Ante todo, les pido mucha paciencia� soy nueva en esto de
escribir relatos y les agradecer�a que me env�en sus cr�ticas buenas y malas al
correo
POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO; tambi�n si quieren hacer amistad conmigo, no
hay problema (sobretodo escr�banme hombres maduritos por favor). Un beso.
Esto ocurri� hace seis a�os y no me arrepiento de
absolutamente nada.
Para comenzar deben saber que mido 1.60, piel blanca, cabello
negro azabache, largo, ojos negros, buen cuerpo gracias a que todos los d�as
desde los 14 a�os voy al gimnasio, mis medidas son 100- 60- 95; me encanta el
sexo y lo practico desde mis 15 a�itos gracias a las ense�anzas de un experto.
Todo empez� despu�s de cumplir mis 15 primaveras, a mi padre
lo trasladaron de su trabajo a otro pa�s por un a�o y yo me qued� con mi madre;
el problema es que ya no tendr�a quien me lleve a la escuela porque a pesar que
ten�amos carro, con la ausencia de mi papi no hab�a qui�n lo manejara (mi mami
no sab�a conducir y yo en ese entonces tampoco).
La empleada de la casa nos dijo que su t�o era taxista y que
con mucho gusto �l pod�a transportarme de la casa a la escuela y de la escuela a
la casa, no cobraba caro y adem�s no ten�a familia (esposa ni hijos) por quien
preocuparse, as� que estar�a disponible a cualquier hora que lo necesit�ramos.
A mi mam� no le disgust� la idea, as� que le pidi� a la
empleada que llamara a su t�o para que fuera por la tarde y llegaran a un
arreglo.
El caso es que s� se lleg� a un acuerdo y todos los d�as don
Juan, quien ten�a m�s o menos 40 o 45 a�os me recog�a en mi casa a las 7:00 am y
a las 2:00 pm en la escuela.
Al principio solo lo saludaba y ya porque no era muy
extrovertida que digamos, ni siquiera lo miraba cuando estaba cerca, pero de
lejos s� me animaba. Era alto, gordito, ya ten�a sus canitas, se afeitaba creo
yo que todos los d�as porque nunca le llegu� a ver la barba crecida y
sinceramente as� se miraba mejor y m�s joven.
Ahora s� al grano; como les dije yo era muy t�mida y casi no
hablaba con el pobrecito de don Juan, pero �l lo not� y poco a poco fue
haci�ndome preguntas para conocerme mejor, yo apenas y le respond�a; despu�s
pas� a contarme chistes, a hacerme bromas y no s� por qu� pero fui confiando m�s
y m�s en �l, tanta era la confianza que despu�s de salir de la escuela le
aceptaba sus invitaciones a comer helado, a dar un paseo por la ciudad con la
excusa de que era para que yo conociera mejor y un d�a no me fuera a perder por
despistada.
As� fueron pasando los meses, hasta que un d�a mi mam� tuvo
que salir de viaje a casa de mi t�a la menor quien estaba a punto de dar a luz y
le pidi� el favor de que la acompa�ara en ese momento tan dif�cil; mi madre se
fue y yo me qued� solita �nicamente con la empleada y don Juan, por supuesto.
Al otro d�a de partir mi mami, don Juan, despu�s de la
escuela me invit� a cine, yo no quer�a porque me daba pena pero �l me dijo que
ahora que estaba tan solita lo mejor era distraerme y que no me preocupara
porque �l me iba a cuidar muy bien.
Al fin yo acced� y nos fuimos a ver una pel�cula de la que no
me acuerdo� ya sabr�n por qu�.
Cuando apagaron las luces de la sala de cine y comenz� a
rodar la pel�cula, no s� por qu� pero sent� un escalofr�o muy extra�o y tembl�,
don Juan se dio cuenta y me pregunt� que si ten�a fr�o, yo le dije que s� y �l
me dijo que si no me molestaba �l pod�a abrigarme abraz�ndome; yo contest� sin
pensar que no hab�a problema y que se lo agradec�a.
Entonces me abraz� y cuando lo hizo me sent� rara� don Juan
empez� a hablarme al o�do dici�ndome que yo era una ni�a muy bonita, que en los
meses que llevaba prest�ndome sus servicios me hab�a tomado mucho cari�o y que
me hab�a convertido en su tesoro; yo lo mir� y le sonre�, �l me abraz� m�s
fuerte y me pregunt� si ten�a novio, le respond� que no porque los muchachos que
conoc�a eran muy groseros e inmaduros y que no llamaban mi atenci�n para nada.
