PROBLEMAS

Estoy en serios problemas y la culpable es mi madre.
En eso estaba pensando, cuando mi padrastro, de la forma m�s amable de la que era capaz me habl�:
- Oye buey, traenos unas cervezas de la tienda
Pero dejen que les cuente.
A sus 33 a�os mi madre es una mujer muy, muy hermosa, pero lo que tiene de hermosa lo tiene de pendeja, que digo pendeja, superpendeja, y es que a�n no me explico que es lo que tiene por cerebro, a veces creo que su cerebro es un enorme im�n detector de vergas.
As� como lo leen, antes de cumplir sus 16 a�os ya me hab�a tenido a m�, gracias a que en la secundaria enloqueci� a uno de sus maestros, mi padre y despu�s de seducirlo, se embaraz� y as� fue como nac�.
Mi padre es un buen hombre, que solo aguant� a mi madre por cinco a�os, cuando la descubri� con un trabajador que hab�a contratado para hacer unas reparaciones en la casa, cogiendo de lo m�s lindo en su propia rec�mara.
Nadie se explicaba c�mo se hab�a tardado tanto en aguantarla y es que en la cuadra donde viv�an, todo el mundo sab�a que mi madre se acostaba con cuanto hombre conoc�a, en especial si era joven, bien formado y ten�a una buena verga, incluso corr�a el rumor de que se hab�a acostado con un equipo completo de futbol, que dirig�a mi padre, en una ocasi�n que hab�an ganado un trofeo y mi madre se conviriti� en su recompensa, as� de grande era su apetito.
Lo que me hab�a salvado a m� con respecto a mi padre era que er�mos pr�cticamente id�nticos, salvo por un detalle, mientras mi padre es un hombre completamente heterosexual, yo soy bien puto.
Despu�s de que mi padre se separ� de mi madre, ella pas� de una relaci�n a otra, en honor a la verdad, siendo ni�o, mi padre nunca dej� de estar al pendiente de m�, siempre pag� todas mis cuentas y siempre que pod�a y mi madre me dejaba, pas�bamos tiempo juntos.
De los novios de mi madre recuerdo a Juan I, Juan II, Juan III, Ricardo, Javier, Luis, Pedro, otro Juan, Antonio, Rigoberto, Gustavo, etc., etc., etc., todos ten�an en com�n que eran grandes, fuertes, con buenas vergas e igual de pendejos que mi madre.
El �ltimo de todos era Joaqu�n, el que me mand� por las cervezas y actual esposo de mi madre, se hab�an casado y todav�a no me explico por qu�.
Joaqu�n tiene 37 a�os, es alto, muy fuerte, puro m�sculo, atractivo y con un enorme y hermoso tatuaje de un �guila sobre su pecho y trabaja en un taller mec�nico que es de su propiedad y donde tiene por compa�ero a su compadre Emilio, que es con est� pisteando en estos momentos.
- Mu�vete, buey que estamos secos
Tomando el dinero que me daba me dirig� a la puerta sin dejar de observar como Joaqu�n se masajeaba el excelente bulto de su verga, situaci�n de la que se percat� Emilio, quien me dirigi� una sonrisa c�mplice.
�Por qu� digo que mi madre es la culpable de mis problemas?
Porque en este momento se encuentra en la c�rcel.
Por pendeja.
Resulta que Joaqu�n tiene una hermana que tambi�n est� en la c�rcel, para acabarla es drogadicta y desde luego para mantener su vicio en el bote, pues est� cabr�n, as� que Joaqu�n convenci� a mi madre de que la fuera a visitar y que aprovechando se metiera en el culo y vagina unos paquetes para que se los pasara a Lucila y mi madre, como es una pendeja, acept�.
El caso es que lo que nadie pens� (me refiero a Joaqu�n y mi madre) es que pudieran revisarla al entrar y cuando lo hicieron, lo primero que encontraron fueron unos hilitos que sal�an de la vagina de mi madre y cuando una mujer polic�a los vi� comenz� a jalar y a jalar y a jalar y a jalar y �pum! que sale un paquete con coca�na y cuando la siguieron revisando, salieron m�s.
