Relato: Alma la tetona en la cama de hierro.
despu�s de haber descubierto con Chicha, mi cuidadora el gusto de coger, y de colocarme el mote de Insaciable, me convert� en un adolescente obsesivo en coger cuando pod�a a Chicha , a veces, a Choch� o sino a seguir haciendome pajas sin tregua. Chicha me dec�a que deb�a parar, que no pod�a estar siempre cogiendo, o haciendome la paja, que as� no era la vida. Cumpl� los 13 a�os y tuve que comenzar el Colegio secundario. Fue hermoso poque hab�a muchas chicas , preciosas, pero en mis estudios no prestaba atenci�n, siempre le estaba mirando las piernas o las tetas a mis condicipulas del colegio. Cuando pod�a le contaba a Chicha lo que me pasaba, y ella se re�a y me dec�a te convertiste en un vicioso del sexo, y me segu�a chupando el pijo hasta hacerme acabar dos o tres veces y ella diez,- el la mejor verga que he tenido, me enloqueces Nene, y cuando se iba me dec�a pero no te hagas m�s pajas.
una tarde , que los otros muchachos estaban jugando al futbol en el patio del colegio, a mi no me gustaba correr atr�s de una pelota, me gustaba mirar a las chica, yo como siempre estaba mirando , se me acerc� Alma, una compa�era morena, fornida, m�s alta que yo, y que me hab�a llamado la atenci�n sus pechos , que deb�an ser muy grandes , porque levantaban mucho la blusa del uniforme. Ella me pregunt� algo obvi- No te gusta jugar al f�tbol? No contest� parco. - Y que te gusta hacer? me repregunt� - Coger, le dije sin m�s tramites. Ella se sorprendio , no mucho, y comenz� a re�rse a carcajadas suelta, y se fue hacia el patio donde estaban las dem�s compa�eras. Cuando lleg� al lugar, les coment� algo sobre m� porque todas se dieron vuelta y me miraron ri�ndose.
A la ma�ana siguiente mi madre sali� de compras con mi hermanita , y mientras me cog�a a mi cuidadora, cada vez que quedabamos solos lo haciamos, le pregunt� si hab�a estado muy bruto con mi contestaci�n hacia Alma.
Ella me dijo- hizo la denuncia ante la direccion del colegio? No, contest� mientras le seguia rompiendo el culo con mi gran verga, Ay Nene la ten�s divina , dame m�s fuerte, y mov�a las caderas con m�s peric�a hasta acabar y largar sus chorros que algunos veces llegaban hasta el piso y ca�an sobre sus zapatillas de tela, de tac�n medio, y me hac�a acabar a mi dentro de su gran culo, mientras sus tetas parec�an reventar de duras.
Y cuando se fue despu�s de tres polvos m�s, me dijo, a esa te las vas a coger en cualquier momento y despu�s que se enteren que eres un pij�n te las vas coger a todas las del colegio.
Yo qued� muy excitado y lleno de fantasias. En los d�as siguientes busqu� a Alma en todos los ratos libres, y siempre avanc� sobre lo mismo- A vos no te gusta coger, todav�a no hiciste, ella se re�a y me dejaba. Pero un d�a que le volv� a preguntas, me dijo, Si lo hice y me gusta, pero lo hago con un hombre grande, un primo de mi madre. No creo que tu puedas cojerme mejor que �l- y se fue corriendo y riendo.La busqu� varias veces m�s, y le dije que probara conmigo. y un d�a ,me di� el Si vamos, pero donde lo hacemos, porque yo con��l voy a su apartamento. y en eso no lo hab�a pensado, porque a Chicha y a Choch� me las coj�a en casa , cuando no estaba mi madre.
Entonces le ped� ayuda a Chicha, y ella despu�s de cojerme varias veces me dijo que me iba a ayudar. Chicha entr� a mi cuarto de la cama de hierro, pasado ma�ana, tu madre sale de compras, invitala a venir, yo le abro.
invit� a Alma y me dijo que si, que iba.
La noche anterior me hice dos pajas pensando en el encuentro. Y a las 9.30 de la ma�ana son� el timbre. Chicha me mand� para el cuarto de la cama de hierro y sali� a recibirla. La trajo y se me dijo Nene voy hasta el supermercado.
Quedamos Solos , y Alma enseguida se percat� del bulto enorme que levantaba la tela de mi pantal�n deportivo, y eso que estaba sentado sobre el colch�n de la cama de hierro.
Ella lleg� con una blusa violeta muy escotada y ajustada a su cuerpo que resaltaban el tama�o de sus pechos, parec�an m�s grandes que los de Chicha y eso es mucho decir, y adem�s �vest�a un short,celeste muy corto que le dejaban ver las piernas bien gruesas y torneadas hasta los muslos grandes. Mi calentura subi� y mi m�stil se elev� m�s, ella lo mir� con asombr�, y entocnes me baj� los pantalones y el short , y qued� al aire, firme, duro, largo y grueso, muy grande! Ella dijo es Enorme, y se abalanz� para tocarlo, y est� muy caliente y eso que todav�a no te mostr� mis tetas, dijo, mientras se quitaba el buz� por encima de la cabeza, sus cabellos negros revolotearon, pero mis ojos quedaron quietos mirando aquellas tetas enormes, adentr� de aquel sosten fuscia, eran muchas m�s grandes que las de Chicha, que eran como melones, est�s eran como pelotas de basket. Estabamos dos fenomenos frente a frente, y sin m�s ella me agarr� la enorme pija, y yo le empec� a sobar las enormes tetas. Fue un duelo imposible de olvidar, hasta que nos calentamos a tope y la sub� a la cama, le quit� le short celeste, y le romp� el culo con mi gran mango, llor� como Chocho, me dijo anormal, pij�n, pero cuando la cog� por la concha, goz� mucho, mucho, con mi gran pija, y yo con sus grandes tetas, cuando le ped� que me cogiera con las tetas, me miro como diciendo y eso? entonces entr� Chicha, ya pronta de caliente, se ve que la gran puta estaba observando detras de la puerta, y con las tetas al aire, tom� mi pija, y se la coloc� entre sus melones, y le dijo a Alma, as� mira, y me sacudi� un polvo, otro m�s, y despu�s me la chupo, me la dej� limpia , y otra vez qued� dura, y le dijo a la tetona, ahora dale t�, y Alma se coloc� mi enorme pija entre sus enormes tetas y me hizo una hermosa paja hasta que le deje los enormes globos rosados llenos de leche.
Asi comenzamos a cojer con Alma la tetona, y ella me comenz� a llamar el Nene Pij�n.