Relato: Mafer, Es Una Nenita







Relato: Mafer, Es Una Nenita

Mafer, Es Una Nenita


Al iniciar esta historia conviene recordar que soy un hombre
de 36 a�os con una vida bastante variopinta que ha encontrado su estabilidad
econ�mica en base al duro trabajo que me ha permitido sacar adelante varias
micro empresas, permiti�ndome adem�s dar trabajo a varias personas de mi
entorno.


Sin embargo, uno de mis pasatiempos es navegar y escribir
acerca de mis experiencias amorosas. Eso me ha permitido conocer a muchas
personas a trav�s del chat. Fue de este modo que conoc� a Mar�a Fernanda, una
nenita de tan s�lo 14 a�os, que es hoy en d�a la due�a de mi alocado coraz�n.


Nos conocimos el pasado s�bado 19 de febrero de 2005 y desde
el primer momento la magia del amor rodeo nuestro encuentro y nos olvidamos de
que ella esta en Lima y yo en Chiclayo. Ese mismo d�a jugamos a excitarnos y
acabamos tan calientes como un volc�n en plena erupci�n. Ella me confes� que de
su co�ito estaba brotando, por primera vez, gran cantidad de l�quido y yo ten�a
mi miembro tan erecto que parec�a estar a punto de estallar.


Esa tarde fue fant�stica y a la noche siguiente nos volvimos
a conectar. Se hab�an roto entre nosotros las barreras de la inhibici�n y
parec�amos haber sido creados el uno para el otro. Mi presencia la encend�a y su
inocencia me excitaba. me acept� como su enamorado antes de la media noche y me
confes� que nunca hab�a tenido uno, que jam�s la hab�an besado y que aunque su
cuerpo desconoc�a el placer de ser pose�do, mis palabras la excitaban a tal
punto que deseaba con desesperaci�n estar entre mis brazos y sentirse plenamente
mujer.


Esa noche jugamos mucho a excitarnos por el chat; por ello,
al despedirnos me sent�a muy caliente y dormido, junto a sus fotos, tuve sue�os
h�medos como un cr�o adolescente y despert� ba�ado en mi propio semen de tanto
so�ar con ella.


Desde el lunes muy temprano organic� mis asuntos y para el
mi�rcoles, en la noche estaba tomando un vuelo que me llev� en 45 minutos a la
capital de mi pa�s. Esa noche me comuniqu� con ella por su tel�fono m�vil y no
sal�a de su asombro al saber que estaba tan cerca suyo.


Me dijo que deb�amos cuidarnos, pues, era la hija menor y la
ten�a tremendamente vigilada y que no aceptar�an que fu�semos enamorados; por
ello, deb�amos establecer un plan para evitar ser sorprendidos.


Al amanecer del jueves alquile un auto para todo el d�a y me
dirig� al club de tenis en donde sab�a que la encontrar�a. El lugar era muy
elegante y estaba atestado de j�venes y chicas que distra�an el tiempo de sus
vacaciones. Entre todos no me fue dif�cil reconocerla, pues, a fuerza de ver sus
fotograf�as; ten�a su imagen esculpida en mi memoria.


La divis� a varios metros desde donde yo estaba. Formaba
parte de un grupo de j�venes y me pareci� entonces una criatura exquisita. Luc�a
una camiseta rosa ajustada y una faldita de tenis blanca, en una mano sujetaba,
por el mango, su raqueta y en la otra un baso, a medio beber, con jugo de
naranja. Debi� sentir mi mirada sobre ella porque volte� hac�a mi y observ�
fijamente sus grandes y almendrados ojos. Bajo los p�rpados en insinuante
coqueteo y ocult� su rubor de adolescente enamorada, mojando sus delgados labios
rojos con un sorbo de naranjada. Dej� el vaso a un lado y llevando la raqueta en
su mano, camin� hacia m�; mientras sujetaba sus casta�os cabellos con una cola a
medio hacer.


Al verla caminar no pude evitar recrearme con su figura
fr�gil de nenita tierna que emite la frescura de sus a�os por cada poro de su
piel. Sent� a mi coraz�n latir desesperado y por un instante tem�, que al
tenerla frente a m�, caer�a desmayado al filo de sus pies; pero, al llegar y
recibir la caricia de sus labios con un beso en mi mejilla; supe por su temblor,
que el nerviosismo era compartido y que ella estaba al borde del desmayo tanto o
m�s que yo.


Nuestra charla fue muy tensa. Me confes� que se disculp� con
sus amigos dici�ndoles que era su t�o venido de fuera y que deb�a irse conmigo.
Salimos del lugar de inmediato y en el autom�vil llegamos a una playa en la que
ten�a alquilada una caba�a. Eran cerca de las 10.30 de la ma�ana y me advirti�
que para las 5.30 deb�a estar en la puerta del club, pues, su chofer pasar�a a
recogerla a esa hora.


Caminamos descalzos en la arena por unos minutos y aunque me
mor�a de ganas por besarla record� que me confi� que nunca la hab�an besado y
que incluso cre�a no saber hacerlo; as� que, decid� esperar.


