Relato: Memorias





Relato: Memorias

Rondando la cincuentena estoy rememorando mi primera relaci�n
sexual, a los diecis�is, no, en realidad no, para ser justos debo remontarme a
los trece, donde inici� el camino que he seguido hasta ahora, y que si bien lo
inicie yo solo fue determinante para mi elecci�n.


A esa edad, los trece, escuch� una conversaci�n entre dos
vecinas, ambas de mediana edad, en la que una le contaba a la otra con lujo de
detalles, como, su amante se "la hab�a cogido por el culo", lo mucho que hab�a
gozado de esa relaci�n, y de c�mo hab�a que proceder para que no
doliese,"empuj�s para afuera, como para cagar", con eso y una buena lubricaci�n,
la satisfacci�n es garantida.


Esas palabras me quedaron grabadas y determinaron mi vida
pues quise saber que tanto se disfrutaba con la penetraci�n anal y empec� a
probarlo, primero los dedos, luego objetos que iba buscando cada vez con mayor
entusiasmo y que a medida que eran probados eran sustituidos por otros de mayor
tama�o, as� fueron pasando velas, hortalizas varias, y un sin fin de cosas
cil�ndricas, no conforme con lo que encontraba, y con el correr del tiempo, me
fui ingeniando para fabricarme consoladores cada vez mas perfectos y manuables,
para cuando conoc� a un hombre, y su consiguiente miembro viril, ya hab�a
desarrollado tal t�cnica que me permit�a "autocojerme" con una calidad de placer
impecable, me hab�a fabricado un consolador de medidas �ptimas para mi f�sico,
suave y flexible, de goma, que mediante una suerte de cinto pod�a fijar a una
almohada, colocaba una toalla sobre la almohada enjaezada con mi verga sint�tica
y poni�ndome en cuclillas me penetraba el ano, luego tir�ndome hacia delante,
boca abajo, me abrazaba a ese improvisado amante, y con movimientos de cadera, y
dirigiendo con mis rodillas a la almohada, lograba un mete-saca que estimulando
mi ano, y esa zona de placer adjunta a la pr�stata me llevaban a un orgasmo
intenso y mi eyaculaci�n empapaba la toalla, algunas noches esa operaci�n se
reiteraba hasta tres o cuatro veces, era un chico muy activo en lo que a sexo se
refiere....


As� llegu� a los diecis�is, con una figurita que muchas
mujeres envidiar�an, piernas largas y bien torneadas, bastante alto para mi
edad, cuerpo flexible, una cola redondita y firme que atra�a las miradas de mas
de un hombre, y a pesar de ser delgado, unas grasitas en mis caderas y pecho,
junto a una total ausencia de vello , me daban un aspecto de efebo romano que
tanto gusta a ciertos hombres....


Claro que ya ten�a definidos mis gustos sexuales, y si a�n no
hab�a concretado una relaci�n, era porque en esa �poca no resultaba f�cil ser
homosexual, por lo menos en el ambiente en que me mov�a, y donde nadie ten�a ni
la menor sospecha de mis gustos y menos de mis "actividades secretas",ya que, a
pesar de mi f�sico, no era, ni lo soy, para nada afeminado....


Bien, y as� llegamos a ese verano de mil novecientos
sesenta...y algo. Mis padres, en buena hora decidieron hacer un crucero a
Europa, muy de moda en ese entonces, y eligieron para dejarme en custodia a la
familia de un viejo amigo de mi padre, conocido por "el Turco"; familia �sta
compuesta por un matrimonio y hermanas solteronas de la esposa del Turco..todos
ellos pasaban los tres meses de verano en una casa que a los efectos pose�an en
un pueblo balneario. Tres meses de viaje, tres meses de verano, tres meses de un
servidor en la casa de verano del Turco....as� de simple.


Ahora hablemos del otro protagonista de esta historia de sexo
y sexo, como supondr�n, el Turco. Era un hombre que rezumaba su condici�n de
macho por todos sus poros, fornido, algo mas alto que yo, con un cuerpo muy
firme y cubierto de vellos, una voz gruesa que utilizaba a los gritos, y unos
ojos negros que parec�an traspasarme.


Fueron a esos ojos que sorprend� varias veces con esa mirada
que ya conoc�a en los hombres (y en algunas mujeres), esa mirada que me
expresaba su deseo en una forma animal, que nada ten�a que ver con sentimientos,
puro deseo sexual.


