Relato: Isaura





Relato: Isaura

- � Isauraaaaa! �El desayuno!



No le he preguntado nunca a mi padre por qu� me puso un
nombre de guerra tan raro. Yo me llamo Pilar no Isaura. Lo correcto es que en
casa me llamasen Pilar y dejar Isaura para el burdel y los clientes. Pero no,
tambi�n en casa me llaman Isaura. Tanto Pap� como Toni y Ricardo, mis hermanos.



- Anda Ricar, s�camela que pap� se cabrea si tardo.



- No me voy a quedar a medias.



- Sabes que por la ma�ana todos ten�is prisa. No haber
empezado, anda d�jame.



- Por la ma�ana me levanto con el j�bilo ma�anero y muchas
ganas de follar.



- D�jame, por favor.



En vista de que no la sacaba, hice un brusco giro y desaloj�
la polla de mi co�o. Me la hab�a metido desde atr�s cuando estaba preparando el
desayuno de pap�.



- Ya me las pagar�s zorra, no se le puede dejar a un hombre a
medias, so calientapollas.



- Yo no te he provocado. Yo estaba cocinando.



- Vete a la mierda. Me voy al curro, pero cuando vuelva te
voy a partir el culo y la cara.



- S�, mejor l�rgate a abrir el taller y trabajar algo. Ya son
las doce.



Mi padre en paro y sin buscar trabajo ni por asomo, Toni
estudiando FP y Ricar gana tres perras con su taller mec�nico porque es un vago
y un lerdo. Los �nicos ingresos de casa son los m�os.



- Pap�, aqu� tienes el desayuno.



- Has tardado mucho, in�til.



- Me entretuvo Ricar.



- �Otra vez follando?. �Es que no tiene nunca bastante?



- Si, dice que por las ma�anas se levanta muy salido.



- Joer, como todos. Anda, hazme lo de todas las ma�anas.



Mientras mi padre desayunaba le baj� la cremallera de la
bragueta, saqu� su verga y me apliqu� a hacerle una paja con las manos como
todas las ma�anas. No quiere que se la mame, solo al final me hace tragar su
esperma. Dice que le gusta ver mis lindas manitas de rojas u�as manejando su
verga enorme y renegrida.



Tras atender a Pap� siempre hago las camas, la colada si hay
y la limpieza de la casa. Al regresar Pap� y Toni ya tengo la comida preparada y
tambi�n la cena. Por la tarde voy a hacer la compra si es necesario. Si no, me
toca plancha.



A eso de las seis de la tarde pasa con su coche Do�a Camila,
la madame del prost�bulo para llevarme. Tengo suerte de que pase por delante de
casa, sino deber�a tomar el autob�s que pasa muy de tarde en tarde.



Do�a Camila me aprecia mucho, dice que soy la chica m�s
rentable de su establecimiento. Siempre me recomienda a los clientes que desean
que les atienda una jovencita. Tengo 16 a�os, pero comenc� a trabajar a los 14,
cuando muri� mam�, que trabajaba en el mismo burdel y manten�a la casa. Pap� me
llev� a ocupar el puesto de ella.



En el establecimiento de Do�a Camila, que es una enorme
casona al lado de la carretera trabajamos unas 25 chicas de todas las edades y
razas. Yo soy la m�s joven y Mayra, una se�orona de muy buen ver y muy jamona,
es la mayor y tendr� unos 55 a�os. Ella tiene una raja del co�o impresionante de
larga y de ancha y suele ser la que atiende a septuagenarios pensionistas que no
alcanzan bien a fin de mes pero se lo gastan en putas. Las hay solteras,
casadas, viudas, pero lo que m�s se da son las divorciadas. Tambi�n hay dos
transexuales y tres chicas que hacen streep tease pero no son rameras.



Mi trabajo es aburrido casi siempre. La media de edad de la
clientela son los 45 a�os. Tengo poca oportunidad de conocer gente de mi edad y
cazar novio para salir de este trabajo.



