Mis experiencias con R. (III)
Esta �ltima entrega de mis experiencias con R. no es bien
bien la experiencia con R. sino en realidad con uno de los miembros de su
familia, por cierto la �nica vez que he tenido relaciones con 2 miembros de una
misma familia, en este caso R. y su hija mayor O.
S�, s�, con su propia hija. Para los que hab�is le�do mis
anteriores experiencias con R. relatadas anteriormente ya estar�is situados, R.
en el momento de la relaci�n con su hija deber�a tener unos 35 a�os y O., su
hija, unos 14, yo por entonces unos 19.
O. era externamente la t�pica adolescente, para la edad alta,
pechos ya casi formados, cabello negro largo y liso, ojos negros y tez blanca a
diferencia de la madre, vest�a usualmente como cualquier adolescente, nada
provocativa, pantalones tejanos, bambas o zapatos de cordones, etc... Todo
empez� tras hechos puntuales, un d�a que vino a casa acompa�ando a su madre nos
quedamos hablando de sus novios, cada semana cambiaba, coment�bamos grupos
musicales, etc, etc..., sin pasar de ah�, obviamente estaba su madre y �sta
supongo que conoci�ndonos a ambos no nos quitaba el ojo de encima.
Todo se precipit� un d�a que la hija llam� por tel�fono a la
madre la cual hab�a ido a comprar y al cogerlo yo, con mi sorpresa ella empez� a
vacilarme y excitarme con frases que ni las chicas de edad con las que iba se
les ocurrir�a, ejemplos: �guarro, te gustar�a que te chupase la polla? Y que me
tragase tu corrida?, te est�s haciendo una paja?, yo me estoy tocando. Toda la
conversaci�n iba en estos derroteros, no me acuerdo exactamente de los t�rminos
exactos pero s� que dur� bastante rato y que yo alucin� de la precocidad de la
ni�a que realmente era mucho m�s avanzada que las mayores de mi entorno. En fin,
no es para justificar mi relaci�n con una de 14 a�os cuando yo ten�a 19 pero lo
cierto es que fue ella la que abri� el fuego provoc�ndome y que como me demostr�
m�s tarde la que ten�a bastante experiencia previa.
Yo le segu� el juego en un par de llamadas m�s que hizo hasta
que un d�a hablando con la madre respecto a que me ten�a que comprar pantalones
me lo puso en bandeja dici�ndome que su hija sab�a donde vend�an marcas caras a
precios baratos, fue como darme el permiso de quedar con su hija, habl� con ella
y quedamos que la recoger�a la semana siguiente e ir�amos a esas tiendas, la
verdad es que hicimos la intenci�n de ir, incluso entramos pero no est�bamos por
la labor y realmente no compr� nada.
Se subi� a la moto y todos los trayectos que hicimos durante
esa ma�ana eran con ella desabroch�ndome la camisa y sob�ndome pecho y pezones y
desabroch�ndome la bragueta sob�ndome mi erguida polla que con p�rdidas de semen
ella me los ense�aba como trofeo antes de trag�rselos, yo, a�n con las
dificultades propias de ir en la parte delantera de la moto, le sobaba las tetas
y le met�a los dedos en la boca que ella succionaba lascivamente. Ella
aprovechaba sobretodo los sem�foros para provocar a otros veh�culos y las
grandes avenidas para torturarme la polla y los pezones. Definitivamente hab�a
salido a la madre y con tan solo 14 a�os reci�n cumplidos. La devolv� a su casa
y yo pill� un catarro descomunal, durante el resto de la semana, por ir en moto
con la parte superior del cuerpo medio descubierta en medio oto�o fr�o.
Eso s� la excitaci�n del hecho sirvi� para excitarme en la
intimidad durante a�os posteriores.
