Patty se quit� su largo y ondulado pelo rubio de delante de los ojos y mir� con el ce�o fruncido la puerta del dormitorio de su hijo adoptado.

-Walter, s� lo que est�s haciendo ah� dentro. Estoy harta de escuchar c�mo te la meneas en tu habitaci�n todos los d�as. Walter, �me est�s escuchando?

Su hijo adoptado adolescente no respondi�. Los golpes secos continuaron, incluso m�s fuertes. Era el sonido del cabecero de la cama golpeando la pared mientras Walter se cascaba la polla moviendo la mano de arriba abajo por �sta.

-�Walter!

Patty dej� escapar algunos tacos y golpe� enfadada la puerta. Ten�a treinta y cuatro a�os y estaba muy buena. Sus ojos azules combinaban muy bien con su pelo rubio y adem�s su cuerpo era delgado y ten�a grandes tetas.

-Walter, pr�stame atenci�n.

Walter gimi� y el cabecero continu� golpeando la pared a�n con m�s fuerza. Posiblemente estaba a punto de salpicarse el pecho con una buena descarga de leche. Patty se dio la vuelta enrojecida y se fue por el pasillo. Llevaba puesta ropa informal, unos vaqueros y una camiseta azul que hac�a que sus grandes tetas se movieran con libertad al no llevar sujetador. Era lo que una ama de casa normal llevar�a puesto, pero ella no se sent�a normal. Y era porque ahora estaba divorciada. La casa y la peque�a pensi�n alimenticia era lo �nico que la hac�a recordar su largo matrimonio. Tambi�n era porque ten�a un joven y atractivo hijo adoptado que estaba obsesionado con masturbarse.

Todo hab�a comenzado hac�a seis meses, tras el divorcio. Walter era un chico muy atractivo de dieciocho a�os. Era alto y musculoso y ten�a un gran bulto en su entrepierna que Patty, a pesar de su pudor, no hab�a podido pasar por alto. Patty hab�a le�do que el deseo sexual de los chicos puede ser muy intenso, pero eso no la hab�a preparado para el hecho de que la polla de Walter parec�a estar todo el tiempo dura.

Ella supon�a que su aspecto ten�a algo que ver con ello, ya que Patty era m�s delgada de lo habitual, ten�a piernas largas y el culo redondeado de una chica joven. Sus tetas eran tan grandes que la mayor parte de sus sujetadores ten�an que ser hechos a medida. Su cuerpo siempre hab�a puesto a los hombres cachondos y tem�a que su �nico hijo no fuera una excepci�n. Durante los �ltimos meses, la hab�a mortificado ver su polla poni�ndose dura mientras se la com�a con los ojos.

-Al menos, podr�a tratar de controlarse -pens� Patty- y tratar de no mene�rsela tanto.

Eran las tres y media de la tarde y Walter llevaba en casa una media hora. Hab�a corrido literalmente hacia su cuarto con los pantalones obscenamente abultados por su erecci�n. Dos minutos m�s tarde hab�an empezado los golpes. Ahora los o�a al menos cuatro veces al d�a.

Hab�a intentado hablar con �l, cari�osa y severamente al mismo tiempo, pero no la escuchaba. Lo �nico que dec�a es que no pod�a dejar de toc�rsela cuando se le pod�a dura.

-Bueno, tendr� que aprender a ignorarlo -pens� Patty.

De repente, se dirigi� al armario del pasillo y encontr� la llave del cuarto de Walter colgada en un clavo. Se dirigi� con decisi�n hacia su habitaci�n consciente de que iba a sorprender a su hijo en el acto. No era normal que un chico se masturbase tanto. Walter ten�a que aprender a controlar su deseo sexual.

Patty entr� en su cuarto. Walter se dio cuenta enseguida de que hab�a entrado. Como Patty hab�a esperado, el chico estaba tumbado boca arriba con los pantalones por los tobillos. Hab�a un bote de aceite para beb�s sobre su mesilla de noche. El chico ten�a la lengua fuera por uno de los lados de la boca mientras se la cascaba, moviendo su mano de arriba abajo por su palpitante y dura polla.