Don Juancho, como yo le hab�a empezado a llamar, me mir� con
cierta felicidad, m�s bien morbosidad y me dijo que si lo que yo buscaba era un
hombre educado y maduro que me hiciera sentir en las nubes, �l con mucho gusto
estaba a la orden� se qued� mir�ndome� de pronto vi su rostro tan cerca del m�o
que mi instinto me llev� a cerrar los ojos y en ese mismo momento sent� que sus
labios se unieron a los m�os, yo me qued� est�tica, no sab�a qu� hacer pero �l
empez� a mover sus labios suavemente y nuevamente actu� mi instinto y tambi�n
comenc� a mover mis labios, despu�s de un rato, �l comenz� a respirar fuerte y
cada vez m�s fuerte� entonces sent� que su lengua buscaba la m�a y �sta ni corta
ni perezosa fue a su encuentro, nos fundimos de esta manera en un apasionado
beso que parec�a interminable� sin exagerar, les cuento que con todo esto ya la
pel�cula iba en la mitad; nosotros que est�bamos en la �ltima fila completamente
solos, despu�s de ese extraordinario beso, nos miramos nuevamente y don Juancho
me dijo que despu�s de lo ocurrido ya �ramos novios y que nunca nos �bamos a
separar, que estuviera tranquila y me preparara para vivir una nueva etapa en mi
vida, llena de inolvidables experiencias.
�l hablaba tan bonito que yo, como si estuviera "encantada"
por alg�n hechizo acept� todo lo que hab�amos hecho y dicho y me dispuse a
estrenar novio.
Salimos del cine y como todav�a estaba temprano, me propuso
que di�ramos un paseo en el taxi antes de regresar a la casa, yo acept� y me
dispuse a vivir una nueva aventura.
En el camino, empec� a notar que �l me miraba mucho, yo me
sent�a achantada y creo que hasta me puse rojita porque Juancho me dijo
�tranquila mi nenita, no te sientas mal si te miro, lo �nico que estoy haciendo
es admir�ndote� eres tan linda� mientras me dec�a ten bellas palabras, Juancho
hab�a empezado a acariciarme las piernas y no le quedaba muy dif�cil sentir la
suavidad de mi piel, ya que yo llevaba mi faldita cortita de colegiala; me
asust� un poco y trat� de esquivar sus manos pero nuevamente con sus palabras
dulces me dijo �mi amor, no te asustes, esto es normal en una pareja de novios�
las caricias son la esencia de la relaci�n y yo no voy a hacer nada que t� no
quieras� comenz� entonces a acariciarme nuevamente y cada vez era m�s
apasionado, yo ya me encontraba excitada y mis braguitas se encontraban h�medas
a causa de ello.
De pronto llegamos a un lugar a las afueras de la ciudad, era
un mirador de donde se pod�a divisar la ciudad en toda su extensi�n, par� el
taxi en medio de unos �rboles y me pidi� que me sentara en sus piernas (el taxi
era amplio, por lo tanto no me cost� ning�n trabajo), as� lo hice y sigui�
acarici�ndome, me bes� apasionadamente con su respiraci�n agitada y con su voz
entrecortada me dec�a �mi tesoro, deja que te consienta, eres lo mejor que me ha
pasado en mi vida, conmigo aprender�s muchas cosas y aunque al principio te
parezcan prohibidas y dolorosas, luego comenzar�s a disfrutar de ellas sin
parar.
Lentamente fue recorriendo mi cuello, haci�ndome sentir m�s
excitada a�n y sus manos empezaron a acariciar mis pechos, debajo de mis nalgas
ya sent�a su erecci�n y por supuesto que �l not� mi humedad.
Poco a poco sus manos fueron bajando hacia mi intimidad, me
acarici� por encima de mis braguitas y un gemido sali� de mi interior� regres� a
mis pechos y lentamente fue desabotonando mi blusa, desabroch� mi brasier y mis
grandes senos quedaron a su completa merced, su boca se pos� en ellos, comenz� a
chuparlos y a morderlos desesperadamente� con lujuria� yo gem�a y gem�a sin
parar hasta que tuve mi primer orgasmo; Juancho me dijo �amor, vamos al asiento
de atr�s para que nos sintamos m�s c�modos, all� te convertir�s en toda una
mujer� mi mujer.
As� lo hicimos, entonces �l se quit� su ropa lo m�s r�pido
que pudo, solo qued� en calzoncillos y not� un gran bulto, lo qued� mirando
cuando su mano llev� a la m�a a palpar m�s detalladamente aquello que se asomaba
y que quer�a desesperadamente salir de su encierro, -t�calo mi vida, es todo
tuyo� por el momento no podr�s probar su sabor porque ser�a presionarte
demasiado, pero con el tiempo podr�s tener grandes cantidades de dosis para que
te sientas como toda una hembra� mientras tanto� nos conformaremos con
entregarnos totalmente y sin ning�n obst�culo.
