Ahora les voy a contar lo que me paso hace 5 meses una t�a
que vive en tabasco me iba a visitar por dos semanas por su puesto cuando llego
ella a mi departamento, por mero me caigo por lo preciosa que estaba yo pens�
que estaba gorda pues tenia 14 a�os al ver tremenda mujer un poco mas de lo que
hab�a pensado fortuna m�a

Estuvimos hablando hasta cerca de medianoche momento en el
cual le dije que aunque al d�a siguiente era s�bado, ten�a que ir a la escuela y
por lo tanto madrugar. La ayud� a instalarse en su habitaci�n

He de decir que esa misma noche, le dediqu� una paja en el
ba�o

Ya que a�n ella era capaz de excitarme, y creo que ella se
hab�a dado cuenta de esto aunque como ya dije antes siempre me trato muy bien.

Ya en el a ma�ana estaba cepill�ndome los dientes para hacer
tiempo a que se bajase mi habitual erecci�n matutina cuando por el rabillo del
ojo la veo frente a la puerta del ba�o que ten�a abierta de par en par. Al verla
que me mira intento cubrirme a lo que ella me dice:

- D�jalo que ya m�s no te puedo ver

- Pues tienes raz�n - contesto yo

- Por qu� te levantas tan pronto? - pregunto

- Pues porque te he o�do y te voy a preparar el desayuno, es
lo menos que puedo hacer - dice

- No te molestes, que yo no desayuno nunca, vu�lvete a la
cama

- Vale pero primero d�jame pasar que me estoy meando - dice
ella

Me hago a un lado y se dirige a la taza del water, sin ning�n
tipo de pudor se levanta su camis�n dejando al descubierto toda su mata de
pelos, se sienta y mea. Ella no apartaba la vista de mi rabo duro y tieso y yo
tampoco se su chocho mientras meaba y se secaba. Al terminar le vuelvo a decir
que se acueste, que todav�a es muy temprano y que yo no tengo por costumbre
desayunar. Accede y me dirijo a mi habitaci�n a vestirme excitad�simo por el
incidente ocurrido; a duras penas consigo abrocharme el pantal�n y me dirijo a
la puerta de la calle, entonces ella sale de nuevo de su habitaci�n con su
camis�n semitransparente, se le adivinaban perfectamente sus hermosas tetas y su
mata de vello p�bico, y me dice:

- Al menos dame un abrazo y un beso de despedida

- Claro que si - digo yo

La abrazo y le doy un beso en la mejilla, bastante cerca de
sus labios, que al verlos entreabiertos no pude resistirme a besarlos. Ella
lejos de apartarse o rechazarme, humedeci� los m�os con su lengua. Nos dimos un
buen morreo y mi polla comenz� a ponerse dura de nuevo, ella lo not� y
apart�ndome yo le dije que deb�a irme o llegar�a tarde ala escuela No pude
apart�rmela de la cabeza durante toda la ma�ana, de la cabeza y de mi rabo que
estuvo casi toda la ma�ana duro.

Cuando regreso a casa ella me estaba esperando con la comida
reci�n hecha, nos besamos de nuevo, esta vez intentando poner yo algo menos de
pasi�n, y nos ponemos a comer. Estuvimos hablando de cosas triviales, intentando
no tocar el tema de nuestro encuentro matutino y una vez terminado de tomar caf�
y recoger yo le digo que iba a darme una ducha para relajarme un poco despu�s de
la jornada del s�bado

Me meto en el cuarto de ba�o y no se si inconscientemente o
por algo de morbo, dejo la puerta entreabierta. No hab�a acabado de empezar a
remojarme con el agua cuando ella llega al ba�o, descorre las cortinas y
desabroch�ndose una bata que llevaba puesta se queda completamente en pelotas
delante de mi, mir�ndome con las mismas miradas que me hab�a dedicado por la
ma�ana.

- Vamos, d�jame entrar que yo tambi�n me quiero dar una
ducha, dice ella

Me aparto un poco y la ayudo a pasar a la ba�era. Yo la
miraba de arriba abajo, ten�a a mi alcance sus preciosas tetas, su co�o, su
maravilloso culo; me sent�a en la gloria.

