Bueno, para aquellos que no me conocen soy un chavo que vive
solo desde hace ya bastante tiempo, mi familia gracias al cielo es acomodada y
no tengo preocupaciones econ�micas, aunque eso si, me esfuerzo mucho para salir
adelante por mi mismo, soy bastante alto, mido 1.87, tengo buen cuerpo, ya que
entreno Tae-Kwon-Do, Basket Ball y Americano y bueno en fin no me considero
alguien de mal ver, soy un tipo muy ardiente y me gusta disfrutar al m�ximo,
sobre todo en cuanto al sexo se refiere.

El relato comenz� ya hace varios a�os, desde joven me llam�
mucho la atenci�n de la mente y los diversos senderos que en ella se encuentran,
siendo hasta ahora uno de los misterios m�s grandes, por lo que me documente al
respecto, nunca lo hice con una mala intenci�n, sin embargo, muchas veces las
cosas se dan, de lo mucho que le� me llam� mucho mas la atenci�n la hipnosis y
el control mental, viendo que en la misma autohipnosis se puede uno ayudar, para
mayor concentraci�n y lograr objetivos mas grandes en menor tiempo, por lo que
empec� a estudiar m�s sobre ese tema, leyendo muchos libros, algunos con puras
tonter�as que la verdad no valen la pena leerlos, pero otros muy grandes como el
de un autor llamado Jeff Easley que te habla de m�todos de hipnosis que se
entienden de una manera sencilla y con ejercicios sencillos.

Algo breve sobre lo que aprend� es que para poder entrar en
un estado hipn�tico se debe estar relajado, por lo que a veces una sesi�n de
masaje facilita las cosas, yo he aprendido muy bien la t�cnica para los masajes
ya que por los deportes que practico muchas veces me lastimo, ya que no soy de
acero o cosas as�, durante varios meses segu� practicando la t�cnica, hasta que
vi que inconscientemente me estaba dando resultados, ten�a un poco mas de
condici�n, pensaba mas claro en clase, en fin estaba mejorando en varios
aspectos.

Un d�a al salir con mis amigos fuimos a la casa de uno de
ellos a festejar, en ese entonces solo era uno m�s de los que formaba parte del
equipo de Americano, aunque en Tae-Kwon-Do, ya era bastante sobresaliente, aun
no entraba en basket, pero me gustaba mucho jugarlo con mis amigos, comenzamos a
beber, a platicar y bromear, habl�bamos de las chicas de la escuela y de alguna
que otra profesora, entre ellas se encontraba la Maestra �ngeles o Angie como le
dec�amos de cari�o, una mujer muy bella. De treinta y dos a�os con muy buenas
formas, ten�a un culo estupendo y grandes senos, estaba bien conservada, muy
bien conservada, se ve�a que hac�a mucho ejercicio, era alta, para ser mujer, de
un metro setenta y cinco mas o menos

- Todos re�mos y asentimos, sin duda Antonio hab�a dicho algo
real, la Maestra Angie era un manjar, sin duda alguna, pero Antonio hab�a dicho
algo que llam� mas mi atenci�n DOMINARLA, sin duda Antonio no hab�a pensado
siquiera en lo que yo imaginaba. Termin� la reuni�n y todos nos fuimos a
nuestras casas. Cuando llegu� a la m�a, me puse a leer sobre la hipnosis y el
control mental, yo me interese mucho y comenc� a hacer mis res�menes, me dorm�
bastante tarde, a la ma�ana siguiente me levant� algo cansado y fui a la
escuela, ese d�a ten�amos clase con la Maestra Angie, a primera hora, por lo que
quer�a poner en pr�ctica lo que cre�a haber aprendido, me ba�� r�pidamente y fui
a la escuela, llegu� rozando la campana, llegu� a la puerta al mismo tiempo que
la Maestra Angie, la cual sonr�o y me dej� pasar antes que ella, me sent� y
comenzamos al clase, ese d�a entregamos una tarea, por lo que estuvo
revis�ndolas un buen rato en lo que nosotros deb�amos hacer otras
investigaciones, como Antonio estaba cerca de mi me dio un codazo y dijo