No trabajo solamente en el burdel. En el sal�n anexo, que
tambi�n es propiedad de Do�a Camila, se celebran despedidas de soltero o soltera
y suelen arrendarnos a algunas cuantas chicas para animar la fiesta.



Tambi�n nos contratan para fiestas privadas. Algunas de las
que he participado son sumamente depravadas. Son lo que llamaban bacanal u org�a
de los romanos en mis libros de texto cuando estudiaba.



Tambi�n hago servicios a domicilio y hoteles. En ese caso
Do�a Camila tiene establecido un concierto con Radio Taxi Celer�n que nos
transporta al sitio de la cita, nos espera, salvo que el servicio dure m�s de
media hora, y nos devuelve al local. El taxista tambi�n cuida de nuestra
seguridad y comprueba que cobremos el servicio en la cantidad acordada
previamente.



Los viernes y s�bados hago un n�mero de streep tease ante
unos cincuenta espectadores a las doce de la noche y despu�s otro de sexo en
directo a la una y media de la madrugada. �ste n�mero es agotador, porque tengo
dejarme follar por El Chul�, que es el amante de Do�a Camila al mismo tiempo que
se encarga de la seguridad del local, de la disciplina de las chicas y de
cualquier cosa que le encomiende la madame.



Las chicas murmuran que El Chul� es su sobrino. Que Do�a
Camila tiene 50 a�os y �l 24. Las m�s viperinas dicen que cualquier d�a Do�a
Camila sufre un accidente "fortuito" y El Chul� se queda con el negocio.



A mi esa posibilidad me horripila. El Chul� es un tipo malo.
Cuando me folla en el n�mero de sexo en directo no para de darme manotazos en
las nalgas y en los pechos y el enrojecimiento que me provoca no gusta nada a
mis clientes posteriores. Se pasea entre las chicas con una fusta y todos los
d�as tiene una disculpa para emplearla. Siempre hay alguna chica que trabaja con
los verdugones de su fusta marcados en las nalgas, la espalda o los pechos. Una
vez le vi golpear tres veces a una en el co�o sin compasi�n.



El Chul� ha tenido problemas con la justicia, f�jense si es
mala persona. Cuentan que una vez trat� tan mal a una de las chicas casadas y
que estaba pre�ada que abort�. Su marido vino a reclamar y le asest� varias
pu�aladas. El hombre muri�. Pero la fiscal�a no pudo demostrar que �l fue el
asesino porque la chica, �nica testigo, declar� que no pudo ver bien al asesino,
as� que en el juicio fue declarado absuelto. Ahora se ha quedado con la viuda
llev�ndose los beneficios que ella obtiene en el prost�bulo. Tiene otras dos
putas m�s a las que les saca todo el jornal.



Para ser justa debo agradecer algo al Chul�. �l fue quien
dise�� la ornamentaci�n de mi cuerpo. Los tatuajes con motivos sexuales que
parten de mi ri�onada, se extienden sinuosamente por mis nalgas, recorren mis
muslos por detr�s y vuelven por delante hasta terminar en una linda mariposa
sobre mi depilado monte de Venus hacen que los espectadores de mis n�meros me
aclamen enardecidos por la imagen sensual y estilizada que corrige mi cuerpo un
tanto paticorto y rechonchete. Do�a Camila dice que eso es cosa de la
adolescencia y que cuando madure voy a ser una mujer arrebatadora. Ojal�. Dios
la oiga. El Chul� tambi�n me prescribi� unos piercings en los pezones, el
cl�toris y la lengua de los que estoy sumamente orgullosa. Eso hace que me
arrienden m�s clientes y se incrementen mis ingresos para mantener mi casa y mi
familia. Por supuesto, como todas las putas del local, llevo tatuado el anagrama
en lo alto del pecho izquierdo.



Lo de "mis" ingresos es un decir. Tengo una cuenta corriente
que, por ser menor de edad, controla pap�. Los pagos de mis servicios en el
burdel los ingresa directamente Do�a Camila, sea por tarjeta de cr�dito o en
met�lico. En este caso siempre tarda una semana en ingresarlos. Dice que es para
compensar la t�cnica contable de los bancos que computan los ingresos de dinero
el primer d�a de la semana siguiente y las extracciones el �ltimo d�a de la
semana anterior. Bueno, no lo entiendo bien. Pero si pap� est� de acuerdo,
bendito sea.



