Relato: Mis mejores momentos... (20: Mis mejores mamadas)





Relato: Mis mejores momentos... (20: Mis mejores mamadas)


MIS MEJORES MOMENTOS (o tendr�a que decir "Mis mejores
mam....")


Parte XX



Para culminar esta serie de mis mejores momentos sexuales,
quiero hacerles llegar las partes sobresalientes de sexo oral que he mantenido
con mi pareja u ocasionales participantes de trios e intercambios de los que
forme parte, ya que muchos me consideran una experta en la materia y suelen
decir que hago muy bien las cosas. Un beso a todos y espero que lo disfruten
como lo hice yo.




"Sab�a que le
gustar�a lo que le iba a hacer y dif�cilmente se olvidara de ello. M�s que una
vez me hab�a escrito que su mujer no era muy proclive a hac�rselo.


Comenc� por la base de su tronco y lam� hacia arriba muy
despacio. Gir� la cabeza de lado y mir�ndolo nuevamente simul� morderlo,
colocando mis dientes suavemente en su carne.


Segu� humedeci�ndosela mientras con un mano le acariciaba sus
pelotas tratando de buscar por debajo y atr�s de ellas ese lugarcito tan
sensitivo que tienen los hombres antes de su ano y que estimula el m�sculo de la
erecci�n.


Despu�s de lam�rselo un mont�n de veces y habi�ndoselo dejado
todo h�medo y bien duro not� que Jos� comenzaba a retorcerse como queriendo
acelerar las cosas.


Me gusta ese momento de los hombres porque se empiezan a
desesperar y quieren cogerte por la boca de impacientes que se ponen.


Contin�e con la tarea que conozco bien lami�ndole ahora la
punta de la pija y poni�ndole la lengua en el agujerito del centro, pero sin
chuparle la cabeza.


Recorr� con mi lengua el borde de su capullo, por todo el
contorno, haciendo frecuentes pases por su tierna piel. Not� por los movimientos
que hab�a acertado con uno de sus puntos sensibles y me alegr� por Jos�...sab�a
que estaba gozando mucho.


Estruj� luego su miembro y v� como empezaba a brotarle el
l�quido claro preeyaculatorio y lo esparc� con la lengua por toda su cabeza.


El estaba cada vez m�s excitado y entonces, como si fuera un
helado, me met� la cabeza de su verga en mi boca humedecida. Lo escuch� gemir y
me la met� entonces todo lo que pude, manteni�ndola quieta en mi interior por un
instante.


Puedo decirles que ello no fue f�cil porque el instrumento de
Jos� es de considerables dimensiones y adem�s quer�a apurar la cosa. Estaba muy
caliente.


Se por experiencia que si lo dejaba actuar acababa de
inmediato y no lo dej� imponerse, quer�a que el placer le durara m�s.


Pero no pude aguantarlo mucho y como su excitaci�n y la m�a
iban en aumento empec� a moverme r�pidamente, desliz�ndome arriba y abajo por si
pija como si lo estuviera cogiendo.


Cambiaba de ritmo constantemente para que no acabara o cuando
supon�a que su verga se volv�a inmune a mis movimientos. Tem�a que se le
durmiera aunque ello resultar�a muy dif�cil pero suele sucederle a algunos
hombres y no quer�a que fuera justamente a �l.


As� fue que pasaba de mamarle tan solo el capullo como si
fuera un pez�n a tom�rsela completa y chuparla todo el tiempo hacia arriba y
abajo como si fuera una aspiradora.


Contin�e chupando y v� que Jos� no se aguantaba m�s y aceler�
los movimientos. Lo sent� venir y quise ver c�mo se disparaba su leche y me lo
apart� de la boca por un instante.


Fue asombroso verla salir a borbotones y r�pidamente me la
volv� a meter para recoger todav�a mucha de su leche. Me la tragu� lentamente y
despu�s le pas� la lengua por todo el tronco dej�ndoselo bien limpito."


"Desconocida de m� misma me anim� a preguntarle si no se le
bajaba.


�C�mo? Dijo el vendedor sin saber exactamente a qu� me
refer�a.


Si tu pija te queda parada por mucho rato, respond�.


El se sonri� y contest� que todo el tiempo que yo necesitara
iba a estar as�.


