En la casa hay una perrita como de 4 meses muy juguetona e
inquieta y cierto d�a que estaba sola, iba tomar un ba�o por lo que ya estaba
desnuda, y cuando iba a entrar en la ducha me dieron ganas de evacuar mis heces,
es decir de hacer pupu, como decimos aqu�.

Al terminar la perrita jugaba con los dedos de mis pies y me
hacia cosquillas. Me levante para limpiarme y cuando tome el papel se me cayo de
las manos y tuve que agacharme para recogerlo. Como no lo alcanzaba me puse en
cuatro y lo tome. Cual seria mi sorpresa que comenc� a sentir una leng�ita entre
mis nalgas. Lam�a con rapidez y desesperaci�n mientras me limpiaba.

El asombro fue tal que no entend�a que pasaba. Iba a
levantarme y reclamarle por lo que estaba haciendo pero la sensaci�n era
agradable. Un cosquillo rico entre mis nalgas comenz� a encenderme mientras ella
segu�a chupando. No pude moverme.

Siempre me hab�a preguntado porque los perros juegan tanto
con el papel y hasta se me meten en los tarros de basura y hacen tanto desastre
pero ahora no pod�a pensar solo sentir.

Abr� mis piernas y baje mi colita para que le fuera m�s f�cil
seguir lami�ndome. Ella continuo su labor con fruici�n hasta dejarme limpia, y
luego empez� a darme vueltas como buscando que m�s lamer. Estaba extasiada con
su forma de lamerme. No es la mejor lamida en mi culo que me han dado pero ella
tenia una forma distinta de hacerlo. Muy rico.

Fui a la nevera y saque un frasco de mermelada y me lo unte
entre mis nalgas y volv� a colocarme en 4 para ella. Se volvi� loca entre mis
nalgas. Chupo y lami� como si nunca hubiese hecho otra cosa. Estaba mojada as�
que unte mermelada entre mis piernas, mi culo y vagina y senos y me entregue a
ella. Com�a entre mis piernas toda la mermelada con mis jugos dej�ndome
empegostada y lamida toda con su saliva. Era delicioso, luego se monto sobre m�
y lami� mis senos, mi cara, todo mi cuerpo.

Me sent�a una perra mas revolc�ndome en el suelo con ella
mientras segu�a lami�ndome por todas partes. Volv� a untar mi culo y se lo
entregue a ella mientras esta vez me frotaba mi cl�toris. El orgasmo vino lento
pero exquisito, y me quede ah� echada disfrut�ndolo mientras ella segu�a
estimulando mi cuerpo.

Fue muy rico y aunque no lo hemos vuelto a hacer siempre que
la veo recuerdo su lengua dentro de m�. Hubiese deseado que fuera un perro y
seguramente me dejo coger por ese animal, mas es extra�o que ahora tengo una
relaci�n lesbiana con una perrita no?

Bueno esto fue lo que paso y la verdad se lo recomiendo a
quien quiera probar.

Lynn.