Por contar un d�a � hoy mismo.



Cuando llegamos Do�a Camila y yo al local, ella se dirige al
despacho y yo me voy al vestuario. Me meto en el ba�o para inyectar por mi ano
uno o dos enemas �seg�n lo que haya comido- y dejar mi herramienta trasera
limpia como predica la publicidad de Do�a Camila sobre los servicios del
establecimiento. Me visto las diminutas braguitas sin entrepierna, las medias
blancas de colegiala pero absurdamente hasta medio muslo, la microfalda de tela
escocesa que no llega a cubrir ni el entronque de las nalgas con los muslos, las
zapatillas deportivas y el polo blanco que delata ostensiblemente los aros de
mis pezones, ya que no necesito sujetador porque mis discretas teticas son muy
orgullosas y se yerguen como globitos de gas. Alg�n cliente me ha reprochado mi
escaso pecho, pero yo estoy muy satisfecha de �l.



Despu�s, y seg�n la hora, puede ser las putas tengamos que
exhibirnos en la pasarela del escenario o bien esperar clientes en el gran sal�n
recibidor. Toc� pasarela y ah� sal�, animosa, a pillar un cliente. Solo hab�a
tres hombres y una mujer y de ellos me seleccionaron uno de los hombres,
bastante viejo, y la mujer, tambi�n de avanzada edad. Se enzarzaron los dos en
una disputa �Do�a Camila no tiene establecido el procedimiento en caso de
concurrencia- y hubo de intervenir El Chul�.



Intent� convencer a cada cual de que hab�a chicas disponibles
tan atractivas como yo, pero no hubo manera. (Comprender�n que yo estuviese
henchida de vanidad contemplando la disputa). El Chul� llev� a los dos a
discutir el asunto con Do�a Camila y mientras tanto entr� en las gradas un se�or
que me se�al�.



El se�or deb�a estar por m�s de sesenta a�os, muy pulcro,
bien hablado y cort�s conmigo. Le hice un servicio corriente como pidi�, pero le
puse mucha voluntad y afecto para cazarlo como cliente habitual porque me
deslumbr�. Al despedirse me dio propina � que acaba en mi bolso y no en la
cuenta corriente- y prometi� volver siempre conmigo. Siempre que estuviera
desocupada, claro.



Despu�s de tirar el cond�n al contenedor y asearme baj� a ver
que pasaba con el contencioso anterior. Do�a Camila y El Chul� hab�an convencido
a los dos clientes de montar un cuarteto con otra de las putas. Estuve de
acuerdo �mientras cobrase el estipendio ordinario- y nos fuimos la mujer, el
hombre, Natalia y yo al cuarto de �sta.



Natalia tiene 19 a�os y una cara angelical que hace que
parezca de mi edad. Do�a Camila hab�a vendido bien la cosa. Los dos postores se
sentaron en sendas sillas y nos ordenaron hacer un l�sbico en la cama. Natalia y
yo somos muy amigas y no nos cost� nada representarlo. Bueno, no s� si esa es la
expresi�n, porque realmente nos gust� y tuvimos cada una un orgasmo que
disimulamos muy profesionalmente.



A continuaci�n la vieja lesbianorra se calz� un arn�s con
grueso dildo que sac� de su bols�n y se fue por Natalia. El se�or se decant� por
mi. Me foll� malamente porque su pene era diminuto y sin conseguir correrse.
Adem�s ol�a raro, como a cosa muerta. Mientras, Natalia gem�a a mi lado
perforado su ano por el dildo de la madura lesbiana que la embest�a
en�rgicamente.



Hubo cambio y tuve que soportar que la vieja me morrease
mientras el anciano intentaba correrse dentro de culo de Natalia que la vieja
hab�a dejado bien dilatado. Mala idea la del viejo. Natalia domina muy bien su
co�o y aprieta como una prensa cuando quiere orde�ar de una vez al cliente.