Casi sin darme cuenta ca� de rodillas a sus pies buscando ese
pedazo para met�rmelo en mi boca. Pese al esfuerzo solo la cabeza entr� en mi
paladar. Lo masturb� con las dos manos mientras �l se quedaba quietecito.


Percibi� mi furia desatada despu�s de tanto tiempo sin sexo,
sent� la dureza de su venosa pija y mientras lo chupaba lo miraba a la cara y v�
que experimentaba un placer enorme.


Ahora, pese a la extra�a situaci�n con ese desconocido me
sent�a libre para gozar.


Mientras le apoyaba una mano en su trasero sostuve la pija
con mi boca y con la otra libre me toqu� la concha.


La ten�a empapada, estaba casi chorreando de la calentura. Se
puede decir que bien lubricada para recibir esa descomunal verga.


El tambi�n estaba muy excitado por mi mamada."


"Dej� la copa sobre una mesita y procedi� a sacarle el
miembro fuera del pijamas y a acariciarlo suavemente con ambas manos. Yo no
pod�a creer lo que estaba viendo y adem�s, lo peor, era que me estaba calentando
con la situaci�n. Ve�a a mi mujer con otra pija entre sus manos y comenc� a
excitarme.


R�pidamente y por los movimientos de Fina el miembro de Sine
creci� a pasos agigantados y realmente ten�a una verga considerable.


Notaba a trav�s de la ventana que ella tambi�n estaba
sorprendida por el tama�o y la miraba algo extasiada. Sus movimientos iban de
abajo arriba y dejaban al descubierto la rojiza cabeza del glande. Sine intent�
acariciarla en su espalda pero �sta se rehus� y le dijo que no la tocara, que la
dejara actuar.


Sigui� con sus movimientos que se hicieron m�s intensos a
medida que pasaban los minutos. Por momentos una de sus manos de deslizaban
hacia los test�culos y trataba de apret�rselos con lo cual parec�a que Sine se
retorc�a en su camilla.


Sigui� acelerando sus movimientos y fue entonces que un
chorro de leche sali� disparado furiosamente hacia arriba. Piru continu� con su
tarea sin importarle que el semen se desparramara sobre su mano. Es m�s y ah�
casi me vuelvo loco, de golpe acerc� su boca al miembro de Sine y sin mediar
palabra se lo introdujo en su boca. Le pas� la lengua por su cabeza y el tronco
limpiando toda la verga hasta dejarla bien limpita. Luego le pregunt� d�nde
ten�a otro pijamas y sac�ndole el que llevaba puesto se lo cambi� por uno limpio
no sin antes darle un nuevo beso a semejante garrote. Despu�s le dio un beso en
la boca a Sine qui�n pretendi� tomarla con sus brazos pero �sta no quiso y se
retir� rumbo a casa."


"Me saqu� el sleep y me met� en la cama. Me sent� apoyando mi
espalda sobre el respaldo de la cama, dejando mi entrepierna a la altura de su
cara. Lo primero que quer�a hacer era pon�rsela en la boca. Suavemente atraje su
mano hacia mi verga que ya estaba totalmente erecta y me qued� quieto esperando
que ella actuara.


Ella murmur� unas palabras ininteligibles y empez� a mover la
mano de abajo a arriba dejando que la piel cubriera y descubriera la cabeza de
mi miembro. Suavemente se la introdujo en la boca y comenz� a succionarla. No
pod�a creer lo que me estaba pasando.


Recorr�a �ntegramente mi pija con su lengua h�meda y un
suspiro escap� de mis labios cuando mis dedos se enredaron en su pelo. Utilizaba
su lengua lentamente hacia arriba, hasta llegar al glande, meti�ndola en su
agujerito de la punta y luego volviendo nuevamente a la base. Llegaba hasta los
test�culos y los mord�a muy suavemente.


No aguantaba m�s. Quise darme vuelta para chuparle la concha
pero ella no me dejaba moverme y continuaba con su tarea. Era toda una experta
chupando pijas y Salva no me hab�a mentido. Lo estaba comprobando realmente.