Desde luego mi madre, no revel� quien le hab�a dado la droga y Joaqu�n le prometi� hacer todo lo posible para sacarla y lo est� haciendo, de hecho el abogado nos coment� que la sentencia iba a ser breve y que en un tiempo corto podr�a sacar a mi madre de la c�rcel, eso espero.
Pero mientras tanto, �qui�n se va a hacer cargo de m�?
Desde luego yo me s� cuidar y atender solo, pero no tengo dinero, el de mis gastos me lo da mi mam� y mi pap� est� en otra ciudad y casi no lo veo y no tengo dinero para ir con el, as� que no me puede ayudar mucho y en la prepa seguido me piden cosas.
De Joaqu�n, no s� qu� tanta ayuda puedo esperar, desde luego, puedo vivir en la casa y comer de lo que haya, pero no confio que me de el dinero que necesito para la escuela y otros gastos, as� que como comprender�n estoy preocupado.

- La verdad compadre, con mi vieja en la c�rcel no s� como le voy a hacer para aguantar yo tengo que coger todos los d�as�
Esto lo dec�a Joaqu�n cuando les llev� las cervezas y junto a su compadre ve�an una pel�cula pornogr�fica, donde se ve�an vergas y vaginas por doquier, las erecciones de ambos eran evidentes, estaban sentados masaje�ndose sus vergas por encima del pantal�n, perfectamente pod�a percibirlas.
- Y Usted, �por qu� se preocupa?, la soluci�n la tiene en casa
- �C�mo?
- Escuche lo que le digo, la soluci�n la tiene en casa
Joaqu�n se le qued� viendo y poco a poco fue comprendiendo lo que su compadre le dec�a
- �C�mo cree, compadre, yo no soy puto!
- No digo que lo sea, pero si lo que necesita es coger, la soluci�n est� aqu� y lo dijo mir�ndome
De pronto comprend� el mensaje y me percat� de la mirada de lujuria que Emilio me lanzaba
- No mame compadre, ya le dije, no soy puto
- Lo que pasa es que no le ha calado, total, si lo que quiere es un agujero, en casa usted lo tiene
Joaqu�n volte� a verme y de pronto una mirada de curiosidad cubri� su rostro como considerando lo que su compadre le dec�a.
- Est� de pensarse, compadre
- No lo piense, adem�s este putito est� muy bonito
Todo esto lo dec�an este par de cabrones mientras me miraban como si fuera la �ltima cerveza del desierto.
La verdad ambos cabrones se ve�an bien buenos desde donde estaba, ambos con su ropa de trabajo, bien cachondos, mi padrastro con un pants donde se delineaba a la perfecci�n su jugosa verga y su compadre no se le quedaba atr�s, con unos pantalones ajustados que apenas pod�an contener su gran instrumento.
Algo en mi mirada (desde luego lujuria) termin� por convencer a mi padrastro, porque me dijo:
- Ac�rcate cabr�n
Me dirig� al sof� donde estaban y me sent� en medio de ambos
Emilio tom� mis manos y le dijo a mi padrastro
- Vea que manos tan chiquitas y delicadas tiene, una chaqueta con estas manitas debe saber a gloria y tomando mis manos coloc� una sobre su verga y la otra en la verga de mi padrastro.
La verdad apenas pod�a cubrir ambas erecciones, mi padrastro se acomod� y pude sentir como su verga temblaba ante el contacto de mis dedos, es grande, gruesa y como lo comprob� despu�s con unas venas enormes que la recorr�an de un extremo a otro.
- Lo mejor de un putito son las mamadas compadre, dijo Emilio
- �A poco?
- La neta
- �Neta?
- Yo s� lo que le digo
Toda esta pl�tica se desarrollaba mientras yo me entreten�a apretando ambas vergas, la verdad yo sent�a rico y estaba excit�ndome cada vez m�s.