Pasaban los meses y yo, por la diferencia de edad y el
peligro de ser delatado a mi familia no daba ning�n paso para concertar
encuentro, esperaba que la casualidad me diera otra oportunidad, y esta lleg�
unos meses m�s tarde. Consegu� unas entradas para ir a un conocido centro de
recreo y le propuse acompa�arme junto a otra pareja, amigos m�os. Nosotros
�bamos en la parte trasera del coche donde ella dio rienda suelta a su
imaginaci�n, primero disimulando sin que nos vieran con la excusa que ella
dorm�a en mi regazo y luego, una vez se hab�an dado cuenta y tras t�midas quejas
por parte de mis amigos que alucinaban, ya segu�a abiertamente, el trayecto que
dur� algo m�s de 1 hora sirvi� para que me hiciese largas y dedicadas mamadas,
decididas pajas, eternos morreos correspondidos por mis dedos escondidos en su
pantal�n, hurgando entre su co�ito, obviamente al llegar al centro recreativo
cada pareja se fue por su lado. �C�mo disfrutamos de las atracciones!, en cada
una nos peg�bamos el lote y abiertamente nos masturb�bamos el uno al otro, sin
temor a que se percibiera el resto de personas, obviamente con la ropa tapando
nuestros respectivos sexos. All� me di cuenta, que lo que realmente le daba m�s
morbo a ella, era el estar con un t�o mayor y yo a mi vez el morbo de estar con
alguien tan joven y precoz.
Volvimos a Barcelona y al estar solos en mi casa finalmente
sin tener que escondernos inevitablemente acabamos en la cama donde descubr� que
no era virgen por delante a lo que tuve por lo menos el placer de ser el 1� que
se lo hac�a por detr�s, le doli� pero otorg�, ya nadie me deten�a y los leves
quejidos de dolor eran una t�mida sanci�n asumible tras sus muchas provocaciones
aunque hay que reconocer quiz�s mi torpeza al ser el primer culo que me
beneficiaba. Curiosa y lamentablemente no quiso que le despojara sus calcetines
no dej�ndome lamerle los pies, nunca lo entendido quiso que le diera por culo y
sin embargo no me dej� lamerle los pies.
Le dije si quer�a probar lluvia dorada y me dijo que esa
noche no pero en otra ocasi�n s� a cambio de que la acompa�ase a su casa y
delante de su madre nos despidi�semos con un morreo, no entend� la provocaci�n
hacia su madre. En fin tampoco me importaba la relaci�n con sus padres, durante
el viaje a su casa me explic� que donde veraneaba al salir de marcha sal�a
vestida normal ya que sus padres hab�an recibido referencias de que ten�a fama
como la putilla de la discoteca del pueblo (su madre me lo hab�a comentado en
nuestras sesiones) e iba a casa de una amiga donde se pon�a vestidos cortos de
tubo, sandalias y botas de tac�n alto de aguja y se quitaba las bragas, que
hab�a probado la lluvia dorada con sus amigos y que le encantaba, quiz�s
fanfarroneaba pero la verdad es que me sobreexcit� al decirme que usar�a esa
ropa para nuestras sesiones. Cuando llegamos a su bloque de pisos los padres nos
estaban esperando ya que los vimos en el balc�n, no me atrev� con lo del morreo
y ella tampoco, hasta que al llamar al timbre de abajo el padre se adentr� en el
piso dispuesto a abrir, fue entonces que estando sola la madre en el balc�n, O.
me cogi� de la camisa tir� hacia ella y se despidi� de m� d�ndome un morreo,
quiz�s para dar envidia a la madre o para provocarla, la verdad es que yo me
dej� hacer pensando en las contraprestaciones del mismo, aunque desgraciadamente
ella nunca cumpli� la parte del pacto as� que no volvimos a tener relaciones y
pr�cticamente no la volv� a ver. Tampoco su madre sac� nunca el tema del morreo
ni de lo que pudi�ramos haber hecho durante el d�a, aunque soy consciente de que
sospechaba y quiz�s hasta su propia hija se lo hab�a narrado, la verdad es que
nunca lo supe.
Nuevamente reitero que si os ha gustado me lo hicierais saber
al e-mail y si hay alguna voluntaria que quisiera sustituirla para rememorar
estas sesiones que me lo diga por mi parte la complacer�a sin dudarlo, mi pareja
actual est� de acuerdo ya que nos gustar�a incorporar una chica en nuestras
relaciones �ntimas.
Juan
Barcelona
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