Al volver de casa de Anne, despu�s de haberle hecho el
arreglo en el jacuzzi, llegu� a casa. Cuando abr� la puerta no escuch� ninguna
voz ni sonido por lo que supuse que no hab�a nadie en casa. Por lo que decid�
darme una ducha para relajarme despu�s del sexo salvaje con Anne. Sub� al piso
de arriba, prepar� el ba�o con agua y sales para el ba�o y cog� un ba�ador para
ponerme despu�s. Como tenia la puerta cerrada no escuch� que alguien hab�a
entrado en casa, as� que sal� del ba�o con una peque�a toalla que poco cubr�a.
Fui a mi habitaci�n, pero al pasar por la habitaci�n de mis t�os, o� unos
gemidos que parec�an venir de la habitaci�n. Por la hendidura de la puerta pude
ver que mi t�a estaba tumbada en la cama abierta de piernas, desnuda y
masturb�ndose. Eso hizo que pene se pusiera muy dura y no pudiera disimular la
erecci�n bajo la toalla. Mi ti ase tocaba sus pechos y con la otra mano
previamente mojada de sus sensuales labios se la pasaba por su depilado co�o, el
cual tenia un brillo especial a causa de sus jugos vaginales. Parec�a disfrutar
de su soledad y yo tambi�n de la m�a, pero eso pronto se iba a acabar. De
repente ella paro de tocarse su co�ito y miro hacia la puerta donde yo estaba,
al verme all� toc�ndome la polla en su honor y me hizo pasar con ella.
Veo que te gusta espiar a tu t�a, cuando se
masturba- dijo ella
Bueno, es que pasaba por la puerta y escuch� unos
gemidos y mir�- dije yo.
Quiero que sepas que esto que hago, lo hago
pensando en ti, en ese pedazo de polla juvenil que tienes la cual me
pone muy caliente- dijo ella, quit�ndome la toalla que cubr�a mi sexo.
Desde el primer d�a en que te vi y entraste en mi
habitaci�n y lamiste los restos de semen de mi polla, he deseado
follarte y correrme en tu cara- dije yo, mientras le tocaba los
pechos.
Pues ahora es el momento muchacho- Dijo mi t�a
Cogi� mi polla y comenz� a examinarla, chuparla desde la base
de los test�culos hasta el inflamado glande que la coronaba. La excitaci�n fue
creciendo entre los dos, los jadeos de placer eran intensos. Su movimiento de
succi�n fue aumento, tanto que estuve apunte de correrme, pero no lo hice porque
aparte la verga de su sedienta boca y la tumb� en la cama dejando sus piernas
abiertas. Su co�ito estaba depilado facilitando el cunningulis a la que se ve�a
sometido por mi parte. Con mi lengua juguetona separaba sus labios mayores para
poder lamer sus labios menores, para as� a su vez poder mamar su cl�toris.
Mientras le chupaba el co�o mi t�a no paraba de decir
obscenidades y gemir como una perra en celo. Por sus movimientos p�lvicos y sus
gritos supe que estaba teniendo un orgasmo. As� que decid� que ya era hora de
poder entrar con mi verga en su cueva, con mi lengua iba subiendo hasta su boca,
mientras que mi polla entraba suavemente dentro de ella. Su vagina estaba
calentita y muy h�meda a causa de la excitaci�n, por lo que pronto comenzamos
con que mete saca, mientras se la met�a le chupaba sus pechos coronados por unas
grandes aureolas marrones. Al cabo de 10 minutos de intenso follar, me pidi� que
me corriese en sus pechos y cara, por lo que saque mi verga de su co�o, y se la
puse en la boca para que me la chupara para as� correrme. Sus movimientos con la
lengua no tardaron en provocar que me corriese, expulsando gran cantidad de
leche sobre ella. Mi t�a gem�a porque mientras le daba mi leche ella se
masturbaba para poder correrse conmigo.
Cuando acabamos los dos nos dimos un beso, en donde nuestras
lenguas se encontraban. Mi t�a me pidi� que fuera su amante, ya que mi t�o no
daba la talla con semejante mujer.
De esta manera como les he contado en los 3 relatos fue como
me convert� en el amante de dos exuberantes mujeres, Anne y mi t�a. Espero que
les haya gustado mi experiencia, no duden en escribirme, a
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