Patty la mir�. Era la primera vez que se la ve�a dura a su hijo adoptado. Por mucho que quer�a, no pod�a evitar la curiosidad. Hab�a imaginado que tendr�a una polla relativamente peque�a, aunque era ya casi un adulto, pero se dio cuenta de que se hab�a equivocado. Walter la ten�a enorme. La gorda y larga verga sobresal�a sobre su vello p�bico. Deb�a medir unos 22 cent�metros y tener el mismo grosor que su mu�eca. El b�lano era con una manzana peque�a, de color rojo oscuro y reluc�a a causa de sus l�quidos preeyaculatorios.

Al instante, la madre divorciada y sexualmente frustrada sinti� un nuevo y vergonzoso deseo en su co�o. Nunca hab�a podido imaginar que ver la polla dura de su hijo adoptado le pondr�a el co�o tan caliente y mojado.

-Muy bien, Walter, para ahora mismo.

Walter levant� la cabeza y por fin se dio cuenta de que su madre estaba en su cuarto con �l. Suspir� soltando su enorme verga y cruz� los brazos detr�s de la cabeza. No hizo ning�n esfuerzo para cubrir su �rgano copulador y �ste continu� movi�ndose a causa de sus latidos sobre su barriga. Patty se sent� al lado del adolescente en la cama, tratando de no fijar la vista sobre su polla. Pod�a sentir sus pezones endureci�ndose y sobresaliendo de su camiseta. Dese� llevar puesto un sujetador para evitar que sus tetas se menearan delante de su hijo adoptado.

-�Desde cu�ndo te cuelas en mi habitaci�n cuando la puerta est� cerrada con llave? -refunfu�� Walter-. �Es que no puedo tener un poco de intimidad?

-Sabes perfectamente que estaba llamando hace un momento. Creo que es suficiente excusa para usar la llave. Walter, sabes que tenemos que hablar de esto. Lo �nico que haces �ltimamente es hacerte pajas y eso no es normal. No te vas a desarrollar con normalidad si te pasas todo el tiempo toc�ndote la polla y corri�ndote.

-No puedo evitarlo -dijo Walter sonriendo-. Mi polla se pone dura y me apetece mene�rmela. �Qu� pasa, es malo?

-�Es que no conoces alguna chica que pudiera... ? -Patty se sonroj�, parando justo antes de decirle a su hijo que se buscara una jovencita cachonda para foll�rsela. �... ayudarte a pensar en cosas m�s normales?

-�C�mo follar? -dijo Walter con una sonrisa a�n m�s amplia-. Joder, mam�, follo con un mont�n de t�as. Si quieres me traigo una a casa ma�ana y me la follo aqu� mismo. Lo �nico que pasa es que me gusta mucho mene�rmela, da mucho gusto.

-Por... por lo menos pod�as subirte los pantalones cuando est�s hablando con tu madre. Esto me da mucha verg�enza.

-Bueno, t� eras la que quer�a hablar, mam�. Adem�s, t� no eres mi madre verdadera. No quiero parar ahora, llevo todo el d�a con los huevos llenos de leche y tengo unas ganas tremendas de correrme.

Y entonces el bien dotado hijo sorprendi� a su madre de nuevo llevando su mano a su polla y agarr�ndola con fuerza. La sorprendida madre no pudo evitar mirar c�mo se la cascaba otra vez, despacio y con fuerza, moviendo su mano de arriba abajo por el tremendo miembro.

-�Walter!�Walter, por Dios! -jade� Patty, abrumada por la ira y un irrefrenable deseo incestuoso-. �C�mo te atreves a hacer eso delante de tu madre!�Quita la mano de tu polla ahora mismo!

-No quiero, mam�. Da gusto.

