De nuevo paso a visitarlas. Ya era m�s bien tarde. Hab�a que
inyectar de nuevo a Pepa. Me encontraba bastante relajado despu�s de cenar con
Laurita y echarle un suculento polvete. Pasaban las 12 de la noche cuando
llegaba a casa de Pepa.

Su amiguita Laura salio a abrirme, perdona Laura, pero se me
hizo un poco tarde. No te preocupes Antonio, est�bamos viendo la tele en el
dormitorio. Laurita llevaba puesto el pijama, en la habitaci�n le digo a Pepa se
desnude para administrarle el enema. Sin nada de ropa en la parte inferior se
puso de costado en la cama para lubricarle el lindo agujerito. Coloc�ndome unos
guantes de un solo uso, pongo en mi dedo un poco de vaselina y lo apoyo sobre el
lindo agujerito, rel�jate cielo le dice Laura. Separando sus nalgas, inserto el
mismo muy despacio. �Notas molestia? No Antonio me lo haces muy bien. Ella
estaba apoyada sobre la almohada y tenia su mano sobre el vientre. Ponte de
rodillas sobre la cama Pepa, voy a ponerte el enema. Laura aguantaba el
irrigador, mientras introduje la c�nula bien lubricada y la introduje en su
culo. Le dije a Laura si el agua estaba a temperatura ambiente, ni muy fr�a ni
muy caliente.

Abr� la llavecita y proced� a administrarle el enema. �Notas
como entra el agua? Si Antonio, es una sensaci�n placentera la que siento, me ha
venido a la mente cuando de peque�a mi madre me administraba esas lavativas que
me daban p�nico. Pero esto es una delicia. La zorrita se puso sus dedos en su
cl�toris, Laura a mi lado se la ve�a excitada observando el trasero de su amiga.
Faltando poquito para terminar el enema me dice, s�came la c�nula por favor,
enseguida se la saco de su lindo culo, incorpor�ndose de la cama fue r�pida al
ba�o a expulsar el enema.

Al ratito saliendo del ba�o, pude observar que no llevaba
bragas, vi�ndole todo el felpudo de su co�ito. Meti�ndose entre las sabanas me
dice, �Dios m�o! Que a gusto me he quedado.Me alegro Pepa, ahora voy a pinchar
esa linda nalguita. Preparo la inyecci�n y le dije se colocara c�modamente para
inyectarle. Pincho sobre la nalga derecha, muy despacio y me dice, �madre m�a!
Como duelen las pu�eteras inyecciones. Me desped� de ambas, dese�ndoles pasaran
buena noche. Al d�a siguiente era domingo, les dije que vendr�a un poquito mas
tarde.

Llegue a casa bastante cansado despu�s del d�a tan ajetreado
y r�pidamente me acost�.

Hoy domingo, me levanto sobre las 9 de la ma�ana, luego de
darme una buena ducha y despejarme, me visto y salgo a hacer las visitas de
rigor que no eran pocas. Veo si tengo alguna llamada en el contestador, anotando
la llamada de Aurora, la chica embarazada. La llamo para decirle que pasar�a al
mediod�a a inyectarla. Hoy era su segunda inyecci�n de vitaminas. Una vez en la
calle, me dirijo primero a casa de Pepa. De camino compro la prensa y entro a
desayunar en una cafeter�a cercana a su domicilio.

Sobre las 10 de la ma�ana, llegaba a casa de Pepa. Laura me
abre la puerta: buenos d�as Antonio. Hola Laura buenos d�as. Iba en pijama y me
dice, prep�rame el inyectable, pues debo irme a casa a recoger unas cosas. Luego
atiendes a Pepa. Por supuesto Laura enseguida, preparo la inyecci�n y ya estaba
echada en la cama junto a Pepa con el pantal�n bajado y mostr�ndome su lindo
trasero. �D�nde te la pongo? En el lado izquierdo cari�o. Le inyecto suavemente
y le digo, listo Laura, puedes vestirte. Fue al ba�o a arreglarse, mientras me
dispongo a prepararle la inyecci�n a Pepa.

Laura se visti� en un santiam�n y saliendo del ba�o me dice,
os dejo pareja. Hasta la noche Antonio. Adios Laura. Sonri�ndome, le dice a
Pepa, p�rtate bien cielo. Descuida Laura. Una vez nos quedamos solos me dice
Pepa, Antonio, iny�ctame primero. Tenemos un ratito, deseaba este momento. Pens�
para mis adentros, esta chica tiene ganitas, igual me equivoco. Se volvi� boca
abajo en la cama, deslizando las sabanas por debajo de la cintura. Baj�ndole el
tanguita, le digo �D�nde Pepa? En el lado derecho por favor, parece que le tengo
menos dolorido. De acuerdo Pepa, rel�jate. Le doy con el algod�n mojado un
poquito en alcohol e introdujo la aguja. Poquito a poco voy inyectando el
contenido de la jeringa. Terminando de inyectarla, me dice, �prepara el enema
por favor?

