CAPITULO 1

LA OPORTUNIDAD

La verdad es que he tenido mucha suerte con el tema del sexo.
He tenido muchas experiencias y con el paso de los a�os he podido comprobar que
el sexo es para disfrutarlo sin prejuicios y de la mejor manera posible. He
decidido explicar, no sin antes ordenar, todas aquellas experiencias que he
vivido y que aun hoy sigo teniendo. Las he intentado ordenar de la mas
importante a la que menos, pero es bastante dif�cil, as� pues empezar� con la
que supuso un giro importante en mi vida y que a�n hoy es duradera.

Me llamo Carlos y tengo 32 a�os, no soy muy alto, 1�70, tengo
un cierto atractivo, moreno, cuerpo atl�tico, cari�oso y muy vicioso en cuanto a
sexo se refiere. Tengo un pene normal, 17 cm. y un poquito grueso, 14 cm. de
per�metro.

Soy una persona muy viciosa en la cama, me gusta hacer
disfrutar a la mujer tanto o m�s que disfrutar yo, y poseo una mente endiablada
para todo tipo de juegos y fantas�as, pero tengo un obst�culo y ese es mi mujer,
cari�osa, buena esposa pero muy recatada. Solemos hacer el amor unas dos veces
al mes como mucho y no le gustan las fantas�as.

Paso a relataros lo que sucedi� en Agosto del 2003. Mis
padres son de la zona de M�laga y cabe decir que tengo mucha familia por aquella
zona. Todos los veranos, hasta que cumpl� veintiocho a�os, visitaba a mis
familiares de M�laga. Sobretodo iba a casa de mi t�o Antonio y fue all� donde
tuve mis primeras experiencias, pero eso son temas para otros relatos. Ten�a
grandes recuerdos de mi estancia all�. Me acordaba de mis primas, Alicia, Vero,
Natalia y sobretodo de Sandra. Hacia siete a�os que no la ve�a, con excepci�n
del d�a que vinieron a mi boda.

Mi familia llevaba tiempo dici�ndome de ir a ver a mis
parientes, pero encontraba la oposici�n de mi mujer, pues le agobiaban las
aglomeraciones. Yo insist�a en que podr�an ser unas vacaciones sin gastos pues
de seguro que comer y dormir no iba a faltar. Mi abuela, a la que me siento muy
unido, era la que m�s insist�a.

Un d�a de reuni�n familiar sali� el tema de vacaciones. Mi
abuela me propuso que la acompa�ara, y as� no tendr�a que ir sola, pues mis
padres no pod�an acompa�arla pues quer�an hacer unas obras en casa. Despu�s de
volver a insistir, no se como, mi mujer me comento en que si yo quer�a ir no
habr�a ning�n problema, pues ella estar�a con sus padres en la torre y esperar�a
a que volviese para irnos de vacaciones en la segunda quincena con ella y los
ni�os.

En el fondo el hecho de estar dos semanas solo me iba a venir
muy, pero que muy bien.

VIAJE Y ACOGIDA

Marchamos un Jueves por la ma�ana y llegamos a casa de mi t�o
Antonio cerca de las 6 de la tarde. All� estaban mi t�a Herminia, mi t�o Luis y
su mujer y mi prima Sandra. Cuando la vi, un escalofr�o recorri� mi espalda.

Sandra es la menor de las hijas de mi t�o Antonio. 25 a�os,
muy atractiva, pelo media melena, morena de piel, unos ojos verdes preciosos, de
mi misma estatura y un cuerpo que quita el hipo.

Iba vestida con un vestido de tirantes corto por encima de
las rodillas. Unas piernas bien formadas, trabajadas, una cintura peque�a, un
culo redondo y bien formado y unos pechos ��� ay!! Grandes redondos y firmes;
sus medidas que despu�s comprob� eran 115-65-95.

Hab�an pasado cuatro a�os desde la �ltima vez que la vi. Nos
dimos dos besos y me sonri� de una manera muy especial...

Mi t�o dijo que hasta el domingo nos ten�amos que quedar con
ellos y despu�s ya ir�amos de visita familiar.

As� pues entramos en la casa. Era una casa no muy grande,
pues era de veraneo, con tres habitaciones y estudio, un gran jard�n con una
piscina, a la cual acced�as a trav�s de un arco de cipreses, por lo que �sta
quedaba escondida... y en un rinc�n del jard�n una peque�a casa con una
habitaci�n y ducha para los invitados improvisados.