Esas miradas, sumadas a la abstinencia obligada, _hab�a
dejado al "negrito", mi consolador, en casa, por no poner en riesgo mi secreto
en casa extra�a_, me llevaron a tener ideas locas y a plantearme seriamente
provocar una relaci�n intima con ese hombr�n....


De eso se trata esta historia, que si bien es ver�dica,
obviamente en sus detalles mis recuerdos se borran un poco, entonces pues sepan
que los di�logos y algunos detalles son recreados por la imaginaci�n, pero
siempre, y eso lo juro, en el contexto de los hechos tal cual ocurrieron.....



El me miraba con "esa" intenci�n cada vez que qued�bamos
solos, al principio sent� un poco de miedo, lanzarme al agua y hacerme coger,
humm, no es f�cil tomar la decisi�n, pero poco a poco la idea fue tomando cuerpo
en mi cabeza, la imaginaci�n empez� a volar, llegaba la noche, y en la soledad
de mi cama me ten�a que masturbar sin mi "negrito", y no es lo mismo acariciarse
que sentir nacer el orgasmo desde adentro y sin tocarse, esa falta y la posible
oferta de sus ojos me llevan lentamente a la decisi�n de provocarlo....


Cuando estamos solos no pierdo la ocasi�n de mostrarle mis
encantos, mis posturas son tan sugestivas que hasta el mas incauto se dar�a por
enterado. Y �l no es para nada incauto...un d�a, al pasar su mano recorre mi
cola, no digo ni hago nada, me asust� un poco, pero no lo dej� notar, me quedo
como si nada, no me di cuenta...otro d�a al pasar por detr�s m�o me refriega su
verga por la cola, que casualmente yo ten�a sobresaliendo en una postura mas que
er�tica...as� transcurren dos o tres d�as, y el domingo es su cumplea�os, lo
vamos a festejar con un asado. Por razones de comodidad se va a utilizar el
parrillero de un vecino, terreno por medio, todos colaboramos desde la ma�ana
llevando y trayendo cosas por el caminito entre arboles y arbustos que atraviesa
desde una casa a la otra. El regalo obligado, una botella de Scotch, empieza a
hacer su trabajo desde temprano, as�, a medio d�a el Turco ya est� pint�n, y por
supuesto con la libido a flor de piel, y pobre, es comprensible, entre el
inmenso y ca�do culo de su mujer, y el m�o paradito y firme, eligi� el mejor
regalo...en uno de los viajes quedamos solos en la cocina y me apret� de atr�s,
haci�ndome sentir su admiraci�n totalmente parada y dici�ndome...."te voy a
coger guachito puto...""Bueno pero ahora no podemos" le contest�, tal vez
esperaba un rechazo, no se, lo cierto es que desconcertado me solt�, me qued�
mirando como sin saber que hacer, para que no le quedaran dudas de mis
intenciones, estir� mi mano y le agarr� por encima del short la pija que ya
estaba totalmente parada, lo pajee un poco y le dije.."luego..., ahora and� al
ba�o y ponete agua fr�a..", como un corderito se fue y me hizo caso. Tambi�n
comprob� que mi "negrito" era m�s abundante....