Cuando percibi� que aparec�a en la boquita del miembro el
l�quido preeyaculatorio ya estaba humedecida por el olor a macho que desprend�a
de mis partes �ntimas aceler� los movimientos meti�ndoselo todo en la boca,


Chupaba de tal manera que no se pude contener y empec� a
acabar. El primer chorro de semen se lo trag�, despu�s la sac� y sigui�
paje�ndome con la mano desparramando leche sobre su cara y pelo. Luego, lami�
las �ltimas gotitas que quedaban en la verga y se recost� a mi lado, sin dejar
de sostener entre sus manos el miembro ya fl�ccido."


"S�bitamente ella lo apart� empuj�ndolo sobre la cama, lo
acomod� en el borde y en un acto de sumisi�n y deseo se arrodill� entre sus
piernas, tom� la pija con ambas manos y la chup�.


Jos� suspiraba, gem�a, gritaba y le tiraba de los pelos para
impedirle que lo hiciera acabar....pero fracas�. La mamada era muy intensa e
instantes despu�s el muchacho derramaba su leche en la boca de mi mujer, que se
lo banc� todo sin desperdiciar nada. Trag�, se relami� y continu� chupando hasta
que el joven casi se desmaya. Es toda una especialista en la materia."


"Me tom� mano y la deposit� sobre su bulto. Se acerc� m�s y
cuando comenz� a rozar sus labios sobre mis pechos, abr� los ojos y no obstante
el buen momento que estaba pasando le pregunt� que era lo que pretend�a hacer.


El sell� mis labios con un beso y ah� s� perd� el control y
le tom� la verga, que �l ya hab�a sacado fuera del pantal�n y se la empec� a
acariciar en movimientos masturbatorios. El doctor tambi�n excitado por la
situaci�n y supuestamente por lo que le hab�a contado me acerc� la pija a la
boca y me la fue poniendo poco a poco.


Comenc� a mam�rsela suavemente (me daba algo de verg�enza lo
que estaba haciendo pero me gustaba) y �l a bombear como si quisiera cogerme por
la boca como si se tratara de la concha mientras sus dedos entraban y sal�an sin
cesar de mi vagina. Estaba tan excitada que tuve un orgasmo y no pude evitar que
se me escapara un grito de placer y dej� caer la cabeza hacia atr�s. El miembro
del doctor se me sali� de la boca y un chorro de semen me salpic� la cara y el
pelo.


Extenuada y muy feliz qued� recostada sobre la camilla y
comprend� el motivo del brillo de los ojos de la esposa de mi primo y el cambio
de su car�cter �ltimamente. Cuando me retiraba pens� que el doctor en la pr�xima
sesi�n me coger�a y no me disgustaba la idea."


"Cuando apagaron las luces de cabina y vi que continuaba
dando vueltas en su asiento en forma molesta le volv� a preguntar y esta vez me
contest� que s� pero que no pod�a contarme qu� era.


Preocupada le dije si quer�a que llamara a una de las
azafatas y se me ve que no aguantaba m�s porque pidi�ndome disculpas por si me
ofend�a me dijo que el motivo de su malestar se lo hab�a causado yo. Que le
hab�a provocado la erecci�n m�s grande de su vida, que estaba desesperado y que
su miembro parec�a que iba a estallar dentro de su ropa interior.


Pens� que me estaba haciendo el verso para que se la chupara,
dado su fama, pero al mirarlo pude darme cuenta que ten�a una prominencia tipo
carpa en su pantal�n, as� que -a pesar de la oscuridad reinante- puse un abrigo
que ten�a sobre mi falda arriba de su entrepierna y jug�ndomela descaradamente
le puse la mano arriba sobre su bulto. No era que tuviera miedo al despido ni
que aspirara a una gratificaci�n extra de dinero, ya que con mi profesi�n me
desenvolv�a perfectamente, ten�a bastante trabajo y ganaba buen dinero. Lo m�o
pasaba m�s por el abandono sexual que ten�a de parte de mi esposo y porque ese
hombre realmente me interesaba como tal.


Lo hice todo muy lento para que no pensara que era una
cualquiera que se la pasa acariciando la primera verga que se le aparece. Lo
ve�a transpirar y le dije que pensaba que sab�a cu�l era la soluci�n para su
problema, que me dejara actuar.


Trat� de bajarle el cierre despaciosamente por temor a
lastimarlo. El me ayud� y entre los dos llegamos a su sleep. Met� mi mano por
arriba y lo primero que encontr� fue una mata vellosa e inmediatamente su pija
que no se como no se hab�a quebrado ya que estaba casi toda doblada.