Durante la cena hablamos y recordamos muchas cosas de cuando
yo me quedaba a veranear en aquella casa. Sandra no me hab�a quitado el ojo de
encima en todo el rato. Acabada la cena, llam� a mi mujer para decirle que
hab�amos llegado bien.

Cuando lleg� la hora de ir a dormir, mis t�os dijeron que mi
abuela dormir�a en la habitaci�n de abajo al lado de la suya y mi t�o Luis y su
mujer en la otra. As� que Sandra y yo tendr�amos que dormir en el estudio, uno
en el sof� cama y otro en un plegat�n. Sandra se puso muy contenta pues quer�a
hablar conmigo de muchas cosas.

El hecho de estar a solas con mi prima me pareci� una
excelente idea, pues podr�a regocijar mi vista con ese pedazo de mujer.

A SOLAS CON SANDRA

Nos fuimos a dormir sobre las once pues mi abuela estaba
cansada del viaje. El estudio era muy grande de unos 50 metros cuadrados, bien
decorado, un escritorio con un ordenador y un sof� cama en el rinc�n,
televisi�n, video etc. y un ba�o, que comprob� ten�a un jacuzzi.

Sandra y yo hablamos durante aproximadamente una hora, re�mos
mucho, nos contamos an�cdotas, hablamos de muchas cosas, y sobretodo consegu�
evitar que Sandra me hiciese recordar aquellos veranos que pasamos juntos desde
que ella cumpli� los catorce.

Hacia bastante calor as� que decid� darme una ducha. Cuando
acab�, Sandra estaba en el ordenador conectada a Internet, se levant� y me
coment� que tambi�n se iba a duchar. La observ� mientras se dirig�a al ba�o y su
caminar bamboleando ese culo precioso hizo que empezara a tener una lenta
erecci�n. Sab�a que lo hac�a expresamente. Me puse el pantal�n corto del pijama
y me sent� en el ordenador. Hab�an muchas p�ginas minimizadas en pantalla y
empec� a restaurarlas y, los ojos se me abrieron como platos. P�ginas y p�ginas
porno se iban abriendo ante m�, lo hab�a hecho deliberadamente.

O�a el agua de la ducha y supuse que habr�a para rato, miraba
con detenimiento y ante mi desfilaron galer�as de fotos de todo tipo, sexo oral,
vaginal, anal, facial, grupos, en fin de todo, me empec� a empalmar pensando en
que, si Sandra era la que ve�a todo esto.....

No me di cuenta y note una ligera sonrisa detr�s de m�. Gir�
mi cabeza espantado y all� estaba mi prima con un camis�n semitransparente de
verano de tirantes y corto por encima de la rodilla. Sus pechos se marcaban en
toda su grandeza y dejaba entrever un cuerpo incre�ble. El pelo mojado y suelto
la hac�a estar superatractiva.

Se acerc� y miro por encima de mi cabeza. Tragu� saliva pues
sentado como estaba se apoyo en mi espalda, notando en mi cabeza una turgencia
incre�ble. Sab�a que estaba sonriendo y no supe que decir. Lo que si notaba yo
era una s�per erecci�n que si me levantaba de la silla no iba a saber
disimular...

Se me acerc� y se sent� a mi lado en la misma silla.

C- Lo siento, pero he visto que hab�a p�ginas minimizadas y
he apretado una cualquiera y....

S- Las miro muy a menudo, pues me encanta las p�ginas porno.

Sandra hab�a sido muy directa. Tragu� saliva, cogi� el rat�n
y empez� a navegar. Sus piernas tocaban las m�as, pues el camis�n al sentarse se
hab�a subido un poco y de reojo vi que ten�a unas piernas realmente preciosas.
El contacto con su piel suave me hizo estremecer. Me recostaba para delante para
disimular mi grand�sima erecci�n. Me hac�a da�o pues no la dejaba salir con
total libertad y presionaba con las piernas hacia arriba.

Me ense�� las p�ginas porno que mas le gustaban. Si hubiese
una c�mara filmando hubiesen visto la cara de soberano gilipollas que hac�a.
Fotos de mamadas, folladas anales con grandes vergas, consoladores, etc.

Tan decidida hab�a sido la invitaci�n que dej� de un lado mis
temores y le pregunt� si querr�a que bajase clips de video porno de p�ginas que
conoc�a.