Y entonces Walter mir� sin tapujos sus tetas, suspirando al mirar los enormes pechos que se balanceaban de un lado a otro bajo su camiseta.

-Joder, las tienes grandes de verdad, mam�. A veces pienso que te las chupo mientras me hago una paja. Es incluso mejor pod�rtelas ver de verdad.

-�Walter!

Patty estaba tan sorprendida que supo que ten�a que hacer que su hijo dejara de masturbarse en ese mismo momento. Baj� una mano y trat� de retirar un dedo de su polla, pero Walter quit� la mano entera y lo siguiente que Patty supo fue que ten�a la polla de Walter agarrada con su mano.

-Mmmm, �qu� gusto, mam�! �Por qu� no me la meneas t�?

-Guarro asqueroso...

Entonces Patty comenz� a hacerlo. No sab�a qu� le pasaba o qu� la hab�a llevado a empezar a cometer el peor pecado imaginable con su hijo. Su co�o estaba muy mojado, palpit�ndole de tal forma bajo sus bragas que no pod�a pensar con claridad. Se sent�a abrumada por la ira, la frustraci�n y el deseo, una incontrolable lujuria.

Walter se limit� a permanecer all�, sonriendo mientras dejaba a su caliente madre hacerle una paja. Patty miraba fijamente su enorme polla, haciendo muecas de repugnancia mientras su mano sub�a y bajaba tan r�pido como era posible.

-�Te gusta? �Es esto lo que quieres qyue te haga, Walter? �T� propia madre? �Eres tan guarro que quieres que tu propia mam� te la menee as�?�Quieres que mam� te la chupe tambi�n? �Te gustar�a eso, verdad? �Te gustar�a que tu madre se metiera tu polla en su boca y se tragara tu semen?

Walter respondi� retirando su mano de su polla y sent�ndose en el filo de la cama. Mir� a su madre intencionadamente, sonri� y despu�s se�al� arrogantemente a su dura verga.

-S�, eso es lo que quiero. �Por qu� no te pones de rodillas ahora mismo, mam�? Mi polla necesita que la chupes ahora mismo.

-Ni�o guarro, asqueroso...

Sus palabras se apagaron mientras empezaba a hacer lo que su hijo le hab�a pedido. Se puso de rodillas delante de su enorme y dura polla. Se dio cuenta de que estaba respirando con dificultad y de que sent�a mejor sus palpitaciones en el co�o que en el pecho. Se sent�a como si hubiera perdido todo control de s� misma, como si hubiera perdido la capacidad para distinguir entre sus sue�os y lo que realmente estaba haciendo. No se pod�a creer que iba a meterse la polla de su hijo adoptado en la boca y que se iba a tragar su semen.

Patty apret� sus dedos alrededor de la palpitante polla de su hijo, deslizando su mano hasta la base de �sta. Mir� fijamente el glande rojizo y gordo durante unos segundos viendo c�mo la gorda corona reluc�a a causa del pegajoso semen. La lujuriosa madre baj� la cabeza apretando los labios contra el agujero por donde sal�a la orina. Sac� la lengua desvergonzadamente y chup� los sabrosos l�quidos que estaban en la punta de su polla.

-�Ahhhhhh!�Qu� gustazo, mam�! -dijo Walter retorci�ndose sobre el filo de la cama y sujetando la cabeza su madre con las dos manos-. M�tetela en la boca, mam�. Sabes que quieres hacerlo. �Ahhhhhh, ch�pamela bien!

Patty cerr� los ojos tratando de olvidar que era el tipo de madre capaz de mam�rsela a su propio hijo adoptado. Poco a poco dej� que sus labios se deslizaran por el palpitante �rgano copulador, sorbiendo ruidosamente mientras avanzaba cent�metro a cent�metro. Se detuvo cuando se hab�a metido m�s de un tercio, ya que de haber seguido se hubiera atragantado.

