Hola ya les cont� como comenc� en el mundo de trasvestirme,
ahora les voy a contar los momentos que mas marcaron mi vida para ser la esclava
de mi �nico gran amor.
En mis vacaciones escolares, mis padres me dijeron para ir de
paseo a las afueras de la ciudad, a visitar a unos parientes que tenemos. Yo no
tuve muchas ganas de ir, ya que realmente me parec�a algo aburrido y mon�tono ir
all� con mis padres, adem�s ve�a la oportunidad de poder estar con Juan Carlos
bastante tiempo sin interrupciones as� que decid� quedarme en mi casa.
Mis padres se fueron un d�a domingo y me dijeron que cuidara
la casa, yo les ped� que si pod�a venir Juan Carlos para que se quedara a dormir
algunos d�as cosa que mis padres aceptaron, ya que ve�an a Juan Carlos como un
buen amigo m�o y no pensaban nada malo al respecto. El mismo d�a domingo Juan
Carlos pidi� permiso en su casa para quedarse a dormir varios d�as en mi casa
cosa que tambi�n su madre acepto.
Cuando Juan Carlos lleg�, trajo consigo un malet�n que yo le
pregunte para que era el malet�n, el me respondi� que ya lo sabr�a. Fuimos a mi
cuarto y al entrar el me dice, como tus padres no est�n, quiero que seas mi
mujer toda esta semana por lo tanto hablar�s, vestir�s y har�s todo como si
fueras mujer, as� que desde ahora te vestir�s como una chica todo el d�a para m�
y por eso te he tra�do toda esta ropa y abriendo su malet�n saco bastantes ropa
femenina cosa que a mi me excit� mucho. Me dijo que era ropa de su hermana que
ya no usaba porque le quedaba chico y que me la pod�a quedar si deseaba. El se
fue a la sala a ver televisi�n y me dijo que comenzara a cambiarme para �l.
Lo primero que ten�a que hacer era ver la ropa que me hab�a
tra�do Juan Carlos, as� que comenc� a ponerla encima de mi cama, hab�a varias
minis, faldas, top, brasiers, trusas, conjuntos, pero hab�a algo que me llamo
mucho la atenci�n, era un uniforme escolar que le hab�an cortado un poco la
falda y tambi�n hab�a una falda que era bien corta ya que tambi�n la hab�a
cortado. Me sent�a todo una reina al ver toda esa ropa para m�, proced� a
vestirme para mi hombre, escog� la falda que Juan Carlos la hab�a cortado,
escog� una tanga bien sensual de color negra, un brasier que hac�a juego con la
tanga, un top bien pegado que dejaba ver mi ombligo y un par de zapatos que eran
un poco elevados. Cuando me comienzo a vestir me doy cuenta que la falda que
quer�a usar me llegaba pr�cticamente hasta donde termina mis nalgas, cosa que
pense que Juan Carlos lo hab�a hecho a prop�sito, igual me la puse ya que me
gustaba mostrar mis atributos a mi hombre, despu�s me fui al ba�o me comenc� a
maquillar y usar perfume de mi madre.
Cuando sal� a la sala, el estaba viendo una pel�cula
pornogr�fica y al sentir mis pasos puso pause, al voltear a verme se quedo con
la boca abierta y me dijo que me ve�a realmente hermosa y que le encantaba que
me haya puesto esa falda, se acerc� a m� y me comenz� a besar apasionadamente,
de ah� me abrazo y me llevo a lado suyo en el sof� para ver la pel�cula, cuando
el se sienta me pide que vaya a recoger algo que estaba en el piso, yo me agache
a recogerlo y me dice que lo que mas le gusta de la falda es que me puede ver
todo mi trasero cuando me agacho, cuando me dijo esto yo me sonroj� y me dijo
que me sentara a lado suyo, cuando me iba a sentar siento que me pasa una mano
por mi trasero y eso me hizo saltar (por las cosquillas), pero logr� sentarme a
lado suyo. �l puso play nuevamente y comenzamos a ver la pel�cula, el actor
estaba bien guapo y la ten�a bien grande, nunca antes me hab�a puesto a ver los
penes en lugar de las chicas.