Durante esa tarde me comi� con los ojos, pero fue muy
cuidadoso, solo alguna caricia en mis nalgas cuando se las ofrec�a sin peligro,
todo bien hasta la noche...despu�s de las velitas, cuando estaban con las
canciones de sobremesa producto de las libaciones, sent� necesidad de ir al
ba�o, y como siempre fui t�mido no lo hice en la casa donde se desarrollaba la
fiesta sino que cruc� el bosquecito y fui a la casa del Turco...al volver, la
sorpresa, el tipo, totalmente enloquecido, me agarra en la mitad del caminito me
arrastra atr�s de unos arbustos (que nos llegaban a la cintura) y baj�ndose el
short me muestra la verga mas parada que el obelisco y me dice que me va a coger
all� mismo..le digo que es una locura, que cualquiera que pase nos va a ver y se
pudre todo, una chispa de conciencia le hace dudar, entonces tomo una decisi�n
heroica...."Par�te de cara al camino como si estuvieras meando...", me arrodill�
y lo empec� a pajear, de repente, ni se como, pues en mi imaginaci�n nunca hab�a
estado presente, me met� la cabeza de la pija en la boca, fue instinto puro, lo
pajeaba y chupaba, le empec� a lamer la cabeza mientras le apretaba el tronco
con mis labios, inici� un movimiento de vaiv�n que pude controlar con mis manos,
en eso se qued� como r�gido, la verga se hinch� al m�ximo, y me acab� en la
boca, no hab�a previsto esto, no pod�a esquivarlo, ni escupirlo sin armar un
enchastro dif�cil de explicar, entonces, sin pensarlo, me tragu� todito el
semen, ....y me gusto. Me miraba asombrado, con la pija en descenso, me miraba y
repet�a, "te la tragaste, te la tragaste..""Si papi me la tragu�, y ma�ana
cuando estemos solitos te voy a dar el culo para que me lo rompas y llenes de
esa rica lechita....le sub� el short, y volv� a la fiesta dej�ndolo con su
asombro....ni yo mismo pod�a creer lo que hab�a hecho. Les juro que cuando se la
estaba chupando fue tal la calentura que estuve a punto de "ponerme" para que me
ensartara. Esa noche me tuve que morder para no masturbarme, quer�a estar bien
caliente para la ma�ana siguiente.




Mi plan era bien simple, todas las ma�anas el Turco nos
trasladaba a su esposa, hermanas y a mi, en su autom�vil, hasta la playa, nos
dejaba y nos pasaba a recoger a las 11.30, esa ma�ana yo me sentir�a mal del
est�mago, y no ir�a a la playa, al volver el Turco.....bien ya se imaginan,
sexo, sexo y sexo...un plan sencillo y efectivo...Al levantarnos se lo expliqu�,
y me mir� con cara de susto, pero dijo "Bueno"


Cuando se fueron, me ba��, me perfum�, me lubriqu� bien el
ojete con crema para las manos, y tomando una toalla de ba�o me sent� a
esperarlo junto a la puerta trasera...Cuando lleg�, por las dudas me envolv� en
la toalla y me puse de pi� en la penumbra de la salita, al verlo solo, dej� caer
la toalla, y arrastr�ndola me dirig� al dormitorio, lo suficientemente lento
como para que admirara mi cuerpo, sobre todo mi cola, mientras caminaba el
coraz�n parec�a que se me iba a salir del pecho, tal la emoci�n, o emociones
encontradas, era la hora de la verdad.


Estir� con cuidado la toalla sobre la cama matrimonial, y me
acost� sobre ella boca abajo, ofreci�ndome para ser pose�do....Por el rabillo vi
como se quitaba el short, quedando desnudo, la verga parada, se coloco sobre mi,
y me empez� a acariciar todo el cuerpo, por primera vez me bes�, en el hombro
primero, luego el cuello, le ofrec� los labios y tras una corta duda los acept�
y se sumergi� en un beso apasionado, me refregaba su tronco duro en mis nalgas,
pero no mostr� intenci�n de penetrarme, "ven� papito, cojeme"le dije, otra vez
la mirada entre asombro y miedo, ""chupala un poco", me gir�, la agarr� con las
dos manos y repet� la rutina de la noche anterior, lengua, labios...sent�a como
se pon�a cada vez mas dura y grande "casi como el negrito", pens�, cuando ya
estaba que estallaba, la solt� , me puse en cuatro patas y le dije, "dale
met�mela que no aguanto mas...",me mont�, la enfil� en mi ojete, y empez� a
empujar, no se si me traicionaron los nervios, pero lo cierto es que en ese
momento mi habilidad para dilatarme me fall�, el empuj�, una y otra vez, pero no
logr� franquear mi entrada, respir� hondo, me tranquilic�, y cuando logr�
dominar mi esf�nter, pafff, �l se desinfl� como un globo pinchado, nos miramos,
otra vez esa mirada, en lugar de la libidinosa de los d�as anteriores, esa
perruna cobarde, nuevamente me gir�, y vuelta a chuparla, demor� un poco, pero
se par�, para asegurarme el �xito segu� jugando con la boca, y cuando me pareci�
a punto, me volv� a poner en posici�n..."No mejor segu� y te acabo en la boca",
me dice...Ah� me prend� fuego, "Ah, no papi, yo vine para que me cogieras,
chupete no, para empezar est� bien, pero a mi me sac�s las ganas, me clav�s y me
coj�s bien cojido, o para que mierda ten�s esa pija,,,""Puto de mierda,,,",dijo
....y me mont�,y me la empez� a meter, mi intuici�n me hizo variar de
t�ctica..."Asiiii papiii. Met�mela despacitooooque bruta pija ten�s, despacito
que sos el primeroooo, dame mi cielo dame...." y cosas por el estilo, como para
enardecerlo y tranquilizarlo a la vez...en realidad la penetraci�n fue bastante
facil e indolora(el negrito segu�a ganando el campeonato). R�pidamente comprend�
que estaba inhibido y un poco asustado de lo que estaba haciendo, se estaba
cojiendo al hijo de su amigo, menor de edad, y en la cama de matrimonio, muy
fuerte pobre diablo, en parte la calentura se le fue la noche anterior, con la
mamada, en parte, y creo lo mas importante, lo sorprendi� mi actitud decidida,
dominando la situaci�n.