Entonces, la caliente madre comenz� a chupar la polla con mucha fuerza, manteniendo los ojos cerrados mientras mamaba contenta la dolorosa rigidez de la erecci�n. Una absurda voz sonaba en lo m�s profundo de su mente tratando de justificar lo que estaba haciendo. Estaba intendando demostrarle lo mal que se siente uno al dejar que tu propia madre te chupe el nabo.

Patty chupaba la sabrosa polla m�s y m�s fuerte, asombr�ndose de las ganas con las que se la chupeteaba y lam�a a su hijo adoptado. Hizo un esfuerzo para aproximar su cara al vello p�bico, atragant�ndose incapaz de meterse la totalidad de su �rgano de una vez. La enorme polla respondi� a sus h�medas y fuertes chupadas poni�ndose m�s dura y grande. El b�lano se hinchaba de forma obscena, latiendo en el cielo de su boca.

-Mmmmmmmmmmmmm -gorje� Patty.

Sus obscenas y ruidosas chupadas se hab�an vuelto muy fuertes y pod�an o�rse en toda la habitaci�n. Comenz� a subir y bajar la cabeza r�pidamente, foll�ndose la boca con la enorme polla del chico. Sus dedos apretaron con m�s fuerza la base de �sta y empez� a mene�rsela mientras le chupaba y relam�a el glande, leng�eteando el salado semen que sal�a del enorme miembro viril.

-�Mam�, me voy a correr... ! -gimi� Walter-. �Ahhhhhhh... Puedo sentirlo, mam�!�Va a ser de los gordos!�Aghhhhhhhhh, ch�pamela m�s r�pido... !�Eres una chupapollas buen�sima!

El escandaloso y repugnante cumplido era m�sica para sus o�dos. Patty sinti� que se sonrojaba mientras chupaba con todas sus ganas arrugando sus mejillas a causa de la enorme erecci�n cubierta de semen. Su pu�o era casi invisible de lo r�pido que sub�a y bajaba por la polla. Se mor�a de ganas de tragarse un buen chorro de leche de nabo, de sentirse obligada a trag�rsela toda lo m�s r�pidamente posible.

-�Tr�gatelo todo, mam�! �Me corro... !

El chico agarr� su cabeza levantando el culo de la cama y meti�ndole la polla m�s profundamente en la boca. Patty se atragantaba, pero al fin sus esfuerzos fueron recompensados. Una tremenda lluvia de semen sali� disparada de la hichada polla y llen� la garganta de la madre amante del semen.

-Mmmmmmmm -gorje� Patty.

El zumo de polla estaba llenando su boca, salpicando los agujeros de su nariz y siendo tragados. Mantuvo la enorme polla lanza-semen en su boca, disfrutando el sabor de la semilla de su hijo adoptado. La caliente madre comenz� desvergonzadamente a chupar y menear la polla de su hijo mientras se tragaba su semen, todo al mismo tiempo. No quer�a solt�rsela hasta que hubiera chupado hasta la �ltima gota de semen de la corona de su polla.

Despu�s de aproximadamente medio minuto concluy� la explosi�n de semen y la hermosa madre ten�a llena la barriga del semen por el que tanto hab�a suspirado en secreto. Levant� la cabeza de la entrepierna de su hijo adoptado, aturidada y desesperadamente cachonda y relami�ndose la boca. Patty respiraba con dificultad y su co�o estaba tan mojado que hab�a empapado totalmente sus bragas.

La polla de Walter estaba todav�a muy dura, y palpitaba delante de su cara. A Patty le dio un espasmo en el co�o al imaginar ese enorme complaceco�os hundi�ndose en su peluda raja y entrando y saliendo de �sta.

-Bueno, supongo que ya est�s satisfecho, Walter -jade� ella-. Ya has conseguido que mam� te chupe la polla. Supongo que ahora quieres hacer otras guarradas con mam�.

Walter asinti� sonriendo. Patty se puso de pie toqueteando los botones de su camisa y sin poder apartar la mirada de la polla enorme del chico.