- Vaya, esto no est� tan hermoso como esta ma�ana, dice
dirigiendo su vista a mi polla que estaba empezando a crecer, -te acuerdas
cuando eras peque�o que alguna vez te ba�aba yo, te la frotaba as� con la
esponjita, aunque parece que te vas animando

Empiezo a tocarla, abrazarla, besarla; ella comienza a hacer
lo propio conmigo y a los pocos instantes, mi polla gracias a sus magreos est�
ya m�s dura que una piedra.

- Me reconforta ver que a mi edad todav�a soy capaz de
excitar a un hombre, dice - con tu t�o llegu� a pensar que le daba asco, l�stima
o que se yo.

- T�a isa est�s buen�sima, desde que llegaste so�� con este
momento, conteste yo

Empezamos a enjabonarnos el uno al otro dirigiendo nuestras
manos a las partes bajas del otro. Ella, la verdad que un poco torpemente me
cog�a la polla y me la sobaba, mientras yo le ten�a cogidas las tetas con una
mano, mientras con la otra le sobaba el cl�toris y le met�a un dedo en su
vagina. Sin poder aguantarme ya m�s le doy la vuelta, poni�ndola de espaldas a
m�, metiendo mi polla entre sus abundantes cachetes culeros, le digo que ponga
una pierna en el borde de la ba�era y la inclino un poco hacia delante; me
separo un poco y empiezo a tantear con mi rabo la entrada de su co�o,
meti�ndosela ansiosamente en cuanto doy con su agujero. Empezamos a follar y
mientras con una mano que le ten�a pasada por delante la sujetaba un poco y
pellizcaba sus pezones, con la otra la pas� por delante de sus muslos y le
sobaba el cl�toris. Al poco rato, ella empieza a gritar como una loca,
dici�ndome que le gustaba, que no parase. En esto est�bamos cuando suelta un
grito tremendo y se queda quieta, como asustada. Le temblaban las piernas y la
sujet� un poco m�s fuerte para evitar resbalarnos, cuando en la mano que ten�a
sobre su cl�toris y por mi polla y mis huevos empiezo a notar un l�quido
caliente. La muy guarra se estaba meando

- No se qu� me pasa, dice ella

- Yo s�, te est�s meando, contesto

- Ya lo se, un momento antes de empezar a mearme he sentido
unos escalofr�os que no hab�a sentido nunca, y creo que de tan gozoso que era no
he podido aguantarme y me he meado. Lo siento, dice

- Te has corrido, has tenido un orgasmo, no me digas que
hasta ahora no hab�as sentido nunca algo as�, digo yo

- Te lo juro que no, ya te coment� que tu t�o lo �nico que
hac�a era abrirme de piernas, ponerse encima de m� y correrse al momento. Nunca
lo hab�a hecho de pies, y mucho menos �l hab�a sido capaz de hacerme llegar al
estado que me has hecho llegar t�, me dice ella

- Pues te prometo que si quieres vas a recuperar el tiempo
perdido y sentir todo lo que no has sentido en treinta a�os, le digo

- Por favor, si todo es tan sensacional como esto, encantada,
replica

Saco mi rabo de su chorreante co�o y nos aclaramos
r�pidamente, nos secamos el uno al otro y nos dirigimos a la cama. Como yo
todav�a no me hab�a corrido, mi polla segu�a tan dura como al principio, de
camino a la cama me sit�o detr�s de ella y le encajo mi rabo entre sus nalgas.
Sentir mi polla entre los cachetes de su hermoso culo, ese culo que siempre me
hab�a excitado y que ahora ten�a solo para m� me satisfac�a enormemente. Una vez
en la cama la tumbo y empiezo a comerme sus deliciosas tetas, para la edad que
ten�a ella, conservaba sus tetas en bastante buen estado. Le com� sus pezones,
grandes y oscuros, sus aureolas, tambi�n grandes y redondas estaban en carne de
gallina del chupeteo que les estaba dedicando. Comienzo a bajar hacia su
vientre, recorriendo su ombligo y llegando a su velludo pubis, le separo las
piernas y busco la entrada de su cueva. Sigo meti�ndole la lengua en su vagina,
chup�ndole y d�ndole mordisquitos a su cl�toris, cuando de repente comienza a
gritar otra vez.

