Todo empez� cuando mi novia me convenci� para que la
acompa�ase a un local donde iban a hacerle un piercing en el ombligo, eso me
gustaba mucho, de hecho yo fui quien la animo a hacerlo. Pero ella me puso como
condici�n que yo me hiciera un peque�o tatuaje, similar al que ella misma ya
tiene, es algo as� como un caballito de mar, lo bueno es que ella lo tiene mas
abajo del ombligo, casi al final del bello de su pubis.
Bueno pues, el caso es que el pasado viernes fuimos a un
lugar que le hab�an aconsejado donde se hacen tatoos y piercing, all� nos
atendi� un tipo con la cabeza rapada y un enorme tatuaje que asomaba por su
cuello y hombros. �l fue el que le hizo el piercing en el ombligo, de manera muy
profesional, con mucha asepsia y delicadeza lo que evito que a ella le doliese
demasiado, ni si quiera fue violento cuando le pidi� que se quedase en sujetador
para poder trabajar mejor, ya que lo hizo de forma educada y en mi presencia.
Hasta ah� todo fue bien, exceptuando las 7000 pesetas que me
costo la broma, lo peor fue cuando mi novia, muy contenta con su nuevo piercing,
me record� que ahora me tocaba a m� hacerme el tatuaje, la idea no me agradaba
demasiado, aunque ya sab�is, las mujeres lo consiguen todo, as� que acced�.
Yo cre�a que aquel tipo me har�a el tatuaje, pero no fue as�,
se disculpo y me dijo que de eso se encargaba otra persona, entonces nos pidi�
que pas�semos a la trastienda donde nos atender�a una chica.
Bueno, para que contaros, encima una chica, estuve a punto de
huir, de veras, pero el caso es que entre acompa�ado de mi novia y all� nos
atendi� una mujer de unos treinta a�os, con acento extranjero y el pelo muy
corto, rubio y de punta.
Me hizo gracia su forma de saludarnos, ya que al acercarse
nos dio la mano a ambos y se presento inclin�ndose un poco. Tenia las cejas
llenas de piercings, as� como las orejas, y uno mas en la nariz, adem�s tenia un
precioso tatuaje en el hombro. Hasta que no pasamos a otra sala no pude
distinguir que en su lengua tambi�n tenia un piercing. Era extra�a, pero
resultaba bastante atractiva y simp�tica.
Pregunto que para quien era el tatuaje, y mi novia se me
adelanto explicando que era para m�, adem�s le explico donde quer�a hac�rmelo,
por supuesto que era en el mismo sitio donde ella lo tenia, o sea encima del
pubis. Entonces la mujer rubia me pidi� que me sentara en una camilla y que me
bajase los vaqueros, de forma natural me dijo que deb�a depilar un poco la zona
para evitar infecciones y mientras me daba una peque�a toalla me pidi� que me
quitase tambi�n el slip y dijo que me tapase con ella que enseguida volv�a con
el equipo.
Ni os imagin�is el corte que pase, mire a mi novia y ella
esbozaba una sonrisa maliciosa, que en verdad a m� me molesto un poco, cuando la
mujer hab�a salido, le dije que pasaba, que me daba corte y que mejor me lo
hacia en otro sitio. Evidentemente ella no accedi�, y de forma perversa, me
record� donde tenia ella su tatuaje, y que si yo tenia otro en el mismo sitio
pues que ambos tendr�an un hermanito, y cosas as�... lo cierto es que no se como
pero me convenci�, y r�pidamente me quite el pantal�n y me tumbe colocando la
toalla sobre mi slip. Enseguida entro la mujer y se dirigi� a m� con una
maquinilla de afeitar y una toallita de esas que usan los bebes, aparto
ligeramente la toalla y tras comprobar que aun tenia los calzoncillos me pidi�
por favor que me los quitase, ella se volvi� aun con la maquinilla en la mano y
de forma despreocupada empez� a preguntarle a mi novia acerca de que tipo de
tatuaje deseaba para mi, las dos empezaron a hablar y yo, all� en medio
totalmente avergonzado, opte por olvidarme de todo y cubri�ndome con la toalla
me quite los slips y volv� a taparme lo mejor que pude.