Emilio comenz� a desabotonar su pantal�n y de pronto una enorme verga sali�, tomando mi nuca dirigi� mi cabeza y pronto mis labios entraron en contacto con su verga, le d� un beso muy suave y cubr� con mis labios la enorme cabeza, comenzando a chupar suavemente, la sensaci�n era deliciosa, Emilio acomodando sus manos en su nuca, solo dejaba que yo experto degustara su rica verga.
Supongo que eso convenci� a mi padrastro, porque de pronto me jal� separ�ndome y par�ndose me llev� a la rec�mara que compart�a con mi madre, empezando a quitarse la ropa, mientras le dec�a a Emilio
- Orita vengo compadre, en lo que termino h�gase una chaqueta
En su habitaci�n me sent� en la cama, mientras el se desnudaba por completo, ver su verga fue lo mejor, larga, grande, gruesa, cabezona, mucho mejor que las verguitas que hab�a probado hasta ese momento, incluidas las de los compa�eros de la prepa (�y yo que me hab�a engolosinado con algunas, pensando que eran lo m�ximo!).
Despu�s se dirig� hacia m� y de manera brusca me comenzo a quitar la ropa, cuando termin�, me dijo
- La verdad tienes un cuerpo bonito, delicadito, me parece que no vamos a extra�ar mucho a tu madre
Me volv� a sentar en la cama frente a m� qued� su espectacular verga, as� que hice lo que deb�a, dirig� mi boca ansiosa y comenc� a chupar su cabeza como su fuera el dulce m�s delicioso, debo admitir que apenas cab�a en mi boca, se notaba el sabor del l�quido preseminal, el que limpi� con cuidado.
De pronto mi padrastro tom�ndome de la cabeza comenz� a hacer movimientos de penetraci�n en mi boca, me sacaba la verga y la volv�a a meter, primero muy despacio, luego m�s r�pido, mientras me entreten�a con sus huevos que estaban a rebozar de semen.
Poco a poco sus jadeos llenaron todo el cuarto, mi boca no dejaba de trabajar, de pronto sent�a como su verga quer�a invadir mi garganta, cosa desde luego imposible, intentaba seguir su ritmo, pero era dif�cil.
Sin dejar de chupar, con lujuria, pude ver como la escena era disfrutada desde la puerta por Emilio, quien efectivamente se estaba haciendo una buena chaqueta, por un momento fantasee con ambas vergas en mi boca.
El ritmo de mi padrasto se volvi� mucho m�s r�pido, casi con furia, sent�a que me desgarraba la boca, y trat� de controlarlo, pero no pude, su verga entraba y sal�a de mi boca y por momentos sent�a que me faltaba aire, pero acomet�a tambi�n con deseo, la tarea de brindarle la mejor mamada de su vida y por la expresi�n de su rostro creo que estaba por lograrlo, hasta que de pronto, sent� crecer su cabeza a l�mites superiores y despeg�ndose un poco de mi rostro, apunt� su verga hacia m� e inund� mi cara con unos potentes chorros de semen que me cubrieron casi por compleo.
Trat� de tomar lo que pude de su leche pero era una tarea complicada, el esperma corr�a por mi cara y pecho, con ambas manos recog� lo que pude y lo chupe con gusto, mientras dirig�a mi lujuriosa mirada a la verga y ojos de mi padrastro.
Eso lo puso caliente de nuevo y me percat� como su verga segu�a pr�cticamente parada, me levant� y me acomod� de a perrito en la cama, y ensalivando una de sus manos, de manera brusca busc� mi culo y embarr�ndome un poco, trat� de dilatarme, yo estoy siempre preparado para recibir vergas, pero la de mi padrastro era otra cosa, me acomod� con firmeza en la cama y esper� un tiempo que me pareci� muy largo hasta que dos de sus dedos comenzaron a hurgar dentro de mi culo, abri�ndolo.
- Ten�a raz�n compadre, este culito es de puto, se ve que le gustan las vergas
De pronto, coloc� la cabeza de su verga en mi culo y tomando con firmeza mi cintura me enterr� un buen pedazo, desde luego mis gritos se escucharon por toda la casa, eran gritos de dolor, porque me estaba partiendo en dos, pero tambi�n del m�s profundo deseo, sent�a como descargas de lujuria recorr�an todo mi cuerpo, era sorprendente, sent�a que el deseo m�s desenfrenado me superaba, me sent�a mejor incluso que la primera vez que alguien me hab�a cogido, era una sensaci�n completa.
