Fue una ma�ana de esas en la que mi vida cambio convenga que
era una ni�a pero nada inocente conoc�a todo lo relativo al sexo, lo �nico que
era virgen hasta el momento y eso era lo que m�s calentaba a la clientela de
hombres maduros mas o menos de 40 a�os en adelante. Esa ma�ana me encontraba
sobre las faldas de un maduro que frecuentaba el local y que muy a menudo ped�a
mis servicios porque seg�n �l le excitaba mucho tener en sus faldas a una ni�a
tan h�bil con su pene, despu�s de estar conmigo se le paraba su tremendo pedazo
y se cog�a a las chicas del prostibulo.

El maduro se llamaba Ram�n y siempre le gustaba deleitarse
con mi cuerpecito que para la edad era bastante desarrollado fijensen que tenia
el cuerpo de una ni�a de 18 y solo tenia 12 a�os. Mis medidas eran 80 � 50 � 80
calentaba a un muerto, creo que a esa de edad estaba asi porque si bien no me
penetraban eran muchas las manos que me tocaban, y si acariciaban mi cl�toris
tanto que llegaba al orgasmo.

Siguiendo con el relato, esa ma�ana Ram�n sali� de lo usual,
mientras me contorneaba en sus faldas su verga s� erectaba cada vez mas, tanto
que en un momento me puso la puntita, cosa que me gusto muchisimo (como dije
anteriormente sabia de estas cosas ya que las chicas siempre contaban sus
experiencias lo �nico que hasta el momento nunca se me hab�a permitido) y bueno
iniciado ese jueguito deje entrar ese pedazo de verga en mi concha. Ram�n me
advirti� que podr�a tener problemas ya que m�s que tocar y jugar no se le
dejaba, a lo que no le hice caso y ped� m�s.

En la zona donde nos encontr�bamos era un lugar de espera
previo a la habitaci�n en donde si se practicaba sexo, pero era un sitio
individual, yo permanec� sentada en sus faldas con la diferencia que tenia su
verga en mi concha y eso me excitaba cada vez mas, al tiempo que Ram�n un maduro
de 59 a�os acariciaba mis pechos, y de vez en cuando lam�a mis pezones cosa que
hacia estallar todo mi sexo.

Pero todo no es alegr�a ni placer en esta vida, de golpe
entro a la sala la encargada del prostibulo y me separo de Ram�n, lo llamo
fornicador de ni�as y lo hizo retirar. Luego de esto me llamo la atenci�n y me
dijo "perra, ramera" lo que me llenaba de placer, vi all� mi posibilidad de
formar parte del grupo de rameras que all� trabajaban. Dora que asi se llamaba
me indico que ya hab�a llegado la hora de comenzar a ejercer la prostituci�n,
pero que primero deber�a tener una charla con el Dr.Lopez quien era el due�o.

Me hizo duchar y me llevo con �l, cuando llegue ya estaba al
tanto de lo sucedido, quedamos a solas y me dijo que revisar�a mi vagina, que
palpar�a mis pechos para ver que todo estuviera en orden y luego me dar�a unas
instrucciones.

Sub� a la camilla ginecolog�a, abr� mis piernas el introdujo
sus dedos, lo que comenz� a exitarme nuevamente, por un segundo los retiro y
acaricio mis pechos, tomo entre sus dedos mis pezones, amaso mis pechos tanto
que mis pezones se pusieron erectos, duros y puntiagudos. Me indico que todo era
normal, que fuera a la cama que all� y me dar�a ciertas instrucciones, fui como
una perfecta esclava y me somet� a los cuidados sexuales mas tiernos que una
chica puede recibir. Estuvimos alrededor de 8 hrs acostados en la misma
practicando diversas posturas que yo hasta el momento solo pero que nunca hab�a
experimentado.

El doctorcito como asi le llam�bamos me dijo que ahora en mas
seria una de sus chicas una vez por d�a deber�a pasar por su consultorio y
practicar una cogida era lo usual con todas, a parte seria una nueva atracci�n
del prostibulo, "ni�a precoz de 12 a�os realiza el sexo m�s rico del mundo" que
deber�a utilizar siempre protecci�n, tomar p�ldoras y que me recetar�a unas
hormonas para que mis tetas al chuparlas dieran leche. Para terminar con las
instrucciones puso un v�deo porno y llamo a dos chicos del lugar y entre los
tres comenzaron a tocarme, el Dr. Se retiro.

Uno de los chicos se acost� y pidi� que lo montara al tiempo
que el otro chupaba mis tetas, acabo dentro de m� y el segundo paso a culearme
cosa que me calent� tanto que llegue a dos orgasmos seguidos, el primero pidi�
que le mamara la verga estaba yo en cuatro patas el segundo aprovecho y me hizo
un perrito, meti� su verga por detr�s en mi concha mientras presionaba mis teta
y con sus dedos hund�a mis pezones, eso era el m�ximo de excitaci�n no se
imaginan y pensar que todo comenz� con el pobrecito de Ram�n, a quien hecharon
del prostibulo como a un simple violador de menores, pobrecito veterano m�o cuya
pija fue la primera que mi concha conoci�. Este d�a hab�a sido el m�s lujurioso
de mi vida y claro el primero ya vendr�an muchos d�as mas como este, y estaba en
lo cierto hoy a la edad de 23 a�os, sigo teniendo muchas experiencias de este
tipo.