La mujer pregunto entonces sin girarse aun si ya estaba, a lo
que respond� que s�. Entonces sin dejar de hablar con mi novia se coloco a mi
lado y aparto un poco la toalla, dejando al descubierto buena parte de mi bello
que empez� a humedecer con la toallita y a depilar con la maquinilla casi sin
mirarme a la cara, os confieso que estaba muy avergonzado por la situaci�n
aunque ellas se lo tomaban de forma muy natural y ya charlaban como si fuesen
amigas de toda la vida. Cuando acabo de limpiar la zona, me coloco de nuevo la
toalla y cogi� de un bote un poco de algod�n y tras humedecerlo con alcohol me
volvi� a retirar la toalla el espacio justo para desinfectar la zona, lo cierto
es que ya estaba menos nervioso e incluso empec� a participar en la
conversaci�n, todo era muy profesional y serio.
La cosa empez� a complicarse cuando la mujer pregunto a mi
novia acerca del modelo exacto que deb�a tatuarme, ella ni corta ni perezosa se
desabrocho el vaquero y baj�ndolo un poco junto con sus braguitas le mostr� el
maldito caballito de mar a la tatuadora, esta se acerco a observarlo, y comento
que era un buen trabajo y que no seria dif�cil hacer otro similar, para colmo le
sugiri� a mi novia que comparase su tatuaje con otro que ella misma tenia en su
cuerpo y para mi desesperaci�n se desabrocho tambi�n el pantal�n y lo bajo hasta
descubrir todo su culo que vestido con un escueto tanga estaba decorado con un
precioso tatuaje de una rosa, pero no era ese el tatuaje que ella deseaba
mostrarle a mi novia, sino otro que tenia tambi�n en la parte delantera mucho
mas abajo que ella, casi a la altura de las ingles.
Mi novia con la m�xima naturalidad del mundo, se agacho un
poco para observar el tatuaje que resulto ser tambi�n un caballito de mar pero
algo m�s grande y de colores, para facilitarle la observaci�n la tatuadora
aparto casi hasta la mitad su negro tanga, dej�ndonos ver que a ella tambi�n le
gustaba depilarse donde antes acababa de hacer conmigo. Sin mas las dos se
volvieron a vestir casi olvid�ndose de mi presencia, y continuaron charlando
mientras la tatuadora se colocaba unos guantes de l�tex y cog�a uno de los
instrumentos que antes hab�a tra�do, fue entonces, en ese preciso momento cuando
las dos se giraron hacia m�, para comenzar con el tatuaje, y evidentemente,
hacia rato que hab�a pasado lo que tenia que pasar, la toalla que me cubr�a
hab�a experimentado una considerable elevaci�n en su parte central, que dadas
las circunstancias yo no pude evitar ni mucho menos ocultar a la mirada de las
dos chicas. Os puedo asegurar que los tres nos quedamos mudos por un momento, yo
completamente colorado, y con ganas de que me tragase la tierra, y ellas dos se
quedaron mirando hasta que se miraron entre s�, y empezaron a re�r cuando mi
novia dijo: anda, mira este.
La situaci�n era de lo m�s bochornosa, aunque ambas se lo
tomaban a broma, empezaron a re�r y a susurrarse algo en el o�do, cuando la
mujer dejo su equipo sobre la mesa y se dispuso a abandonar el cuarto,
dirigi�ndose a m� y diciendo: Perdona que nos hayamos re�do, es normal, no te
preocupes, anda volver� en 10 minutos, a ver si para entonces te has "relajado"-
y mirando a mi novia a�adi�: - si quieres tu le ayudas- y ambas volvieron a
sonre�r.
Yo no sabia que decir, cuando nos quedamos a solas me
disculpe con mi novia, la que afortunadamente se lo tomo todo de buena forma, y
esperamos un rato a que se bajase mi "problema" algo realmente complicado, sobre
todo cada vez que recordaba el ultimo comentario de la tatuadora.