Entonces a jugar el papel que se espera de mi...."Mi amor
cuanto esper� estoooo, que placer me das, soy todo tuyo, tu putitoooo, cojeme
como vos sab�s mi macho divinoooo" y en verdad es que estaba gozando como nunca
antes lo hab�a hecho, esa pija con vida propia que se iba agrandando y
endureciendo adentro m�o, ese vaiv�n marcado por �l, me estaba llevando al cielo
, superando a�n mis sue�os mas grandes, no jugu� mas me entregu�, de cuerpo y
alma me entregu� a ese hombre para que me poseyese como quisiese, movi�ndome al
comp�s de su bombeo, acompa�ando con mis caderas, las penetraciones profundas,
tir�ndome atr�s para enlentecer sus salidas sintiendo la caricia tenue de su
glande en mi zona sensible, disfrutando del orgasmo que crec�a en lo profundo de
mi vientre, su jad�o, sus vellos en mi espalda, los test�culos en mis nalgas,
apret�ndose en mi entrada, esos brazos fuertes atray�ndome en cada embestida,
fabric�ndome tetas en la gordurita de mi pecho, sus insultos cari�osos con esa
voz ronca que da el deseo, por primera vez, el placer iba acompa�ado por un ser
vivo, un hombre, un macho con verga , huevos, brazos y piernas que me dominaban
y me pose�an tanto como el pist�n duro y suave, mas placentero que el mejor
consolador, con su ritmo propio, distinto al m�o, pero acompasando mi placer,
"me est�n cojiendo" me dec�a incr�dulo, mientras mis labios soltaban todo tipo
de gritos, gemidos, palabrotas que acompa�aban mi excitaci�n y pretend�an
incrementar la de mi macho...Mi macho, al fin me sent�a como quer�a, hembra
pose�da por un macho, mi agujero relleno por su carne, horadado una y otra vez
por esa virilidad maravillosa, estrujado por sus brazos, dominado por sus
piernas, a su entera voluntad para que me llevase al colmo que desease.


El mete-saca, las caricias, el cuerpo, caliente y velludo,
sobre mi piel, su respiraci�n agitada en mi cuello....todo eso fue haciendo
crecer mi placer y mi excitaci�n, estaba como en un delirio, solo sintiendo ese
c�mulo de sensaciones variadas. Sent� que me iba a acabar...creo que el sinti�
lo mismo, la verga creo que se le puso mas dura y grande, por lo menos as� me
pareci�..."Acabame negroooo, acabameeee bien adentro....llename de
lecheeee..."grit� en mi paroxismo, creo que esa fue la se�al para que su
excitaci�n llegase al m�ximo, sus manos tomaron mis caderas, irgui� el cuerpo, y
empez� un bomb�o largo y violento que casi me vuelve loco de placer.."Te voy a
llenar el culo...guacho divino, mi putito...", y me la enterr� hasta el fondo,
una, dos,cinco veces, mientras lanzaba un grito salvaje, casi un estertor. Supe
entonces que hab�a culminado adentro m�o, que su semen inundaba mi recto, y esa
idea, mas que nada, provoc� que mi placer llegase al m�ximo y de mi pijita sin
tocar saltaron unos chorritos de leche que terminaron sus d�as en el tohallon de
ba�o. Nos quedamos as�, unidos por su miembro aun erecto, quietos, sintiendo
nuestras respiraciones agitadas, asumiendo lo que acababa de pasar...con un
movimiento de mi cuerpo le indiqu� lo que deseaba en ese momento, y abraz�ndome
nos fuimos recostando hasta quedar de lado..."no salgas...no me la
saques"....�te gust�?�te acabaste..?pregunt�, "si papi, me acab� como una
yegua..y me pareci� divino lo que me hiciste...�y a vos te gust�?", �"qu� si me
gust�?...fue el mejor polvo de mi vida...", no seguimos hablando pues se dedic�
a besarme y acariciarme con una ternura que me fue llevando a una modorra....la
pija, ya fl�cida se escurri� de mi agujero, de pronto sent� un pujo
incontrolable, me separ�, e intentando apretar el ojete corr� hacia el ba�o, me
sent� y dej� escurrir lo que result� ser el semen del Turco, �l que hab�a
seguido mis pasos atemorizado, el pobre cre�a que me hab�a roto el culo, sonri�
tranquilizado cuando le inform� que no era sangre sino leche lo que sal�a, "y es
un mont�n", dije.


