Lula y yo somos hermanos, hijos �nicos; es decir, que ella es
la �nica hija y yo el �nico hijo, mis padres son gente de campo; mi padre tiene
un rancho y mi madre no es la esposa cl�sica, pero su gusto por el campo la
llevo a casarse con mi padre.
Mi madre es 15 a�os menor que mi padre, es una buena madre
atendi�ndonos a todos en casa, adem�s de eso, le gusta estar en forma y para
ello hab�a acondicionado una pista alrededor del rancho, donde sol�a correr tres
veces por semana, adem�s tenia un gimnasio en casa.
Lula y yo ten�amos recamaras juntas, con la vista hacia los
establos. En la �poca que sucedieron los hechos, Lula tenia 16 a�os y yo estaba
por cumplir los 18, est�bamos en la etapa de las primeras emociones sexuales.
Una tarde est�bamos viendo la tele en mi recamara , cuando o�
gritos y esc�ndalo en los establos, nos asomamos para ver que es lo que estaba
pasando, para nuestra sorpresa descubrimos a un grupo de los vaqueros que
estaban apareando a una de las yeguas; un semental llamado "veneno", estaba
sobre una de las yeguas llamada "blanca", los vaqueros emocionados le gritaban
cosas que si bien se alcanzaban a o�r sus gritos, no eran comprensibles del
todo, pero lo que ve�amos nos hizo sentir calientes, Lula me miro con cara de
curiosidad y me dijo:
� que es lo que hacen con los animales ? �
se est�n apareando � conteste.
O sea que ...- dejando la pregunta en el aire.
Aja, ...se est�n haciendo el amor � le dije
Me gusta lo que est�n haciendo �
� a quien no ? � le dije
y tu; � ya los has hecho ? � me pregunto con cierta
intenci�n
� porque quieres saberlo ? �
por nada, solo era curiosidad - me contesto
Pero seguramente sabia que tenia una amiguita con la que
�bamos a nadar a la poza que esta en el r�o; una peque�a poza que hace el r�o y donde tengo un
escondite que aparentemente nadie a descubierto, es una cueva mas o menos
grande, que oculta la cortina de agua, que forma la ca�da del r�o a la poza.
Esa misma curiosidad me llevo en mirar mas detenidamente a mi
hermana, que a sus 16 a�os era una verdadera mujer, con los pechos medianos,
pero firmes; una cadera bien torneada y un culo maravilloso, redondo y paradito.
Se me vinieron a la mente tantas ideas, pero sobre todo, el deseo de tir�rmela,
asi que la invite a nadar a la poza, como parte del plan..
� quieres acompa�arme a la poza a nadar ? � le propuse
si, pero ma�ana, porque hoy tengo demasiada tarea de la
escuela, � te parece ? �
bueno, al fin ma�ana ya es s�bado y no tenemos prisa, �
no crees ? � le dije
aja, bueno ma�ana nos vamos temprano �
As� paso ese d�a, y al d�a siguiente me levante temprano,
desayunamos, y nos fuimos a la poza a caballo; El d�a estaba brillante y caluroso, as� que
llegamos a la poza casi ba�ados en sudor.
�ndale hermanita, vamos meti�ndonos a la poza a nadar �
Nos desvestimos, dejando nuestra ropa en la orilla,
qued�ndonos con el traje de ba�o que nos hab�amos puesto antes de salir. Nadamos un buen rato, y luego
le dije:
�sabes?, tengo un secreto, � quieres conocerlo ? �
si, si quiero; � me lo ense�aras ? �
claro, pero me tendr�s que prometer que no se lo dir�s
a nadie, � de acuerdo ? �
te lo prometo, hermanito, no se lo dir� a nadie �
Entonces la lleve nadando hasta la cortina de agua que
ocultaba la entrada de la cueva, por un momento no vio la entrada de la cueva, oculta por unas ramas
que hab�an crecido en la entrada, pero cuando vio la entrada de la cueva me dijo:
� como sabias de esta cueva, hermanito ? �
pues una vez que andaba nadando, me la encontr�, pero
como no se ve, no dije nada, ahora tu tambi�n lo sabes, ese ser� nuestro
secreto, � te parece ? � le dije
si, me parece muy bien �
bueno, ahora que nadie nos puede molestar, dime, � que
es lo que te llamo tanto la atenci�n el d�a que se apareaban los animales?
�
no lo se, pero me gusto verlos aparearse � dijo - mas
que eso, me excito verlos.
