La charla transcurr�a sin alarmas, nos hab�amos mudado de
ciudad y eso nos hab�a hecho muy compa�eros� No conoc�amos a nadie y eso hac�a
que al final del d�a, cuando nos encontr�bamos en casa las charlas fueran sobre
todos los temas, de su infancia, de nuestras vidas, de lo nuevo, de lo que
extra��bamos, de lo que ya pas�.
Esa conversaci�n parec�a una mas, hasta que no s� muy bien
porque, empezamos hablar de sus amores�
- Yo nunca mas voy a estar, otra vez, con un chico que sea
virgen� tuve dos y ya es bastante� No me gust�. Con Jes�s no alcanc� a acabar
nunca�
- Bueno, creo que ya lo ten�s decidido�
- Yo ya no tengo mas paciencia, no s� ense�ar, quiz�s cuando
tenga mas de treinta quiera tener un pendejo de dieciocho, pero hoy quiero
alguien con experiencia�
- No te gusta ense�ar� �te gusta aprender?
- Si� creo que tengo ganas de un tipo que sepa� Que me
ense�e, que tome la iniciativa�
Podr�a tomar eso como una insinuaci�n ya que ella tiene casi
veinte a�os y yo cuarenta. Es una de las fantas�as de los hombres� �Ser� una
fantas�a de las mujeres? Pero claro que si, hay miles de libros, novelas,
pel�culas sobre amores de mujeres que desean a muchachos, j�venes. Pero todas
estas cosas las pienso ahora, en ese momento no me di cuenta de nada�
Todo la circunstancia fue extra�a. La madre de Nati, mi
esposa, se hab�a quedado en nuestra ciudad natal, terminando de hacer muchos
tr�mites, que por el apuro de nuestra mudanza, tuvo que hacerse cargo. Pero este
tiempo se hab�a extendido mucho mas que lo calculado y deseado. La cosa es que
yo hac�a mas de tres meses que no ten�a relaciones con nadie. Nati tampoco ya
que como dije antes no ten�amos casi vida social. Yo del trabajo a casa y ella
de la facultad a estudia a casa� no le quedaba tiempo libre y cuando lo ten�a no
ten�a con quien compartirlo salvo conmigo�
El di�logo transcurr�a, mientras yo estaba escribiendo en mi
ordenador y ella hab�a puesto m�sica y se sentaba en el sill�n del living, a dos
metros� no nos mir�bamos, pero eso sol�a ocurrir, todo era como siempre. Y ahora
me recriminaba que las toallas higi�nicas que hab�a comprado eran para tangas de
colaless.
- No me di cuenta, dec�a con alas y me pareci� que eran las
que compraba siempre. No sab�a que hab�a comunes y para colaless.
- Pero con lo que yo menstr�o eso no me sirve.
- Bueno guardalas para cuando se te est� yendo, que ya no
ser� tanto el caudal� y te compro, ma�ana de las que vos usas� �Todav�a te
quedan para esta noche?
- Si, si. Me dijo fastidiada y agreg� - Yo no s� como alguien
puede usar esas toallitas, Ya usar esas bombachas debe ser inc�modo y con la
regla debe ser a�n peor�
Me pareci� muy extra�o ese comentario y quise saber mas al
respecto�
- Pero esa bombachas no se usan cuando est�s indispuesta.
- Las minas que usan colaless, la usan todos los d�as, hasta
esos d�as, dijo en tono de publicidad de la televisi�n
- Yo cre�a que las usaban con cierta ropa o los d�as que iban
de guerra�
- Si, pero la mayor�a de las que usan colaless, la usan todos
los d�as.
- �Vos no usas colaless? (Dije en tono ir�nico, ya que ella
es bastante liberal, su cuerpo lo merec�a y nunca pens� que no usara ese tipo de
ropa �ntima.)
- No nunca us�.
- Pero te probaste, alguna vez� No te lo creo
- No, nunca� Todas las bombachas se te meten en la cola, y
una se acostumbra. Malena dice que es mejor porque es menos tela la que se mete
en el orto� pero yo no s�
- Pero hay tipos a los que le gusta la lencer�a� que le
excita, que la mujer usa esas cosas, medias caladas, porta ligas, colaless y
esas cosas� otros le gustan las bombachas de nena y as�, mil cosas.