Nos metimos en la ducha, y nos acariciamos con agua y jab�n,
mis nalgas fueron cuidadosamente lavadas por sus manos, con alg�n que otro dedo
que se escap� hacia mi ano, tal vez para indagar el esperado destrozo, los
machos son todos iguales, esperan dejarnos el culo como el de un mandr�l, y en
el mejor de los casos, es decir con una verga de esas de novela, lo �nico que
nos dejan es una dilataci�n que dura unos minutos, a lo sumo un par de horas,
pero es el af�n, el amor propio de "rompernos el culo", rasgar, provocar sangre,
dejar un recuerdo imborrable all� donde metieron la pija...y bueno no nos cuesta
nada decirles que nos lo dejaron a la miseria, que seguramente pasaran meses
antes de usarlo, que nunca podremos olvidar ese instrumento de placer, perd�n
por la disgreci�n, pero es que ese d�a empec� a conocer la sicolog�a de esos
hombres a los que les gustan los jovencitos para usarlos como hembras, en esa
�poca les dec�amos "bufarrones", seguramente una deformaci�n del t�rmino
bujarr�n, que en buen espa�ol significa , homosexual activo en la pareja, es
decir un "macho" rompeculos...


Pero sigo con el relato, as� como el recorr�a mi cuerpo, yo
lo hice con el suyo, y, por supuesto, el principal inter�s se centr� en el
sustituto vivo de mi querido negrito, estando fl�cido, como ahora, despert� mas
ternura que morbo, y justamente por eso, por ternura, decid� hacerlo revivir, y
levantarse pronto para una nueva batalla, batalla que mis interiores estaban
reclamando, sobre todo y a consecuencia de haber sentido escurrir de mi culito
el residuo esperm�tico de mi amante, eso, aunque parezca mentira, me exit�
sobremanera...as� que, caricias, mimos, palabras excitantes, poses mas
excitantes, y, por fin, arrodillarme ante su dios y hacerle una fellatio, logr�
el cometido...cuando la tuvo bien paradita, le puse la cola para un refriegue
entre mis nalgas...y en seguida se prendi�, me abraz� por atr�s y me punte� la
cabezota en el ojete, tentado estuve de tirarme hacia delante y permitirle su
invasi�n, pero no, a�n no, me le escurr� y fui corriendo hasta el sill�n del
living, y all� en las penumbras lo esper�, se demor� lo suyo el hijo de puta,
tal vez por miedo, tal vez para hacerme sufrir por mi desplante.