- Yo algo avergonzado me par� tom� mi laptop y me pas� al
asiento, mientras la Maestra me ve�a, me sent� y volte� a ver a Antonio que se
re�a por lo bajo, no le di importancia y me puse a hacer mi investigaci�n,
volteaba a ver a la maestra que ya hab�a terminado de revisar las tareas y se
daba vueltas en el sal�n, luego se paro frente a mi, recarg�ndose en el
escritorio, yo la vi y record� lo del libro, por lo cual la vi a los ojos, ella
me volte� a ver y luego regres� su mirada a la clase, yo ve�a directo a sus
ojos, ella volvi� a voltear a mirarme algo extra�ada, pero se qued� mir�ndome un
poco confusa, en ese momento yo pens� en que se quitara el saco y se abriera los
dos botones siguientes de arriba de la blusa, ella parpadeo y volteo a otro
lado, sigui� todo sin cambio alguno, aunque yo me sent�a muy cansado, as� que
segu� haciendo mi investigaci�n, termin� la clase, me estaba levantando cuando
la maestra me dijo.

- No me enoje maestra � dije en mi defensa.

Yo s�lo me desped� y fui a mis dem�s clases, aunque no pude
poner mucha atenci�n., pensaba que tal vez hab�a sido una gran casualidad, pero
luego me dije, no seas est�pido, fuiste t� quien lo hizo, por ello se apen�,
pero me di cuenta que la orden que ten�a que enviar deb�a ser algo mas
especifica, por lo que segu� practicando, vi a una compa�era, guapa, que no
necesitaba mucho de controlarla para tener algo con ella, pero la vi directo a
los ojos he intent� hacerlo, pero no consegu� nada, por lo que pude observar que
no todos caen de la misma forma durante los siguientes d�as segu� intentando con
la Maestra Angie, algunas cosas si suced�an, como hacer que me hablara al final
de la clase, pero solo era eso, pens� que nada m�s pasar�a, pero la suerte
estaba de mi lado, el viernes la Maestra Angie era la que nos impart�a la �ltima
clase, por lo que cuando termin� la clase todos salimos, me llamo si que yo
hiciera algo, me desped� y fui a ver que ocurr�a

- �Si maestra? � pregunte extra�ado

Me sub� a mi camioneta e iba saliendo de la escuela cuando vi
a la Maestra esperando en el sitio de taxis, me orill� y le pregunt�

- Ella lo pens� un poco, yo para mis adentros dije vamos, ya
que si iba a llevarla no quer�a demorarme mucho, ella de inmediato dijo

Como es normal en la ciudad de M�xico, se hizo un tr�fico
terrible, ya que cuando llueve todo de por si es m�s lento, iba platicando de
cosas sin sentido con la maestra, como de las clases, que qu� me parec�an, que
como ve�a la din�mica, si me gustaba la clase, como me iba en la escuela, y que
tal el deporte y cosas as�, yo le dec�a lo normal, contestando como si fuera una
persona m�s, ya que como yo veo algunas cosas de mis padres aqu� en el D.F trato
mucho con gente mayor que yo y no me coh�bo al hablar con ellos. De pronto
volte� a ver por la ventana del copiloto para pasarme a la derecha, ya que un
carro de enfrente se hab�a descompuesto y observ� de reojo como iba vestida la
Maestra, una falda negra, a medio muslo, la t�pica blusa blanca y el saco, as�
como zapatillas negras y medias negras, bastante bien arreglada y se ve�a
hermosa, se hab�a quitado las zapatillas en el carro, yo creo que para descansar
los pies, r�pidamente me pase y volv� a manejar, aunque aun lento. De pronto me
dijo

Cuando entr� al ba�o un tipo medio aventado me dijo

Yo s�lo sonre�, aunque solo fue cortes�a, pero volvi� a
inquietarme y mis pensamientos se fueron a otro lado, volvimos a la mesa y
comenzamos a platicar, de otras cosas, me pregunto si ten�a novia, que donde
estaban mis padres, que si no me sent�a solo y cosas as�, yo volv� a pensar,
porque no me habla mejor de sexo y la vi, ella me dijo

- �Y que tal el sexo?