Cuidadosamente pero decidida la empu�e y con mucho cuidado la
puse en forma vertical y ah� s�, zaf� del calzoncillo y la pude sacar afuera. No
pod�a abarcarla toda con mi mano. Estaba en un estado impresionante. Su cabeza
parec�a a punto de estallar. Nunca hab�a visto una verga en ese estado. Era
realmente enorme. Yo no hab�a conocido muchas pijas m�s aparte de la de mi
marido ya que �nicamente lo hab�a cuerneado con cierto amigo de la infancia que
me encontr� de casualidad un d�a a la salida de un cine y como estuve siempre
muy caliente con �l y �l conmigo, seg�n me confes� esa noche cuando fuimos a
tomar algo para festejar el reencuentro, acced� sin mucho esfuerzo a acostarme
con �l. Me acuerdo que mi marido hab�a viajado por trabajo al interior y por eso
yo hab�a ido sola al cine porque estaba aburrida y no ten�a problemas en llegar
a cualquier hora a casa.


Me acomod� sobre su hombro como si fuera a dormirme y
despacio, muy despacio comenc� a acarici�rsela suavemente moviendo mi mano de
arriba para abajo y viceversa dejando que la piel corriera entre mis dedos.
Tocaba el agujerito del glande y volv�a a repetir la acci�n. Me daba cuenta que
su respiraci�n cambiaba de ritmo.


Despu�s de un instante de pajearlo con mi mano me inclin� un
poco m�s pasando por debajo de su brazo y me llev� su pija a mi boca y comenc� a
mam�rsela. El baj� su mano y comenz� a acariciarme las piernas hasta llegar a
mis nalgas por la posici�n en que me encontraba. Lo hac�a en buena forma y me
estaba empezando a calentar.


Yo mientras tanto segu� con mi tarea, que la verdad no me
disgustaba. Le daba vueltas con mi lengua alrededor del glande, me deten�a en la
corona, en el frenillo y trataba de introduc�rmela toda en mi boca lo que no era
posible debido a sus dimensiones. Le acarici� los test�culos con mi mano y �l
empez� a estremecerse.


Me susurr� que me la sacara de la boca ya que estaba por
acabar. No le hice caso y aceler� el tr�mite acompa�ando la succi�n de mi boca
con los movimientos de mi mano. Quer�a que eyaculara dentro mio. A mi esposo
nunca lo hab�a permitido que lo hiciera y una vez que tard� en sacarla y me
salpic� la cara me puse furiosa pero con este hombre era distinto, no s� que me
pasaba, me hab�a liberado de golpe y quer�a mam�rsela hasta la �ltima gotita.


El presintiendo que no puede aguantarse m�s intenta apartarme
nuevamente pero no lo dejo y descarga toda su leche dentro de mi. No me result�
tan desagrabable el sabor de su leche. Me acuerdo haber leido en un viejo libro
de Jacqueline Susan que tomarla o pon�rsela por la cara era beneficiaria para la
salud. No se si era cierto o no pero no me disgust� el hacerlo.


Le pas� la lengua por toda la verga hasta que no qued� una
sola gotita y se la volv� a guardar en su lugar. Como ya estaba algo fl�ccida no
tuve inconvenientes. Le sub� el cierre del pantal�n y me incorpor� en mi
asiento."


"La mujer empez� a acariciarles los miembros un rato a cada
uno masturb�ndolos un poquito hasta que sus miembros llegaron a su m�xima
expresi�n. Despu�s la fellatio fue la estrella. Tomaba cada una de las vergas y
las chupaba suavemente. Sal�a de una flaquita y larga y se introduc�a una
gruesa, para terminar con la del muchacho que hab�a conocido en la playa que era
una verga espectacular.


A esta �ltima la saboreaba bien descubriendo el glande con
sus movimientos manuales. Ellos apretaban las piernas para no pasar por precoces
pero el que la ten�a gruesa fall� y le llen� la boca de leche, tanta que tuvo
que sacarla para no ahogarse. El resto salt� sobre su rostro. Eso caus� un
efecto catarata y tuvo que sorber tambi�n la leche del que la ten�a flaquita y
larga porque tampoco se aguant�."