Lo vi trajinar abriendo la ventana del dormitorio y
levantando la cama, en verdad el olor a sexo impregnaba la habitaci�n, aprovech�
su demora para encremarme el agujero dej�ndolo listo para una nueva penetraci�n,
al rato lleg�, con su short puesto, como para dar por finalizada la sesi�n, se
sent� a mi lado, me le arrim� mimoso y acarici�ndolo le dije..."Papi, como me
gust� lo que me hiciste...y me gustar�a que me lo hicieras otra vez...", y en el
oido..."que me cojas bien cojido otra vez..." Me mir� con esa pregunta que desde
hace rato est� en sus ojos..." �De veras soy el primero?", " Me pareci� que
ten�s experiencia"....Ah� le cont� de mis trece a�os, de mis experiencias, y por
supuesto del negrito....cuando termin� la mirada reflejaba tranquilidad...y
bastante lujuria, complejos de macho, que le vamos a hacer...Pero lo mas
importante para mi en ese momento es que su pedazo se marcaba pidiendo libertad
en la pierna de su pantaloncito...me arrodille, tir� de la prenda hasta
sac�rsela, y me zambull� en una mamada furiosa, estaba dispuesto a recibir y
tragarme su crema...pero la calentura pudo mas...me trep� al sill�n, y apoyando
mi pecho en uno de los brazos, le ofrec� la cola, no se demor� mucho en aceptar
mi ofrecimiento, sent� como se arrodillaba entre mis piernas�y enseguida su mano
guiando el glande en mi puertita ansiosamente abierta, una presi�n, un tirarme
atr�s, y la ciruela con un �plop! Viol� nuevamente mi ser...sus manos en mis
caderas, gui�ndome y someti�ndome ...y aquel pedazo de carne, duro y caliente se
fue sumergiendo en mis entra�as, solo el que lo vivi� puede saber el placer de
ser penetrado analmente, son un c�mulo de sensaciones las que se sienten, el
roce del miembro entrando a presi�n en el ano, esa sensaci�n sorda de eso que se
va abriendo paso en el recto, es algo suave y violento a la vez, una caricia y
una violaci�n, ese poder que transmite la verga con sus palpitaciones, ese
peque�o impase que se produce cuando la tengo toda adentro y los huevos se
aprietan contra el ojete, justo antes de empezar a movernos para ese ritual del
mete y saca...ahora �l es el due�o, ahora me vuelve a dominar con su pija y todo
su cuerpo, me marca el ritmo, me posee como le place, haciendome gozar al buscar
su placer, porque el m�o, mi placer, es lograr que su excitaci�n vaya creciendo
y creciendo para explotar al fin en un orgasmo que eyacule su semen en mi
interior, y en ese vaiv�n, acompa�ado de movimientos de caderas, gemidos y
obscenidades dichas con voz ronca y entrecortada, lograr que la
caricia-violaci�n, golpee en esa zona sensible que me va haciendo nacer mi
propio orgasmo.


Es incre�ble la qu�mica de nuestro cuerpo, mi culo clavado
por esa lanza de carne, mis caderas amasijadas por sus manos, mis muslos
apretados por los suyos, su jad�o, sus palabrotas, todo y mil sensaciones mas le
van diciendo a mi cuerpo cuando el va a culminar su placer y van preparando en
mi interior la explosi�n propia que resuene con la de mi macho, es maravilloso
vaciarse en una acabada donde mi pene no fue para nada estimulado, solo el suyo
que me transmite su fuerza, su deseo y por fin su placer...


Fue un polvo de novela....largo, distendido, con mucho
"chiches", te la saco toda y te la clavo de un viaje, te la clavo hasta los
huevos y te la dejo adentro mientras de digo chanchadas, muchos movimientos de
caderas por mi parte, mucho decirle macho, papito, negro pijudo y cuanta forma
de agrandarle su ego y endurecerle la pija, caricias, besos y un estirar el
placer hasta el m�ximo, para explotar juntos en un delirio de gritos,
estertores, y leche de pija...no se cuanto dur�, media hora, tal vez mas, se que
ca�mos rendidos, �l encima m�o, y un sue�o invencible nos invadi�, as�,
nuevamente unidos por su carne.


El velo del sue�o se fue corriendo lentamente, la realidad,
hermosa, de haberme dormido con mi Turco encima y sobre todo, adentro, se fue
abriendo camino en mi conciencia, no se fue la posici�n, o si la excitaci�n de
mi amante sigui� en sue�os, pero el hecho es que sent� su miembro, semi-erecto,
a�n en mi interior, sin despertarlo, contraje mi esf�nter d�ndole un abrazo
lujurioso, hummm que placer, repet� el ejercicio esta vez durante mas tiempo, y
as� una y otra vez recibiendo en cada una esa peque�a descarga de placer, pero
el due�o de la pija que estaba usando no fue indiferente a mis masajes
esfinteriles, y la verga comenz� a tomar tama�o y dureza, para cuando se
despert� del todo ten�a una bruta erecci�n en mi recto, primero el
miedo,..."�qu� hora es?....despu�s esa risita c�mplice al sentir que me estaba
emporrando, "�qu�,? �quer�s mas?..." " Si, papi, dame as�, como estamos,
suavecito.....cojeme mi amor, otra vez, cojeme como solo vos sab�s..."