Al cabo de un rato mi novia llamo a la mujer y esta entro,
poni�ndose de nuevo los guantes de l�tex, y disculp�ndose otra vez por las risas
de antes. Sin mas pre�mbulos se dirigi� a m� y apartando ligeramente la toalla
empez� su trabajo, lo cierto es que el dolor que sent�a en la zona, evito por un
momento que pudiese pensar en otra cosa y quiz�s eso evito males peores. Las dos
chicas empezaron a charlar mientras yo era sometido a esa tortura cuando las muy
malvadas empezaron a hablar acerca de los lugares del cuerpo donde se hac�an los
tatuajes y piercing, la tatuadora comentaba que ella hab�a hecho tatuajes en
todos los lugares del cuerpo y que conoc�a casos de chicos con el pene tatuado,
adem�s a�adi� que la gente ped�a piercings en lugares como en los pezones, la
base del pene e incluso el cl�toris argumentando extra�as virtudes sexuales
derivadas de la estrat�gica colocaci�n de esos pendientes,
de echo,- a�adi�,- un piercing como el que yo llevo en la lengua dicen que
excita mucho a los chicos el practicar sexo oral-
Os aseguro que cuando o� eso, se me olvido el dolor del tatuaje, e incluso la
direcci�n de mi casa, me apret� los labios intentando evitar lo inevitable e
intente repetir la tabla del 12 para olvidarme de todo, pero la misteriosa
toalla volvi� a elevarse de nuevo ante la mirada de ambas conversadoras.
Yo las mire como pidiendo excusas y ellas de nuevo se miraron
sonriendo y moviendo la cabeza.
_EH, o te calmas un poco o no puedo continuar con mi trabajo-
dijo comprensivamente la mujer,
-Lo siento, de veras, ....- dije yo mientras miraba a mi novia buscando su
reacci�n.
La chica volvi� a dejar el instrumento sobre la mesa y miro a
mi novia diciendo:
- oye, lo de antes lo dije en serio, no es la primera vez que me ocurre, si
quieres me voy y le ayudas a desahogarse, nena, seguro que sabes como-
No pod�a creer lo que me pasaba, yo all� como un pelele, con la erecci�n mas
grande de mi vida y ellas hablando de c�mo deb�a de "calmarme"
Entonces mi novia me miro, ya sin sonrisas en su cara, y sin dejar de hacerlo
dijo:
No en serio, quiz�s es mejor que no te vayas, de veras no importa-
�pero que esta diciendo esta t�a? Pens�-
entonces la tatuadora se levanto y se dirigi� a la puerta.
Por fin alguien con sentido com�n, pens� entonces.
Pero para mi sorpresa no sali� del cuarto, sino que cerro el
pestillo y se volvi� echando el brazo sobre el hombro de mi novia mientras ambas
me miraban, supongo con la cara de gilipollas mas grande que he puesto en mi
vida y con la toalla aun mas alta que mi verg�enza.
La tatuadora se dirigi� a mi novia y dijo:
Bueno, bueno, este chico es muy travieso, a ver si se nos ocurre algo para
calmarle y poder terminar mi trabajo.
Os aseguro que no pod�a creer lo que me estaba pasando, y
menos aun la actitud de mi chica,, que parec�a estar disfrutando con la
situaci�n desde luego bastante mas que yo. (al menos hasta entonces)
Entonces la tatuadora se acerco a mi y aun con el guante de l�tex en la mano la
coloco sobre la delatora toalla, apret�ndome donde mas lo necesitaba.
_Ven nena- tu chico necesita una mano....
Mi novia se acerco, como hipnotizada, no dec�a nada, solo se
acerco y observo como ella retiro la toalla dejando al descubierto mi pene.
Para ese entonces yo deje de estar nervioso o avergonzado, y
decid� en un acto del que nunca me arrepentir�, estar totalmente en silencio y
dejarme hacer todo lo que fuese.
Sent� la mano de la tatuadora posarse de nuevo sobre mi, y
era ella sin duda, debido al tacto del guante, y en un par de segundos ya estaba
moviendo lentamente el objeto de tanta pol�mica. Yo eche mi cabeza hacia atr�s y
cerr� los ojos. Ellas sabr�an lo que est�n haciendo.
La tatuadora le dec�a a mi chica que observase de cerca lo
que estaba haciendo ,que era una chica afortunada, y cosas as�.
A mi novia no la escuchaba de hablar, hasta que supe lo que
estaba haciendo: Al notar unos h�medos labios rodeando mi glande levante la
vista y la vi agachada sobre mi.
Era incre�ble! Mi novia haci�ndome eso, delante de otra
mujer, que adem�s no paraba de mov�rmela con su mano enguantada....
Os aseguro que cre� morir, y extend� una mano para ver lo que
pod�a tocar, pero al parecer yo no estaba invitado a esa fiesta, la mujer aparto
mi mano y me dijo que no con la mirada.
