Hola, hace tiempo escrib� un relato que no publicaron pero
ahora narro la continuaci�n.
Yo soy un joven de 21 a�os que radica en cierto lugar de
M�xico, soy alto como de 1.85m, delgado, de piel blanca, cabello negro, ojos
caf� claro y en realidad no soy feo, aunque tampoco soy un galanazo. En fin,
tengo una prima que tiene mi misma edad pues nacimos el mismo a�o, ella es alta
como de 1.72m de piel muy blanca, cabello negro lacio hasta media espalda, tiene
unos senos que yo dir�a que son perfectos pues est�n redonditos y en su lugar de
buen tama�o, muy blancos con un pez�n bastante grandecito cuando se exita, tiene
un trasero de pel�cula, bien redondito y paradito, y que conste que no tiene
ninguna cirug�a por su puesto.
En fin, todo comenz�, como lo cont� en mi otro relato, hace
un a�o, en las fiestas de diciembre siempre vamos a pasar la navidad a la ciudad
de M�xico pues all� se encuentra la familia de mi pap�, todo era normal, mi
prima y yo siempre hemos sido muy cari�osos el uno con el otro y siempre hemos
llevado un tipo de relaci�n mas o menos de novios plat�nicos, agarr�ndonos de la
mano, caminando abrazados, pero nada m�s. Pero esta vez todo fue distinto, pues
el trato comenz� a ser diferente, la manera de abrazarnos cuando camin�bamos por
la plaza era m�s sexual, yo la tomaba por su cintura m�s abajo de lo normal y
ella hac�a lo propio, cuando entramos a una tienda de ropa, mientras ella ve�a
alguna prenda yo la tomaba por atr�s de su cintura y me acercaba mucho, poniendo
mi barbilla sobre su hombro para ver lo que ella estaba viendo (si claro).
Para no hacer el cuento m�s largo, nosotros acostumbramos
jugar juegos de mesa en esas reuniones con la familia, as� que mientras
jug�bamos cartas nosotros dos hac�amos equipo y nos sent�bamos juntos y pegados
a la mesa, de manera que nuestras piernas quedaran cubiertas por el mantel. Debo
decir que ella comenz� todo el jugueteo pues mientras jug�bamos era yo el que
sosten�a las cartas mientras que ella con su mano por debajo del mantel
acariciaba mis piernas muy seductoramente, en ciertas ocaciones yo tomaba las
cartas con una sola mano y con la otra correspond�a a sus caricias de la misma
manera, era genial pues ella usaba un pantal�n de esos pegaditos hecho con una
tela muy delgadita que me permit�a sentir sus piernas como si no trajera nada.
As� pasamos la semana hasta que sucedi� que debido a la
comida de la cena de navidad, mi mam� se enferm� y la tuvieron que hospitalizar,
as� que tuvimos que quedarnos m�s tiempo del planeado en la ciudad. Como mi pap�
se fue a dormir al hospital para cuidar a mi mam� mi prima se qued� a dormir en
la casa de mi abuelita, que es donde nos quedamos nosotros. Ese d�a,
desgraciadamente y por est�pido no aprovech� la oportunidad que se presentaba
pues me dorm� en el sill�n de la sala, pero me promet� que no volver�a a mi casa
hasta haber hecho mi aproximaci�n con ella.
D�as despu�s una amiga de mi t�a nos invit� a su casa al
recalentado despu�s de a�o nuevo, as� que fuimos.
Obviamente nos sentamos mi prima y yo juntos y empezamos
nuestros juegos debajo de la mesa, como de costumbre, pero esta vez fuimos mas
all� pues acarici�bamos un poquito m�s arriba que de costumbre y cuando todos se
vieron fuera de nuestro alcance despu�s de cenar y nos quedamos relativamente
solos en el comedor, ella comenz� a besar mi cuello de manera muy sensual, lo
cual me vuelve loco. Luego nos levantamos de la mesa y nos fuimos a la sala
donde mis primos estaban viendo una pel�cula, yo me sent� en el sill�n grande y
ella junto a mi se acost� pr�cticamente sobre m�, dejando su torso a mi alcance.
Mientras nadie nos ve�a comenc� a rozar con mi brazo su seno izquierdo con el
pretexto de calentar con mi mano su brazo del mismo lado, not� que ella no hac�a
nada al respecto, excepto que, por el contrario, se acomod� de manera que
pudiera continuar mi tarea sin que nadie se percatara de lo que estaba haciendo.
Luego por fin me di valor y acarici� su seno con la mano directamente y sin
decir agua va.
Ella se sorprendi� un poco y se movi�, pero no dijo nada, y
luego volvi� a la posici�n en la que se encontraba.
Inmediatamente despu�s tuve una idea genial, alegando el
clima fr�o, le ped� a mi primo que me pasara las chamarras que se encontraban
junto a �l en el otro sill�n, me pas� tres chamarras con las que tap� el cuerpo
de mi prima y de paso el m�o.
Ah� empez� todo, comenc� a sobarle sus tetas con mi mano
derecha (que era la que estaba libre) ya debajo de la protecci�n que nos
brindaban las chamarras, las acariciaba a mi gusto pues hace mucho que no tocaba
unas tetas y nunca unas tan espectaculares como esas, despu�s me fui animando
m�s y comenc� a tocarlas por debajos de su delgado sueter, sobre la blusa,
luego, debajo de la blusa hasta que por fin, baj� el sost�n de cada uno de sus
senos y los pude acariciar piel con piel, yo estaba en la gloria, no s� si ella
notaba el grado de exitaci�n en el que yo me encontraba pues mi verga estaba
incre�blemente grande y dura. Despu�s de un buen rato (aprox 1hr) de estar
acariciando esas preciosas tetas a mi gusto, decid� ir m�s all� y comenc� a
acariciar su sexo por arriba del pantal�n pues tra�a uno de esos pantalones de
tela muy delgada.
Ella comenz� a respirar entrecortadamente, lo que me dec�a
que de verdad estaba disfrutando. Abr� el cierre de su pantal�n y comenc� a
meter la mano a ese lugar prohibido, toqu� su pantaletita que pude apreciar
ten�a un mo�ito, esto me puso a mil, luego introduje mi mano por debajo de su
calzoncito hasta que me encontre frente a frente con su lugar m�s �ntimo, su
monte de venus, lleno de pelitos, y comenc� a meter mis dedos (no sin falta de
esfuerzo pues su pantal�n era bastante apretadito) y ella me ayudaba poni�ndose
en posiciones que facilitaran mi acceso. As� comenc� a acariciar lo que me
pareci� que era su cl�toris pues no pod�a ver nada, hasta que ella agarr�
fuertemente mi brazo y tens� los m�sculos de sus pies, lo que me hizo ver que
hab�a alcanzado el orgasmo m�s silencioso en la historia de la mujer.
Despu�s de eso, regresamos a nuestra ciudad y no la volv� a
ver hasta este a�o, en las mismas fechas, donde volvimos a repetir la
experiencia e incluso, fuimos un poco m�s all�.