Me dijo que ten�an ADSL a m�xima velocidad y que bajar�an muy
r�pido. Busqu� p�ginas donde se habilitaban clips de videos porno de todo tipo y
empec� a descargarlos.

Empec� a bajar videos porno de todo tipo, anal, facial,
org�as, deepthroat, blowjobs, pollas grandiosas, en fin, de todo. De reojo
miraba a mi prima y la notaba agitada, mientras escrib�a en un papel las p�ginas
que visitaba.

En apenas media hora hab�amos bajado cerca de 300 clips de lo
m�s variado. Mi estado de excitaci�n era extremo. Empezaba a tener un dolor
bastante agudo en mi entrepierna, y no mas doloroso fue cuando hizo como si
estuviese incomoda en la silla que compart�amos y pidiendo permiso se sienta
encima de mi pierna derecha a caballo. Aquello era insoportable. Cinco horas
hac�a que hab�a llegado y estaba en el para�so. Sentir sus piernas y su culo
encima de mi pierna me estaba haciendo perder el sentido. Notaba como el camis�n
se hab�a subido hasta el final de sus piernas y un peque�o tanga blanco asomaba
por debajo. Miraba el perfil que hac�a el camis�n con sus pechos. No sab�a donde
poner la mano derecha y se la coloque en su cintura, no sin cierto temor. Por mi
mente se agolpaban recuerdos de cuando ella ten�a catorce a�os y ya era toda una
mujer. Se gir� y me pregunt� como se hac�a para ver los clips todos seguidos.
Tard� unos segundos en contestar, pues me hab�a quedado en estado de coma
sexual. Me sopl� a la cara y despert� de aquel letargo sin saber que narices me
hab�a preguntado.

Volvi� a sonre�r esta vez m�s sensualmente y me hizo la misma
pregunta. Marque los clips con cierto temblor en mis manos y con Media Player
empezamos a visualizarlos. Se recost� hacia atr�s y se apoy� e mi pecho...
Aquello era insoportable. Los clips duraban entre 30 segundos y un minuto.

S- Me encantan, �y a ti? � me susurro-

C- Tambi�n

S- Sabes escoger �no?

C- Son los que mas me gustan

Notaba cierta humedad en mi pierna. Sab�a que estaba
totalmente humedecida, y no me atrev�a a hacer nada. Su mano izquierda me cogi�
la m�a y me hizo rodearla por la cintura. Yo estaba encendido. Ten�a que
lanzarme. Intent� rebobinar la situaci�n.

C- �Tienes novio?

S- No, s�lo amigos.

C- No me dir�s que no tienes pretendientes.

S- La mayor�a unos pesados pues babean y no intentan
conocerme, a los cinco minutos ya est�n intentando acostarse contigo. Y �como te
va con tu mujer?

C- �Bien �(con cierto aire de desencanto, ustedes ya saben)

S- Noto cierta duda en tu respuesta

C- Bueno, en unos aspectos bien y en otros no tan bien.

S- Los que no son tan bien, no ser�n �de sexo?

C- Pues� la verdad es que, si.

S- �Cuantas veces hac�is el amor?

Aquello era la guerra y ella utilizaba balas de verdad.

C- Una o dos por mes, por lo general una. �contest�-

S-�Dios! Debe ser una tortura �no?

C- Si te digo la verdad, pues s�. (Sab�a perfectamente de mi
apetito sexual)

Se levanto y bajo a la cocina y subi� con unas coca-colas,
ron y cubitos. Nos preparamos unos cubatas, volvi� en la misma posici�n que
antes y continuamos hablando.

Mientras mir�bamos los clips, profundizamos ambos en cosas
sobre el sexo. Despu�s de dos cubatas, la lengua se nos hab�a soltado.

S- As� pues, no habr�s dejado a un lado todas tus fantas�as,
�no?

C- Si pero no puedo ponerla en practica, tu ya sabes.

S- Expl�came alguna cosa que har�as.

Aquello fue el detonante final. La confianza y mi segundo
cubata hicieron el resto. Empec� a explicar.

C- Lo primero es que la mujer est� muy sexy. Despu�s de
contemplarla la empezar�a a besar con ternura y pasi�n, recorrer�a todo su
cuerpo con mi boca y me entretendr�a en sus pechos. Bajar�a por su vientre hasta
su vagina recorri�ndolo todo con mi lengua y abri�ndola bien me la comer�a hasta
que me suplicara que parase. Coger�a unos consoladores de los que me gustan y
entre ellos la llevar�a hasta el cielo por todos los sitios. Despu�s...