"La hicieron arrodillar y se colocaron a cada lado de ella
para que pudiese chuparles la pija sin moverse del lugar. En ese momento mi
esposa estaba como fuera de s�, como nunca la hab�a visto en nuestras
relaciones. Ten�a un pene en cada mano y los mov�a a un ritmo fren�tico,
buscando el m�ximo de placer, no solo para ellos sino tambi�n para ella. Los iba
chupando alternativamente mientras se mov�a en una forma provocativa, como si
estuviese disfrutando m�s que nadie. Pensar que cuando yo le propuse alguna vez
que me lo hiciera me dijo que le daba asco."


"Nora se agach� de golpe y se hizo cargo de la tan deseada
verga del negro meti�ndosela suavemente en su boca. Comenz� con los movimientos
de succi�n al tiempo que sosten�a la pija entre sus manos y mientras se la
tragaba y la sacaba, chupaba y chupaba.


Hab�a empezado de a poquito, sosteniendo el miembro entre las
manos y recorri�ndolo �ntegramente con su lengua h�meda mientras segu�a
lami�ndolo un rato lentamente hacia arriba hasta llegar al glande, meti�ndola en
el agujerito de la punta y luego volviendo a la base hasta llegar a sus
test�culos velludos. Pod�a sentir c�mo se le tensaban los m�sculos de la cola al
negrito mientras �ste se conten�a y esto la excitaba m�s.


Cuando �ste dijo que estaba a punto de eyacular la mujer
aceler� la maniobra. Chupaba y bombeaba como si fuera la �ltima vez que mamara
una pija (en realidad era la primera vez que ten�a una poronga negra y de esas
dimensiones en su boca).


El muchacho lleg� como un toro en celo. En el momento en que
se descarg�, la mujer se la quit� de la boca y las otras pudieron ver como ca�a
el blanco semen que parec�a m�s blanco que nunca. El primer chorro cay� sobre la
cara de la mujer y el segundo se derram� sobre sus tetas y �sta entonces volvi�
a met�rsela en la boca y se la chup� hasta dejarlo totalmente seco.


Todas estaban excitad�simas y muy h�medas y se masturbaban
sin ning�n prurito. La homenajeada que estaba toda mojada se introdujo tambi�n
los dedos en su concha y tuvo r�pidamente un orgasmo que no pudo disimular."


"Percatado de la situaci�n el Ra�l acerc� su miembro erguido
a la boca de Nora, quien mir� a su amiga como dudando y ante un gesto afirmativo
de �sta se lo puso a chupar golosamente. Mientras ello ocurr�a Mary se dedicaba
a acariciarle los test�culos y lo masturbaba aceleradamente como si quisiera que
acabara dentro de la boca de su amiga.


Tal fue el movimiento y los lenguetazos y chupadas que
recib�a la verga que el hombre no se pudo contener y derram� su leche dentro de
la boca de Piru, quien sin amilanarse primero la sac� cuando fue sorprendida por
el chorro y luego se la volvi� a meter para succionarla hasta que saliera la
�ltima gotita de esperma.


Las mujeres continuaron luego bes�ndose y acarici�ndose
mientras el hombre se recuperaba en silencio."


"Ella se excitaba mucho cuando se la chupaba a su pareja y
dedujo que ac� le ocurrir�a lo mismo as� que matar�a dos p�jaros de un tiro. Lo
dejar�a bien al chico y ella gozar�a tambi�n.


Abri� sus labios lentamente y dej� que esa descomunal verga
se fuera introduciendo de a poco. Mientras su lengua recorr�a la cabeza y se
deten�a en su agujerito superior sus manos acariciaban la parte del tronco que
quedaba afuera llegando hasta los test�culos.


El muchacho, excitad�simo, le segu�a sujetando con una mano
la cabeza y con la otra le acariciaba las tetas a trav�s del escote y a ella los
pezones que se le estaban empezando a endurecer. Entonces dej� sus manos de lado
y empez� a pajearlo solamente con la boca, sab�a como hacerlo, hasta que �ste no
se aguant� m�s y derram� un poderoso chorro de semen que lleg� hasta su la
garganta. Era tanto el l�quido que el muchacho derram� que al principio tuvo
dificultades para tragarlo pero inmediatamente se recupero y no dej� que ninguna
gota se deslizara fuera de su boca.


