Relato: Maternidad y pubertad





Relato: Maternidad y pubertad


MATERNIDAD Y PUBERTAD





Expres� mi sentimiento maternal con mi sobrinito. Mi historia
es 100% real.



Me tom� mas de seis meses en tomar la decisi�n de contarles
este testimonio 100% real, que llevo muy dentro de mi, y que en ocasiones me
hace sentir culpable y en otras sentir lujuria.



Me cas� hace nueve a�os 10 a�os en Santiago de Chile con un
hombre Venezolano al que conoc� trabajando para una empresa Americana. El era mi
jefe y nos enamoramos casi que de primera vista.



Luego de seis a�os de matrimonio, decidi� pedir si traslado a
Caracas nuevamente, pues extra�aba mucho a su familia, y yo como buena esposa
sumisa y responsable, acept� el desprendimiento y arraigo a mi pa�s, por seguir
a mi amado esposo. Cuando llegamos a Caracas y con la ayuda de su familia,
buscamos y buscamos una linda casa donde vivir. Finalmente encontramos, una muy
cercana de la casa de su hermana, en una linda �rea al este de caracas sobre una
de las sierras que dan contra la ciudad. Corr�a en ese entonces el a�o 1985, y
ya estando instalados y con mi marido feliz de su regreso a Venezuela, comenz�
nuestra nueva vida en este pa�s. El momento econ�mico de Venezuela no era tan
bueno como en a�os anteriores, pero todav�a se viv�a bien. Nosotros no hab�amos
tenido hijos por ese entonces, y lleg� el momento de hacer el primero. Lo
decidimos y fue casi de inmediato que me cargo dentro de mi vientre,
fecund�ndome con una linda beba que nacer�a nueve meses m�s tarde.



Lo que te voy narrar podr� sonar fuerte para algunos pero es
algo que ha estado dentro de mi por a�os, y debo expresarlo de cualquier modo.
En ese entonces ten�a 32 a�os de edad pues me cas� de 26, conservaba a�n un
lindo cuerpo, aunque no era tampoco de reina, siendo bastante alta, ojos claros,
cabello casta�o, lindo busto y una cola bastante atractiva. Siempre me ha
apasionado la ropa, gasto mucho dinero en ella, y obviamente me vest�a lind�simo
para la �poca, como siempre bastante sexi en ciertos momentos. El vivir en un
pa�s extra�o y lejano al m�o, aunque fuera el de mi marido, me hac�a sentir la
necesidad de apoyarme mucho en personas cercanas, desarrollando as�, una gran
amistad con su hermana (mi cu�ada) ya que su vecindad lo permit�a. Ella estaba
casada con un hombre mucho mayor que nosotras, y ten�an tres hijos. Dos gemelas
de 18 a�os cada una, y un ni�o de 14 a�os reci�n cumplidos en ese momento. El
chico era lind�simo f�sicamente, comenzaba las primeras etapas de su desarrollo,
ya cambiaba de voz, y tenia bastantes bellos para su edad, que yo le observaba
cuando estaba en pantaloneta (shorts), pues su pasi�n era el f�tbol. Siempre
desde que lo hab�a conocido meses atr�s me impact� la belleza de su rostro, de
verdad que era un chico espectacular, con ojos grandes y nariz perfecta con
algunas pecas que le luc�an, a tal punto que desde que lo v� dese�, tener un
hijo igual a el.



Sol�a ir de visita a la casa de ellos, pues la amistad con
Juliana (su madre) era muy especial y ellos por consiguiente pasaban largas
tardes conmigo aqu� en mi casa, y las gemelas gozaban haci�ndome visita casi a
diario.



A mediados del 1986, mi embarazo hab�a evolucionado bastante,
ya ten�a cerca de 23 semanas, mi vientre hab�a crecido buluctuosamente, a tal
punto que muchas personas cre�a que iba a parir en pocos d�as, aunque faltaba
cerca de tres meses para el alumbramiento. Recuerdo mucho el a�o en que esto
sucedi�, pues adem�s de ser el a�o de nacimiento de mi hija mayor, tambi�n fue
el a�o del mundial de f�tbol (en alg�n pa�s que no recuerdo, pues el tema no es
de mi inter�s y poco lo entiendo), comenc� a sentir de vez en cuando cierto
dolor en m�s senos que consideramos con mi marido poco normal. Decid� visitar al
ginec�logo, y nuestra sorpresa fue que estaba teniendo una etapa de lactancia
prenatal, algo poco com�n pero que en algunas mujeres se da por anticipado.