- Si tambi�n hay tipos que le gusta que las minas est�n todas
depiladas.. Y ahora me vas a salir con eso de que las cosas que te gustan ahora
despu�s cambian y el ejemplo de los besos y el de chuparla�
- Y si, pero no me des bola, yo soy un viejo y todas esas
cosas� (Se hizo un silencio y termin� de escribir lo que estaba escribiendo as�
que apagu� la m�quina y justo se acab� el CD que Nati hab�a puesto)
La conversaci�n se agot�, ya que se hab�a hecho muy tarde y
al otro d�a los dos ten�amos que madrugar�
Cuando volv�a a casa al d�a siguiente, me acord� de esa
charla y cuando estaba a pocas cuadras de casa, pas� por una tienda de lencer�a
y vi su vidriera� muchos modelos de ropa interior� todos de buena calidad� A mi
no me daba verg�enza, compr� mil veces bombachas para mi mujer, a veces lencer�a
fina y otra er�ticas� Pens� que Nati nunca se hab�a puesto una porque no le
gustaba usar una de otra persona�
- Estoy buscando una tanga de esas que de atr�s son muy
finitas.
- �Una colaless?
- No se como se llama. Mu�streme alguna. La vendedora
desapareci� tras el mostrador y volvi� con varios modelos distintos. Pero
confieso que me dio un poco de morbo comprarle a la nena una tanguita de esas
caracter�sticas, para colmo de males, la vendedora se puso enseguida nerviosa� y
termin� comprando una que no era la mas linda pero era la mas atrevida.
Cuando entr� en casa, me acord� que ella llegar�a como una
hora mas tarde� Todo bien. Tome una tarjet�ta y le escrib� la siguiente leyenda:
"Para que puedas probar y usarla con alguien de experiencia".
A la hora, lleg� como un terremoto. Quiso contarme todo lo
que hab�a hecho y m�s en un segundo, como un torbellino, como siempre. As� que
dej� pasar el tiempo, para que se libere de las ganas de contar y despu�s le
daba el regalito.
Prepar� la cena, como siempre y comimos. Cuando terminamos,
ella levant� los platos de la mesa y yo me fui a buscar un cigarro y la
sorpresa.
- Nati, Tengo una sorpresa para vos.
- �Un regalo?
- No,.. si, tom�. (Extend� el brazo y se lo di.) - Lee,
primero la tarjeta�
Tomo el regalo y ley� la tarjeta en voz alta.
- "Para que puedas probar y usarla con alguien de
experiencia". Dijo poniendo voz sensual� Abri� el paquete y me la mostr�, como
si yo no supiera que era�
Se dio media vuelta y se fue a su cuarto� pas� un minuto, que
pareci� una hora. Escuche que se abr�a la puerta de su pieza y no sab�a que iba
a pasar, Escuche los paso que se acercaban, pero no la ve�a.
- Cerr� los ojos. Dijo con vos de nena que hace una
travesura� Ahora pod�s abrir los ojos� Cuando los abr� la encontr� frente a mi
con su tanguita nueva puesta� Se dio vuelta para mostrarla en plenitud. Yo no lo
pod�a creer. Si bien me hab�a imaginado alguna situaci�n er�tica con ella,
siempre pens� que no iba a pasar del plano de la fantas�a.
- Gracias. Me dijo y me abraz� y me dio un beso en la
comisura de los labios. Su aliento me envolvi�. No atin� a nada. Estaba,
totalmente, abrumado� Juro que nunca pens� que me iba a encontrar en esta
situaci�n.
- �No vas a decir nada?
- �Te es c�moda?
- No te hagas el boludo� �Qu� te parece?
- �Te queda mortal!!! Pareces una modelo.
- �Por lo tonta?
- No, una mina barbara, una mujer con may�scula, los vas a
matar� me vas a matar.
�Qu� dije? Se hizo un silencio inoportuno, alguno de los dos
ten�a que tomar la iniciativa y ese era yo, ella ya me lo hab�a dicho ayer
cuando hablamos de su sexo y que quer�a aprender y que mejor que su padrastro,
un hombre con experiencia para empezar� �Qu� hago? Esa es la pregunta, �Pateo el
tablero o me hago el idiota y la dejo pasar? �Debo esperar otra se�al? �Y si
pasa este segundo y pierdo la oportunidad?