Termin� de quitarme mi faldita, mis medias, zapatos y por
�ltimo mis braguitas que ya estaban bien mojaditas, las oli� y dijo �cari�o� ya
est�s preparadita para recibirme en tu interior, me bes� con ternura y me pidi�
que abriera lo m�s que pudiera mis piernitas �para qu�?, le pregunt�
ingenuamente, -no tengas miedo, al principio te va a doler, aunque yo tratar� de
hacerte lo m�s despacito que pueda� conf�a en mi� al final gozar�s y querr�s
m�s� Entonces, se agarr� su pene, se puso encima de mi y la puntita de su
miembro roz� suavemente mi cl�toris, sent� un gran placer� comenc� a mirar como
su pene se perd�a dentro de mi cuevita� lo hac�a despacio, con calma y sin
prisa� lentamente� top� con mi himen� sent� un empujoncito y me doli�, las
l�grimas brotaron de mis ojos, no quer�a que siguiera �para por favor, no sigas,
no me gusta� quiero irme a mi casa, -tranquila nena, te advert� que te iba a
doler y todav�a te falta un dolor m�s, pero despu�s me lo agradecer�s� c�lmate y
disfruta� sent� otro empuj�n un poco m�s fuerte� yo ya no pod�a, quer�a salir
corriendo� mi cuevita era muy chiquita para ese hu�sped tan grandote, no ser�a
capaz de alojarlo por un minuto m�s� otro empuj�n y un grito desgarrador sali�
desde lo m�s profundo de mi ser� �l lo ahog� con un beso� -llora coraz�n, te
comprendo� pero estoy muy feliz porque ya eres m�a, completamente m�a� se qued�
quieto por un instante mientras yo me calmaba� despu�s continu�, su miembro
estaba todo dentro de mi, lo sac� y meti� de nuevo, comenz� un mete y saca al
principio lento� a�n me dol�a pero �l comenz� a besar mis pechos, a tocarlos, a
morderlos con cari�o� me excit� de nuevo, el dolor se convirti� en placer y mis
caderas empezaron a moverse� -ahhh, ahhhh, ahhhhh, ahhhhhh, ahhhhhh, ahhhhhhh,
ahhhhhhh�mis gemidos eran cada vez m�s fuertes y formaban un coro con los de �l
�mmm, ahhh, ahhhhh, as� mamita mu�vete� qu� rico, eres mi beb�, m�a y solo m�a�
-Juanchito, te amo ahhhh, ahhhh, ahhhhh, mmm, me gusta lo que me haces, se
siente rico� quisiera que esto nunca se acabe� comenz� a moverse m�s y m�s
r�pido, -ahhhhh, ahhhhh, ahhhhhh, ahhhhhhh, ahhhhh, ahhhhhh, ahhhhhh, -mmm,
mamita rica, ahhhh, ahhhh, ahhhhhh, ya casi� ya llega tu premio por ser buena
ni�a� -ohhhhh, ahhhhhhh, mmm, -ya mi amor, aqu� viene�
ahhhahhhhhahhhhhhahhhhhhhahhhhhhhhohhhhohhhhhhohhhhhhhmmmmmmm� su leche inund�
toda mi cuevita, yo gem� m�s fuerte �ahhhhahhhhhhahhhhhh,
ahhhhahhhhhahhhhhhahhhhhhh�, terminamos� (no usamos protecci�n, pero en esos
momentos nada importaba ya).
Estuvimos quietos por un instante� -reinita, te gust�?,
-claro que me gust�, no sab�a que me estaba perdiendo de algo tan bueno� re�mos
juntos� nos besamos y nos vestimos, �l limpi� el asiento, ya que qued� manchado
por la mezcla de nuestros l�quidos y emprendimos la marcha hacia mi casa.
Ya era tarde, la empleada, su sobrina, hab�a estado muy
preocupada por nosotros, tem�a que algo malo nos hubiese pasado (si supiera que
estuvimos gozando como dos locos desenfrenados�); -tranquila sobrina, la ni�a
Caro tuvo que ir a hacer un trabajo donde una compa�erita de la escuela y por
eso nos demoramos, adem�s el tr�fico a esta hora es horrible� -y por qu� no
llamaron a avisar d�nde estaban?, -Betty, tranquila� le dije, -no llamamos
porque mi amiga y yo est�bamos trabajando para una exposici�n de anatom�a y nos
toc� aprendernos muchas cosas, entonces nos olvidamos del resto del mundo y solo
nos dedicamos a estudiar "el cuerpo humano", por cierto, un "cuerpo" con muchos
misterios para descubrir; mir� disimuladamente a Juancho y le gui�� el ojo, �l
hizo lo mismo y se despidi�, -hasta ma�ana, -hasta ma�ana� le respond�,
-recuerde que a�n me falta terminar mi trabajo y quiero que vuelva a acompa�arme
a casa de mi amiga, -tranquila se�orita, no lo olvidar� y como usted misma lo
dice� "todav�a le falta mucho por descubrir"�
Me duch�, me acost� y me dispuse a conciliar el sue�o�
esperando pacientemente el d�a siguiente�
Hasta una pr�xima oportunidad amigos.