-Pues entonces qu�tate el resto de la ropa, Walter. Ya que hemos empezado m�s vale que nos quitemos estos deseos de encima de una vez por todas.

Walter sonri� de nuevo quit�ndose los zapatos y baj�ndose los pantalones del todo. Lo �nico que llevaba ahora puesto era la camiseta, pero no necesitaba quit�rsela para echarle a su madre el polvazo que obviamente necesitaba. Se incorpor� y la vio desnudarse. Patty se sinti� orgullosa al quitarse la camiseta revelando sus enormes tetas.

-Te gustan las tetas de mam�, �verdad Walter? -le pregunt�.

Patty llev� las manos de su delgada cintura hasta sus enormes tetas, manose�ndolas lascivamente. Los pezones que coronaban las dos tetas de copa D ten�an a su alrededor amplias areolas rojas y estaban duros y erectos. Patty se quit� los zapatos y se desabroch� los vaqueros. Entonces, llevando s�lo las bragas puestas, se subi� junto a su hijo a la cama.

-Ya puedes chuparle las tetas a mam�, Walter. Supongo que tambi�n habr�s pensado en hacerlo cuando te la meneabas.

Walter se limit� a asentir y se puso de rodillas al lado de su madre, poniendo las manos sobre sus gigantescas y firmes tetas. Con mucho ah�nco, estruj� y apret� los enormes melones, movi�ndolas de un lado a otro y pasando sus pulgares por los pezones. Patty se estremeci� al sentir el placer de sus tetas ir directamente a su co�o.

-Pue... puedes chup�rmelas si quieres -jade�.

Walter se repantig� sobre ella, abriendo la boca lo suficiente para meterse uno de sus pezones dentro. Empez� a chupar ruidosamente la enorme teta de su madre, frunciendo los labios como cuando hab�a mamado leche de peque�o. Patty gem�a, la necesidad de su co�o se hac�a cada vez m�s acuciante. Acun� cari�osamente la cabeza de su querido hijo adoptado, anim�ndolo a que chupara tanto como quisiera sus tetas.

-Puedes tocarme el co�o -le susurr�-. Supongo que tambi�n quieres hacer eso.

Walter desliz� su mano y la llev� a trav�s de sus muslos para despu�s poner un dedo sobre su co�o. Entonces dej� de chuparle las tetas y la mir� con aire triunfalista a los ojos.

-Mam�, tienes el co�o goteando.

Patty se sonroj�. Sab�a que su co�o estaba mojado, pero lo que no sab�a era que estaba tan mojado que hasta sus muslos estaban impregnados de fluidos vaginales. Walter parec�a fascinado ante el caliente y jugoso co�o de su madre. Agarr� sus bragas y se las empez� a bajar, pero la parte que cubr�a su co�o se qued� pegada a �ste durante un momento. Ahora su apetitosa madre estaba completamente desnuda. Walter separ� sus muslos y mir� fijamente el h�medo y excitado co�o.

-�Por qu� me miras as�, Walter? -jade� Patty. �Por qu� no me metes la polla ya? S� que eso es lo que quieres hacer, a pesar de que soy tu madre.

-Quiero chup�rtelo primero -musit� Walter.

Entonces se repantig� entre sus largas piernas y elev� sus muslos para que su boca tuviera m�s f�cil acceso a su excitado y sabroso co�o. A Patty le cost� un poco darse cuenta de que su hijo adoptado quer�a comerle el co�o. Entonces se estremeci� al sentir su lengua por primera vez lamiendo entre los perfumados labios de su co�o.

-�Ahhhhhhh, Walter! �Por... por qu� est�s haciendo eso? �Ahhhhhh!�Ahhhhhh!

