Si es cierto que a las mujeres les fascina mantener
relaciones sexuales con caballos, porque se trata de "bestias grandes y
corpulentas que representan el poder", no lo se, lo cierto es que a algunas
mujeres encontramos en estos maravillosos animales una exaltaci�n de nuestra
sexualidad que por alguna raz�n, no encontramos en hombres o mujeres, por mas
que tratemos una y otra vez.

Empec� mi vida sexual a muy temprana edad, primero con
mujeres y luego con hombres en ambos casos siempre con estupendos resultados, mi
encuentro con amantes equinos fue de manera tard�a, casi a mediados de la
universidad justo durante una conocida huelga estudiantil y durante la cual, fui
a dar al rancho de uno de mis t�os para matar el tiempo, solo por un par de
semanas que se transformaron en casi un a�o, en el que descubr� muchas cosas
tanto de mi misma como del placer interespecies.

Mi prima Laura, veterinaria de profesi�n se encargaba del
rancho desde que su padre (Fer) hab�a enfermado a�os atr�s y ya no pod�a
atenderlo personalmente, aunque de hecho, ella siempre estuvo conciente que
alg�n d�a se quedar�a a cargo del mismo, luego de 5 hijas y ya que el var�n
nunca fue concebido, al ser la mayor vino a resignarse a la vida del campo; se
licenci� como medico veterinario justo como su padre deseaba y al cabo de los
a�os la resignaci�n se convirti� en gusto, a las pocas semanas de mi estancia
descubrir�a el porque.

En principio me integr� a las actividades del rancho, cosas
f�ciles para empezar tanto para sentirme �til como para aprender un poco, nunca
se sabe cuando vas a utilizar eso que alguna vez aprendiste y que en su momento
dudaste que te servir�a de algo.

Desde el principio me sorprendi� que Laura no saliera con
nadie, conociendo el sin fin de problemas que tuvo con Fer por sus innumerables
"novios", me parec�a realmente extra�o no haberla visto salir sobre todo porque
los hombres del pueblo no estaban nada mal, finalmente durante una charla
nocturna la cuestion� si no tendr�a alguna aventurilla por ah�, me confes� que
se ve�a con un tipo del pueblo, no se trataba de algo serio era solo sexo
ocasional pero serv�a cuando las ganas de tener a un hombre en la cama se le
sub�an a la cabeza, adem�s no quer�a arriesgarse a una relaci�n formal por el
momento, considerando lo entusiasmada que se encontraba con "otro" amante y ya
que no quiso profundizar mas sobre el asunto opte por dejar la pl�tica y
retirarme a mi cuarto, alegando que las copas se me hab�an subido y quer�a
dormir, ella estuvo de acuerdo pues si hab�amos bebido bastante.

Ya en nuestras respectivas habitaciones, no dejaba de pensar
quien ser�a aquel amante misterioso sobre el que no quer�a hablar, �acaso un
pe�n del rancho, la muchacha que ven�a dos veces por semana para el aseo de la
casa grande? No pod�a saberlo y la idea no dejaba de rondarme en la cabeza tanto
que sal� de la cama para caminar un rato, el fresco era agradable y se me hab�a
hecho ya casi una rutina el salir un par de veces cuando ten�a insomnio.

Esta vez y a diferencia del resto de mis paseos nocturnos
distingu� luz en el establo, en principio me asust� pues podr�a tratarse de
gente extra�a o algo as�, por lo que inmediatamente fui a buscar a Laura, no se
encontraba en su habitaci�n por lo que deduje que seguramente se encontraba en
esos momentos con alguien mas, la curiosidad me llev� inmediatamente al lugar,
la puerta estaba entreabierta y pas� sin ning�n problema y procurando no hacer
ruido.

En efecto, se o�a a lo lejos ruido, se trataba de Laura y por
sus gemidos descarados se evidenciaban claramente que estaba teniendo sexo, me
acerque buscando un sitio donde observar sin que notaran mi presencia, me situ�
tras unas pacas y entonces me quede paralizada por lo que vi.