Sandra me miraba fijamente de lado, mordi�ndose el labio
inferior, giro la cabeza hacia atr�s y me bes� apasionadamente. Fueron diez
minutos incre�bles, de una fuerte descarga el�ctrica. Nos comimos la lengua sin
apenas movernos ni tocarnos, �incre�ble!

S- No sab�a que supieses tanto.

C- Visito a menudo alg�n sex shop. Alquilo pelis porno y�
�all� hay de todo!,... despu�s las miro en el ordenador de casa, y como no toca
ese d�a pues tengo que acabar yo solito. En casa tengo sin estrenar varios
aparatos.

En el ambiente se respiraba sexo a raudales. No me dio tiempo
a pronunciar nada m�s. Sandra se gir� y se sent� a caballo, mirando hacia m� y
rode�ndome con sus brazos me volvi� a besar. Le empec� a acariciar las piernas,
suavemente, sintiendo esa piel suave y caliente. Notaba como se aferraba a mi y
sus manos acariciaban mi pelo, mi cuello mi espalda, notaba esos pechos grandes,
turgentes y duros contra mi pecho. Mi pene se restregaba contra su vagina y ella
se mov�a lentamente, not�ndolo. Mis manos hab�an cogido su culo y lo masajeaban
suavemente.

Estuvimos unos quince minutos as�. Fue incre�ble. Jam�s me
hab�an puesto en ese estado de excitaci�n.

Me empez� a comer la oreja y me susurr� que fu�semos a su
cama.

Apague el ordenador directamente y cogi�ndola en brazos y sin
dejarnos de besar nos estiramos en su cama. Hab�a empezado la cuenta atr�s.

Se estir� encima de m� y segu�amos bes�ndonos. Se me acerc�
al o�do y me susurr�:

S- Te deseo, desde que has llegado estaba deseando hacer
esto. No he podido olvidar y nunca he encontrado a alguien que me hiciese lo que
t� me hac�as. He esperado este momento desde que dejaste de venir a visitarnos y
ahora est�s aqu�. Quiero que durante todos estos d�as me hagas entrar en tus
fantas�as y hagas conmigo todo lo que har�as a una mujer.

Despu�s empez� a recorrer con su boca todo mi cuerpo y cuando
lleg� a mi pene, este asomaba su cabeza por la entrepierna del pantal�n. Me los
quit� y me dej� desnudo.

Quedo mi pene bambole�ndose, pidiendo a gritos que lo
tranquilizaran.

Sandra lo cogi�.

S- �Uuh! Parece m�s grande de c�mo la recuerdo �susurr�-

Me la acariciaba de arriba abajo. La agarr� fuertemente y me
la empez� a besar lentamente, introduci�ndosela poco a poco en su boca, mientras
con la otra mano me acariciaba los test�culos. Segu�a haci�ndolo lentamente
mientras nos mir�bamos a los ojos. Estaba en el cielo.

Recorri� todo el tronco y abri� la boca y se introdujo mis
test�culos en ella. No sal�a de mi asombro. Mis dos test�culos en su boca y su
lengua jugaba con ellos, los succionaba. Cre� morir. Cuando los saco, dejo caer
en mi pene gran cantidad de saliva y continu� succion�ndolo. Al cabo de cinco
minutos paro y se quit� lentamente el camis�n. Se quito el peque�o tanga que
llevaba y se me acerco gateando y con una sonrisa maliciosa en la boca.

Ten�a unas tetas incre�bles. Se las cog� y no me cab�an en
las manos, ten�a unos pezones grandes y una peque�a aureola los recubr�a. Se los
amase, estruj�, com�, chup� hasta saciarme.

S- Oohh� siii� c�metelos� son para ti�� �dios! Que gusto
oooooohhh �

Mientras me los com�a su mano sub�a y bajaba de mi polla.
Not� como se estremec�a. Tuvo un orgasmo.

