Relato: Marco... En busca de su propia identidad (2)
Hola, mi nombre es Marco (autor de El Chico del Chat y La
Pasi�n en el F�tbol) y les presento un nuevo capitulo de serie de relatos
titulada "Marco� En busca de su propia identidad". Para cualquier
sugerencia o comentario lo pueden hacer en:
POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO
y por favor valoren este y todos los relatos ya que es una manera de que todos
los autores nos podamos sentir que nuestro trabajo vale la pena.
Marco� En busca de su propia identidad
Capitulo Dos
El regalo sorpresa de pap�
De verdad te lo vuelvo a decir si fueras mujer� tienes un
trasero muy atractivo �dijo Alejandro dudando un poco� creo que ser� mejor
que me vaya
Alejandro dejo la toalla colgada en la divisi�n y de
inmediato salio de la secci�n de las regaderas. Permanec� en la misma posici�n,
no pudo moverme de miedo ya que mi miembro estaba erecto por primera vez y me
sent�a sumamente avergonzado.
Totalmente abatido por estas nuevas sensaciones que sent�a,
me deje caer al piso quedando sentado con las rodillas en mi pecho y recargando
el rostro sobre estas comenc� a llorar. Eran l�grimas de angustia y de miedo,
pero sobretodo l�grimas llenas culpabilidad
Por primera vez en mi corta vida no sab�a que hacer y estaba
perdiendo el control de mis emociones. Me encontraba ahora llorando, recordando
la imagen de Alejandro desnudo y con mi miembro erecto por primera vez, nunca
antes lo hab�a visto as�, nunca lo hab�a vivido yo, sab�a que significaba pero
nunca lo hab�a experimentado y eso me hac�a sentir culpable, sucio, pervertido,
en ese momento pensaba que era algo anormal.
Llore hasta que me canse, mis ojos estaban sumamente rojos,
la alegr�a que llegue a sentir durante toda la ma�ana, se esfumo, ahora solo
sent�a mucho, pero mucho miedo, quer�a hablar con alguien, por primera vez me
sent�a solo y ahora se que no ser�a la �ltima vez que me sentir�a as�.
Despu�s de mucho tiempo, me levante y termine de ba�arme, mis
ojos me ard�an porque el agua no hab�a dejado de caer sobre mi rostro. Cuando me
dispon�a a tomar la toalla para secarme, record� que Alejandro la hab�a usado
minutos atr�s y sin pensarlo la tome con mis manos y la lleve hacia mi rostro
buscando su aroma, estaba como pose�do buscando alg�n recuerdo de Alejandro,
cuando de pronto mi nariz percibi� un olor extra�o, un olor que nunca antes
hab�a tenido oportunidad de percibir y busc�ndolo me percate que en medio de la
toalla hab�a una sustancia blanca y de inmediato tome un poco con la punta de
mis dedos y la sent� caliente, gelatinosa, espesa, pegajosa y sin saber porque
la prob� y el sabor era como agridulce y recuerdo que me agrado, en ese preciso
momento no sab�a que aquello hab�a sido producto de una corrida de Alejandro y
que eso que tanto me hab�a gustado eran restos de su semen, ya que yo hasta ese
momento no me hab�a masturbado ni mucho menos me hab�a corrido.
Como pude me seque y de inmediato me puso una playera
deportiva y me percate que mi b�xer estaba mojado y decid� ponerme mi pans sin
ropa interior y partir de ah� tome una de las costumbres que m�s me agradan en
la actualidad: andar sin ropa interior.
Antes de salir de los vestidores, pase por un espejo de
cuerpo completo y cegado por la curiosidad visualice a trav�s del espejo mi
perfil, observando con suma sorpresa que con este pans que tra�a puesto mi
trasero luc�a m�s abultado, mas relleno, mas atractivo, ya que la pans se
ajustaba a mis caderas, por el lado de enfrente si levantaba mis manos era muy
visible mi ombligo y por el lado de atr�s se alcanza a ver la divisi�n de mi
trasero.
Al observar como se notaban mis nalgas, nuevamente me invadi�
un nuevo sentimiento y con ello el sentimiento de culpa crec�a m�s, as� que de
inmediato sal� y me dirig� a mi casa, ya que los invitados a mi fiesta en
cualquier momento llegar�an y yo a�n segu�a en la escuela.
Como ya se me hac�a tarde, espere afuera del colegio un taxi
para llegar m�s r�pido a casa y me diera tiempo de cambiarme, de pronto observo
un taxi que se acerca y al hacerle la parada, el taxi se paso derecho
ignor�ndome por completo y segu� esperando a que apareciera un taxi nuevo,
cuando de pronto escuche el sonido de claxon de un veh�culo y me percate que se
trataba del mismo taxi y ahora ven�a de reversa por m�, el taxista no me hab�a
visto cuando le hice la parada y por el retrovisor se percato que me hab�a
ignorado y por eso venia en reversa.
