La verdad es que estaba muy ilusionada con la fiesta. Pensaba
que era una buena oportunidad para integrar de forma definitiva a Juan en el
grupo de mis amistades de verano. Casi sin darnos cuenta hab�a transcurrido el
mes de agosto, qued�ndonos tan solo un par de d�as para regresar a Madrid, y en
todo ese tiempo apenas hab�a estado con ellos, salvo las veces que hab�amos ido
a la playa de La Barrosa, que fueron pocas.
Muchas cosas hab�an cambiado en m� desde que conoc� a Juan.
De ser una joven t�mida sexualmente hablando, y tradicional, he pasado a ser una
novia morbosa, apasionada y dispuesta a todo tipo de juegos sexuales. Tengo que
confesaros que disfruto enormemente cuando Juan me exhibe en la playa llevando
un simple y atrevido tanguita, o cuando me hace desnudar en la escalera de su
casa, o cuando me ha invitado a disfrutar de alguna polla distinta a la suya, y
por supuesto, entreg�ndome a esos intensos tr�os entre Juan, Javi y yo, tr�os en
los que he sido doblemente penetrada, me han follado sin parar por todas partes,
y se han corrido un sin fin de veces en mi boca.
Con todo todav�a me quedaban muchos pasos que dar hasta
convertirme en la zorra que Juan requer�a de m�. Pero antes continuaremos
narrando los inicios de nuestro noviazgo.
La fiesta empezar�a a eso de las 22,00 horas en el chalet de
los padres de Miguel. El chalet era grande, realmente precioso, contaba con una
piscina y un amplio jard�n donde se celebrar�a la fiesta de despedida del
verano. Los padres de Miguel nos hab�an dejado la casa para la fiesta (ser�amos
sobre 30) y ellos se ir�an a cenar con los m�os. La hora era perfecta, pues ya
no har�a el calor que hab�amos padecido durante todo el d�a. A las seis de la
tarde aparec� en el apartamento de Juan. Tanto mi novio como Javi estaban
tumbados en el sof�, en ba�ador, y bastante adormecidos, pero al verme enseguida
se animaron.
Juan, levant�ndose del sof� se acerc� a m� y me dio un beso
en la boca:
�C�mo est� mi ni�a?, ..... Puso su mano sobre mi culo y
empez� a sob�rmelo por encima del pantal�n, a la vista de Javi, ...... uff,
tengo ganas de ti, sabes? ..... Mira quien est� aqu�, mira al pajarito.......
Al bajar la vista hacia el ba�ador vi que Juan ya se la hab�a
sacado. �A qu� esperas, Marta?. Venga, dale unas buenas chupaditas. Obediente
introduje su verga en mi boca y empec� a despertarla lentamente. La iba
engullendo despacio, al tiempo que mi mano la acariciaba en toda su longitud. La
mantuve frente a mi boca, y con la lengua empec� a lamer la punta de la polla
mientras le miraba a los ojos. Eso le pone a cien, que le mire mientras se la
chupo y que ponga cara de zorra. Cuando not� que se iba a correr le ped� que me
la diera toda en la boca, que su novia se la iba a tragar. Casi al t�rmino de la
�ltima de estas palabras sent� su l�quido caliente discurrir por mi garganta. La
relam� complacida y excitada.
Cada d�a lo haces mejor. Te est�s convirtiendo en una
experta mamadora de pollas. Javi, �Quieres que Marta te la chupe a ti
tambi�n?.
Me volv� dispuesta a complacerle pero Javi contest� que
prefer�a reservarse para despu�s y se fue a la ducha.
Yo hab�a tra�do un par de vestidos de fiesta para que Juan me
dijera cual me quedaba mejor. No duchamos los tres juntos y al terminar me
dispuse a prob�rmelos mientras ellos, tumbados en la cama, observaban como me
quedaban. Me puse un tanga blanco, de encaje, muy bonito. No era de los de
cord�n por la parte del culo, sino de los que tienen m�s cuerpo y resaltan m�s
las nalgas.
Uno de los vestidos era negro, de una pieza, con generoso
escote y con abertura en la pierna. Me quedaba muy bien y estaba elegante. Les
gust�. El otro era de color verde, muy ajustado al cuerpo pues la tela era tipo
el�stica, semitransparente, y corto, ya que apenas terminaba un palmo debajo de
mi trasero. La verdad es que me encontraba algo vulgar con �l, parec�a m�s
propio de la t�pica buscona y no lo ve�a apropiado para la fiesta en el chalet
de mis amigos. Adem�s, si me pon�a sujetador me transparentaba y hac�a feo, y si
no lo llevaba ir�a mostrando los pechos. Lo mismo ocurr�a con la parte de abajo,
que a contraluz pr�cticamente se ve�a al completo el tanga, como si no estuviera
vestida.
La decisi�n era f�cil, llevar�a el vestido negro. �Qu�
ingenua!. En cuanto hice adem�n de quitarme el verde, Juan exclam�:
Pero, �Qu� haces?. �Est�s loca? No pretender�s ir a la
fiesta con ese vestido negro tan serio?. Javi, verdad que con el verde Marta
causar� sensaci�n?.