La cog� por la cintura y la sub� hasta mi boca. Hasta ahora
no me hab�a fijado en su vagina, estaba depilada pero una mata triangular de
pelos coronaba su pelvis. La hice sentar en mi cara y se lo empec� a comer. Me
sorprendi� su cl�toris, pues no lo recordaba as�. Era bastante grande y eso me
excito sobremanera. Su vagina emanaba un olor incre�ble, estaba completamente
mojada. Me lo com� con avidez y me entreten�a en su cl�toris. Ella se lo abr�a
para que se lo comiese bien y no hacia mas que gemir y gemir. No paraba de
soltar fluidos vaginales. Con mis manos le hab�a cogido su culo y le abr�a las
nalgas. Se sent� en mi pecho y empec� a comer su culito. Se lo lam�a en toda su
extensi�n. Me entreten�a en su cl�toris y bajaba hasta el final de su culo.
Dadas las convulsiones de su cuerpo debi� tener unos dos orgasmos. Se dio la
vuelta y empezamos un 69. Ahora ten�a su culo a mi merced.

Not� como se introduc�a mi pene en su boca hasta el fondo y
all� se quedaba unos segundos y despu�s lo sacaba, haciendo un ruido excitante
(slruupp).

Si segu�a as� me correr�a r�pidamente. Intente controlarme.

Yo segu�a chupando y notaba como su ano tenia peque�as
contracciones. Mientras le chupaba el cl�toris, introduc�a mis dedos en su
vagina, primero uno, dos, tres, era incre�ble como se dilataba, y hasta cuatro.
Ella gem�a guturalmente haciendo un ruido ronco.

Empec� la inspecci�n de su culito y despu�s de mojarlo
concienzudamente empec� a abrirlo con mis dedos, uno, dos y hasta tres. Aquello
era incre�ble. Era tal la excitaci�n que estaba totalmente dilatado.

Ella se mov�a arriba y abajo y yo notaba como no paraba de
correrse.

Par�, se giro y me dijo que la follara de una puta vez. Mi
prima me miraba con ojos de lujuria y voz desencajada. Se sent� encima m�o y se
introdujo de golpe mi pene hasta el fondo.

S- Oohh! Cabr�n!! Que guusssto! Hac�a mucho tiempo que no
follaba. Me vas a mataaar! �Que passsada!

Le abr� el culo con mis manos mientras con la boca le com�a
las tetas. Dos dedos se introdujeron en su ano.

S- Cabr�n! Quiero un consolador en mi culo!, �diooosss!

Se mov�a como una posesa. Notaba como chorreaba fluidos. Me
beso y se puso tensa, sus ojos estaban casi en blanco, emit�a un sonido gutural
mientras me besaba. Le dije que no aguantaba m�s y que me iba correr

Mir�ndome a los ojos cogi� mis manos y se las puso en sus
pechos.

S- Ll�name con tu leche, correte hasta que me salga por los
ojos.

Explot� en un largo orgasmo, hasta cuatro convulsiones,
vaciando toda mi leche dentro de ella. Se estir� encima m�o y me beso
apasionadamente, mientras jade�bamos. Hab�a sido espectacular.

S- �Ha sido incre�ble!- jadeaba-

C- hac�a mucho tiempo que no ten�a un orgasmo como el de
ahora.

S- Esto no ha sido m�s que el principio. Quiero que en
cualquier momento lo hagamos hasta que no podamos m�s.

C- Pues rep�rate porque me pedir�s que pare y no te
escuchar�.

S- Ma�ana tengo preparada una sorpresa, ya lo veras

Me bes� nuevamente como ella sab�a hacer. Mire el reloj. Era
la 1,30 de la madrugada. Me dijo que ella dormir�a en el plegat�n. Se levanto se
puso el camis�n y se acost�.

Me puse el short y cerr� los ojos hasta que� amaneci�.

AL D�A SIGUIENTE

Despert� sobre las ocho y mir� a mi derecha. All� estirada
boca abajo y de lado estaba Sandra durmiendo pl�cidamente. Ten�a la pierna
ligeramente subida y su camis�n se arremolinaba en su cintura. Un tirante no
estaba en su sitio y uno de sus pechos casi se sale del camis�n. Sus piernas y
su culo acabaron por hacer que tuviese mi primera erecci�n del d�a.

Me levante y fui a ducharme. Sal� con la toalla en la
cintura, abr� la puerta y baj� las escaleras. Mi abuela me dio los buenos d�as.
Mis t�os hab�an marchado a comprar el desayuno. Ten�a que aprovechar el tiempo.
Sub� de nuevo y cerr� la puerta.