Laura se encontraba arrodillada, con la blusa fuera y la
falda enredada a la cintura, con una mano se apoyaba en el suelo mientras con la
otra dirig�a el miembro de un caballo hacia su boca, apenas lograba meter un par
de cent�metros si acaso la parte rosa brillante, dejando fuera casi la mayor
parte de la carne negra y colgante, nunca hab�a visto un miembro de tales
dimensiones era indescriptible y ella lo hac�a a�n mas excitante. Chupaba la
punta con dulzura para despu�s succionar toda la barra haciendo una multitud de
gemidos apasionados, su saliva corr�a fuera de sus labios y de vez en cuando le
pasaba la lengua a todo lo largo, desde la punta negra y achatada, pasando por
esos pocos cent�metros de carne rosada hasta arriba, al tronco negro y grueso
que se conectaba con la entrepierna del animal. Nunca cre� que ella fuera capaz
de hacer algo as�, jam�s hab�a mostrado mucho inter�s en los caballos, los
atend�a como al resto de los animales con todo el profesionalismo que le exig�a
su trabajo, ahora se notaba francamente inspirada.

Por su parte el caballo se manten�a de lo mas tranquilo, de
vez en cuando relinchaba un par de veces y daba un pasito o dos hacia el frente,
pero aparte de eso, parec�a disfrutar de lo que Laura hac�a debajo de �l. Para
mi, significaba un espect�culo del que no pod�a despegar la mirada, los senos
menudos pero muy bonitos de ella se balanceaban a medida que la mamada por todo
el tronco se hacia mas intensa, mi vagina estaba por completo empapada y sin
pensarlo mucho dirig� un par de dedos hacia ella para acariciarme.

En eso, suspendi� el trabajo de su boca sobre el miembro y se sent� en el suelo
con las piernas separadas, una mano fue a dar a su sexo mientras que con la otra
masturbaba al animal con todas sus fuerzas, fue cuando habl� dirigi�ndose hacia
donde me encontraba.

� �Por que no te acercas para que veas mejor?, voy a hacerlo acabar y no creo
que quieras perd�rtelo.

Ella sab�a que estaba ah� y no se hab�a cortado en ning�n
momento por el contrario, le hab�a dado una mamada al caballo con una intensidad
que no cre� fuera posible hacerlo con un animal, por un momento dude de salir de
mi escondite pero a final de cuentas lo hice, estaba que reventaba de excitaci�n
pero si me hab�a descubierto ya no importaba.

Me deshice de la bata que llevaba puesta y me situ� del lado
contrario al que estaba ella adoptando su misma posici�n, quedamos desnudas una
frente a la otra, entonces pude distinguir claramente como sus dedos abr�an sus
labios mayores para buscar el cl�toris, como sobaba con fuerza toda su labia
empapada de la misma manera en que lo hac�a con el miembro del caballo, as�
pasaron varios minutos hasta que vi como todos sus m�sculos se contra�an
anticipando el orgasmo. Cuando finalmente se vino entre fuertes gemidos, dedic�
toda su atenci�n al caballo, de vez en cuando buscaba mi mirada como para
comprobar que no perdiera detalle alguno y la verdad no ten�a intenci�n de
perderme nada.

� Ya viene... �oyes como relincha?

R�pidamente se pas� bajo la panza del animal y con ambas
manos acariciaba el tronco en toda su longitud, estaba decidida a hacerlo venir.
Pegu� un grito cuando el caballo empez� a correrse, era impresionante como
desped�a chorros de semen blanquecino. Parec�an no acabar nunca, se trataba de
una venida a litros que iba a dar directamente a la boca de Laura, la mayor
parte se desbordaba de sus labios y resbalaba por su cuello pero como pod�a
tragaba el resto. Casi al mismo tiempo, empec� a temblar, todo mi cuerpo se
conect� con el miembro descargando esperma, con la garganta femenina tragando
todo cuanto era vertido dentro de ella y estall� en un poderoso orgasmo m�ltiple
que me oblig� a cerrar los ojos, disfrutando al m�ximo de las sensaciones
originadas entre mis piernas y que se esparc�an por el resto de mi cuerpo.