Walter estaba demasiado ocupado chupando como para responder. Era obvio que adoraba el sabor del co�o de su madre y lo que se sent�a al deslizar la lengua de arriba debajo por su rosa y reluciente conejo. Patty tuvo entonces miedo de c�mo reaccionar�a ahora, ya que estaba ya de por s� muy cachonda y no sab�a c�mo de incre�blemente caliente se pod�a poner cuando su hijo le pusiera el co�o m�s h�medo y hormigueante.

-No, Walter... No... ahhhhh... no tienes por qu� chuparle el co�o a mam�... ahhhh... F�llame, Walter. S� que eso es lo que quieres.

Walter no respondi�. Mantuvo los labios del co�o de su madre separados con los dedos para poder meter la lengua m�s hondo en su agujero perfumado. Los fluidos segu�an fluyendo en cantidad de sus profundidades vaginales y su cl�toris estaba muy hinchado y duro, sobresaliendo en la parte superior de su raja cubierta de pelo.

Walter movi� la lengua hacia arriba probando su habilidad como chupador de co�os y comenz� a mover el cl�toris de su madre de un lado a otro. Su desnuda madre chill� agarrando su cabeza con dos manos. Entonces comenz� a mover sus caderas hacia arriba para que le follara el co�o con la boca.

-�S�, Walter! -grit� ahogadamente Patty-. �Ahhhhhh! Mam� necesita que se lo chupes... �Ahhhhhhh! L�meme el cl�toris, Walter. Oh, �ch�palo, ch�palo, ch�palo bien, haz que mam� se corra!

Walter sigui� chupando y besando su co�o, deteni�ndose s�lo para acariciar su cara con los pelos de su vulva. Estir� los dedos meti�ndolos en el estrecho interior del co�o de su madre. Patty se estremeci� con su hijo adoptado haci�ndole un dedo mientras le lam�a el cl�toris.

-Ch�pamelo, Walter, por favor...

Walter puso su cl�toris entre sus labios:lo chup� suave pero intensamente, haciendo ruidos al chupar y al mismo tiempo meti�ndole los dedos en el co�o. Patty sent�a el orgasmo cerca; sus pezones y ano se estremecieron con la placentera sensaci�n preorg�smica. Entonces empez� a correrse incontrolablemente mientras su hijo adoptado segu�a comi�ndole el co�o.

-�C�memelo, Walter!�Ahhhhhh! �Ch�pamelo, ch�paselo a tu madre! �Me corro!�Me corro!

Su excitado co�o tuvo espasmos y lanz� fluidos para que su ni�o pudiera chuparlos y trag�rselos. Walter sigui� chup�ndole el cl�toris y haci�ndole un dedo, llev�ndola al punto �lgido del orgasmo. Un minuto despu�s, los espasmos remitieron y Patty sinti� una acuciante necesidad en lo m�s profundo de su co�o que jam�s hab�a sentido antes. Necesitaba desesperadamente sentir la polla gorda de su hijo adoptado entrando y saliendo de su co�o.

-Puedes follarte a mam� ahora, Walter. S� que eso es lo que quieres de verdad. Venga, Walter, m�temela, date prisa.

Walter se puso encima de su desnuda madre coloc�ndose entre sus muslos con la polla h�meda tocando su est�mago. Impaciente, Patty agarr� el pene y lo gui� a su co�o. Gimi� y se mordi� un labio al sentir la dura polla penetr�ndola y abriendo los pronunciados labios de su co�o que luego apretaron la dureza invasora.

-�Ahhhhhhhh! La tienes muy gorda, Walter. Me han metido muchas pollas, cari�o, pero la tuya es la m�s gorda. �Ahhhhhhhhh! Vas a tener que meterla a la fuerza, �no? Pues venga. �Ahhhhhhhhhh! M�tesela a mam� en el co�o, cielo. �R�pido, r�pido!

Walter separ� las rodillas, poni�ndose en una posici�n m�s adecuada para meterle la polla. Entonces empez� a meterla poco a poco, cada vez m�s hondo. Patty levant� la cabeza y mir� abajo, viendo el pene lleno de venas entrando y saliendo de su estrecho co�o. Era muy excitante y empez� a hacer movimientos p�lvicos y circulares con su culo, clav�ndose la enorme polla de Walter.