La verdad esto me emocion�, pues supimos que el bebe ven�a
sano y en muy buena condici�n, adem�s que yo no iba a tener problemas para
alimentarlo cuando naciera. Fue tal mi sorpresa que cuando habl� ese d�a m�s
tarde con Juliana mi cu�ada, le coment� sobre el tema, la verdad no vi ning�n
temor en decirlo a ella delante de sus dos hijas y Juan Felipe su hijo de cual
ya les he hablado.



Por esos d�as arranc� el famoso mundial de f�tbol, y el
fan�tico de mi sobrinito, decidi� pedirme permiso para ver algunos partidos en
mi casa, pues nosotros ten�amos una pantalla gigante que hab�amos tra�do de
Chile. La verdad me pareci� excelente, pues no le ve�a nada de malo a su
requerimiento.



El chico comenz� a ir de vez en cuando seguramente para no
abusar, pero yo le dije que viniera cuantas veces quisiera pues a mi no me
afectaba en lo m�s m�nimo que el observara sus partidos en nuestro televisor
gigante. La primera semanas transcurri� normal la verdad que yo no notaba nada
extra�o pues el era un chico t�mido, amable y muy respetuoso. A mi me gustaba
observarlo de vez en cuando, en momentos que me sentaba a ver los partidos con
el y preguntaba acerca del tema que la verdad nunca he podido entender bien. La
presencia del chico ya era a diario, y a la vez me gustaba, pues era decente y
educado, adem�s me acompa�aba pues yo permanec�a mucho tiempo sola. Cuando el
partido terminaba el se iba hacia su casa. Hacia la segunda semana de haber
comenzado el torneo, Juan Felipe se hab�a acercado m�s a mi, me conversaba m�s y
se mostraba m�s maduro aunque conservaba rasgos de timidez, muy de su
personalidad. Tengo que confesar que empec� a sentir que el muchito me observaba
con disimulo, llegu� a pensar que le impresionaba mi inflado vientre, a medida
que el me observaba yo me hacia la desentendida, pero extra�amente comenc� a
sentir agrado y cierta atracci�n hacia sus miradas ocultas. La verdad es que
hasta me sent� halagada y pens� lo buen-mozo que iba ser �l, unos a�os m�s
adelante, cuando alcanzara su adultez. La verdad eso no impidi� el buen
desarrollo de nuestra relaci�n como t�a y sobrina, adem�s yo comprend�a la edad
y etapa que comenzaba a cruzar el muchachito. Sus miradas eran m�s frecuentes y
la verdad me puso nerviosa, empec� a imaginar cosas con el chico, la verdad no
eran muy obscenas, pero me hacia sentir cosquilleo por el cuerpo. Debo explicar
que en algunas mujeres en gestaci�n el deseo sexual aumenta, y siendo este mi
caso, sol�a hacer el amor d�a a d�a con mi marido estando pre�ada.



No se como explicarlo pero me empez� a turbar la presencia
del chico, yo misma ni me entend�a, a tal punto que pens� decirle que no
volviera, que en esos d�as no iba poderlo recibir m�s, pero luego recapacit� y
pens� que era absurdo decirle eso, pues adem�s de observarme, el solo ve�a sus
partidos y luego muy respetuosamente se iba.



Es decir no hab�a motivo, y por lo pronto a la larga es
normal que un hombre mire a una mujer. Pasaron varios d�as y me sent�a asechada
cada vez que yo me volteaba, entonces decid� permanecer lejos de �l, e irme al
otro cuarto donde siempre preparaba todo lo necesario para la llegada de m�
beba. Un d�a hacia la tercera semana del campeonato, decid�a entrar y no prestar
atenci�n a sus miradas y observar un rato el partido en su compa��a. Yo not� al
chiquillo intenso, como si no se pudiera acomodar, cuando de repente decidi�
hablarme, y cual ser�a mi sorpresa, al o�r sus preguntas.



T�a cuantos meses te faltan para tener a tu bebe??



Tres, Juan Felipe, .............. le contest�.



Y como te sientes de salud?



