La primera sorpresa fue que una tarde al llegar yo mas pronto
que de costumbre a casa ,mi mujer trabaja, me llamaron al m�vil y era Isabel mi
vecina que me hab�a visto llegar y me dijo que dejara abierta la puerta de casa
que ella tambi�n estaba sola y que no habr�a peligro.

Deje abierta la puerta y en un instante est�bamos bes�ndonos
,toc�ndonos como dos n�ufragos ante la falta de agua , subimos a la habitaci�n
,est�bamos atacados de los nervios pero tambi�n atacados de deseo del uno hacia
el otro, la fui besando suavemente por la boca mi lengua paseaba por su cuello
notando como se estremec�a con mis caricias, mis manos tocaban sus pechos y mis
dedos daban peque�os c�rculos en sus pezones ,!que pezones� tiesos como rocas ,
llam�ndome para que los comiera ,para que mi boca entrara en ellos y mi lengua
sintieran su dureza.

Ella a su vez me tocaba , rug�a en mi boca cuando la besaba
,sus manos recorr�an mi pene ,me lo apretaba y lo hacia subir y bajar d�ndome
tanto placer , en ese momento ca�mos los dos en la cama , nos estorbaban toda
clase de ropas, sab�amos q �bamos a llegar hasta el final y despu�s de tanto
esperarlo hab�a llegado el dia.

La tumbe en la cama ,por fin al bajar sus braguitas me
encontr� con ese tesoro, como explic�roslo , mi boca se fue acercando ,los
olores que me llegaban me hac�an ponerme como un burro y sus suspiros me dec�an
que �bamos por buen camino, me dec�a!t�mame� ,por favor quiero sentirte, me
situ� entre sus piernas y la fui penetrando muy despacito ,sintiendo los dos
como iba entrando, nuestros ojos coincidieron en ese momento y no hubo falta de
decir nada mas ,la empec� a penetrar mas profundamente ,�ramos un solo ser ,sus
gemidos se convirtieron en gritos apagados y se confund�an con los m�os.

En ese momento sent� que Isabel se puso tensa y al girarme vi
a Andrea , mi mujer como se acercaba a la cama y con mucha lentitud se fue
quitando la ropa, iba con un conjuntito cantidad de er�tico , no me miraba ,sus
ojos solo estaban posados en mi vecina Andrea, se acerco ya desnuda y la estampo
un beso en la boca , sus lenguas se encontraron , se empezaron a tocar por todo
el cuerpo , eran sensaciones nuevas para las dos , bueno para los tres , nos
empezamos a besar los tres a la vez , mis manos recorr�an los pechos de las dos
, los besaba mientras ellas se tocaban con las manos sus sexos.

Mi vecina Isabel tubo su primer orgasmo en las manos de una
mujer y se la ve�a que disfrutaba como nosotros, en ese momento Andrea empez� a
chuparla todo el co�o bebi�ndose todo los jugos que Isabel soltaba en ese
momento, yo puse la polla en la boca de mi vecina que empez� a com�rmela con
verdaderas ganas , con la visi�n que tenia sabia que iba a aguantar poco asi que
me coloque detr�s de mi mujer y mientras ella segu�a su comida yo se la incruste
hasta el fondo y empec� un ritmo fren�tico ,el orgasmo que tuve fue apote�sico
los tres a la vez corri�ndonos .

Pasado el orgasmo me tumbe en la cama y las dos se me
lanzaron como fieras a mi polla ,creo que en ese momento como en la pel�cula
Titanic te crees el rey del mundo, viendo a las dos mujeres que en ese momento
quieres comi�ndotela ,sabore�ndote ,una, los test�culos, la otra el glande
,luego al rev�s , se com�an mientras tanto a besos, sus lenguas se un�an en mi
polla , asi estuvieron hasta que me dejaron con el pene listo, entonces entre
ellas hablaron algo y vi. como mi vecina se sub�a encima mia y se meti� toda mi
verga , empezando a cabalgarme, mi mujer mientras tanto se puso detr�s de
nosotros y nos estuvo chupando mientras mi polla se met�a en el co�o de su amiga
, de pronto note algo que me hizo alucinar , mi mujer la estaba metiendo un
consolador por el ano , lo notaba perfectamente , solo era una telilla la que
nos separaba y notaba como iba entrando, los gritos de mi vecina eran ya
descomunales , hasta que no pudo mas y con un grito exagerado se corri� no se
las veces yo tampoco pude aguantar mas y sac�ndola me dispuse a que pusieran sus
boquitas para echar con un quejido el polvo mas maravilloso , se lo com�an todo
a la vez y mi semen escapaba por la comisura de sus labios haci�ndose luego un
maravilloso beso y mir�ndome a los ojos�.

Sonrieron y supe que esto solo era el comienzo de grandes
batallas.

Vuelvo a dec�roslo��.os quiero