Me par� y me puse a su lado, la abrac� y la bes�, de forma
lenta y profunda. Mis manos recorrieron su espalda y sent� como su cuerpo se
estremec�a. Solo se escuchaba el rumor del televisor haciendo de m�sica
ambiental�
Ella se dejaba como me lo hab�a dicho ayer que har�a. Pero no
es que me rechazara, temblaba toda y jugueteaba en mi boca su lengua. Sus
grandes tetas que rebozaban en el escote de su remera, me ped�an que las tocara,
que las acariciara, que las chupara como nunca se lo hubiera imaginado� Tuve que
ayudarla y acercarla al sill�n porque ten�a miedo que se caiga� All� la pude ver
entera, deseosa, perdida, entregada a la pasi�n. Lo �ltimo que le sacar�a es la
colaless. Ella se levant� la remera y qued� en corpi�o� yo desabroche mi camisa
y la dej� en el piso, quer�a sentir su piel en mi piel. Me abalanc� a su cuello,
tratando de aspirar el aroma de su piel.
- �Tengo olor a chivo? Me dijo entre interrog�ndome y
afirm�ndolo.
- Me gusta tu olor y si est�s transpirada me gusta mas� -
Levant� el brazo. Le ped�, para que su axila quede a merced de mi nariz y mi
boca. Y mientras lo iba haciendo se quejaba
- A mi no me gusta mi chivo, no s� como pod�s hacer eso.
Mientras yo lam�a la caverna que se forma en el interior de la uni�n entre
hombro y brazo.
- �No te gusta? Le dije mir�ndola desde all�.
- Para colmo no me depil�
- Me encanta que no te depiles�
En un arranque que no esperaba ella levant� mi brazo e hizo
lo mismo que yo estaba haciendo� en obvia muestra de sus primeras lecciones
aprendidas y en un claro mensaje de querer mas cosas nuevas.
- Me gusta tu olor� Me dijo mientras raspaba con sus dientes
mi axila.
Mezclamos nuestras lenguas en un beso y nuestros sudores en
las bocas� Desabroch� su corpi�o y me dediqu� a sus hermosas tetas, coronadas
por pezones opulentos y provocativos� Una de dos, o le encantaba que juegue con
sus pechos o nunca lo hab�a experimentado de este modo ya que gem�a y no pod�a
dejar de encorvar su espalda� Mientras dejaba descansar mi boca y apretaba sus
pezones con mis dedos, mir� su cintura y me felicit� por haber comprado esa
bombachita. Le quedaba hermosa� los bellos se transparentaba bajo la tela fina,
que cubr�a su pubis� Y por la posici�n, las nalgas eran enmarcadas por las tiras
que se perd�an en la raya de su cola.
Parece que ella se dio cuenta y me dijo
- �Te gusta mirarme la tanguita? O �te gustar�a mirarme
desnuda?
- Por ahora me gusta mirarte as�, �Est�s mojadita?
- Estoy empapada.
- �Es incomoda?
Acarici� con mis dedos por su rayita cubierta y not� la
humedad� ella gimi�, como gimen las mujeres, Ol� la yema de mis dedos y su
n�ctar se impregn� en mi olfato.
Nati estaba quebrada, su excitaci�n era tal que gem�a,
aullaba, se re�a� Sin importarle nada de nada. Fue ah�, en ese momento en que le
dije,,,
- �A ver si sos tan putita como te hac�s?
Escuchar que la llamaba as� la puso m�s loca y se dirigi� a
mi pantal�n y trataba sin �xito de desabrocharlo. La ayud� ya que no soy de
hierro y yo tambi�n estaba a mil�
- Dejame que te ayude, perra. Se arrodill� y dejando que yo
vaya bajando los pantalones y el boxer, dejando mi pija al su vista� Su ansiedad
era tan enorme, que no pude deshacerme de mis prendas, apenas las pude bajar
hasta los tobillos, corriendo el riego de caerme� Decid� que era mejor dejarme
caer al piso y as� pode hacer un buen sesentinueve. Ella comprendi� mis
movimientos y reci�n en ese momento qued� completamente desnudo. Ella, todav�a
manten�a intacta su nueva colaless, como �nico abrigo. As� como se encontraba
ten�a dos posibilidades sac�rsela o apenas correrla porque era tan peque�a que
daba para corr�rsela y dejar su rayita, a la intemperie� Nati chupaba, mord�a
ol�a, lam�a desde la cabeza del pene al culo. As� que no lo pens� mas y le chup�
la concha a morir� Ella largaba chorros de flujo y yo acab� muy fuerte en su
boca.
Esa noche no fuimos mas all�, solo caricias y mimos