� Ah, eso es entonces ? �
� que ? � dijo
pues que quieres aparearte, �no? �
pues la verdad, si me gustar�a hacerlo, pero con
alguien que supiera hacerlo y �quien mejor que mi hermanito ? �
pues que bien, porque yo tambi�n quisiera hacerlo
contigo � y diciendo esto la abrase
y la bese suavemente en los labios, pero ella meti� su lengua
en mi boca, bes�ndonos con mas pasi�n, luego me quito el traje de ba�o y
acaricio mi verga, que ya estaba dura, apret�ndola me dijo:
oye hermanito, que gruesa la tienes, parece la de
"veneno", y empez� a re�r �
� te lo parece, hermanita ? �
Si coraz�n, esta rica, se siente tan suave...mmm, tan
dura....- y continuo acariciando y apretando.
Luego se hinco y se la llevo a la boca, pasando los
labios por el glande, besando con mucha suavidad, lamiendo como si fuera un dulce, haciendo que
me pusiera al punto.
En la cueva tenia unas colchonetas, velas y algunas latas de
comida que usaba de vez en cuando, por lo que pod�amos estar ah� mucho tiempo.
As� que despu�s de tender las colchonetas en el suelo, me
acost� y deje a mi hermana que hiciera lo que quisiera.
Lula me besaba la pinga sin dejar de hacerme una pu�eta,
luego se la meti� completa en la boca, no cre�a que le cupiera, pero descubr�a
lo caliente que era mi hermanita.
Chupaba todo lo largo como si me la estuviera cogiendo por la
boca, la tome del pelo y le ayudaba a llevar el ritmo de la mamada, hasta que
sent� que pronto le echar�a la leche en la boca.
ya amor....estoy a punto....casi te la
doy....asiiiiiiii�....sigue...s�camela toda... as�....c�meme todo
amoooooooorrrrr!!!!!!!- y no pude mas, me viene en su boca, que segu�a mam�ndome
hasta que me dejo seco. Me quede descansando un momento, bes�ndola, mordi�ndole
los labios, acariciando su cuerpo, desnud�ndola completamente, su pecho se
agitaba con su respiraci�n cada vez mas r�pida, segu� besando sus pechos,
mordiendo sus pezones, que se encontraban duros, deliciosamente duros, lam�a sus
puntas, pasando la punta de la lengua, apretando los pechos de mi hermanita;
despu�s continu� lamiendo su estomago plano y las caderas, mordiendo
lujuriosamente, con ansias, saboreando su carne tierna hasta que finalmente
llegue a su conchita, h�meda, delicada pero lista para ser tomada, acaricie sus
labios, separando los p�talos de su maravillosa flor, rosada, h�meda, brillante,
lista para ser devorada, y eso fue lo que hice, devore su flor deliciosa,
res�mando jugos de delicado sabor, que sorb�a ansiosamente, mientras mi lengua
se hund�a en su puchita, buscando su botoncito, que asoma levemente, esperando
la caricia que lo hiciera trepidar, temblar de placer, cada leng�etazo sobre su
cl�toris le arrancaba gemidos:
amor, me estas sacando la vida....siento como me estoy
vaciando....me vengo amor....que rico me mamas,...asiiii....eso me
gusta.....dame mas hermanito.....s�came toda la miel.......dame
mas,.....mas, mas.......-
y as� le saque el alma, se vino dos, tres veces; ella quedo
rendida, pero ahora yo era el que tenia ganas de meterla en alguno de sus
agujeritos, si se pod�a en todos, seria magnifico.
La deje descansar un poco mientras acariciaba su cuerpo,
hasta que ella me empez� a besar, y sent�ndose sobre mi, se meti� lentamente
toda la verga, se mov�a cadenciosamente subiendo y bajando, sent�a como me
apretaba con su puchita joven, pero caliente, los jugos se derramaban por mi
vientre y entre sus muslos, su cuerpo brillaba con el sudor, me levante y le
besaba los pechos, le mord�a los pezones, lami�ndolos, hasta que senti que un
alud de leche iba a brotar de mis huevos.
- ya amor,... me vengo....la tengo en la punta....me
estoy.....viniendooooooooo......te la doyyyyyyyy........y me vine en un chorro
inmenso de leche, como nunca, un verdadero placer.
Ambos quedamos rendidos, nos dormimos un rato, luego nos
vestimos y regresamos al rancho.
Ese fue el principio de una serie de experiencias en
familia, porque no termino aqu�.