Cuando termin� de venirme el miembro del aquel precioso
animal colgaba fl�cido entre sus piernas, mientras Laura recostada a un lado de
mi recuperaba el aliento esparciendo el semen en su cuello por sus hombros, sus
pechos, su vientre, era un masaje dotado de una sensualidad indiscutible, el
ambiente estaba saturado de una atm�sfera sexual muy poderosa y penetrante, casi
tanto como el olor a esperma de caballo.

� Soy muy lindos verdad, �lo hab�as visto antes?

� No, nunca, pero me gusto mucho... �desde cuando lo haces?

� Hace mucho durante la Universidad, empec� a encontrarle sus incentivos
especiales a la veterinaria... en las pr�cticas hab�a una chica que lo hac�a con
todo: caballos, asnos, perros, cerdos, yo solo lo hago con caballos, te gustar�a
probar?

� Mmmm... no, creo que no... fue muy excitante pero no estoy segura de querer
hacer algo...

� Ok, es mejor as�. Necesito ba�arme �vienes adentro?

� Si, ahora estoy contigo.

Laura se despidi� muy cari�osamente del caballo,
acarici�ndole la cabeza y pein�ndole el flequillo sobre los ojos, luego sali�
rumbo a la casa. Me quede un rato ah�, pensando en lo que hab�a pasado y lo que
significaba para mi, la hab�a sorprendido a mitad de un encuentro sexual con un
animal y lo tomaba con entera naturalidad, incluso hab�a confesado que no se
trataba de la primera vez... antes de salir, eche un vistazo al miembro fl�cido
del caballo que se retra�a r�pidamente perdiendo ese largo impresionante de hace
un rato.

Pensaba en el sin fin de cosas que se esconden bajo un establo, cuantas mujeres
en el mundo en ese momento disfrutaban de un encuentro con sus mascotas, cuantas
fantaseaban con ello, cuantas como yo que nunca imaginaron tales cosas la
curiosidad empezaba a consumirlas por dentro, cuanto tiempo pasar�a hasta que
finalmente me decidiera a hacerme de un amante animal?. Las respuestas vendr�an
mas temprano que tarde.

Al d�a siguiente las actividades fueron como en las semanas
precedentes, fue hasta la noche cuando sali� el tema a sugerencia m�a, la verdad
es que no dejaba de pensar en ello y llegue incluso a considerar que ya empezaba
a afectarme, desde luego sab�a de lo que se trataba, que aquello era una
parafilia y que de probar, pod�a tanto descubrir que eso no era para mi o bien
que fuera tan excitante en la pr�ctica que no ser�a capaz de prescindir de ello.

Me explic� que es lo que hab�a que hacer, como empezar, que
cuidados habr�a que considerar, en fin ella era una profesional y conoc�a todo
lo que necesitaba saber para vivir la experiencia con toda seguridad, en
especial hubo algo que me dio mucha confianza: ella ten�a "su semental" ya que
solo lo hac�a con un caballo mientras que se manten�a al margen con el resto,
tanto por su seguridad como la de los animales.

Finalmente y luego de hablar un rato mas, y ya que sab�a cual
era la situaci�n no ten�a porque esconderse por mas tiempo, si quer�a pod�a
acompa�arla lo dejaba a mi elecci�n y entonces se levant�, me dio un beso en la
mejilla y sali� rumbo al establo. Ya no lo pens� por mas tiempo, estaba decidida
a probar y sal� detr�s de ella, esa noche iba a ser mi primer encuentro sexual
interespecies y estaba lista para lo que fuera...

Contin�a...