Por fin la vieja me hizo comerle el co�o hasta que se corri�
y el se�or, entrado ya en raz�n, foll� a Natalia de forma convencional y ella lo
llev� h�bilmente a vaciar sus huevines en el cond�n.



No ha sido agradable, pero soportable, comparado con las
cosas que tengo que sufrir cotidianamente.



Natalia trabaja tambi�n en pel�culas porno que le reportan
muy buenos ingresos y conoce mundo porque se ruedan en Barcelona, Praga,
Budapest y sitios as�. La echo en falta cuando se va de tour para rodar las
pelis. Le ped� a Do�a Camila que me arrendase para las pel�culas pero me lo
deneg� porque soy menor de edad. Sin embargo alguna vez ha permitido que me
filme El Chul� follando con viejos y despu�s me ha dado buen dinerete. No s�
como se lo monta. Seguro que no es muy legal. Sobre todo si El Chul� est� por
medio.



Despu�s de eso tuve otros dos clientes normalitos. Se�ores en
la cincuentena, casados, formales, conservadores, con hijos. Lo habitual.



Hay d�as malos.



Recuerdo hace dos semanas. Me eligieron un par de caballeros
de raza negra gigantescos y pidieron ser atendidos simult�neamente. Do�a Camila
tiene establecido que en ese caso haya una rebaja del 15% de las tarifas y los
negros se acogieron a ella. Cuando sacaron sus vergas para que se las mamase ya
me puse a rezar. Eran tremendas, solo pod�a lamerlas. Pero uno de ellos me meti�
los dedos en la boca, me estir� las comisuras y acab� metiendo el monstruoso
tronco en mi boca. Me sujet� por la nuca y los pelos para que no me la sacase y
empez� a empujar hacia dentro.



Yo ten�a arcadas y babeaba pero el negro segu�a. Mientras el
otro aprovech� para met�rmela en el co�o. Me doli� por lo grande, pero pronto me
acostumbr�. Pero era el que me follaba la garganta.



Despu�s se cambiaron de sitio, pero el de detr�s, en vez de
follarme el co�ito me la meti� por el recto. Cre� morirme, pero al rato mi
esf�nter se acostumbr� al monstruoso pene y ya no me molest� tanto. No sab�a yo
que era capaz de abrirme tanto. De tener muchos clientes como esos pronto
tendr�a el co�o como la vieja Mayra.



Despu�s quisieron darme al mismo tiempo por el co�o y el
culo. No es la primera vez que lo hago. Es frecuente que me follen as� en las
fiestas bacanales y en las despedidas de soltero. Pero estos dos quer�an hacerlo
por el precio ordinario y eso no est� estipulado as� en el cuadro de mis
tarifas.



Como no entraban en raz�n apret� el timbre y se person� El
Chul� que los convenci� r�pidamente de sacar de sus bolsillos el complemento o
largarse. Optaron por pagar y me dispuse al sacrificio. El Chul� se fue
satisfecho de no perder esos ingresos.



Al cabo de dos minutos de bombeo por ambos agujeros le fui
cogiendo gusto a sentirme totalmente repleta en mis entra�as y no pude reprimir
un orgasmo del que los dos negros ni se enteraron. Las dem�s putas dicen que soy
muy rara por tener orgasmos con algunos clientes.



La primera vez que prob� la fusta de El Chul� fue hace cinco
meses, no lo olvido. Estaba yo esperando cliente vestida de colegiala viciosa
como siempre cuando me avisan que me presente en el despacho de Do�a Camila.



Cuando entro est� la madame con una pareja muy bien vestida y
de porte distinguido, de unos 40 a�os los dos.



- Miren, esta es Isaura. Lo mejor de la casa. �Qu� les dec�a?
�Es o no un hermoso angel?



- Tiene raz�n. Es una preciosidad �dice el hombre tras
contemplarme atentamente. Pero queremos verla desnuda.



- Anda Isaurita, desn�date para los se�ores.