Me sub� y le di la direcci�n de mi casa como mis pensamientos
segu�an invadiendo m� mente olvide por completo que mis ojos estaban hinchados y
rojos y el taxista se hab�a dado cuenta de ello:
�Qu� te paso, muchacho? �me pregunto el taxista -�te dejo
la novia?
No� no me pasa nada� -le dije un poco molesto
Pero traes los ojos completamente rojos, como si hubieras
estado llorando mucho por mucho tiempo �insist�a el taxista
Y fue cuando me di cuenta que se trataba de un muchacho como
de unos 25 a�os, luc�a muy varonil y hasta cierto punto se ve�a agresivo, sus
facciones eran duras y adem�s su voz era muy gruesa.
Lo que paso es que tengo una infecci�n en los ojos y me
hizo da�o venir a la escuela el d�a de hoy �contest� en un tono muy
fastidiado por su insistencia
Mmm� no lo creo� para mi que tu novia te dejo �insisti�
el taxista
No tengo novia �le dije yo tratando de mantener la calma
y de alguna manera hab�a logrado distraerme de lo que tanto me acongojaba
Si creo que en eso tienes raz�n� no eres de los chicos
que tienen novia �dijo el taxista dej�ndome sorprendido por su afirmaci�n
�Por qu� dice eso? �le conteste muy intrigado
Mmm� no... por nada� -contest� el taxista y como hab�a un
sem�foro rojo volteo a mirarme por completo y note un extra�o brillo en sus
ojos, que me inquieto un poco
Ahora d�game porque dice que soy de los chicos que no
tiene novia �le dijo yo muy decidido
�De verdad quieres escucharlo? �me contest� esta vez sin
mirarme
Si, quiero saberlo �conteste
Bueno� yo creo que tu eres� mmm como decirlo sin
ofenderte� bueno desde que te vi por el retrovisor la manera en que estabas
parado� tu silueta� y ahora que te escucho lo confirmo mas� -me dec�a el
taxista y yo comenzaba a sentirme sumamente angustiando, como prediciendo
que sus palabras ser�an algo muy duro para mi
Que yo parezco que�termine de decirlo sin rodeos� -no
recuerdo como pude apresurarlo a hablar, porque sent�a un nudo en la
garganta
Creo que eres maric�n� puto� pues para que me entiendas
�dijo el joven taxista sin saber el da�o que sus palabras provocaron en mi
Me quede nuevamente en silencio, no sab�a que decir, nunca
antes nadie hab�a insinuado algo as� de mi, ni yo mismo lo hab�a pensando y
ahora un total desconocido me lo dec�a as� como si nada, llen�ndome a�n m�s de
miedo.
Te quedaste en silencio �dijo el taxista volte�ndome a
mirar y ahora vi en sus ojos comprensi�n y apoyo �si eso es cierto, no te
preocupes al principio es muy dif�cil aceptarlo y afrontarlo, pero ya veras
como poco a poco lo vas a superar
Pero� yo� no� soy� -no pod�a decir ninguna palabra adem�s
de que no sab�a ni que decir estaba confundido
�Sabes porque regrese por ti? Al observar a trav�s del
retrovisor me di cuenta de que eres un chico muy atractivo, pero lo que m�s
me llamo la atenci�n es que tienes un trasero muy apetitoso y pues por eso
decid� regresar por ti�me imagine que tal vez tu y yo� podr�amos� -dijo el
taxista deteniendo el taxi
Pero� yo� no� soy� -segu�a sin decir nada.
Mi garganta y mi pecho estaban cerrados, sent�a que no pod�a
respirar bien, as� que sin pensarlo saque un billete de mi mochila y se lo di,
baj�ndome de inmediato del taxi y comenc� a correr sin mirar atr�s,
afortunadamente mi casa estaba a media cuadra, sin saber como busque las llaves,
abr� y de inmediato me encerr� en mi recamara.
Esta vez ya no pod�a ni llorar, los ojos me ard�an y las
l�grimas ya no me sal�an, solo me deje caer sobre la cama aventando la mochila
en el suelo, en esos momentos quer�a desaparecer el planeta, �c�mo iba a ser
posible que yo fuera gay?
Acostumbrado a no tener privacidad en casa, mam� entro sin
tocar al cuarto y de inmediato me bombardeo con preguntas �si me sent�a? �Qu� me
pasaba? y cuando me pidi� que la observara a los ojos, casi se desmaya de la
impresi�n al verme con los ojos bien rojos e hinchados, de inmediato se le
ocurri� llevarme al doctor que no pod�a seguir as�, cuando me pregunto porque
ten�a los ojos as�, le tuve que mentir dici�ndole que de repente me empezaron a
escocer fuertemente y que me rasque sin ning�n cuidado. Como ten�amos encima la
comida de la fiesta, mam� de inmediato me tranquilizo pero antes me lleno los
ojos con algunas gotas de quien sabe que medicina, me pidi� que descasara la
vista en lo que llegaran los primeros invitados y antes de salir dejo sobre una
silla la ropa que me pondr�a para la fiesta.