Bien gracias Juan........ Por que me lo preguntas?? (la
verdad me caus� curiosidad de que me hablara el directamente)



Pues tiiita, la verdad es que el otro d�as le contaste a mi
mami delante de m� que estabas pre-lactando y la verdad le� en una de tus
revistas que tienes en tu mesa de noche, que la mujer lacta despu�s del parto.



Si Juan es cierto, pero mi caso es diferente, y algunas nos
ocurre antes de, aunque no es muy frecuente.



Tiita, perd�name por esta pregunta que te voy hacer. Piensas
amamantar a tu beb� cuando nazca?? Yo le� en la misma revista, que eso hace caer
los senos.



La verdad me impact� la pregunta, sent� algo raro en mi
est�mago, como si fuera prohibido hablar de eso con un muchachito tan joven, a
la vez me causo curiosidad y le contest�. Juan Felipe, uno es una madre y debe
hacer cualquier cosa por sus hijos. Una madre debe alimentar a su bebe para que
crezca sano, y nunca pensar primero en su apariencia f�sica, pues eso es
segundario. Primero est� el bienestar de su hijo. Adem�s por que me lo
preguntas??? Debo confesar que sent�a como corrientazos dentro de m�, no se si
producidos por efectos del embarazo o si por la pregunta del chiquillo.



Pues tiiita, te estado observando todos estos d�as, y no he
hecho si no pensar como una madre le da leche a su b�be, no puedo imaginar como
ser�, y a que sabr� el liquido. Es una simple curiosidad, pero la verdad es que
me retumba. Si sabes que mi mami me cont�, que no quiso darme de su leche cuando
yo nac�, pues el m�dico le recomend� no hacerlo ?? Tal vez por eso, tengo hoy en
d�a mucho deseo de saber como es, y desde que te he visto en cinta me he
preguntado si tu lo vas hacer y por cuanto tiempo.



La verdad que el tema del chico me turb�, trat� de
componerme, y le respond� que eso era algo personal, aunque muy dentro de mi me
gustaba el tema.



�


T�a perd�name, no te quiero ofender, yo no le veo nada de
malo a que me cuentes sobre eso. Yo soy chico pero ya entiendo lo que sucede,
adem�s tu eres una mujer lind�sima, de las m�s bellas que yo he viste, con unos
bell�simos pechos, m�s hermosos que los de mi misma mama, y me parecer�a muy
l�gico que quisieras conservar siempre tu figura.



La verdad sent�, no unos si no miles de corrientazos dentro
de mi, era diferente a lo que se sent�a, en medio de una excitaci�n con mi
marido. Me sonaba raro, extra�o y prohibido estar hablando con el chiquillo de
ese tema, y decid� continuar pues en el fondo me agrad�..... OK, Juan Felipe te
entiendo, pues la verdad es que si pienso amamantar a mi beb�, lo har�a
inclusive con cualquier hijo o ni�o que lo necesitara, eso es algo muy
importante para el futuro, adem�s los bebes lo sienten y son mas seguros cuando
comienzan a crecer, adem�s la relaci�n con su mam� se fortalece dspues de
haberlo amamantado unos meses.



Para ese momento �l hab�a perdido todo el inter�s en su
partido, y de pronto expres� con mucha timidez pero con valent�a a la vez.



Hay tiiita, de verdad que lo har�as con cualquier otro ni�o
que lo necesitara???


Siempre he querido saber como se hace, como es la lechecita,
y a que sabe, adem�s me es muy dif�cil dec�rselo a mi mam�, pues fue su
decisi�n, no haberme dado pecho a m�, adem�s yo la respeto mucho, y seguro que
tambi�n quiso cuidar su figura.....T�a me amamantar�as por un ratico as�, yo
podr�a tener lo que no tuve y a la vez tu podr�as practicar conmigo. Yo te
prometo respeto hacia ti como si fueras mi propia madre, y tambi�n te juro total
sigilo, pues ser�a nuestro secretico hasta la tumba.