- Otra vez, otra vez, sigue por favor, sigue as�, grita ella

Yo sin apartar mi lengua de su entrada, noto como se
estremece de nuevo y su chocho empieza a destilar a�n m�s jugos de los que ya
ten�a. Ella pega otro chillido se queda quieta y noto como se su vagina empieza
a salir un hilillo de orina que termina en mi boca.

- Te has vuelto a correr y te has vuelto a mear, le digo

- S�, lo siento, es algo que no puedo controlar, pero ahora
han sido s�lo unas gotitas, no te las habr�s tragado, dice sonriendo
maliciosamente

- Hombre, despu�s de la meada que te acabas de echar en la
ba�era, no creo que te quedase mucho dentro, replico

- Es que es algo tan alucinante, pero descuida que intentar�
controlarme si me vuelve a suceder, me dice

- Ya lo creo que te va a volver a suceder, le digo yo, no te
preocupes que no me importa ni me da asco, es algo que con la pr�ctica ya no te
pasar�.

A todo esto yo segu�a teniendo mi verga a punto de reventar,
quer�a volver a met�rsela y correrme dentro de ella para que as� probase tambi�n
de mis caldos. Le dije que se incorporase y se pusiese de rodillas de espaldas a
m�. Le agach� su cuerpo y apoy�ndose con las manos le separ� un poco las
piernas. Su maravilloso culo quedaba ante m�, me encantaba verlo as�, desde esa
perspectiva a�n parec�a m�s grande. Acerqu� mi capullo a la entrada de su co�o y
se la clav� de un solo golpe; entraba sin ninguna dificultad, ya que estaba
chorreando por todas partes. Comenc� el mete-saca con fuerza, me encantaba
chocarme con sus nalgas y ver sus gl�teos moverse como dos flanes, sentir que
mis huevos rebosantes de leche golpeaban su cl�toris me pon�a a cien. Le volv� a
pasar una mano por delante de su pierna y abri�ndome camino entre su monte de
Venus llegu� a su cl�toris que volv�a a pellizcar y sobar con la punta de los
dedos. No pod�a esperar m�s, me iba a correr ya

- Me corro, me corro, te voy a llenar de leche calentita, le
dec�a

- Yo creo que tambi�n me voy a correr, dice, sigue as�, no
pares

Un instante antes de descargar el contenido de mis huevos
dentro de ella not� como se estremec�a de nuevo, la t�a se hab�a vuelto a
correr. Sin poder aguantar m�s me vaci� dentro de ella y nos quedamos quietos
por unos instantes.

- Creo que esta vez no se me ha escapado nada de pis, dice mi
t�a

- Ves como con la pr�ctica todo se consigue, contesto

- Es maravilloso, nunca hab�a me hab�a sentido tan bien, dice

- T� si que eres maravillosa, eres una hembra fuera de serie,
no sabes la de veces que he so�ado con que llegara este momento, le digo

- Me alegro de haberte ayudado a alcanzar tu sue�o, dice
isabel, eres estupendo, nunca lo hab�a hecho de una forma que no fuese la
cl�sica, me encantan estas posturas

- Ya tendremos tiempo de probarlas todas, hay muchas formas
de hacerlo, y con imaginaci�n todo se consigue, le digo