Al menos todo el drama que mam� hizo me sirvi� para relajarme
un poco y olvidarme de la pena que me atormentaba.
Me levante como un zombi y al observar la ropa que mam� dejo,
obviamente no me la puse y en cambio busque en mi armario aquel pantal�n y
playera que con mucho esfuerzo hab�a logrado que mi pap� me la comprara y que no
hab�a usado en ninguna ocasi�n.
Ya no hab�a tiempo para ba�arme otra vez, as� que de
inmediato me desnude por completo y esta vez sin saber porque lo hice frente a
un espejo, que aunque no era de cuerpo entero si me alejaba un poco pod�a verlo
completo.
Mientras me cambiaba me ve�a al espejo y tambi�n era la
primera vez le pon�a atenci�n a mi cuerpo, nunca antes le hab�a hecho y ahora me
encontraba identificando cada parte de mi cuerpo, fue en ese momento cuando por
ejemplo me di cuenta de que ten�a un peque�o lunar en la nalga izquierda, dos
mas en los hombros por la parte de frente. Me agrado mucho verme vestido, creo
que luc�a sumamente atractivo, incluso ahora me preocupa por lucir atractivo.
El pantal�n era de mezclilla acampanado y ajustado a la
cadera y al verme al espejo mi trasero resaltaba como nunca antes lo hab�a visto
yo mismo as�, no sab�a si era el pantal�n o que estaba descubriendo mis
atributos f�sicos, la playera era de color roja ajustada sin mangas haci�ndome
lucir m�s delgado de lo que estaba, mostrando mis delgados brazos y adem�s la
playera era corta y apenas alcanza a cubrir mi cintura de tal manera que si
levantaba los brazos pod�a verse el inicio de mis nalgas y para finalizar . Como
el cabello lo ten�a quebrado no era necesario peinarlo con un poco de gel se
acomodaba a mi antojo, antes de salir del cuarto nuevamente me mire al espejo y
me gusto verme.
Supongo que el hecho de que dos personas el d�a de hoy
alabaran mis atributos f�sicos, ocasiono que en mi despertara el inter�s por mi
aspecto f�sico.
Decid� que ahora solo me dispondr�a a disfrutar de mi fiesta
y a olvidarme al menos por un rato de los nuevos sentimientos que comenzaban a
florecer dentro de m�. Sal� de mi habitaci�n porque ya hab�a escuchado que la
gente comenzaba a llegar.
La casa a pesar de que era de dos pisos, era peque�a y
adecuada para las tres personas que viv�amos ah�. En la planta de abajo, estaba
la cocina, el estudio, la sala-comedor y un ba�o sencillo, en la planta alta
solo contaba con dos habitaciones con ba�o propio cada uno de ellas, la recamara
de mis papas y la m�a. La fiesta ser�a en el jard�n que si era amplio y contaba
con una peque�a alberca, que fue mi delirio en mi �poca de ni�ez, generalmente
la casa era usada para eventos familiares por lo amplio del jard�n.
Baje las escaleras muy contento y radiante, tanto que mi
propia madre me lanzo algunos piropos, pero a pesar de eso no pudo evitar
decirme que me ve�a muy raro con esa ropa y que no le gustar�a que continuara
visti�ndome as�, pero sus palabras lejos de hacerme sentir mal elevaron aun mas
mi ego.
De pronto escuche que tocaban el timbre y de inmediato me
dirig� abrir y comenzaron a llevar mis compa�eros de clase, algunos t�os y
primos y la casa comenz� a llenarse de ruido y de un buen ambiente. A pesar de
que en la escuela hab�a recibido algunos obsequios, aun continuaba recibiendo
m�s, por supuesto que tambi�n recib� varios piropos sobre todo de mis
compa�eras, me dec�an que ve�a muy guapo y muy diferente a mi manera de ser pero
que era un cambio agradable.
Los m�s sorprendidos con mi nueva imagen fueron mis mejores
amigos: Gabriela y Carlos, quienes no pod�an creer que me vistiera as�a ya que
estaban acostumbrados a verme m�s formal y m�s serio, pero fueron sus palabras
las que m�s me importaban a m�, porque siempre hab�an demostrado lo buenos
amigos que eran y lo mucho que me apreciaban y obviamente ellos siempre eran
sinceros conmigo.