La verdad sent� de todo cuando el ni�ito, o chiquillo, o
muchachito o hombre, pues no sabia como verlo me dijo eso. Era una sensaci�n
interna que corr�a de mi vientre a mi cabeza y de mi cabeza a mi vientre. Su
madurez y la seriedad con que me habl� me dej� anonadada, la verdad no pude
decir nada ni contestar, la boca me qued� un poco abierta, y sent� humedad en mi
entre pierna. D�jenme contarles que siempre he sido fiel a mi marido, y que esa
excitaci�n no estaba dentro de mis l�mites de control, pasaron unos segundos, no
sab�a si demostrar pudor y pedirle que se fuera, tampoco era impuro lo que el
propon�a y me turb� much�simo, sent� un excitaci�n diferente a la com�n y le
contest�.



Oye soy tu t�a, y tu mi sobrino.



Si es cierto, pero yo no quiero irrespetarte, solo quiero
conocer algo que es desconocido para mi. Yo solo quiero sentirte como una mami
por un rato y que tu me sientas como un b�be tambi�n por el mismo rato, as� yo
conozco y tu aprendes y practicas.



La capacidad de elocuencia del chico me impresion�, adem�s su
alto poder de convencimiento, era claro la falta de afecto que ten�a de su
madre, desde no haberlo amamantado cuando era beb� hasta seguramente su pubertad
y adolescencia.



En ese momento me sent� dominada, sab�a que era algo raro,
fuera de lo com�n, de lo convencional, posiblemente pecaminoso y reprochable, me
levant� del borde de la cama donde yo me encontraba sentada, pues la pantalla
gigante la ten�a ubicada mi marido en nuestro cuarto matrimonial, y el chico
estaba sentado en una silla reclinable ubicada cerca de un lado del cuarto, y
completamente aut�mata me dirig�, a la puerta del cuarto, cerr� con seguro, pues
la dom�stica se encontraba en el primer piso lavando y haciendo aseo, luego sin
mirarlo a el, entr� al vestier (vestidor) que comunicaba al ba�o y por decencia
y pudor con el y conmigo misma me quit� mi sujetador por debajo de la blusa
lejos de su presencia, luego sal� y me sent� en el borde de la cama y le dije.



Bueno mi nene, ven y tomas un poco, pero por favor solo hagas
lo que yo te diga.



El ni�o se levanto del sill�n y se dirigi� hacia m� con
firmeza pero lleno de temor. Se sent� a mi lado y debido a su tama�o, le ped�
que se arrodillara enfrente m�o. En cuanto estuvo arrodillado, me solt� dos
botones de la camisa que llevaba puesta y sin pensarlo dos veces saqu� mi seno
derecho que se encontraba grande y erecto por efecto de la situaci�n anormal que
estaba sucediendo y a la vez grande y pesado por el embarazo y la lactancia. El
se qued� paralizado sin saber que hacer, tome su cabeza por su nuca con mi mano
y con la otra sostuve el seno para ponerlo a su disposici�n



Ven nene que tu mami te va alimentar, chupa con ternura, y no
muerdas.



Eso mi bebe hermoso, eso lindo, chupa , succiona el pez�n,
abre bien tu boquita y ch�pala bien suave, eso mi b�be, succiona con tu lengua
par que puedas saborear la lecha materna, yo le dec�a suavemente a su o�do, a la
vez que con mi otra mano sosten�a el busto presion�ndolo delicadamente como si
lo orde�ara.



Que sientes mi amor le pregunte, mientras que el muchachito
me succionaba con su boca.


Ya sale???



En ese momento lo retir� y vi mi biber�n manchado como un
tetero y el sin decir nada regres� y empez� a beber de ella como si estuviera
sediento.



Siento un sabor dulce, sabes delicioso tiiita, y no paraba de
chuparme. La sensaci�n que yo sent�a era fren�tica, nueva para mi, y el saber
que amamantaba a mi sobrino me enloqueci�, el por reacci�n se agarr� de sus
manos a mi vientre, bien crecido por las 24 semanas de embarazo y chup� y chup�
hasta el punto que no me di cuenta cuando cambi� y me chup� el otro seno, y en
ese momento mi camisa la ten�a abierta completamente y solo le repicaba. As� mi
B�be, as� mi n�ne, no me muerdas solo chupa.