No me importa desnudarme ante extra�os. Estoy
acostumbrad�sima. Pero no es normal que los otros no se despeloten al tiempo. Me
qued� un poco cortada ante las tres personas correctamente vestidas.



- Isaurita, date unas vueltas y presenta a los se�ores tus
virtudes.



Gir� para que me apreciasen desde todos los costados y
despu�s me inclin� des espaldas a ellos y apart� con mis manos las cachas para
que apreciasen mi conejito pulcramente pelado y mi ojete trasero.



La se�ora se acerc� con inter�s y pregunt� a Do�a Camila:



- �Puedo meter los dedos para probar?



- Por supuesto se�ora. Siempre se debe asegurar uno de la
calidad de la mercanc�a.



- �Est� limpia de atr�s?



- No lo dude se�ora. Este establecimiento tiene a gala
garantizar siempre la m�s estricta higiene.



La se�ora meti� un dedo en mi culo y otros dos al mismo
tiempo en el co�o y los estuvo frotando un rato. Despu�s se los llev� primero a
la nariz, y despu�sa la boca y oli� palade� mis jugos �ntimos y oli�



- Bueno Arturo. Yo creo que a nuestro Paquito le gustar� la
putita.


- Do�a Camila, mi mujer siempre suele acertar. Queremos a la
putita en viernes en nuestra mansi�n a las ocho de la tarde. Perfectamente
depilada, con especial atenci�n al pubis, manicura impecable, maquillaje
discreto, bien duchada y el las tripas limpias.



La pareja se march� y la madame me envi� a mis quehaceres. Yo
le daba vueltas a lo de Paquito. "Su Paquito", hab�an dicho. No ser�a mayor. A
lo mekor me tocaba desvirgarlo. Por fin iba a follar con alguien de mi edad,
Salvo mis hermanos, que no cuentan. A lo mejor se enamoraba de mi y nos
cas�bamos. Y hab�an hablado de una mansi�n, deb�an ser ricos. Se notaba en su
porte y modales.



El viernes puse todo mi empe�o en parecer la mujer 10. Do�a
Camila, que me inspeccion� antes de tomar el taxi me dijo que lo era, que era la
mujer 10. Contenta me fui a conocer a Paquito. Antes le ped� a la madame la
consabida caja de condones pero sonriendo me dijo que ese d�a no har�an falta.



La casa era una formidable edificaci�n con un gran parque
todo alrededor. Me recibi� una criada muy guapa y me condujo al otro lado de la
casa por el parque. All� estaba la pareja, bajo un cenador tomando una copa.



De inmediato me ordenaron desnudar y lo hice. Comprobaron con
gesto complacido mi pulcro cuerpo y la se�ora dijo:



Ponte en el c�sped de rodillas, la cabeza y las tetas sobre
�l y levantando el culo todo lo que puedas. Voy a buscar a Paquito.



Me coloqu� en esa posici�n nada anormal cuando te arriendan
para usarte el trasero. El se�or me miraba complacido y apareci� la se�ora con
un enorme perro negro.



Me levant� de inmediato.



-�Ese monstruo es Paquito?



- Si, este es nuestro Paquito. Ya se cans� de la se�ora y de
la criada y necesita nueva hembra. Es caprichoso nuestro nene.



- Pues va a ser que no.



- Que no. �Qu�?



- Que yo no me presto a follar con un animal.



- �No te dijo nada Do�a Camila?



- No.



El hombre se apart� mientras tecleaba en su tel�fono m�vil y
yo me qued� all� desnuda mirando con pavor al gran bicho que ten�a su mirada, a
mi juicio asesina, fija en mi. Quiz� le hab�a molestado que le rechazase. Los
perros tienen mucha intuici�n.



Casi media hora estuve as�, ya que ni la se�ora ni el se�or
se dignaron llevarse al perro. Ellos desaparecieron y pens� que hab�an decidido
que el chucho me violase o bien me destrozase.



Por fin reaparecieron acompa�ados de El Chul� cuando yo
estaba a punto de salir corriendo aunque el perro me destrozase el culo a
dentelladas.



