lo que se hace y no se comparte queda inconcluso. por eso vuelvo a degustar cada momento de esa locura a la cual jamas imagine llegar.
soy muy feliz con mi esposo y llevamos una vida sexual activa que aunque no tan abierta, en las fantas�as encontramos alas potentes que nos llevan al infinito.
el tuvo antes de mi a su pareja de veinte a�os de relaci�n, terminando en un divorcio propuesto por el. ella jamas se resign� a perderlo y a decir verdad, se convirti� en un martirio en nuestra relaci�n. mi esperanza era que ella recomenzara su vida con otra pareja para que dejara de molestar a mi esposo pero al pasar los a�os era evidente su obstinaci�n.
una noche de locura sexual, no se como pude pero empece a mencionar su nombre en una fantas�a. mi esposo, muy amoroso conmigo se neg� al principio pero yo estaba decidida. le hice saber que yo estaba segura de que me excitaba y que se dejara llevar. esa noche fue incre�ble. mi sexo se mojo tanto que empap� la cama y note que a el tambi�n lo hab�a enloquecido.
ella es vendedora de perfumes por catalogo y por ah� instru� a mi esposo para acercarme. le mand� decir que me recomendara alguna marca y despu�s de muchas trabas accedi� a responderme.
tras algunas compras me atrev� al segundo paso. mi esposo me grab� un v�deo en el cual yo le dec�a lo mucho que admiraba su temple al resignarse a quedarse sola y que estaba dispuesta a producir un acercamiento entre los tres para acabar con las discusiones y rabias.
como era algo tan prohibido convenimos ir a un hotel y as� fue. llego el d�a esperado y aunque yo sent�a temor por todas las amenazas pasadas tambi�n sent�a el gusto de todos los orgasmos logrados con ella en las fantas�as.
la recogimos en nuestro veh�culo y llegamos al hotel. fue un momento incre�ble. le dije que la hab�a citado para devolverle el derecho a follar con su hombre y que mi �nica exigencia era que fuera en tr�o.
mientras los tragos eran disfrutados ella fue deshinibiendose y aprovech� para acercar la cara de mi esposo a su boca.
-b�sala- le dije a mi marido.
el estaba t�mido y yo acerqu� mi cara tambi�n con mi lengua dispuesta. ese fue el beso mas er�tico que he conocido.
ella se aferr� a la lengua de mi esposo y yo aprovech� para llenar mi boca de licor. volv� a ellos y me met� ente las dos bocas dejando escapar lentamente el abundante trago. ella chupaba de mi boca y el tambi�n.
nos dejamos caer en la cama. ella boca arriba bes�ndolo y yo quit�ndole su falda hasta dejarla desnuda. me situ� entre sus piernas descubriendo su sexo. aquel sexo en el cual mi pareja se hab�a venido tanto. eso me enloqueci� mas.
ya el me hab�a dicho que su punto d�bil era el cl�toris y a poco tiempo lo confirme. fue excitante. ella comenz� a quejarse cual una gata en celo. no pod�a creer que la ex de mi esposo, alguien que hab�a jurado matarme , en este momento estaba gritando mi nombre en un orgasmo h�medo y perro.
al notar que se hab�a corrido quise incorporarme pero mi amado me dijo
-qu�date que ella vuelve en tu boca-
segu� yo con la nariz sumamente empapada de ese liquido viscoso y a menos de tres minutos los gritos volvieron a retumbar en la habitaci�n.
jamas hab�a escuchado a una mujer gemir mi nombre y eso me puso al borde de derramarme al frotar mi vagina en la cama.
mi esposo me ayud� a incorporar y meti� su pene en esa vagina que yo hab�a dejado lista. ella y yo nos mir�bamos con romance escuchando el sonido de su sexo h�medo. mi esposo, conociendo a su ex me dijo
-ella se va a vaciar otra vez. abre la boca bien grande y deja que ella se meta en ti-
as� lo hice y aunque tem� que me arrancara la lengua de las ganas, vali� la pena sentir en mi garganta a esa perra que sin poder hablar balbuceaba mi nombre aun fuera yo la esposa de su ex.

Por favor vota el relato. Su autor estara encantado de recibir tu voto .