Mi relaci�n con este hombre fue maravillosa. �l era un
cuarent�n muy moreno de piel de ojos negros y buen tono muscular aunque con algo
de tripa. Yo tenia 16 a�os por aquel entonces y solo me vest�a de chica para �l.
Y practic�bamos todo tipo de fantas�as que �l me propon�a.

Un d�a de tantos en que �l estaba solo en su casa me dijo que
me pasara a verle, como era costumbre entre nosotros, pero esa vez ten�a una
sorpresa para m�. Cuando llegue a su casa �l estaba esper�ndome impaciente se le
notaba m�s excitado que de costumbre. Me dijo que hoy tenia una ropita especial
que ponerme. Directamente pase a la habitaci�n donde yo me sol�a cambiar para
estar con �l y me encontr� un uniforme de colegiala. Me puse la blusita blanca
con un sost�n debajo y como por aquel entonces no tenia pecho lo rellene un
poco. Despu�s un tanguita y la falda tableteada que me quedaban algo corta y
calcetines. Cuando termine de vestirme me mire al espejo y la verdad estaba
bastante bien me excitaba vestirme as� porque siempre hab�a envidiado a las
ni�as por llevar esta ropita al colegio.

Cuando sal� �l estaba esper�ndome y me miro con ojos de
deseo.

Se acerco a m� y me rodeo con sus brazos morenos y fuertes
que a m� me volv�an loca y me beso los labios con mucho ardor. Sent� su lengua
en mi boca y eso me puso a cien. Despu�s se quito la camisa y solo quedo vestido
con un pantal�n corto, debajo del pantal�n corto no llevaba nada y note como su
pene crec�a contra mi vientre.

Seguidamente el se sent� en una silla y saco su poya del
pantal�n con una clara indicaci�n de que quer�a que yo pasase a la acci�n. Me
acerque y comenc� a chupar esa barrita que tanto placer me proporcionaba, me
encantaba el sabor saladillo del liquido preseminal y como �l me agarraba con
fuerza la cabeza para que se lo hiciera como �l quer�a. Cuando est�bamos as� de
pronto noto otras manos en mi culo, en principio me asust� pero despu�s me di
cuenta de que esta era la sorpresa que me tenia reservada, alguna vez me hab�a
comentado que le gustar�a compartirme con otro hombre y hoy hab�a llegado el
d�a. Mientras yo segu�a chupando sent�a como esas manos manoseaban mi culo y
como levantaban la falda y como retiraban el hilo del tanga. Finalmente sent�
como me acariciaba mi agujerito suavemente con los dedos h�medos, supongo que de
saliva. Despu�s note como una lengua se deslizaba por mi ano y me puso en las
nubes. Me hizo la mejor comida de culo que jam�s me han hecho.

En ese momento yo ya estaba totalmente entregada y muy
caliente.. Al rato el desconocido paso a sentarse en la silla y entonces vi que
se trataba de un hombre mayor (sobre 60 a�os) muy velludo y gordo, estaba
totalmente desnudo y entonces vi que pose�a un enorme pene grueso y muy potente.

Cuando dijo eso yo no lo pens� dos veces y sent�ndome a
horcajadas puse mi culo sobre esa enorme verga. �l me paro y me unt� el culito
con abundante vaselina.

Comenc� a introducirme ese pene. Sent�a como mi culo no pod�a
contener aquello. Sent�a dolor pero tambi�n un placer indescriptible mientras �l
me agarrba de las caderas y me besaba los labios y me dec�a.

-Venga as� cari�o eres una ni�a buena

Mientras mi compa�ero, que se encontraba de pie al lado
nuestro, me dio su pene para que se lo fuera chupando. As� que me encontraba
siendo ensartada, mamando y disfrutando como una perra. Seguidamente el hombre
de pene gigante me tumb� de espaldas en el suelo y el se tumbo encima de m�
poniendo mis piernas en su cuello con lo que tenia mi culo a su merced y me lo
meti� sin contemplaciones con golpes duros y secos. Yo sent�a sus pesados huevos
chocar contra m� y el su olor de macho en mi nariz mientras su vello rozaba mi
cuerpo. En ese momento me corr� de placer despu�s el hombre mayor pas� a
follarme la boquita y mi compa�ero el culo.Hasta que lleg� el momento en que los
dos ten�an ganas de correrse se pusieron de pie y se masturbaron hasta correrse
encima de mi cara los dos a la vez. Me dieron una buena ducha de leche de la que
pude tragar bastante.