- �Que qu� tal el sexo? - Y sonr�o

- �Porqu� dice eso Maestra?

- Ella sonr�o y me sigui� contando de sus problemas m�s
abiertamente, sin problema alguno, terminamos de comer dos horas despu�s, ya
eran las seis de la tarde, pago ella, aunque yo quise pagar ella dijo que ella
me hab�a invitado y luego nos fuimos, llegamos como a las siete a su casa y la
ayud� a bajar sus cosas y la acompa�e a su casa, era bastante bonita, as� que
econ�micamente no ten�an problemas, ella se estaba despidiendo en la perta, pero
yo me sent� excitado y le dije con la mente, Inv�teme a pasar y as� lo hizo,
tomamos un caf� y me sigui� platicando otras cosas, yo ya no estaba interesado
en eso y le pregunt�

- Perfecto pens� en mis adentros y le dije con la mente,
comience a quitarse el saco, las zapatillas y �brase la blusa con naturalidad y
no se percatar� de ello, tardo un poco en entender la orden, yo creo que era
como una resistencia de la mente, algo queriendo salir en defensa, pero al cabo
de un rato lo hizo, , estaba con la blusa abierta, sin saco y sin zapatillas,
pens� que me estaba arriesgando mucho, as� que cuando se sent� yo me pare detr�s
de ella, ella se saco de onda un poco, pero confiaba en mi, as� que le comenc� a
hacer un peque�o masaje en los hombros y el cuello dici�ndolo con una voz
mon�tona y como apenas un susurro que se relajara, que estaba muy tensa, que
disfrutara el masaje, ella poco a poco fue cediendo, yo hab�a le�do que cuando
se escucha y se refuerza con ordenes mentales y en un estado de relajaci�n las
�rdenes son m�s profundas y seguras, as� que poco a poco fui venciendo sus
defensas, cuando estaba casi dormida le dije

- S� � respondi� casi dormida

Ella comenz� lentamente a quitarse la blusa, dejando ver un
hermoso sost�n de encaje, luego bajo el cierre de la falda y la dejo caer se
ve�a hermosa con esa falda, ten�a un liguero negro lo cual me fascino y dije

- No te quites el liguero d�jatelo, al igual que las
medias y las bragas

- Ella obedeci� y se quit� solo el sost�n, era hermoso, esas
tetas al aire firmes y de un excelente tama�o, luego me invit� a la sala, se
sent� en un sill�n individual y yo en el familiar, le dije que viniera, ella lo
hizo, la vi y antes de que se sentar� le dije, qu�date de pie y as� lo hizo, me
qued� admir�ndola se ve�a estupenda, me par� y comenc� a besarle sus tetas,
acariciando sus nalgas y pasando mis mano por encima de sus bragas por enfrente,
eran unas delicias esas tetas, si Antonio me viera se sentir�a frustrado porno
ser �l, apretaba con una mano una de sus tetas mientras que con la otra me la
com�a deliciosamente, ella gem�a poco a poco, sus pezones se endurec�an, sin
duda disfrutaba, aun cuando no estuviera del todo consciente. Yo estaba s�per
excitado y con mi pene al m�ximo, as� que me alej� y me quite r�pidamente la
ropa.

Luego me sent� nuevamente y la admir�, mientras me acariciaba
la verga, luego la tom� de las piernas y comenc� a acarici�rselas, estaban bien
formadas, saqu� el tirante de los ligueros, y le comenc� a bajar las bragas. Fue
incre�ble ten�a perfectamente depilada su v�gina, con un peque�o triangulo
arriba de sus labios vaginales, me sent� atra�do y me hinqu� y le dije que
abriera las piernas, ella las abri� y comenc� a lamerle su puchita, era
delicioso su sabor y su olor, met�a mi lengua dentro de su v�gina y la agarraba
de sus deliciosas nalgas, yo segu�a saboreando su puchita, hasta que vi que sus
piernas estaban temblando por lo que la hice sentarse y que abriera al m�ximo
que pudiera sus piernas, la Maestra hacia ejercicio, algo de gimnasia sin duda,
ya que ten�a mucha elasticidad por lo que me divert� comi�ndole esa deliciosa
panocha.