Sin darme tiempo de respirar me enterr� el resto de su verga, yo apret� y apret� tratando de disfrutar el momento, eso lo puso mas caliente
- Compadre est� mucho m�s estrecho que su madre o cualquier vieja que haya tenido, guauuu
- Yo se lo dec�a compadre
Comenz� a bombear, una dos, tres, cien veces y cada que me enterraba la verga yo me sent�a en la gloria, de pronto estaba sobre m� en la cama, pod�a sentir sobre mi cuerpo todos y cada uno de sus kilos, me sent�a asfixiar, tratando de seguirlo, mientras mis gritos y los de �l se confundian en uno solo, afortunadamente, Emilio hab�a encendido el estereo a todo volumen, si no, nuestros aullidos se hubieran escuchado en la calle.
Me sacaba la verga y me la met�a hasta el fondo, cada acometida me hac�a vibrar, oleadas de placer me recorr�an, de pronto comenc� a masturbarme, mentras el me cog�a una y otra vez, hasta que de pronto sent� que se qued� quieto, le mir� la cara y sus ojos estaban en blanco, se puso muy tenso, su cuerpo parec�a de hierro y de pronto la sac� muy despacio, la volvi� a enterrar hasta el fondo, y se vaci� en potentes chorros que me inundaron por completo.
Despu�s se qued� por unos instantes encima de m�, mientras sus gritos y jadeos de placer cubr�an toda la habitaci�n, yo me sent�a igual, nuestros cuerpos cubiertos completamente de sudor.
Poco a poco se sali� de m� y se volte� en la cama todav�a jadeando, lo v� completamente satisfecho mientras su verga de manera incre�ble segu�a dura, con restos de leche a�n.
Mi cara, pecho y pelo eran un desastre, as� que me levant� y me dirig� al lavabo para limpiarme un poco, al pasar junto a la puerta me entretuve viendo a Emilio con los ojos cerrados d�ndose tremenda chaqueta, con gusto lo hubiera ayudado pero sent�a urgencia de ir a asearme.
En el lavabo estaba limpiandome la cara, cuando sent� que dos poderosas manos me sujetaban por la cintura, era Emilio, que empuj�ndome salvajemente me enterr� de un solo golpe toda su verga, que tambi�n era enorme, pero un poco m�s chica que la de mi padrastro.
Sus gritos se escuchaban fuerte en el espacio reducido del ba�o, me la met�a y sacaba con fuerza, yo estaba sostenido como pod�a del lavabo, casi de puntas, porque Emilio es mucho m�s alto que yo, disfrutando como loco de la tremenda cogida que me estaba dando, hasta que de pronto explot� y espesos chorros de leche me inundaron de nuevo, cuando se despeg�, pude sentir como su semen y el de mi padrastro escurr�an por mis piernas.
Emilio se limpi� su verga con unas servilletas y me dej� solo para recuperarme, abr� la regadera y me ba�� con cuidado, limpiando toda la leche que ten�a sobre mi cuerpo y temblando de placer y lujuria por la tremenda experiencia que acababa de vivir.
Cuando sal� del ba�o me habl� mi padrastro, quien estaba completamente desnudo al igual que Emilio de nuevo viendo la pel�cula, con una cerveza en una mano y agarr�ndose la verga con la otra.
- Ven t�mate una chela con nostros
Me sent� entre ambos, pero la tentac�n pudo m�s que el deseo de una chela y de nuevo e insatisfecho me hinqu� frente a mi padrastro y Emilio y de manera alterna comence a chupar una y otra verga, sin dejar de acariciar ambas.
- Creo que este putito quiere m�s verga compadre.
- Pues vamos d�ndole.

Pens�ndolo bien, me parece qe la ausencia de mi madre no va a ser muy problem�tica para m�, �verdad?

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