El Chul� se acerc� a mi manoseando su odiada fusta y me mir�
con su ojos crueles. No dijo palabra. Repentinamente me solt� un fustazo en un
pez�n que sent� como un rel�mpago por mi cerebro. Solt� a llorar.



- Los se�ores dicen que has dicho que Do�a Camila no te
anunci� en qu� consist�a el servicio.



- Sssi.



- Has dejado a Do�a Camila en mal lugar. Yo mismo la escuch�
dec�rtelo. Eres una puta lerda que no escuchas y desprestigias el
establecimiento. Haz tu trabajo o te igualo los pezones.



De inmediato de arrodill� y me volv�a a colocar como me
hab�an ordenado. Nada m�s verme as�, el perro se acerc� y comenz� a olfatearme
por todas partes, le not� una buena herramienta ya desplegada. Despu�s lami� a
fondo todo mi pubis y el culo y por �ltimo se subi� sobre mi espalda aferrado a
mis costados con sus patas delanteras que llevaba forradas de tela y empez� a
golpearme buscando alguno de los agujeros.



La se�ora ayud� al animal guiando su pene a mi co�o, aunque
estoy segura que �l solo hubiera encontrado donde enfundarlo. Le dej� hacer lo
que quisiera y el bicho me empez� a montar fren�ticamente hasta que not� mi co�o
calentarse con su esperma. Qued� abotonada al animal culo con culo durante diez
minutos mientras la se�ora lo acariciaba como si fuera su hijo y los hombres
miraban. Me sent�a bastante humillada, pero el oficio proporciona numerosas
ocasiones de ello y decid� tom�rmelo como una m�s.



Cuando me entregaron mil euros no me lo pod�a creer.
Setecientos para mi. Pap� se pondr�a contento.



El regreso al burdel lo hice con El Chul� que hab�a despedido
al taxi. Durante el trayecto me hizo mamarle la polla mientras conduc�a.
Numerosos camioneros me ve�an y hac�an sonar sus bocinas. A mi no me importa que
me vean jodiendo. Ya estoy acostumbrada por el espect�culo en vivo que hago en
el local anexo al burdel. Lo que me fastidia es tener que tenerme siempre el
semen de El Chul�. El no usa nunca cond�n.



Al llegar al establecimiento me esperaba Do�a Camila. Como me
tem�a me llev� una rega�ina por mi rebeld�a y le orden� a su amante que me
bajase al s�tano para aplicarme un correctivo. Sin embargo me comunic� que los
se�ores, salvado ese tema, hab�an visto que Paquito hab�a salido satisfecho del
encuentro y que quer�an que acudieses todos los viernes a la misma hora. Me iba
a hacer millonaria. �Pero qu� me har�a El Chul�?.



Yo nunca hab�a visitado el s�tano porque hab�a sido siempre
obediente y sumisa. Las otras putas lo describ�an como un lugar siniestro donde
El Chul� ten�a unos cuantos aparatos para castigar.



Me tumb� sobre una mesa, me sujet� mu�ecas y tobillos a las
patas mediante unas correas quedando con las piernas abiertas y me coloc� una
mordaza de bola. Seguidamente el cabr�n me introdujo en el culo una bola
met�lica con un cable soldado que dej� asomando por mi esf�nter. El cable lo
enchuf� en una m�quina y tom� una varilla met�lica con mango aislado. Me aplic�
la varilla al pez�n maltratado y sent� una horrible quemadura que corr�a desde
mi culo al pez�n. Pas� a hacer lo mismo con mi otro pez�n y repiti� dos veces
m�s. Yo sudaba, lloraba y moqueaba.



No contento con ello me aplic� la varilla al anillo de mi
cl�toris dos veces. Me convenc� de que me hab�a inutilizado el �rgano para
siempre. Me abandon� all� durante un tiempo que me pareci� eterno. Pero solo fue
hasta las tres de la madrugada, cuando volv� a casa en el coche con Do�a Camila,
como hac�a siempre. La Do�a me dio permiso para no trabajar el s�bado, cosa
extra�a porque era el d�a de mayor negocio. El domingo y el lunes son mis d�as
libres.