Despu�s de un rato, veo que se le comienza a levantar a Juan
Carlos, as� que me agacho y se lo comienzo a morder suavemente encima del buzo
que tra�a puesto, cuando lo hago el comienza a suspirar de placer cosa que tome
como que quer�a que siguiera as� que le saque el buzo y se lo comenc� a chupar,
cuanto hab�a extra�ado tener esa gran verga dentro de mi boca jugueteando mi
lengua con su cabecita, Juan Carlos despu�s de un rato me dice que me levante,
yo obedezco y me pongo de pie, el con sus manos me voltea d�ndole la espalda,
con sus manos me quita mi trusa lentamente alabando lo bonita que me ve�a ese
d�a, termino de sacarme la trusa y me dijo que me sentara encima de su verga ya
que la faldita no iba a molestar, yo encantada comenc� a sentarme y agarr� su
verga con mi mano para guiarla a mi huequito que estaba pidiendo que lo
penetraran, me comenc� a sentar suavemente sobre su verga y �l con sus dos manos
en mis caderas me hunde de un solo golpe que me hizo doler, me puse a mover de
arriba para abajo no subiendo tanto, as� que Juan Carlos con sus manos en mis
caderas comenz� a subirme mas alto y dejarme caer siendo �l quien llevara el
ritmo.
Despu�s de unos minutos me dijo que me parara cosa que yo no
quer�a pero igual le hice caso, me agarro de la mano y me llevo a mi cuarto, me
hizo echarme boca arriba como en la pel�cula, me abri� las piernas y se las puso
en los hombros, era un poco incomoda la pose, coloc� su pene en mi huequito y de
un solo golpe me lo meti� todo, ya no me doli� para nada solo sent�a mucho
placer, me gusto mucho esta pose porque me dejaba verlo y �l hac�a lo mismo
conmigo dici�ndome cosas como lo hermosa que estaba, lo bien que lo pasaba
conmigo y que yo como Ver�nica le gustaba mucho, yo al escuchar estas palabra
tuve un orgasmo de lo mejor viendo a mi hombre el placer que yo le daba, �l
segu�a bombeando y yo segu�a disfrutando ya que me parec�a lo mejor del mundo
estar as� con mi amado Juan Carlos.
Me saco su verga y me dijo que me echara de costado, cosa que
hice sin pensarlo dos veces, el se echo detr�s de m� y me la meti� nuevamente
fuerte, ahora lo hac�a mas fuerte ya que me sacaba su verga hasta fuera y la
volv�a a meter con todas sus fuerza, mientras tanto �l me daba besos en mi boca
haciendo juguetear nuestras lenguas, era tan delicioso el momento que no pude
aguantar y explot� en otro orgasmo el cual Juan Carlos si lo noto ya que este
fue tambi�n maravilloso, el sigui� bombeando por un buen rato hasta que me la
saco y se arrodillo en la cama cerca de mi cara, yo ya sab�a lo que quer�a as�
que comenc� mamar esa deliciosa verga que me hab�a dado tanto placer, ayudada
por mi mano y con una muy buena mamada, no tardo mucho en tirar ese delicioso
manjar que me tome una gran parte y la otra parte la ten�a esparcida sobre mi
cara, despu�s de que hab�a llegado segu� mam�ndola hasta que no quedara ninguna
gota de semen en su verga. Me dijo que le hab�a encantado y que estaba muy
satisfecho, despu�s de eso Juan Carlos me abrazo y entre sus brazos me quede
dormida.
As� paso mi lindo d�a domingo, otro d�a les cuento como la
pase el d�a lunes y los dem�s d�as donde ning�n d�a pare de gozar.