As� segu� un buen rato, hasta que me levante y me sent� e
hice que me comiera la verga, ella lo hac�a de una manera espectacular, tomaba
mi verga y lam�a mi glande, luego se lo met�a a la boca y masajeaba mis
test�culos, yo la tomaba del pelo y la hac�a hacia delante y hacia atr�s, sent�a
que iba a venirme, por lo que la detuve e hice que se recostara en el sill�n,
ah� comenc� a met�rsela, despacio, ella gem�a y tuvo su primer orgasmo, me
sorprend�a lo caliente que ella estaba y ni que decir yo, pero era aburrido
tanto silencio, por lo que le ordene, que me hablara, y me dijera lo que sent�a
y quer�a y comenz� a decirme

- H�zmelo m�s fuerte, anda � yo pens� que eso era
aburrido y le dije,

- S�, m�temela, mas duro, c�geme, destroza mi puchita,
as�, as�, m�s, m�s

- Yo me excitaba de o�rla decir esas palabras y lo hac�a mas
duro, mientras le apretaba algo fuerte las tetas, y ella gem�a y dec�a

- Si, apri�tamelas, cast�game, soy tu puta, dame, m�s,
m�s.

- Yo la volte� e hice que se sentar� en m� se moviera, sent�a
delicioso, como su v�gina me apretaba, sin duda tenia buen tiempo de no coger
como se debe, yo aprovechaba la pose para besar sus tetas, que brincaban al
ritmo de sus movimientos y con una mano acariciaba su culito y comenzaba a
masajearle el ano.

La puse luego en cuatro patas, yo me ten�a que aguantar para
no venirme, era delicioso, as� comenc� a met�rsela en esa posici�n, mientras
apretaba sus nalgas y le dije

- Separa tus nalgas putita, te la meter� por tu ano

- Ella obedeci� de inmediato, yo le comenc� a estimular el
ano, le met� uno, luego dos, entraban algo apretados, le pregunte si lo hab�a
hecho por ah� y me dijo que no, as� que yo la estrenar�a, de lo que se hab�a
perdido su marido, as� que lo segu� masajeando, y cuando se dilato lo necesario
apunte mi pene a su culito y comenc� a met�rselo, entro con algo de dificultad,
pero segu� meti�ndoselo hasta que estuvo todo adentro y comenc� a moverme, a
ella le dol�a un poco, por lo que le ordene que lo disfrutara y as� lo comenz� a
hacer, al poco rato ya era ella misma la que se mov�a y se tragaba mi verga por
su ano, yo le acariciaba el cl�toris y le apretaba sus tetas, luego la agarraba
de su pelo y la jalaba, ella jadeaba de lo excitada que estaba.

Comenc� a venirme dentro de su culito, lo saqu� y le orden�
tragarse lo que restaba, as� lo hizo, y le dije que siguiera mam�ndolo hasta que
le dijera, era delicioso ver su boca alrededor de mi verga, esa maestra tan
hermosa trag�ndose mi verga, le dije que pusiera mi verga entre sus tetas y me
masturbara as�, y lo hizo, sent�a muy rico, pero me excitaba mas ver a mi
Maestra como mi puta, cuando se me volvi� a para, le dije que me llevara a su
habitaci�n y as� lo hizo y comenzamos a hacerlo nuevamente ah�, le dije que no
fingiera ya si le gustaba el sexo anal, y cuando se lo hice ella disfrutaba, ya
le estaba agarrando el gusto, se lo saque nuevamente y se lo hice en su concha
en su lecho matrimonial.

As� estuvimos toda la noche, a la ma�ana siguiente no fui a
mis entrenamientos de Americano y me reporte enfermo y segu� cogi�ndome a la
deliciosa maestra Angie,

...pero eso lo contare en otra historia

Como es costumbre aqu� les dejo unas fotos, aunque ahora no
tapo el rostro ya que no son de gente que yo realmente conozca, espero sus
comentarios y no dejen de leer mis otros relatos.