- Si, quiero hacerlo de muchas maneras, contesta

Saqu� mi polla todav�a dura de su interior y nos tumbamos a
descansar un rato. Nos bes�bamos, jug�bamos con nuestras lenguas, nos sob�bamos
mutuamente y mi rabo a�n segu�a duro y ella mojada, as� que llegamos a la
conclusi�n de que lo mejor que pod�amos hacer era darle gusto al cuerpo. Le dije
que se sentase sobre mi rabo, que fuese ella la que me follase a m�. Se puso en
cuclillas, cogi� mi verga, la dirigi� a la entrada de su co�o y se sent� sobre
m�. Yo la ayudaba a moverse cogi�ndola de la cintura, sus movimientos eran un
poco torpes debido a que no hab�a practicado nunca esta ni ninguna otra postura
que no fuese la del misionero, sus tetazas se bamboleaban sobre m� y de vez en
cuando me incorporaba un poco para mordisquearle los pezones. Tumb�ndola hacia
m�, le rode� el culo con mis manos, subi�ndoselo y baj�ndoselo. Qu� culo tiene
mi t�a, me pon�a a mil por hora. Me moj� un dedo y empec� a juguetear en la
entrada de su ano, meti�ndole un poco el dedo. Mientras segu�amos con el sube y
baja y yo ve�a que no iba a tardar mucho en correrme otra vez

- Qu� me est�s haciendo? Pregunt� ella

- Rel�jate y disfruta, le dije yo

- Creo que me corro otra vez, lo noto como viene, dice

- Aguanta un poco m�s, esp�rame, que a m� tambi�n me falta
poco, le digo yo

No pudo ser, volvi� a chillar, aunque esta vez un poco menos
escandalosamente, se estremec�a y yo lo notaba, y se corri�. Se qued� un momento
quieta y not� como de nuevo por mi pubis resbalaba hacia mis huevos un l�quido
caliente. Se le hab�a vuelto a escapar un chorrito de pis. Volvi� a disculparse
pero yo ya estaba a punto, un par m�s de sus torpes saltos sobre mi polla y yo
tambi�n me corr�

- Te has corrido verdad? He notado como algo calentito me
mojaba por dentro, me dijo

- S�, vuelvo a repetir, eres maravillosa, le dije yo, aunque
antes de seguir con las pr�cticas quiz�s ser�a mejor que vieses las teor�as

- A qu� te refieres? Me pregunt�

- A que si quieres despu�s de recuperarnos un poco, podemos
cenar y comprar una pel�cula porno en el "pay per view" para que as� veas un
poco de cuantas formas se puede hacer y ya vayas un poco sobre seguro, le dije
yo

- Me parece estupendo, contest�

Y dicho y hecho. Despu�s de reposar un poco nos pusimos a
cenar los dos desnudos, sentados uno al lado del otro, sin parar de sobarnos
entre bocado y bocado. Le llegu� a decir que se sentase sobre m� para as� poder
darnos bocaditos el uno al otro. Lo hizo, yo notaba el roce de su vagina cada
vez que se mov�a un poco sobre mi semitieso rabo. Al estar frente a frente nos
bes�bamos a cada momento, pon�amos un bocadito de comida en nuestras lenguas y
el otro se lo com�a. A mi ahora m�s que nunca querida t�a todo le parec�a bien,
estaba dispuesta a experimentarlo todo, y yo tambi�n a probarlo todo con ella.
Terminada la cena nos fuimos al sof� y nos dispusimos a ver la pel�cula porno,
abrazados y sob�ndonos constantemente, como dos adolescentes. Yo la miraba a
ella como iba descubriendo lo que en materia de sexo se puede hacer, que no todo
se reduce a la postura del misionero y al �brete de piernas que voy para
adentro. Llev�bamos algo m�s de una hora de nuestra "clase te�rica" cuando dice:

- Creo que por ahora ya he visto bastante, no se si podr�
asimilarlo todo

- No te preocupes, la estoy grabando en video y cuando
quieras volvemos a verla, adem�s tengo alguna otra grabada por ah�, le digo yo

- Oye, a los hombres les gusta que se las chupen, verdad? Tu
t�o alguna vez me la pon�a en la boca y me dec�a que se la chupase, pero a m� me
daba asco y no lo hac�a. Creo que contigo no me va a dar asco, eres tan distinto
a todo lo que conoc�a, dijo ella

- Pues aqu� la tienes, es toda para ti, le dije cogi�ndome la
polla y ofreci�ndosela