Despu�s se la sac� y sigui� masturb�ndolo con sus manos y
chup� toda la leche que quedaba en la cabeza y el tronco hasta dej�rsela bien
limpia."


"Entonces, fuera de s� y con una calentura de aqu�llas,
intent� acercar su boca a ese bulto tan deseado a esta altura. Casi sin darse
cuenta subi� sus manos y acarici� la entrepierna del hombre, quien r�pidamente
se baj� el cierre de su pantal�n y sac� el miembro viril afuera.


A esta altura los dedos de la masajista ya jugueteaban dentro
de su vagina, de ah� su excitaci�n. Sinti� como le separaba suavemente las
piernas flexion�ndoselas hasta que los talones tomaran contacto con sus gl�teos
y como proced�a a introducirle una verga de pl�stico con vibrador. Pens�
oponerse a ello pero estaba de tal modo que no ofreci� resistencia para que
entrara con m�s facilidad..


El consolador, untado generosamente con vaselina comenz� a
penetrarla y la mujer dej� escapar unos gemidos de satisfacci�n. La verga real
del hombre fue entonces su objetivo. La tom� entre sus manos, la acarici� de
arriba abajo, dejando que la piel descubriera la roja cabeza y se la introdujo
en la boca y empez� a chuparla.


Como los movimientos entre los tres se realizaban
sincronizados, la mujer estaba a punto de acabar nuevamente. El hombre por
entonces ya no pod�a aguantar m�s el contener la eyaculaci�n y el estallido se
produjo de golpe. Un poderoso chorro de semen sali� disparado hacia la garganta
de la mujer quien al sacarse la pija de la boca, recibi� sobre su cara el resto
de la leche."


"Casi sin que �ste se diera cuenta del movimiento, ella se
inclin� y pos� sus labios sobre esa brasa caliente y comenz� a succionarla como
una aspiradora. La boca de la contadora se trag� toda la verga. La llev�
suavemente hasta el fondo dejando visible �nicamente el cuello de la misma. Lo
paje� con la boca, sin la ayuda de las manos, las que estaban entretenidas en
acariciar los velludos test�culos.


Carlos no aguantaba m�s, quer�a apretar su miembro para
evitar descargar su leche sobre Nora pero �sta se lo impidi�. Nunca hab�a gozado
as� con una mujer. A su esposa le daba asco chup�rsela y desde que era joven que
no le hab�an dado una mamadita. As� que estaba enloquecido, sobre todo por qui�n
era la que se lo hac�a,


Meti� su mano por detr�s y comenz� a masturbarla
delicadamente. Ella mov�a su trasero como deseando tenerla dentro. Pens� que
deb�a detenerla para no eyacular, ya que la situaci�n se le hac�a insostenible.
Se lo hizo saber pero �sta continu� con su tarea sin inmutarse. Solo emit�a
sonidos de placer cada vez que la hac�a entrar y salir de su boca.


De pronto sinti� escapar unas gotas de semen y tir� de la
cabeza de la mujer para que dejara de chuparlo, pero �sta gem�a y mandaba al
miembro m�s adentro de su boca. La descarga fue tremenda. Profusos chorros de
semen fueron directos a la garganta de Piru, que se trag� toda la leche y no
derram� ni una sola gota. Era toda una experta. Luego pas� la lengua sobre las
gotitas que quedaban adheridas todav�a a la pija y recibi� gustosa un beso en la
boca del agradecido hombre."


"Yo sab�a que a Piru le gustaba mucho chuparla y que era toda
una experta pero no pens� jam�s que se atreviera a realiz�rselo a otros hombres
y sobre todo en p�blico. Era lo que m�s frecuentemente hac�amos cuando ten�amos
sexo. A veces me la chupaba nada m�s hasta hacerme acabar y gozaba con ello y a
poco de comenzar ya se humedec�a y llegaba al orgasmo. Me acord� que cuando eran
novios en el viejo cine de Flores, luego de las consabidas caricias que nos
propici�bamos habitualmente en esos lugares, me la empez� a chupar ante la
at�nita mirada de una pareja vecina y no par� hasta hacerme acabar.