Me gustar�a poderles describir el grado de excitaci�n que
tuve, pero es indescriptible, lo �nico es que era diferente que con mi marido, y
la �nica reacci�n que tuve en ese momento en que perd� totalmente mi cordura,
fue dirigir mi mano izquierda que sosten�a mi seno derecho abajo a su zona m�s
viril, obviamente se encontraba erecto, era bastante bien dotado para su edad,
baj� la bragueta, desabroch� y baje un poco su pantal�n, y comenc� a
masturbarlo, suavemente al ritmo que el me succionaba y tomaba leche de mi. Era
algo que nunca pens� que yo hiciera, amamantar a mi sobrino a la vez que lo
meneara. El chiquillo se enloqueci� y a medida que el movimiento de mi mano
sobre su pene se aceleraba, el chupaba con m�s fuerza mis pezones. El mutuo
movimiento me llev� a expresar jadeo y gemidos de parte hasta que sent� como el
chiquillo no pudo controlar m�s su cuerpo y en medio de mordiscos involuntarios
a mis pechos, eyacul� con todas sus fuerzas en mi mano, vientre, camisa a la ves
que me besaba en mis senos y panza.



Se debi� haber sentido muy apenado que se par� en ese
momento, me abraz� me dijo que me quer�a, se subi� su pantal�n y trat� de
marcharse sin decir nada. Lo detuve en la puerta y le dije. Ya tu y yo somos
macho y hembra con lo que ocurri�, as� que reacciona con madurez, yo no plane�
esto y tu tampoco, as� que comp�rtate como el macho que has demostrado ser hasta
ahora, y sin ning�n tipo de tab� lo bes� suavemente en los labios luego abr� su
boca lentamente debido a su inexperiencia y introduje mi lengua. Era distinta a
la de mi marido, m�s peque�a y suave y hasta algo puntuda. El chico se me
abalanz� encima m�o sin ning�n temor y me tir� al borde de la cama, y por la
incomodidad del volumen de mi barriga le dije a su o�do. Mi nen�, esta posici�n
va ser incomoda para ti y para mi y por cosiguiente para el beb�. Para hacer el
amor con una mujer en gestaci�n, mejor col�cala en posici�n como si fuera una
perrita, y me enderec�, baj� mi slack, y me quit� mis cucos y poni�ndome en
posici�n en cuatro patas y mi vagina a su disposici�n el chico se subi� encima
m�o como un potro y sin explicarle mucho le dije.



Lubr�came m�s mi amor, con tu boquita, el chico se sorprend�o
y con mucha ternura estir� mi brazo, lo tome por su nuca y lo hice besarme y
chuparme por toda mi bulba. Su lengua puntuda me hizo vibrar gemir y gritar, me
relaj� m�s y imagin� como si el beb� que ten�a dentro de mi entra�as fuera de
el, era un pensamiento aberrante, pero el chiquillo me parec�a hermoso como se
los describ� anteriormente, eso me tumbo m�s en la posici�n, y a la ves que me
besaba en mi vagina y mov�a su lengua por toda ella mis brazos que sosten�a se
aflojaron, clave mi cabeza en las sabanas, quedando mi cadera y trasero en bomba
hacia el, y me le entregu� por completo.



Mi amor, mi nene, pen�trame hasta al �tero, El chico en medio
de su inexperiencia se coloc� detr�s de m�, coloc� su pene en mi vagina y con la
ayuda de mi mano lo hundi� r�pidamente. No pude callar el grito, y el gemido que
me hizo pensar que la dom�stica nos iba a escuchar, y pens�. "pues hoy mismo la
echo para que no diga nada, solo por si las moscas"



El ni�ito continuaba penetr�ndome como un experto acompa�ada
de jadeos y gemidos tanto suyos como m�os. La verdad yo no puedo expresarles el
tremendo orgasmo que el muchachito me hizo sentir sobre todo cuando eyacul� todo
su semen dentro de m�, les juro que lo sent� entrar, que me dej� sin fuerzas por
un momento, teni�ndome que reponer r�pidamente, arreglarme y arreglarlo a �l y
relajarlo, como decirle en forma tierna, que ese momento de debilidad de ambos
deber�a guardarse hasta la tumba.



Mi posici�n de mujer casada, y supuestamente fiel me hice
mantener mi conducta por siempre, y nunca m�s volv� a tener un encuentro
extramatrimonial con nadie m�s. Hoy en d�a mi sobrino es todo un hombre casado
con 32 a�os y nos miramos delante de los dem�s como si nada hubiera sucedido en
los finales de su pubertad y comienzos de su adolescencia.



�


Este relato es muy personal, pero si has tenido una
experiencia similar estoy presta a escucharte.



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