Esta vez, si bien perd� el placer de la penetraci�n, disfrut�
de todo su cuerpo sobre el m�o, su abrazo total, con brazos y piernas, su pecho
velludo sobre mi espada, los pedejos acarici�ndome la rabadilla, su boca
altern�ndose entre la m�a, mi cuello, mis orejas, donde mezclaba con los besos
palabras tiernas u obscenas. Esta vez el cl�max lleg� pronto, las caricias
fueron haci�ndose cada vez mas posesivas, el mete saca mas r�pido y violento,
los jadeos, los gemidos crecieron hasta ser los gritos que anunciaban el final
"��llenameeee!!" "tomaaaaa...." y otra vez el semen se derram� dentro mio,en
unos pijazos violentos y profundos. �l descans� un momento apret�ndome con su
cuerpo, y luego, dici�ndome "apretalo", se fue incorporando y retirando la verga
todav�a hinchada de mi, cuando hubo salido me volv� para besarlo y de paso para
hecharle un vistazo a su aparato de placer, estaba tumefacto y brillante, con
una gota de semen aun asomando del agujerito, me escurr� al suelo, y de una
lamida le limpi� esa �ltima gota de su jugo masculino...despu�s, corr� al ba�o,
a disfrutar del placer de sentir salir ese mismo juguito por mi ojete ahora un
poquito irritado, dos o tres pujos eliminaron su regalo, el de los dos
polvos.....



Ese dia continu� como si nada, fue a buscar a su esposa y
cu�adas a la playa, yo me ba�� y elimin� todos los vestigios de nuestros juegos
amorosos, en mi f�sico y en la casa, especialmente en el sill�n que no tomamos
la precauci�n de cubrir y quedo de oro y azul con mis acabadas, incluso fue un
motivo de broma privada en el futuro cuando alguna de las mujeres se sentaba en
una de las manchas que no fue posible quitar "La vas a dejar pre�ada", me dec�a.
Como dec�a ese d�a transcurri� con la rutina habitual, nosotros intercambi�bamos
miradas c�mplices cuando pod�amos, e incluso alguna caricia o beso


Sobre el atardecer, las miradas se fueron haciendo cada vez
m�s lujuriosas, y en determinado momento me hizo se�as de que me dirigiese al
garage, lo esper� all�, cuando lleg� nos besamos y las manos se dirigieron a
nuestros respectivos intereses, ya la ten�a parada.... la extraje de su encierro
bajando el el�stico de su pantaloncito y con �l apoyado en el auto, me puse de
rodillas ante ese dios y me puse a aplacar su deseo con mi boca, lam�, sabore�,
chup�, con mis labios y manos cree un recept�culo suave y ardiente para esa
verga a punto de estallar, as� acoplados empez� a moverse como en un coito
suigeneris, y empec� a sentir como aquella pija se pon�a cada vez mas grande y
dura, los dos call�bamos, el solo gem�a de placer y yo por el obvio uso que le
estaba dando a mi boca tampoco pod�a decir nada, aceler�...y nuevamente recib�
sus chorros de leche espesa, caliente, entre salada y amarga, en mi
boca....sabore� ese n�ctar y luego voluptuosamente y haciendo que �l lo viese me
la tragu�.



As� comenzaron tres meses de sexo desenfrenado, donde toda
ocasi�n era aprovechada, en la soledad de las ma�anas, en el encierro del ba�o,
en el garage, montes cercanos, a la luz de la luna en la playa, en el asiento de
atr�s del auto...fueron cientos de veces que su miembro me penetr�, litros de
semen pasaron por mi ano o mi garganta, ese hombre incansable y mi deseo
exacerbado nos unieron en una luna de miel interminable, y as� comenz� una vida
por donde muchas vergas entraron en mi, pero fue mi Turquito quien me inici� y
quien me hizo conocer el placer de ser pose�do por un hombre, a su memoria,
gracias.


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Relato: Memorias
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