Sin pens�rselo dos veces, me cogi� la verga y se abalanz�
sobre ella con la boca abierta. Al principio se dedic� a recorrerla con la
lengua y besarla chupando un poco el capullo, ella me preguntaba si lo hac�a
bien, a lo que yo le contestaba que s�; le dije que se la metiera entera en la
boca y la apretase con los labios, accedi� pero se le notaba su torpeza y creo
que le vino alguna arcada. La detuve un momento y le indiqu� como se ten�a que
colocar para hacer un 69. Poco a poco fue adquiriendo m�s destreza, me sobaba
los huevos y le dije que ten�an envidia, que quer�an probar sus labios; ella se
los met�a alternativamente en la boca, y empezaba a hacerlo con verdadera
destreza. Mientras nos d�bamos mutuo placer con nuestras lenguas, comenc� a
meterle los dedos alternativamente por el co�o y por el culo, y en esas
est�bamos cuando entre fuertes sacudidas se volvi� a correr y una vez m�s se
volvi� a mear sobre mi boca y cara.

- Al final le voy a acabar por coger gusto a que te mees
sobre m� cuando te corres, le dije

- Es que me quedo tan a gusto que no lo puedo controlar, dijo
ella

- El igual, no importa, pero mi cara y el coj�n del sof�
est�n empapados, contest�,

Y mientras le manten�a metido un dedo el culo le dije que a�n
hab�a una cosa que no hab�a probado, y que si quer�a podr�amos hacerlo ahora

- Qu� es?, me pregunt�

- Que te la meta por el culo, le dije

- Es que me da un poco de cosa, con los dedos si que me
gusta, pero tu polla dentro de mi culo, creo que me va a hacer algo de da�o,
dijo

- No te preocupes, que pondremos aceite para que resbale
mejor y lo har� muy despacito para que no te duela, t� s�lo rel�jate y sigue
disfrutando, le dije

- sale, pero con una condici�n, dijo ella, y es que cuando te
vayas a correr la saques y me lo des en la boca, que yo tambi�n quiero comerme
tus jugos

Por supuesto que acced� encantado, con la polla dura como una
piedra, fui a buscar aceite de oliva a la cocina y tras embadurnarle el ojete y
frotarme ella la polla con aceite la situ� en posici�n y se la fui metiendo en
el culo. Al principio despacio, y conforme su agujero virgen se iba dilatando y
ella relajando, m�s deprisa. Sus primeros suspiros de dolor y desconocimiento se
fueron transformando en gemidos de placer, yo ya no pod�a aguantar m�s, me iba a
correr y tal como le hab�a prometido, la saqu� de su culo y se la acerqu� a la
boca. Isabel empez� a chup�rmela, acarici�ndome los huevos y en un momento le
descargu� el contenido de ellos en su boca, contenido que ella sabore� hasta la
�ltima gota, sin dejar de chupar mi polla hasta que la not� blanda en su boca.

Tras esta jornada de descubrimientos para mi t�a, las semanas
siguientes fueron igual de estupendas para ambos. Lupe se fue desinhibiendo cada
vez m�s, practic�bamos el sexo en cualquier lugar y posici�n. Le gustaba
recibirme a mi vuelta de la escuela completamente desnuda, o vestida s�lo con un
liguero y unas medias negras que se compr� un d�a y que ella sab�a que me
excitaban sobremanera. Poco a poco fue controlando su incontinencia urinaria al
correrse, pero como a m� en cierto modo me gustaba, frecuentemente sol�amos
hacerlo en la ba�era, para as� no poner toda la casa pingando; cuando ella se
corr�a, con mi polla a�n dentro de su caliente chocho, daba rienda suelta a su
pis y regaba mis bajos con sus fluidos. Tambi�n a ella le gustaba que yo le
mease encima de sus tetas, de su vientre, su culo,.... En fin, que disfrut�bamos
del sexo a tope, sin ning�n tipo de tab�.

Ojala les haya gustado mujeres maduras que est�n interesadas
en hacer todo tipo de cosas como lo hice con mi t�a escr�bame a
POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO y nos
ponemos en contacto.