Nos alejamos bastante del bullicio y aprovech� entonces para
sacar de mi bolsillo un estuche de cuero que puse en sus manos mientras que con
voz queda le dec�a "Es para ti". Al abrirlo sus ojos se enternecieron al
descubrir que se trataba de una cadenita con una medalla en la que se
entrelazaban sus iniciales y las m�as y se emocion� mucho por el detalle y
abraz�ndome me dijo "Eres tan lindo... te quiero mucho". La alc� en mis brazos
sin que nadie nos viese y corr� en medio de sus gritos y risas hasta la puerta
de mi caba�a; en donde, a pesar de la incomodidad abr� la puerta sin bajarla de
mis brazos y entramos as� hasta la peque�a sala, en donde con cuidado fui a
ponerla en un sof� de espuma.


La vi tan m�a en ese instante que no pude evitar acariciar
sus cabellos y aprovechar que cerr� sus p�rpados para acercar mis labios a los
suyos y sellar nuestro encuentro con un beso que pas� lo de imperceptible e
inocente a lo intenso y pasional en casi un instante.


Sent� entonces como su sangre herv�a de pasi�n ante las
caricias de mis labios en su boca; pero, tuvo el valor de detenerme y la solt�
presuroso como temiendo ofenderla. Me puse en pi� confundido y ella me abraz�
desde atr�s por la cintura y me susurr� "Te amo".


La invit� a mi cocina y re�mos de todo y por todo, desde que
me ayud� a colocarme el mandil hasta que le serv� un exquisito plato de arroz
con lomito saltado que devoramos en un santiam�n. Lleg� entonces el momento de
brindar y prefiri� cambiar la champa�a por una gaseosa y en su intento por abrir
la botella antes que yo; el gas derram� el l�quido sobre su ropa y casi sin
pensarlo se quit� su camiseta rosa qued�ndose ante m� s�lo en un peque�o bracier
blanco. Por un instante la admir� y de inmediato de abalanc� a ella para besarla
sin recibir de ella la m�s leve resistencia; por el contrario, sent� su entrega
en el momento que al besarme quit� con destreza el polo que cubr�a mi dorso
mientras regresaba a colgarse de mi cuello.


Pasaron unos minutos de sondear nuestros cuerpo en la cocina
antes de que la volviese a cargar en mis brazos; aunque esta vez fue para
depositarla en la cama de mi peque�a caba�a. Mar�a Fernanda estaba excitada y el
temblor de su cuerpo inocente y puro me hicieron desearla como nunca antes dese�
a otra mujer.


Me desnud� de inmediato ante la mirada curiosa de la due�a de
mi ser. Se le ve�a excitada; pero, nerviosa ya que jugueteaba con una de sus
piernas como si se tratara de un tic infantil y me acerqu� a ella con
intenciones de desprenderla de la faldita de tenis que a�n manten�a puesta;
pero, un reflejo de pudor y de inocencia la obligaron a sujetarla por los bordes
y me anim� a interrogarla:


-�Qu� ocurre mi vida, no quieres amarme?


-No, no es eso.


-�Entonces?


-Es que una amiga me dijo que duele mucho y...


-Y temes que te haga da�o?


-Aha


-No temas mi amor, yo te amo y jam�s te lastimar�a....�lo
hacemos?


-Me prometes hac�rmelo despacito?


-S�


-Y �No me doler�?


-Si te duele no lo haremos


Dicho esto me dej� desnudarla y tuve ante mi el cuerpo de una
hermosa ni�a a punto de convertirse en mujer. Su piel era suave como un
terciopelo fino, blanca y clara como una ma�ana de Sol y tibia y palpitante como
una avecilla en primavera; entonces, me enamor� mucho m�s de ella. Mis manos se
apoderaron de sus senitos en plena formaci�n mientras mis labios acostumbraban a
los suyos a los besos del amor. Su instinto de mujer pronto aflorar�a y aunque
con cierta timidez empez� a tocar mi cuerpo hasta llegar a falo erguido ya, como
un arma listo para el combate.


Recorr� despacio su cuello con calientes besos mientras que
mis manos viajaban de su entrepierna a sus nalguitas y a sus piernas. Sus formas
adolescentes me enervaban llev�ndome al desquicio y mis caricias arrancaban de
sus juveniles labios los primeros gemidos y jadeos de sus nacientes orgasmos.
Descend� con mis besos hasta sus tetas ya hinchadas entonces por el placer y las
devor� a besos mientras ella en el lecho estrujaba la almohada y se retorc�a de
placer. Succione sus pezones mientras la o�a decirme incoherencias y note como
se mojaba en mi mano. Continu� r�pidamente mi viaje hacia abajo hasta
encontrarme con su pubis casi despoblado y aprovechando que sus piernesitas
estaban ligeramente separadas me situ� entre ellas y tuve ante m� la visi�n mas
dulce, un chochito tierno y puro ba�ado en sus propios jugos. Era una tentaci�n
muy grande para un viejo lobo como yo; as� que, invad� con mi lengua aquel
rozadito manjar y me beb� su n�ctar como si fuese la fuente de la vida en medio
del desierto y como recompensa se corri� en mi cara regal�ndome m�s de su n�ctar
y me lo beb� sin dudar.


