Este relato es continuaci�n de Mar�a Fernanda, Una ni�a
inquieta.
Era aquella mujer madura, sus tetones aun firmes brindaban un
grandioso espect�culo mientras ella se acercaba frotando su chocha con actitud
fren�tica, tra�a a un tipo con collar de perro tras ella, la mujer ven�a con
unas sandalias romanos como �nico art�culo de vestir, sus piernas hermosas y
blancas a medio broncear se notaban h�medas, a lo mejor por el sudor y los jugos
que brotaban de aquella experimentada conchita.
Yo segu�a sentado disfrutando de una leng�eteada experta en
mi culo, y de una mamada m�s que profesional, que fue interrumpida cuando
aquella mujer empez� a mearse en mi verga, mientras Hela chupaba fervorosamente,
cuando quizo levantarse recibi� un fuerte empuj�n de parte del esclavito, hasta
casi ahogarla, cuando pudo respirar brotaron de su boca grandes hileras de vino
amarillo.
La mujer madura acerc� su mojada y hedionda chucha a mi boca
y me la dio limpiar cosa que hice con el mayor de los gustos, ensimismado en mi
trabajo, lam�a, incrustando mi lengua larga en aquel hoyito, mordiendo el
cl�toris, jal�ndolo, hasta provocarle dolor.
La mujer orden� al esclavo:
Iv�n empieza a lamerle el culo a la alemanita, y quiero
que lo lamas duro y profundo.
El tipo empez� a chupar hac�a mucho ruido, casi le sacaba la
mierda de los intestinos si segu�a chupando as�, hela hab�a perdido
concentraci�n ante la lamidita que le estaban propinando.
Me levante, no sin antes ver el rostro degenerado pero
sonriente de mi perra pobre, le escup� el rostro y a continuaci�n empec� besar a
hela con una pasi�n desmedida, rom�ntica, no me importo el sabor a meados, me
encantaba conocer una mujer tan pervertida.
Ana la mujer madura, cogi� de los pelos a la perra y le
escupi� en la boca, ante un gesto de asco aquella cerdita recibi� solo una
cachetada.
Hela me llevo de la mano, a�n con mi verga enhiesta hasta un
colch�n all� me lanz� y se ensart� mi palo entre su almeja, que suave vagina, me
dec�a:
Juane gracias, sientes como se me rompe la concha en
pedazos por ese pedazo tuyo, dame duro ni�o malo, dame duro por esa almeja.
Te gusta cuando te habl� as�.
S�, le contest�.
Empez� a decirme cosas en el oido,
Que rica, verga,
Me encantas ni�o divino..
Ana, la perra y el esclavito se daban chupadas entre s�.
Hela sigui� d�ndole a mi verga, ensart�ndosela y habl�ndome
al o�do, hasta que acabe de la manera m�s bestial.
Ana le orden� a la perra sorber el semen de la cuca de hela,
y obligada pero a�n as� lo hizo, sonaba delicioso. La tir� luego de los pelos y
la arrastr� hasta el ba�o, d�nde nos pidi� que la us�ramos como orinal, y as� lo
hicimos y lo disfrutamos.
Pronto viene la m�s salvaje cogida de mi vida, fue el s�bado
con mi actual novia mafe, la sucia.
Un besote a todas las mujeres divinas, a todas las lectoras y
lectores un abrazo caluroso.
Hey, no soy gay por ning�n lado, as� que no me busquen APRA
eso, recibo comentarios y propuestas de mujeres.
Se despide por ahora,
Juan Eduardo (Bogot�, Colombia)