Paso al ba�o y me dispongo a verter los dos envases de � en
el irrigador. Una vez en el dormitorio Pepa estaba colocada de costado
mostr�ndome todo su culo desnudo, se hab�a quitado el tanguita. Vamos cielo,
lubr�came con el dedito como sabes hacer. Con el guante puesto, procedo a
ponerle un poquito de vaselina en ese lindo agujerito �Qu� placer me das Dios
m�o? Ansiaba este momento, y una no es de piedra. Coloc�ndose de rodillas,
piernas separadas procedo a introducirle la c�nula, observando como contra�a el
esf�nter.

Ponte flojita Pepa., no empujes hacia fuera. Perfecto Pepa,
ya va entrando el liquido en tu delicioso culito. Gracias Antonio, lo haces muy
bien, me dir�s que soy una viciosilla. Este ser� nuestro secretito Pepa.

Una vez administrado la mitad del enema, retiro la c�nula del
culo y me dice vamos al ba�o, sent�ndose sobre el water, de espaldas a mi,
observaba como expulsaba todo el contenido del enema. All� mismo le dije que se
apoyara sobre la ba�era para aplicarle el resto, as� lo hizo. Me daba m�s morbo,
vi�ndola delante de m� con el culo en pompa. Tienes un agujerito delicioso Pepa,
gracias Antonio. Me estaba excitando a tope cuando de nuevo separo sus nalgas y
procedo a aplicarle el segundo enema. El irrigador lo puse colgado de un soporte
de la ducha, ve�a como lentamente bajaba el liquido a trav�s de la goma
transparente del irrigador.

�Falta mucho? Aguanta un poquito Pepa, ya lo tienes todo
dentro, saco la c�nula y sent�ndose sobre el water de espaldas a mi, expulsando
el agua, pr�cticamente limpia. Incorpor�ndose me dispuse a secarle el lindo
culito.

Gracias Antonio, eres un solete. Ahora quiero que me pongas
una irrigaci�n vaginal. �No tendr�s inconveniente, verdad? Por supuesto que no
Pepa, enseguida preparo el irrigador. Echo agua templada sobre el mismo,
aproximadamente � de litro, junto con un gel �ntimo. Acom�date en el inodoro
Pepa. Observo su lindo co�o, en todo su esplendor, y le dije que se abriera sus
lindos labios vaginales. Lentamente introduzco la c�nula curvada y un poquito
m�s larga en su linda concha. Ya te va entrando el agua �verdad? As� es Antonio.

Mientras yo le sujetaba el irrigador, ella ten�a la c�nula
cogida con su mano. Una vez acabado el contenido del irrigador, sac�ndose la
canulita de la vagina, se la seco delicadamente con una toallita.

Pepa, debo marcharme, tengo la ma�ana completa de visitas. A
la noche nos vemos. Muy bien Antonio, gracias por todo, hasta luego.

Seguidamente me paso a inyectar a Aurora, la chica
embarazada. Hoy le tocaba su segunda inyecci�n del complejo vitam�nico

_Buenos d�as Aurora. Buenos d�as Antonio, pasa por favor.
Estaba en compa��a de Alicia, una chica rubia, de aproximadamente unos 39 a�os.
Mira Alicia, hablando del rey de roma. Te presento a Antonio, practicante. Como
sabes me pongo unas inyecciones recetadas por mi doctora. Perd�name un momento,
Antonio puede prepararme la inyecci�n. Pasemos al dormitorio, por favor.

Me dispongo a prepar�rsela, cuando quieras Aurora. Baj�ndose
el pantal�n, se puso acostada en la cama. Se le apreciaba su linda barriguita.
Llevaba unas braguitas diminutas tipo slip, que obviamente le dije se la bajara
un poquito. Gracias Aurora, �de que lado la inyecci�n? En el derecho por favor.
Aplico el algod�n en la zona a inyectar e introdujo la aguja administr�ndole la
jeringa de 2 ml.

Dejo un momento el algod�n sobre el punto de la inyecci�n, y
le digo, puedes incorporarte. Ech�ndose la braguita hacia arriba, junto con el
pantal�n se puso de pie. Me dice, Antonio la siguiente inyecci�n es el martes.
Ir� a tu consultorio. Conforme Aurora. Hasta el martes pues. Saludo a su amiga
Alicia y nos despedimos hasta la pr�xima visita.