Hombre, y tanto que causar� sensaci�n. Se me ve todo.
Venga, d�jate de bromas, contest� a Juan.
Marta, no es broma, sabes que me gusta exhibirte, que los
dem�s puedan ver ese pedazo de cuerpo que tienes.
Esta vez no, Juan, son mis amigos, es una fiesta en la que
hay muchos conocidos de mis padres y no quiero dar la nota y ser el centro de
atenci�n de todos los t�os, que seguro no perd�is detalle.
Marta, si no llevas el verde, nosotros no vamos a la
fiesta.
Pero Juan, ?est�s seguro de querer verme as�?. Pero si
estoy rid�cula, parezco una pendona ......
Y eso es lo que quiero que parezcas .........
Est� bien. Llevar� el verde. Veamos c�mo lo podemos
arreglar.
Saqu� un forro de la bolsa que hab�a tra�do con la ropa y me
lo puse para as� evitar las transparencias y que se viera el tanga. Pero Juan me
lo hizo quitar, dici�ndome que precisamente lo que le gustaba del vestido era
que mostraba mi ropa interior. Sujetador tampoco me permiti� ponerme, por lo que
mis pechos quedaron totalmente expuestos bajo la gasa del vestido. Escogi� unos
zapatos de tac�n de aguja, decidimos que llevar�a mi melena suelta y finalmente
Juan coment� que estaba espl�ndida. Mirando al espejo yo solo ve�a en m� a una
buscona con tacones, con las tetas a la vista, y con un vestido que le marcaba
el culo y mostraba su ropa interior, el tanga blanco de encaje, a cualquiera que
me mirara. Estaba muerta de verg�enza.
Javi coment�: Joder Marta, pareces una puta de verdad. En
serio que te atreves a salir as� por la calle?
Empezaba a arrepentirme, pero Juan, agarr�ndome de la cintura
y d�ndome un cachete en el culo dijo:
Venga, vamos a dar un paseo los tres por el Puerto de Santa
Mar�a y hacemos tiempo hasta la hora de la fiesta, que son las ocho y no
empieza hasta las diez.
La vuelta por el Puerto fue tremendamente morbosa. Caminaba
por el paseo que va paralelo a la r�a entre Juan y Javi, quienes no perd�an
ocasi�n en tocarme el culo cada pocos pasos. Cuando nos par�bamos en alguno de
los puestos de venta de bisuter�a que abundan por all� notaba como alguno de
ellos aprovechaba para acariciarme mejor. Cada vez estaba m�s encendida, ten�a
el sexo empapado y cada vez menos control de la situaci�n.
Juan se par� de repente, en medio del paseo, que ya empezaba
a estar abarrotado. Me acerc� a �l me abraz� y comenzamos a darnos un morreo en
plena calle, mientras me pasaba la mano por la espalda hasta mi trasero, a la
vista de todos. Luego me dijo:
Vamos, Marta, s� tambi�n cari�osa con Javi, y me empuj�
hacia �l.
No pod�a creer lo que estaba haciendo. La gente hab�a podido
contemplarme morreando con Juan, y ahora me estaba dando el lote con Javi, otra
vez delante de todo el mundo. Mientras Javi me besaba not� como me intentaba
subir el vestido por atr�s, como queriendo mostrar a la concurrencia mi culo
cubierto por el peque�o tanga blanco. Lo hizo, ten�a el culo expuesto, desnudo,
al aire libre, tapado solo con mi tanga. Me corr� en ese momento, tuve uno de
los mejores orgasmos de mi vida, apoyada contra Javi, cerca de mi novio, con el
vestido subido descubriendo mi culo y en medio de la calle.
No me atrev�a a mirar a ning�n sitio. Mis pulsaciones fueron
bajando y m�s tranquila suger�:
Por favor chicos, v�monos a tomar algo.
Nos sentamos en una cafeter�a de los jardines del paseo. El
vestido se sub�a m�s de lo adecuado y a Juan le encantaba la situaci�n. Me
orden� que no cruzara las piernas, ya que as� los que pasaran por delante de m�
podr�an verme las braguitas. Os dir� que hubo quien pas� m�s de tres o cuatro
veces, con escaso disimulo, frente a nosotros. Yo me sent�a cada vez m�s salida,
y cuando un hombre que iba con su mujer se par� a encender un cigarrillo,
disimulando, pues lo cierto es que estaba mirando hacia mi co�o, abr� mis
piernas y le ofrec� una panor�mica completa de mis bragas. Ya hab�a perdido el
control y estaba gozando con mi exhibici�n p�blica. Me mostr� al camarero, me
agach� en un par de ocasiones a recoger algo del suelo para mostrar mi culo, los
pezones pod�an verse totalmente erectos por la transparencia del vestido, y dej�
incluso que tanto la mano de Juan como la Javi me acariciaran el sexo ante la
mirada de algunos de los desconocidos que pasaban a nuestro alrededor.