La fiesta transcurr�a muy bien, mis compa�eros se divert�an,
mis familiares tambi�n y yo la estaba pasando genial, era el centro de
atracci�n, mis t�os no se cansaban de decirme lo mucho que estaba creciendo y
que ahora ya no era un ni�o, que me estaba convirtiendo en todo un jovencito.
Mientras andaba de un lugar a otro saludando a los invitados,
sin querer mire hacia la entrada y mi sorpresa fue mayor al percatarme que mi
amiga Gabriela recib�a a Alejandro, el chico con el que hable en las regaderas,
hab�a olvidado por completo que era primo de mi mejor amiga y ella lo hab�a
invitado.
Me quede sin habla observando como Alejandro, que luc�a muy
guapo, se acercaba con mi amiga:
�Recuerdas que te dije si pod�a invitarlo? �pregunt�
Gabriela
Por supuesto, no hay problema �conteste sin poder dejar
de observa el cuerpo de Alejandro
Hola Marco �dijo Alejandro �Felicidades �y abri� sus
brazos con la intenci�n de darme un abrazo de felicitaciones
Entonces Alejandro me abrazo fuertemente, pude sentir como me
acaricio mi espalda y una de sus manos las iba deslizando hasta llegar al final
de la misma y al tiempo que me dec�a a manera de susurro al o�do:
De verdad marquitos� luces hermos�simo con esta ropa� de
verdad que si fueras mujer ahora mismo te dar�a t�� regalo �me dijo
Alejandro separ�ndose de mi, qued�ndome sin palabras
Y sus palabras fueron como m�gicas para mi, porque por
segunda vez en este d�a mi miembro comenz� nuevamente a levantarse, no pod�a
creer que las palabras de Alejandro me excitaran de esta forma.
Comenc� nuevamente a sentirme culpable y sucio, me quede
helado en medio de toda la gente que estaba en el jard�n, era como si todo el
ambiente se hubiera congelado y yo era el �nico despierto, pero para mi
desgracia las sorpresas no terminaban ah�.
Fue mi pap� quien me hizo reaccionar:
�Qu� te pasa Marco? �pregunt� mi papa despert�ndome del
estado en que estaba
Nada� pap� no me pasa nada �le conteste
Adem�s porque estas vestido as� pareces� -mi pap� se
dispon�a a rega�arme, pero se dio cuenta de que estaba rodeado de mucha
gente y se cayo cambiando de inmediato el tono de su voz �mira aqu� esta tu
regalo
Y pap� me entrego una caja grande y pesada y mis compa�eros
comenzaron a gritar que lo abriera y emocionado me dispuse a romper la envoltura
del regalo mientras la mayor�a se acercaba haciendo una bola llevados por la
curiosidad.
Cuando por fin logre quitarle la envoltura y al destapar la
caja, descubr� que se trataba de una mochila de cuero, pero que para ser solo la
mochila pesaba mucho y nuevamente el grito de todos insist�an a que abriera
ahora la mochila y cuando lo hice descubr� que se trataba de una computadora
port�til, la misma que semanas anteriores le hab�a insistido a mi pap� que me
comprara sorprendiendo a la gran mayor�a de mis compa�eros, sobre todo aquellos
a los que les llamaba la atenci�n todo lo referente a la computaci�n, �rea que
tambi�n me encantaba.
De inmediato Gabriela y Carlos se acercaron sorprendidos por
el regalo, mi papa me pidi� que lo acompa�ara a al puerta porque ten�a algo muy
importante que decirme y nos fuimos a la entrada tom�ndome del brazo me llevo
hacia su coche y me sorprendi� demasiado que afuera de coche estaba parado un
muchacho con una maleta, no lo pod�a alcanzar a ver bien por que esta muy
obscuro, mi papa le pidi� que se acercara:
Ven Diego �dijo mi pap� y comenz� hablarme antes de que
llegara el chico �veras Marco, Diego es tu primo, un primo que nunca hab�as
visto ni escuchado hablar de �l y la raz�n es porque Diego, es hijo de un
hermanastro m�o con el que nunca tuve contacto durante mucho tiempo y el d�a
de hoy me entere que hace algunos d�as muri� junto con su esposa en un
accidente y Diego quedo solo en el mundo, no tiene ning�n otro familiar por
parte de su pap�, por parte de su mam� nadie quiso hacerse cargo de �l y
pues yo no lo puedo abandonar, a pesar de que nunca conviv� con su padre no
le puedo hacer eso
�Qu� me estas tratando de decir pap�? �le contest�
Que Diego se va a quedar a vivir con nosotros de ahora en
adelante, lo tienes que tratar como un hermano, recuerda que no tiene m�s
familia que la nuestra.
Ante de contestar levante la mirada y ten�a frente a mi a
Diego y lo que vi me dejo realmente sorprendido.
Continuara