Domingo y lunes libro del burdel, pero no de trabajar el
cuerpo ya que entonces es cuando mi familia disfruta de �l.



Pap� y el Ricar me suelen usar conjuntamente por los tres
agujeros intercambi�ndose en ellos. El Ricar trae �ltimamente a su novia. Ella
es una negra bastante mayor que �l, puede que 40 a�os, y que tiene unas tetas y
un pandero descomunales. Debe ser una guarrona de campeonato, porque si no no
ser�a la novia del Ricar, y menos siendo vieja. Verla desnuda lo dice todo.
Tiene tatuajes por todas partes y unos anillos de piercing de tama�o
espectacular. Tiene dos bolas en la lengua, dos argollas descomunales en los
pezones, cuatro en cada uno de los labios menores y otras cuatro en cada uno de
los labios mayores. De las argollas de los labios mayores salen unas cadenitas
que enlazan con otra argolla nada desde�able en el cl�toris que, por cierto,
parece un peque�o pene. En fin lleva tanta ferreter�a que los labios vaginales
se le han descolgado de tal manera que el co�o parece la boca de un caballo. Las
enormes manos de largas u�as pintadas de rojo son un muestrario de joyer�a. No
solo tiene sortijones en la primera falange de todos los dedos sino tambi�n en
todas las segundas falanges



A mi no me resulta atractiva pero al Ricar le priva la vieja.
Y a la puta de ella le privo yo por desgracia. Me hace comerle el agujero del
culo y el holgado co�o, que resuena por los hierros, y ella me babea en los
mismos sitios. Todo mientras El Ricar se la folla o la sodomiza y Pap� hace lo
propio conmigo mientras nos miran complacidos. Despu�s se cambian. Casi siempre
la insaciable negra acaba exigiendo que le meta mi manita en el culo mientras
Pap� se la mete en el inmenso co�o. No me extra�a que quiera que la follen con
el pu�o. Los hierros que lleva no deben permitir que las pollas penetren mucho
en su co�azo, que debe tener una enorme profundidad. Seguro que no se queda
embarazada nunca porque los espermatozoides se agotan antes de llegar a su
destino. Desde luego pap� le mete el brazo hasta el codo y la guarra no se
queja. A mi me hizo profundizar en su culo una vez hasta el hombro, claro que yo
no soy muy grande.



En estas org�as les gusta ponerme un collar de perro y
dirigirme a capricho con una cadena. No me importa, tengo un cliente habitual en
el burdel que le gusta lo mismo y ya estoy acostumbrada. Pero a veces me
enganchan la cadena al anillo del cl�toris y entonces siempre estoy temiendo que
me lo desgarren.



Con Toni es diferente. Toni prefiere follarme a solas en su
habitaci�n. Es dulce y cari�oso haci�ndomelo y yo le quiero mucho, quiz� porque
es mi gemelo.


Dice que me quiere tanto que le gustar�a tener dos pollas
para follarme el co�o y el culo a la vez. Como no las tiene, le regal� un plug
in anal que me inserta en el ano cuando me folla en la vagina y viceversa. Es un
cielo, siempre procur�ndome placer.



A Toni le encanta afeitarme el conejito y despu�s, cuando me
lo deja como el culito de un beb�, chuparlo y comerlo y beberse los litros de
jugos que suelto con los orgasmos que me proporciona mi amor. El resto de los
d�as me lo afeitan las peluqueras del prost�bulo. Estoy pensando en pedirle
dinero a pap� para depilarlo definitivamente con l�ser.



Toni siempre est� haciendo planes sobre nosotros. �ltimamente
se le ha ocurrido que cuando seamos mayores de edad y podamos coger el dinero de
mi cuenta corriente nos iremos a Barcelona para introducirnos en el cine porno.
El ser� mi representante. Me encanta la idea de que me vean follando muchos
desconocidos.




FIN.


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Relato: Isaura
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