Eran casi las 11 de la ma�ana pasadas. Aun me quedaban dos
visitas. Primeramente me dirig� a visitar a Cristina a su domicilio. De camino
entro a desayunar en una cafeter�a cercana al domicilio de ella.

Ya en el domicilio de Cristina, me dijo que su hija Cristina
necesitaba tambi�n de unas inyecciones. Cristinita como le dice su madre, es una
jovencita de unos 16 a�os, alta, morena y de una belleza extraordinaria. Hacia
tiempo que no la ve�a. Ya era toda una mujercita.

Cristina, le dije. He sido precavido y traigo tus
inyecciones. Como sabes, las ten�a en el consultorio. Solo te quedan 2 ampollas.
Hoy y ma�ana. As� es Antonio. El martes ir� a visitar a mi doctora, para que me
examine y si cree conveniente recetarme. Ahora me preocupa Cristinita, esta
ma�ana a primera hora no se encontraba bien y menos mal que vino la doctora de
urgencias enseguida. No te he llamado, porque sab�a que ten�as que venir.

Le han recetado 6 ampollas parecidas a las m�as, ha cogido
faringitis. Aparte unos supositorios para la fiebre. Vamos al dormitorio de
Cristina me dice, saludando a Cristinita le dije. �Qu� tal jovencita? Fastidiada
Antonio. Con dos o tres d�as en cama todo solucionado. �Tienes fiebre? Toco su
frente y le digo a su madre que le pusiera el term�metro. Puede que tenga
algunas d�cimas. Su madre, desabroch�ndole la blusa del pijama se lo puso en la
axila. Mantenlo as� durante unos minutos cari�o. Mientras me dispuse a
prepararle la inyecci�n. A los pocos minutos, Cristina retir�ndole el term�metro
procedi� a su lectura.

Tienes fiebre cari�o, en concreto 37.7. � Antonio, puedes
inyectarle por favor. Le dije que se preparara para inyectarla. Ella se volvi�
boca abajo en la cama y echando el cobertor hacia abajo, se dispuso a bajarse el
pantal�n junto con unas lindas braguitas de algod�n. Vamos Antonio, cuando
quieras. Prefiero los inyectables a las pastillas, pues estas no me sientan
bien. Sent�ndome en la cama, que culito m�s lindo. Regordete y de piel blanca
como la leche. La chica promet�a, era toda una mujercita y bell�sima como su
madre. Puse el algod�n mojado un poco en alcohol y desinfecto la nalguita en
cuesti�n. En concreto la izquierda. D�ndole una palmadita, y vi�ndola toda
relajada, inyecto suavemente el vial de 4 ml. Intramuscular lenta. �Duele? Un
poquito Antonio. Termino de inyectarla y le dije, eres una buena paciente.
Cristina ponle el supositorio. Mientras yo fui al ba�o a tirar la jeringa
desechable. Mirando a su madre toda sonrojada le dice, cuidado mami.

Yo cre� conveniente salir del dormitorio. Vale Cristina ahora
voy a inyectar a tu madre. Vendr� sobre las 21.00 horas, a inyectarte de nuevo..

Salgo al sal�n y me dispongo a prepararle la inyecci�n a
Cristina. Baj�ndose el pantal�n junto con la braguita se recost� sobre el sof�.
�D�nde te la pongo? Donde quieras. Froto con el algod�n sobre la nalga izquierda
y la inyecto suavemente. Listo Cristina, puedes incorporarte. Subi�ndose el
pantal�n toda sonriente me dice, gracias Antonio. Procura venir pronto a la
noche, para la inyecci�n de Cristina. Descuida sobre las 21.00 horas estoy aqu�.
Hasta la noche pues. Adios Antonio y gracias.

Seguidamente paso a casa de Olga, la cu�ada de Cristina. Toda
sonriente sale a recibirme. Pasamos al dormitorio y le preparo la inyecci�n.
Llevaba un albornoz de rizo, en color azul marino. Acababa de salir de la ducha
por lo que deduje. Preparo las 2 ampollitas en una sola jeringa, y coloc�ndose
en la cama, levant�ndose el albornoz, me muestra su bello cuerpo. Disfruto
viendo sus lindos muslos y le bajo la braguita. Pongo el algod�n sobre la nalga
izquierda y la inyecto suavemente. Dejo un momentito el algod�n, desinfectando
el punto de la inyecci�n.

Listo Olga, gracias Antonio. Incorpor�ndose de la cama nos
despedimos hasta el d�a siguiente. Ahora voy a inyectar a Mercedes, que vive en
el mismo rellano.

_Buenos d�as Mercedes.

Hola, buenos d�as Antonio. Pasa por favor.