-Puedes met�rmela m�s hondo, Walter -jadeaba-. Venga, Walter, m�tesela a mam� lo m�s hondo que puedas.

Walter comenz� a meterla m�s fuerte, haciendo que su madre hiciera muecas de dolor y se estremeciera al estar foll�ndosela de verdad, meti�ndosela en su estrecho y excitado co�o. Por fin, se la meti� hasta el fondo, dej�ndola hundida hasta los huevos. Patty no se hab�a sentido tan llena de polla en su vida. Su co�o chupaba y se contra�a sin control sobre el enorme falo penetrabarrigas.

Walter permaneci� inm�vil sobre ella durante varios segundos, doblando los codos y aplastando las tetas de su madre con su pecho.

-F�llate a mam�, Walter.

La intensidad del deseo incestuoso se hizo m�s aparente y Patty levant� las piernas tan alto como pudo y puso sus pantorrillas cruzadas tras la espalda de su hijo. Entonces comenz� a revolverse y a follar como una perra en celo, jodi�ndose el co�o en la polla de su propio hijo adoptado.

-�He dicho que me folles! Mam� est� muy cachonda ahora. F�llame, �f�llame bien!

Walter sac� su nabo hasta que s�lo su corono quedaba dentro, separando los labios del co�o de su madre. Se estremeci� al hundirse de nuevo por completo en su co�o. Patty estaba ya follando como una m�quina hambrienta de sexo y sus tetas se mov�an de un lado a otro mientras la polla de su hijo entraba y sal�a r�pidamente de su conejo. Walter sigui� el ritmo de su madre, metiendo su polla hasta el fondo de su resbaladizo co�o que lo succionaba hacia dentro.

-As�, Walter. �Ahhhhhhhhhh! Oh, mierda, m�s r�pido. F�llale el co�o a mam� tan fuerte como puedas. Me gusta fuerte y asqueroso, cari�o.

Patty puso los brazos alrededor de sus hombros, abraz�ndole con fuerza mientras jadeaba y gritaba con su co�o teniendo espasmos alrededor de la polla del chico.

-�F�llame, Walter!�F�llame, ni�ato pervertido!

Walter jade� sobre su hombro y luego empez� a follarse a su madre lo m�s r�pido que pudo. Mov�a su pelvis sin cesar entre sus muslos, gru�endo mientras met�a su enorme polla similar a una flecha en las pegajosas profundidades del co�o de Patty. La cachonda madre pod�a ya sentir ya una segunda serie de espasmos form�ndose en su entrepierna, haciendo que su invadido y violado agujero chupara con m�s fuerza la polla de Walter.

-�Mam� se est� corriendo otra vez, cielo!F�llate a tu madre, f�llate a tu madre, que estoy muy caliente. �Ahhhhhhhhh! Me corro, Walter. �Me cooooooooooorrrrrroooooo!

Su co�o lleg� a un lascivo orgasmo rezumando fluidos coitales mientras sus paredes de piel rosa apretaban con fuerza la gigantesca polla de su hijo. Walter se desplom� sobre ella, metiendo la polla hasta el fondo dentro de ella. Entonces, el segundo chorro de semen sali� de su polla. Patty la sinti� salpic�ndolo todo dentro, corri�ndose dentro de su co�o e inundando su �tero con un buen chorro de semen caliente y reparador.

A�n cachonda, ayud� a la polla de su hijo a terminar de vaciarse en su chocho. Pero ya le invad�an sentimientos de culpa, verg�enza y repugnancia por haberle entregado el co�o a su hijo adoptado. �sta ser�a la primera y la �ltima vez, pens�. No podr�a vivir si tuviera que aliviar la polla de su hijo cada vez que se le pusiera dura y dolorida

Por favor vota el relato. Su autor estara encantado de recibir tu voto .