A eso de las nueve y media cogimos el coche y pusimos rumbo
hacia la casa de ...................., donde se celebraba la fiesta. Antes de
llegar el cabr�n de Juan me acarici� un rato para excitarme y conseguir que de
nuevo mis pezones estuvieran totalmente en punta, y as� resaltar mis tetas bajo
el vestido. Al llegar al chalet todav�a estaban mis padres, y los de
................ Los salud� y observ� c�mo me miraban asombrados por mi
vestimenta, pero no me dijeron nada. Mi hermano, cuando se acerc� a darme un
beso, me susurr�:
Marta, est�s loca, menuda pinta traes, pareces una puta.
No le contest� y segu� saludando al resto de la pandilla como
si no ocurriera nada especial. Todos miraban con lujuria mi cuerpo, desnudo
pr�cticamente bajo el vestido. Estaba muy nerviosa y pronto me serv� una copa y
me la beb� r�pidamente. Eso me ayudar�a a pasar el mal trago.
Juan se acerc� y me dijo que iba a hablar con alguno de los
invitados y que yo deb�a exhibir mi cuerpo al personal para que todos lo
pudieran admirar. Me record� que todos hab�a podido ver el tanga que llevaba
bajo el vestido, y que hab�a o�do comentarios sobre m� del tipo de menuda pinta
de furcia que lleva hoy Marta, de lo buena que estaba as� vestida, de c�mo se me
ve�a todo el culo, de que menudo tanguita me hab�a puesto para la fiesta, etc.
Ahora les vas a dar gusto, verdad cielo?
Sabes cari�o que har� todo lo que me pidas.
�Qu�tate las bragas y d�melas!
�C�mo? �Qu� has dicho? .... Si hago eso van a saber que me
las he sacado a prop�sito, pues todos me han visto con el tanga. �Qu� van a
pensar de m�?
Venga, Marta, dame las bragas y no discutas, demuestra que
me quieres y que har�s lo que te ordene.
Le obedec�. Ahora ya pod�an verme el co�o a trav�s del
vestido. Estaba empapada, m�s excitada que nunca, dispuesta a todo.
Juan, f�llame, de verdad que no aguanto m�s, estoy muy
caliente de ver c�mo me miran , de mostrarme as� en p�blico, en medio de la
fiesta ........
Luego te follar�, ahora date una vuelta por la fiesta,
baila, y ponlos cachondos a todos.
La fiesta poco a poco fue enton�ndose y dej� de llamar la
atenci�n. A la hora y media ya hab�a alguna pareja bes�ndose o d�ndose el lote
en alg�n rinc�n apartado, algunos se ba�aban medio en pelotas en la piscina, y
todos lo est�bamos pasando de miedo.
Javi a eso de las doce de la noche cogi� el micro y se puso a
decir tonter�as. Pidi� que las chicas nos acerc�ramos y a voz en grito pidi� una
voluntaria para un streep-tease. R�pidamente Juan me hizo levantar la mano,
gritando:
Marta, Marta .... hasta que todos coreaban mi nombre. Me sub�
a la tarima dispuesta a darles el espect�culo que quer�an. Bail� insinuante,
contorne�ndome sensualmente y poco a poco empec� a desnudarme, primero baje el
vestido hasta que mis tetas quedaron al aire, me las apretaba con las dos manos,
estruj�ndolas delante de todos mis amigos: luego el vestido, que fui deslizando
hacia abajo hasta quedar completamente desnuda (las bragas sab�is que hac�a
tiempo que no las llevaba). Desnuda por completo continu� bailando, de un lado a
otro de la tarima, tir�ndome en el suelo, abri�ndome de piernas, mostrando el
culo, agach�ndome,....... Subieron al escenario Javi, Pedro, Miguel, dos o tres
chicos m�s, mi hermano Santi y un sinf�n de manos empezaron a acariciarme
delante de todo aquel p�blico que coreaba mi nombre. Entre mi hermano Santi y
Juan me cogieron cada uno de una pierna, me elevaron en el aire y me mostraron
abierta de piernas. Javi con el micro ped�a voluntarios para comerme el co�o,
para tocarme. Se suced�an las lenguas, las caricias sobre mi sexo, y yo no
dejaba de correrme una vez tras otra, fuera de control.
Escap� como pude y me tir� a la piscina. Juan tambi�n se
tir� al agua y me hizo el amor all� mismo, a la vista de todos.
Mientras Juan me follaba al borde la piscina aparecieron mi
hermano Santi y Miguel, ya bastante bebidos. Juan me la sac� del co�o, me hizo
dar la vuelta y me la meti� otra vez desde atr�s, situ�ndome cara a cara con mi
hermano y con Miguel. Juan me agarr� de la melena y me dijo:
Ahora zorra, quiero ver como le chupas la polla a Miguel
mientras tu hermano Santi mira lo puta que eres. Le baj� el ba�ador a Miguel y
mientras Juan me daba fuerte en el co�o, yo mamaba la polla tiesa y dura de
Miguel hasta que se derram� en mi boca. Luego lo hizo Juan dentro de m�.
Me vest� y nos marchamos, cansados, excitados de todo lo que
hab�a pasado, por el morbo de haber follado y mamado la polla de Miguel delante
de mi hermano. Al llegar al apartamento todav�a follamos una vez m�s esta vez
los tres, Javi, Juan y yo.