En el dormitorio procedo a prepararle la inyecci�n. Iba con
ropa c�moda de estar por casa. En concreto un pijama estampado. Coloc�ndose en
la cama y con el pantal�n bajado me dice, luego de la inyecci�n necesito darme
con este gel en la espalda. �Puedes darme el masaje? Claro Mercedes, ahora voy a
inyectarte. No llevaba braguitas, pudiendo observarle todo el trasero a mi
antojo. Se la pongo en el gl�teo derecho.

Fui un momento al ba�o a lavarme las manos. Ella estaba en la
misma postura. Quit�ndose la blusa del pijama, pude observarle toda la espalda.
No llevaba sujetador. �Dios m�o! Que lindo cuerpo. Me siento en la cama y
procedo a darle un masaje por toda su espalda. Que bien lo haces, como me alivia
esto.

Listo Mercedes. Gracias Antonio. Incorpor�ndose de la cama,
nos despedimos hasta el d�a siguiente.

De momento no ten�a que realizar mas visitas por la ma�ana,
as� que me dirig� a mi domicilio. Miro si hab�an dejado alg�n mensaje en el
contestador. Cual sorpresa la m�a. Hab�a un mensaje de mi amiga Laura la
ginec�loga. Al parecer no se encontraba bien. La llamo por tel�fono dici�ndole
que en una media hora estar�a en su domicilio.

Llego a casa de Laura, encontr�ndola pachuchita. �Qu� te
ocurre cielo? Me temo que me encuentro algo resfriada. Vamos al dormitorio,
necesito acostarme. Toco su frente y le digo, creo que debes tener fiebre.
Llevaba una bata, y autom�ticamente le dije se la quitara y se metiera bajo las
s�banas. Pude observar un camis�n cortito acompa�ado de unas lindas braguitas.
No pude por menos que excitarme vi�ndola de aquella manera.

Sobre la mesilla de noche, tenia el term�metro junto con unos
medicamentos. En concreto unos inyectables y supositorios. Ponte el term�metro,
descubri�ndose lo puso en la ingle, visionando sus lindos muslos. Tap�ndola con
las sabanas, le dije tenlo puesto un momentito. Al ratito me lo ense�a,
comprobando que ten�a un poco de fiebre. Ser� mejor que me pongas el
supositorio. Baj�ndole la sabana, la digo se ponga de costado y se descubra.
Braguitas bajadas, separo sus nalgas y vision�ndole el lindo agujerito, lo
introduzco en su culito.

Gracias cari�o, vete preparando las inyecciones, como puedes
ver son bals�micas, espero que qued�ndome en cama hoy pueda ma�ana visitar a mis
pacientes. Caso contrario deber� posponer las citas.

Preparo tranquilamente el inyectable, un vial de 4 ml. Ella
nuevamente se puso boca abajo mostr�ndome su lindo trasero, de nalgas redonditas
y prietas. Le bajo la braguita y desinfecto su nalga izquierda, introduzco la
aguja y procedo a inyectar suavemente el contenido de la jeringa. Listo mi amor.
Antonio, tienes que realizar hoy mas visitas. No cielo, hasta la noche que debo
realizar un par de ellas. Estupendo pues, �podr�s quedarte conmigo? Claro que si
Laurita. Desn�date Antonio, deseo sentirte junto a mi. Me desvisto y me meto
bajo las sabanas junto a ella. Ten�a una tele en su dormitorio y nos pusimos a
ver unos documentales. Al rato apagamos la televisi�n y procedimos a
acariciarnos bajo la ropa de la cama nuestros cuerpos. Se puso de costado frente
a m�, yo rozaba con mi pene sus lindas posaderas. Al mismo tiempo acariciaba su
vientre y bajando la mano a la altura de su pubis, me entretuve en acariciarle
los lindos rizos. Sigue as� amor, me das mucho placer. Me calent� de tal forma,
que le dije quiero penetrar esa linda conchita. No te cortes amor, adelante. En
esa misma postura, con mi pene erecto, ella misma lo gui� hacia su dulce
conchita. Comenc� con unos movimientos de mete y saca, al mismo tiempo la
sujetaba por las caderas. Notaba como sus flujos vaginales se mezclaban con los
m�os. Alcanzamos el cl�max al mismo tiempo. Algo sorprendente que no ocurre
muchas veces .No te retengas amor, descarga tu semen en el fondo de mi vagina,
sabes que tu mismo me pones el anticonceptivo inyectable.

Despu�s de descargarme completamente, nos levantamos de la
cama y fuimos al ba�o a lavarnos. Le dije que se sentara sobre el bidet y me
dispuse a prepararle una ducha vaginal. Los dos aseaditos nos metimos en la cama
de nuevo. Nos quedamos dormidos entrelazados.