Entonces recapacit� y pens� que no estar�a mal que lo hiciera
con otros, porque a veces hab�a fantaseado con ello y le d� mi consentimiento
con la mirada.


Se prepararon entonces tres de los presentes -que fueron
elegidos por la due�a de casa sin que ella, que hab�a sido llevada a otra
habitaci�n supiera de quien se trataba. Uno era un tipo joven, de alrededor de
30 a�os, que ten�a un miembro bastante bien proporcionado, que despert� la
envidia del resto de los hombres que no pod�amos creer lo que est�bamos viendo.
No era muy larga pero ten�a un grosor increible. Las mujeres no pudieron evitar
un �oh! de sorpresa al verle semejante pija. Los otros dos, de aproximadamente
50 a�os, la ten�an de medidas normales al igual que yo.


Cuando mi mujer ingres� con los ojos vendados la sentaron en
el apoya brazos del sill�n y los hombres, con las pijas en sus manos,
masaje�ndolas para que adquirieran dimensiones, se colocaron alrededor. El
sorteo que se hizo luego de elegirlos, determin� que yo ocupara el tercer lugar.


El primero era uno de los de cincuenta y Piru se la chup� por
un instante sin que se le parara del todo y dijo que no era la m�a. Con el
segundo, el joven de 30, se entretuvo m�s tiempo (la muy p�cara se dio cuenta lo
que ten�a entre manos, mejor dicho en la boca, y supongo que por las dimensiones
se dio cuenta que yo no era, pero se la chup� por un buen rato ante la mirada
molesta de su joven esposa y los celos que me estaban atacando por la
situaci�n). Tambi�n respondi� negativamente. A m� me la chup� un poco menos que
al anterior y expres� tener dudas. Pidi� continuar con el otro, con el que tuvo
dudas tambi�n. As� que le propusieron seguir chup�ndolas (a esas dos) para
desempatar.


Le hicieron una se�a al �ltimo para que se la volviera a
poner y como a esta altura yo notaba que estaba excitada y supon�a humedecida,
le realiz� un trabajo especial. Empez� de a poquito, sosteni�ndole el miembro
entre las manos y recorri�ndolo �ntegramente con su lengua h�meda. Sigui�
lami�ndolo un rato lentamente hacia arriba hasta llegar al glande, metiendo la
lengua en el agujerito de la punta y luego volviendo nuevamente a la base hasta
llegar a sus test�culos velludos.


El resto de los presentes observaba los movimientos y estaban
at�nitos y excit�ndose con lo que acontec�a. Nora sigui� con su tarea como si
nada, acentuando sus movimientos. Chupaba y bombeaba como si fuera la �ltima vez
en su vida. El pobre hombre (o afortunado) estaba tan fuera de s� que no pudo
contenerse y se corri�, parte en la boca de ella y parte en la cara, cuando mi
mujer se la sac� r�pidamente al sentir los primeros chorros de semen en su
interior.


Ah� termin� todo. La due�a de casa par� el juego. Mi mujer se
sac� la venda que le cubr�a los ojos ante un cerrado aplauso de todos y mi
mirada complaciente."


"As� que tom� valor, dej� lo que estaba haciendo, se dio
vuelta y agarr� suavemente con sus manos el miembro del empresario. Despu�s se
la introdujo en la boca sin hacer ning�n movimiento especial y tratando de
pensar en cualquier otra cosa. El hombre que estaba excitad�simo le sujeto su
cabeza con ambas manos y empez� a bombear como si quisiera cogerla por la boca
lleg�ndole a producirle arcadas a la contadora.


Acab� r�pidamente sin darle tiempo a ella de sac�rsela, lo
que le produjo fastidio y asco al mismo tiempo. Cuando pudo retirarla todav�a
estaba chorreando y las �ltimas gotas cayeron sobre su blusa."


"Yo ten�a ganas de probar su ansiada verga o pico como dicen los chilenos,
as� que formamos un 69, yo arriba y �l abajo.


Juanito timone� mis caderas para lograr la posici�n correcta y su lengua
comenz� a lamer y succionar con fruici�n.


Unos segundos despu�s, ten�a el cl�toris entre sus labios y me lo chupaba
como si fuera una golosina.


Para entonces, su pija estaba dentro de mi boca y yo deb�a hacer verdaderos
esfuerzos para no morderlo cada vez que �l me provocaba un estremecimiento con
sus h�biles leng�etazos.


