
sal� a tomarme otra cerveza. Estaba tembloroso, aturdido, pero a la vez segu�a
excitado. Pero algo dentro de mi me dec�a que eso no era correcto, que no estaba
bien.

Entre nuevamente a la cocina y mi hermana estaba preparando
la cena, no me hizo ning�n comentario. Yo le dije que me marchaba, pero ella me
pidi� que antes le hiciera unas compras en el supermercado. Sal� inmediatamente
y decid� bajar por las escaleras desde el piso 12, para ver si caminando me
pod�a despejar. Hice las compras y camin� un rato, logr� estabilizarme y
regres�, al llegar me encontr� con mi cu�ado que hab�a llegado del trabajo. Le
dije que me marchaba, pero se neg� a dejarme salir.

Conversamos mientras nos tomamos las cervezas, luego cenamos,
vimos en TV un juego de b�isbol de la liga local, escuchamos algo de m�sica y
fuimos a dormir.

A mi me toc� dormir en el cuarto de mi sobrino, estuve toda
la noche pensando en lo sucedido, hasta que me qued� dormido.

Esta ma�ana cuando eran las 7.30 a.m., mi cu�ado nos despert�
a todos porque �l y mi sobrino ten�an que ir a un torneo de tenis y quer�a que
lo acompa��ramos. Yo le dije que no pod�a porque tenia otras cosas que hacer y
mi hermana le coment� que ella prefer�a quedarse haciendo arreglos en la casa.

Desayunamos, los deportistas se fueron y se llevaron a mi
sobrina quien tambi�n practica el deporte.

Nos quedamos solos y mi hermana me sugiri� que me ba�ara,
mientras se secaba la camisa que me hab�a lavado y me pidi� mis medias y
calzones para lavarlos tambi�n. Acept� porque ya no me daba tiempo de regresar a
casa a cambiarme.

Mientras me ba�aba estuve a punto de pajearme nuevamente,
pero me contuve para llegar a casa y cogerme con todas las ganas que ten�a a mi
esposa.

Sal� de la ducha y me met� en la habitaci�n de mi sobrino y
me acost� en su cama, con la toalla sobre mi cuerpo, a esperar que secara mi
ropa, pero como estaba algo trasnochado me qued� dormido profundamente. Al rato
sent� un movimiento extra�o en la cama y SORPRESA!!!! Era mi hermana que hab�a
entrado sigilosamente y estaba arrodillada en un costado de la cama y hab�a
levantado mi toalla y se llevaba mi pija a su boca, comenz� a succionarla
suavemente, con su boca tibia, le pasaba ligeramente su lengua por la cabeza,
manten�a sus ojos cerrados, la agarraba con sus manos cuidadosamente como si
fuera un trofeo de cristal, fue acelerando el ritmo y yo estaba como loco,
jadeando, dici�ndole lo rico que lo hac�a, me lo mam�, me lo chup�, me lo lami�,
me lo paje� hasta hacerme acabar. Con mi leche entre sus dedos los meti� en su
boca, dejando ver los hilos de semen chorreaban entre sus manos y en sus labios.
Se acerc� a mi cara y me dio un tierno beso en mis labios y me dio las gracias.

Como yo estaba a mil, la tome entre mis brazos, la acost� en
la cama y me baj� a su concha, quite sus bombachas y me met� entre esa nube de
pelos para encontrar su cl�toris, y comenc� a lamer lentamente su concha
mientras sent�a su cuerpo estremecer, pidi�ndome que acelerara el ritmo con mi
lengua, pero yo estaba sumergido en su concha chupando y tragando aquel viscoso
l�quido que brotaba del interior de su vagina. Cuando sent� que su cuerpo
reclamaba a gritos un orgasmo, me acost� en la cama y le ped� que se sentara
arriba de mi, en mi cara, desde esa posici�n comenc� a mover r�pidamente mi
lengua entre su concha y su culo, ella se mov�a como si estuviera cabalgando
hasta que me agarr� por los cabellos y comenz� a convulsionar de placer, estaba
acabando, coloque mi boca en toda la salida de su concha para no dejar escapar
nada de su rico n�ctar.

Cansada de la acci�n se baj� y se recost� a mi lado, de
espaldas, dejando la posici�n ideal para que la abrazara y le agarrara sus
tetes. Estuvimos acostados como 1 hora, sin hablar, luego nos paramos, nos
duchamos cada quien en su ba�o, nos vestimos.

Luego hablamos un poco del tema y me hermana me pidi� que la
disculpara y me confes� que no lo hab�a planeado, que s�lo hab�a entrado a la
habitaci�n de mi sobrino y cuando me vio all� acostado se apoder� de ella un
deseo incontrolable y que sumado a lo que hab�a visto el d�a anterior, hizo que
no lo pensara antes de hacerlo. Pero que honestamente lo hab�a disfrutado, pero
que esperaba que no se volviese a repetir.