Relato: fausto I Hola amigos, les voy a relatar muchas de mis vivencias que he tenido en mi vida, he leido otros relatos zoo, y en ellos hay mucha fantasia y otros que son muy reales a lo largo de mis relatos les expondre mi experiencia en este tipo de sexo.
Desde peque�o mi familia me envio a vivir con mi abuelo a un campo alejado de la ciudad, donde se me asigno la tarea de cuidar un enorme reba�o de cabras y ovejas, en ese tiempo tenia solo 8 a�os la tarea se me facilitaba con la ayuda de unos perros que asian muy bien el trabajo de pastoreo, en tiempo escolar en las ma�anas concurria a una escuela rural y el resto del dia me encontraba con los animales, la soledad, de los parajes y el abundante tiempo me daban a pensar muchas cosas, obserbaba con atencion como los animales se apareaban, obsebaba sus genitales y como follaban. me miraba mi peque�o pene, tambien obserbaba la lactancia de los animales recien nacidos y eso desperto mi morbo para los animales era tan conocido que se me hacercaban y me dejaban tomarse, una vez tomeuna peque�a cabrita le ense�e mi pene y ella por instinto lo comenso a succionar como si fueran las ubres de su mama, lo hacia muy brusco con mucha fuerza, me provocaba un poco de dolor pero lo dejaba muy exitado, por mi corta edad aun no ellaculaba por lo que me mantenia caliente todo el dia, alternaba con los animales y me pasaba mucho tiempo efectuando esa practica, eso provoco que mi pito se desarrollara y en poco tiempo crecio bastante, a eso sume el introducir mis dedos en los co�os de las embras, y asi pasaron los a�os, tendria unos 10 a�os cuando decidi penetrar a una cabra, la elegi porque me gustaba su cuerpo era adulta y ya habia tenido crias, estaba en selo pero el cabron aun no la montaba, la lleve a una choza que tenia en lugar era imposible que alguien me viera pero preferi ese lugar, la empese a acariciar, hacercandome de apoco a sus partes sexuales acaricie sus suaves tetitas, y luego frote su conchita, introdige primero un dedo y luego dos, si soltarla para que no se fuera, me desvesti de la cintura hacia abajo y me acomode detras de ella, apunte al animal con mi pene y empese a empujar al principio no le entraba pero despues ella elevo su colita y yo encontre el angulo que le dio entrada a mi pene, a la embra parecia gustarle por que no se quedaba sin empujar y no intentaba retirarse, se sentia muy caliente dentro y empece a darle muy fuerte sintiendo un rose muy fuerte le daba muy rapido, por mi corta edad no ellaculaba pero lo disfrutaba a ful, yo creo que la cabra tambien lo asia porque despues de esa primera vez andaba muy cerca de mi, ese dia lo hice como una hora, el pene me quedo muy inchado y sencible.
Despues de eso lo hice todos los dias con diferentes cabras sin dejar la practica de que me la chuparan asi trancurrio mi vida infantil de pastor y zoo, hojala les guste esta historia pronto escribire mi evolucion en el sexo animal.
Fausto
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Relato: fausto I
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