Su miembro creci� y creci� y lleg� a un momento en que mi cavidad bucal
result� chica para albergar tama�a verga.


Me entretuve lami�ndole las pelotas ya que eso me produc�a mucho placer y por
lo que notaba a �l tambi�n.


Cuando los dos estuvimos suficientemente satisfechos con los ejercicios
linguales y bucales, nos acostamos uno junto al otro."


"Cuando v� que Miguel estaba recuper�ndose comenc� a
acariciarle con mis manos su verga, la que pronto alcanz� un tama�o descomunal.


Ah� si, me la introduje nuevamente en la boca y esperaba
concluir el trabajo que hab�a dejado de hacer antes.


Se la mam� como siempre lo hago con Euge y lo hice desesperar
tanto como a mi marido. Cada vez que chupo una verga tengo un orgasmo, eso desde
la primera vez que lo hice y me pone muy bien.


Primero efectu� movimientos de lamida con mi lengua y luego
empec� a succionarle la pija de tal modo que pens� que se la quer�a morder.


Sinti� que iba a acabar y me lo avis� pero continu� con mis
movimientos.


Se derram� todo en mi boca y no se la dej� sacar hasta
dej�rsela bien limpita."


"El se acerc� r�pidamente y me puso la pija casi encima de la
cara.


No tengo dudas que ah� se produjo el "click" que hac�a falta,
es decir el punto donde uno se olvida de todo, donde el deseo manda y le tom� la
verga con fuerza y me la introduje en la boca dej�ndola quieta sobre mi paladar
mientras mov�a lentamente su lengua y fui cerrando los ojos como si cayera en un
agradable sue�o.


Afloj� mi cuerpo y busqu� con mi cola la pija de Salva, quien
me penetr� y nos entregamos a un placer total.


Pronto invertimos los papeles y era Juan el que me cog�a
mientras se la chupaba a mi esposo."


"Le toqu� la pija, estaba caliente y sent� el impulso de
chuparla, tal como lo hago contigo.


Me acomod� entre sus piernas y me met� la verga en la boca y
comenc� a lamerlo. Me asombr� la diferencia de sabor.


Lo lam� de arriba hacia abajo, �ntegramente, acariciando sus
test�culos entre mis manos mientras frotaba la lengua por la cabecita de la pija
provoc�ndole unos cuantos espasmos.


Mi mujer prosigui� con el relato: lo mam� durante un rato y
sabore� varias gotas de su semen. Quer�a complacerlo y darle mi cuerpo como a �l
le gustase. Lo dej� que me quitase el camis�n."


"Nuevamente me qued� dormida y cuando despert� ten�a su
enorme pija a las puertas de mi boca. Quiso que se la mamara sin sacarla para
nada de la boca pues cuando hice el intento le v� las intenciones de pegarme. Me
sobaba las tetas y yo le acariciaba los huevos. Luego de un rato la verga
estall� llen�ndome de l�quido toda la boca y la cara. Me grit� que me tragara
toda su leche as� que obedec� al tiempo que comenc� a espantarme"


"Si Salva quer�a que me cogieran sus amigos mejor no la pod�a
estar pasando ya que estaba siendo penetrada por los tres al mismo tiempo. Lo
mamaba a Jorge y recib�a las pijas de Ra�l y Salva por mi culo y concha
respectivamente.


Ten�a todos mis agujeros ocupados y estaba gozando mucho. El
primero en acabar fue mi marido quien sin embargo la dej� adentro y por suerte
erecta un buen rato. Luego acab� Ra�l sac�ndola y tir�ndome la leche por mis
nalgas y mi espaldo..


Como estaba al borde del orgasmo aceler� los movimientos de
mi boca ayud�ndome con mis manos y cuando sent� el primer chorro del semen de
Jorge en mi boca la saqu� salpic�ndome la cara y las tetas y parte del cuerpo de
Salva, lo que no me disgust�.


Despu�s de un rato de relax se fueron invirtiendo las
posiciones y mientras se la chupaba a Ra�l cog�a con Jorge mientras Salva
observaba todo con cara de calentura y resignaci�n a la vez."


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Relato: Mis mejores momentos... (20: Mis mejores mamadas)
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