Yo por supuesto, volv� a cerrar los ojos y a dejarme
llevar...
Era fant�stico, estaba a punto de... cuando sent� una extra�a
sensaci�n en mi pene, era algo fr�o que me lo recorr�a lentamente, mire entonces
y descubr� que ahora era la tatuadora la que estaba haci�ndome la felaci�n
mientras mi novia no dejaba de mirarla a escasos cent�metros de mi . Record�
entonces lo del piercing en la lengua, y os puedo asegurar que me volv�a loco
sentirlo rode�ndome, subiendo y bajando cada vez mas r�pido. Eso fue demasiado
para mi, y empec� a mostrar evidentes signos de que el trabajo de ambas estaba a
punto de tener �xito.
La Tatuadora lo noto enseguida y aparto su boca, eso si, sin
dejar de mover su mano... con asombrosa facilidad se cambio de mano y alcanzo un
peque�o recipiente de la mesa de al lado. Para aquel entonces yo estaba
empezando a acabar y.... con la ayuda de una segunda mano, creo que de mi novia
me volcaron el pene haciendo que eyaculara sobre el platito, Fue incre�ble....
las dos segu�an moviendo sus manos lentamente y yo no dejaba de correrme...
mientras me retorc�a agradeciendo a la providencia la idea de hacerme un
tatuaje. Cuando me calme un poco me incorpore ciertamente agradecido, y antes de
poder decir nada... descubr� a mi novia mir�ndonos a mi y a la tatuadora,
mientras esta sujetaba el platito con su enguantada mano. Cre�a que todo hab�a
terminado, y como digo me sent�a enormemente afortunado, pero lo que realmente
me dejo de piedra, fue cuando la mujer se dirigi� a la mesa con el platito en el
que hab�a recogido mi semen y lo coloco quit�ndose los guantes y dirigi�ndose a
mi dijo:
Eh, atento a esto- se dirigi� a mi novia sujet�ndola
suavemente por el cuello y acerc�ndola hasta la mesa, all� la hizo agacharse
hasta el platito y.... nunca pens� que lo har�a me miro y saco su lengua
empezando a lamer en el platito como si fuese una gatita, eso fue demasiado...
era lo mas caliente que hab�a vivido en mi vida, mi novia estaba tan excitada y
a la vez sometida por la otra mujer que me pareci� incre�ble... lam�a el platito
como si viniese del desierto... pero lo mas fuerte fue cuando la tatuadora se
agacho a su lado y empez� tambi�n a sacar su lengua mostrando a cada lamida su
piercing lleno de semen.... Al acabar el platito, la mujer sujeto a mi chica por
el cuello y le meti� la lengua hasta fundirse en un caliente intercambio de
fluidos.
Sin mas la mujer se levanto, volvi� a ponerse unos guantes y esta vez sin
protegerme con toalla prosigui� con el tatuaje mientras me contaba cosas de su
trabajo como si nada hubiese ocurrido. Yo miraba a mi chica que estaba como
extasiada, ahora era ella la avergonzada y casi no hablo hasta que nos fuimos.
Al acabar nos despedimos los tres con un casto beso en la mejilla, y yo le
agradec� su trabajo, sin especificar a cual me refer�a...
Al salir a la tienda me acerque al tipo para pagarle, mi
novia sali� fuera a esperar, casi sin decir nada, pregunte por la cuenta, y casi
me desmayo cuando la tatuadora sale y se abraza al calvo sin dejar de mirarme a
los ojos, y le susurra algo al o�do. El tipo se puso mas serio y se dirigi� a mi
diciendo: son 20.000 pesetas
Joder, me dijiste que me costar�a unas 7 mil. No?
Entonces el tipo se incorporo sobre el mostrador y
acerc�ndose a mi o�do me dijo:
- No te pases ni�ato! Que aun me quedo corto con el favor que
te hemos hecho!
Entonces no comprend�, pero decidir pagar con mi tarjeta y
retirarme prudentemente de ese local, cre�a que ya pod�a irme cuando mi novia
entra de nuevo a la tienda y me dice en voz alta:
- Cari�o, pregunta el precio y pide hora para otro d�a, he
decidido hacerme un piercing en la lengua.
Entonces me volv� a sentir un poco est�pido por un momento,
porque todos empezaron a re�r hasta que finalmente yo me un� a ellos...