Me acerqu� a Sandra y me arrodill� a su lado empec� a
acariciar sus piernas muy suavemente. Sub� lentamente hasta que llegu� a su
culo. Lo empec� a acariciar y amasar con suavidad. Se movi� un poco y la mir�.
Ten�a una ligera sonrisa en la cara. Con las dos manos segu� concentrado en su
culo, mientras con la lengua recorr�a sus piernas. Sin abrir los ojos, Sandra
incorpor� su culo y empec� a pasarle la lengua, primero por su ingle, despu�s
por su vagina y finalmente por su culito. Est� volv�a a tener contracciones, y
Sandra, sin abrir los ojos, empezaba a gemir. Con suavidad lubriqu� su ano con
mi saliva y sus flujos e introduje un par de dedos. Empec� a un lento mete y
saca, mientras con mi otra mano le puse dos dedos en su vagina y con el dedo
gordo le acariciaba su cl�toris.

Al cabo de diez minutos de gemir not� una gran contracci�n en
sus dos agujeros y con un sonido gutural grave se corri� abundantemente.

Abri� los ojos lentamente y se incorpor�. Me rodeo con sus
brazos y me beso.

S- �Buenos d�as, cari�o! � Has dormido bien?

C- Divinamente.

S- Siempre hab�a so�ado con despertar de esta manera. Ha sido
incre�ble.-dijo sonriendo-

C- Pues no ser� la �ltima- respond�-

Sandra tiro de mi toalla y all� qued� mi pene totalmente
tieso apunt�ndola. Me miro a los ojos y supo lo que ten�a que hacer.

S- Que le pasa a mi cari�ito-dijo con voz sensual-

C- Lo que le pasa cada ma�ana.

Me puse de pie y ella se sent�. Me lo empez� a chupar y de
que manera. Volvi� a ponerse mis test�culos en su boca y me los succion�. Con la
mano sub�a y bajaba mi pene. Estaba en la gloria. Volvi� a salivar mi pene y
empez� una soberana mamada. Se la introduc�a hasta el cuello y despu�s se la
sacaba, as� durante casi cinco minutos. Ya no pod�a m�s.

C- Ohh! Como la chupas, �que gustazo!-

Noto que mi pene se hinchaba e iba a estallar. Aceler� el
ritmo. No dejaba de mirarme, cuando me empec� a correr en su boca. Tragaba y
tragaba mi leche caliente. Creo que fueron quince segundos intensos y de un
placer indescriptible, pues no la saco hasta que no quedo ni una sola gota en
mis test�culos.

Sandra se levant� y me beso. Me dio su lengua y notaba el
gusto de mi propio semen.

S- Este ser� mi primer desayuno cada ma�ana �no te olvides-
Quiero que me despiertes cada d�a diferente- �de acuerdo?

C- As� lo har�

Se quit� el camis�n y se fue desnuda a la ducha. Me la qued�
mirando. �Dios, que vacaciones me esperaban!

Bajamos a desayunar a las nueve y media. A las diez mis t�os
y mi abuela dijeron que estar�an todo el d�a en al capital a ver a su familia.
Mi abuela me dijo que por la noche ya tendr�a tiempo de visitas, as� que se
marcharon y nos dejaron solos a Sandra y a m�.

Se acerc� se sent� encima y me dijo que vendr�an un par de
amigas suyas a pasar el fin de semana, ya que mi t�o Luis y su mujer ya no
vendr�an.

S-�Cari�o me voy a la ciudad, tardare un par de horas ya que
despu�s tengo que pasar a buscar a Vanesa y a Carmen! Hoy hace mucho calor as�
que vete refrescando en la piscina.-sonri� p�caramente-

Me beso fuertemente y despu�s se march�.

Eran las diez y ten�a un par de horas hasta que no viniese.

Dada la extensi�n de este relato, lo ir� entregando por
cap�tulos, dado que los quince d�as que pas� fueron de lo m�s lujurioso y hoy
estoy intentando buscar una excusa para al menos pasar este a�o m�nimo una
semana en casa de mis t�os, pues as� es como quede con Sandra.

Si quer�is hacerme alguna objeci�n, siempre constructiva, o
comentarme algo al respecto, as� como si quer�is comunicaros conmigo, os dejo de
momento mi e-mail, Despu�s ya pasar� mi cuenta messenger para hablar.

Un saludo,

TERRASSA