Para entonces supe que era el momento, ella estaba muy mojada
y yo ten�a el pene como un fierro al rojo vivo; as� que, separe m�s sus
piernitas sin la mas m�nima oposici�n y ayudado con mis pulgares separe lo m�s
que pude sus delicados labios vaginales y coloque la cabeza caliente de mi palo
en la entrada de su vagina y presion� muy despacio hasta encontrarme con el
sello de su virginidad; entonces empuj� con firmeza y romp� sin esfuerzo su
himen para empezarla a follar. Empec� muy suave; pero, ella reclam� y cogimos un
ritmo fabuloso que pod�a sentir como mis huevos chocaban en su culito.


Fueron largos minutos de mete y saca hasta que una descarga
de semen inundo su huequito reci�n estrenado de mi amada Mafer en el preciso
instante en que ella ten�a un gran orgasmo.


Ambos nos dormimos una hora y al despertar nos duchamos
juntos y volvimos a hacer el amor. Llegamos a tiempo al club y al despedirnos me
ofreci� que si le promet�a que no le doler�a la pr�xima vez me dejar�a
estrenarle su culito.


Este relato es para ti Mar�a Fernanda: El amor de mi vida; de
tu eterno esclavo, Mart�n... Tu CABALLERO AZUL



POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO


Por favor vota el relato. Su autor estara encantado de recibir tu voto .


Número de votos: 5
Media de votos: 7.60





Relato: Mafer, Es Una Nenita
Leida: 6938veces
Tiempo de lectura: 7minuto/s





Participa en la web








Contacto
Categorias
- Amor filial
- Autosatisfacci�n
- Bisexuales
- Confesiones
- Control Mental
- Dominaci�n
- Entrevistas / Info
- Erotismo y Amor
- Fantas�as Er�ticas
- Fetichismo
- Gays
- Grandes Relatos
- Grandes Series
- Hetero: General
- Hetero: Infidelidad
- Hetero: Primera vez
- Intercambios
- Interracial
- L�sbicos
- MicroRelatos
- No Consentido
- Org�as
- Parodias
- Poes�a Er�tica
- Sadomaso
- Sexo Anal
- Sexo con maduras
- Sexo con maduros
- Sexo Oral
- Sexo Virtual
- Textos de risa
- Transexuales
- Trios
- Voyerismo
- Zoofilia


Afiliados




Le compre unas tangasami amanterelato porno sexo duromaduros pajerosrelatos muy guarros de incesto madre hijohistorias de mujeres con perros de penetracion relato casero real gitanorelatos xxx incesto mi mama es mi putaRelatos porno alquilando a mi hijarelatos pornos le pregunto a mi esposa si quiere ver la vergota del compadregordas negras desnudasRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatoRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatorelatos porno con nenafui la mujer de mi yerno relatosrelatos me dejaron llena de leche la panochaprofesora culonadeseo el culo de mama relatos pornorelatos hot la mujer de mi compadrerelatos eroticos de incestoporno con mujeres arabesrelatos madre lesbiana arnesanal mama relatorelatos eroticos.de.suegras cachondasIncesto con la abuela relatadosRelato porno tia sobrinoimagenes y relatos xxx con perrodvideos porno de mujeres folladas por el ano con las manos detras de la nucacogiendo por el culo a mama relatosfotos porno borrachassobrina de 7 relatosmi hijita de 9 añitos relatoincesto hermana casada condonRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatorelatos xxx mi peque�a sobrinaRelatos de sexo no consentido con misioneras americanasrelatos de playarelatos eroticos mi putita mi pequeña hijahermanita de mi novia relatolas amigas de mi pequeña hermana relatos pornoRelatos porno amor filial el tio mario bdlol.rumi hijita relatosrelatos eroticos el culote de mi hijarelatos eroticos de incestotravetis pornorelato erotico mama e hijoOrgia familiar relatos porno gayRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatorelatos xxxmi mamame cura la fiebre relatohistorias gay con el vecinitorelatos eroticos bdlol.ru incesto en familiarelatos porno mi sobrina de 8relatos porno de narutovecinita aprendiendo a nadar 2 relatos pornorelatos erotico con el compadrerelatos analrelato sexo gays entre futbolistarelato porno de comadres putasRelatos eroticos gratis incesto sobrina de 13 añitos primera vezrelato follando a la camareraRelatos eroticos de primera vez con la prima culonapornos cojen con ropa y poco se banquitandoRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatorelatos trio con mi mujer y mi hijarelatos eroticos de nietas cojedorastodorelatosxxx Luna de miel familiarfollo con mi hermana menor relatosrelatos me follarontías zorrasRelatos nenita eroticorelatos eroticos de hijas pequeñas virgenesPorque siento que mi esposa me muerde con su vagina mi pene cuando estamos teniendo un orgaasmo al mismo tiempola bebe de papa relatopornorelatos pornos me culie a la niñera