Quien mejor para ense�arnos la primera vez, que una maestra�

Hola amigos, leyendo esta secci�n me di cuenta que es un buen
espacio para compartir experiencias que en ocasiones no podemos o no debemos
comentar con otras personas, aunque �stas sean los mejores amigos, quiz� no lo
comprender�an, pues bien, mi nombre no importa, lo que interesa es el contenido
er�tico de estos relatos, y a�n cuando nunca he escrito de esta forma, espero
poder trasladarlos en un relato lleno de gratos momentos.

La historia inicia cuando yo ten�a 14 a�os, me encontraba
jugando soccer en con los chicos de la calle cuando una maestra, vecina de la
calle me hizo se�as para que me acercara, ya estando frente a ella me pidi� de
favor que le ayudara a colocar un cortinero, al cual como buen chico acced�, la
maestra Karla (ese es su nombre) tendr�a cerca de 40 a�os, sin embargo ten�a un
trasero tremendo, y un par de senos fenomenales, no era muy delgada pero se
notaba que estaba en muy buena forma, pues bien, ya estando en una recamara de
su casa me pidi� primero que le detuviera la escalerilla, la maestra llevaba
puesta una faldita corta color mel�n y una blusa blanca de botones al frente, de
lo cual no me hab�a percatado hasta que subi� los tres escalones de la
escalerilla, lo que vi fue mi primer pantaleta de mujer a 10 cm de distancia,
las manos me sudaban, un par de buenas nalgas aprisionaban el panty blanco de
una forma que mi miembro se levanto de inmediato, as� estuve un rato hasta que
me di cuenta que la maestra me observaba, y desvi� la mirada, ella no dijo nada,
despu�s me pidi� que agarrara bien la escalerilla y ella estiro una pierna hacia
otro mueble que ten�a enfrente y la visi�n me hizo doblar las piernas, apareci�
frente a mi su monte de Venus abultado cubierto por un tri�ngulito de tela de
encaje y que apenas manten�a aprisionados un mont�n de vellos que luchaban por
salirse de este por los laterales y que lo obscurec�an, entre miradas que
desviaba por la pena alcance a ver como la parte baja de su panty estaba h�medo.

De pronto la maestra se tambaleo y yo la sujete de las
piernas, vaya par de piernas, en el movimiento sin yo quererlo puse una mano en
su trasero, casi me chorreo all� mismo. La maestra me pidi� que mejor yo subiera
por la escalerilla y que ella la sujetaba (ahora comprendo que era un ardid),
cuando estaba sobre la escalera me pregunto: oye, �no sab�a que estuvieras ya
tan crecidito! Me dijo viendo el bulto que ten�a en el pantal�n,- bueno, ya voy
a cumplir 15 le dije-as� parece me dijo tomando mi palo por encima del pantal�n
(ahora era yo el que casi se ca�a. -maestra �Que hace? Le dije mientras ella me
sacaba la verga que para entonces estaba m�s parada que la torre latino (bueno
no tanto, exagero un poco). -vaya muchachito que guardado lo ten�as, �y ya has
cogido? - desde luego la pregunta me turb� mientras ella se quitaba la blusa y
mostraba un par de tetas aprisionada por el sost�n, parec�a que reventar�a- casi
como aut�mata le agarre los senos y los saque de su envoltura, para mi era un
regalo, jam�s hab�a visto unas, suaves pero firmes a�n, ella me jalo la cabeza y
me los puso en la cara, autom�ticamente comenc� a besarlos y chuparlos.

De pronto, ella me tiro sobre un silloncito que ten�a y me
bajo el pantal�n y empez� a chuparme el pene, casi me desmayo y sent�a mis
piernas dormidas, luego ella se volteo y me puso frente a la cara ese tremendo
culo y sin saber como s�lo hice a un lado la braguita y comenc� a chupar la
entrada de su vagina desde luego atragant�ndome algunos pelillos la maestra se
mov�a de una forma que la desconoc�a, tenia ante mi a una gran puta, y que todos
en la calle consider�bamos como la mujer mas recatada, le chupe el cl�toris y el
culo (claro yo no sabia vien entonces, ella me los alternaba, como ense��ndome
la rutina) de una forma que se lo deje todo mojado y de pronto se dio la vuelta
y su rajada quedo a solo unos cent�metros de mi verga, y si m�s la maestra se lo
inserto poco a poco, por lo que supe despu�s, ella ten�a ya algunos meses de no
probar palo, y vaya suavidad de su vagina aunque este mal decirlo, yo la llenaba
en todo su ancho, aunque no creo que en su profundidad sin embargo los aullidos
de la maestra pronto hicieron mella en mi mente y explote de pronto llen�ndole
el �tero con mi leche, y vaya venida (aunque ya me hab�a masturbado alguna vez)
dentro de ella que al mismo tiempo brincaba m�s y mas sobre mi pene y gritaba y
temblaba (tambi�n se corr�a), las piernas me dol�an.

Y de pronto ella se sali� y volvi� a chuparme el pene que
todav�a escup�a las mieles del sexo, y lo hizo de una forma que apenas mi pene
se iba agachando, ella sabiamente y con unas mamadas deliciosas que no tard�,
mas que uno tres minutos y lo levanto de nuevo, no cre� que esto fuera as�, se
puso en cuatro y me dijo una palabras que me dieron risa primero y que despu�s
entend�, as� que me dijo para el estreno, debe ser "chico, grande y mameluco",
al traducirlo entend� que era culito, panocha y mamada, as� que cuando ya lo
ten�a otra vez bien parado ella de los jugos que salian de su panocha se unt�
bien en la entrada del culo y me pidi� que se lo metiera, y as� lo hice, puse
primero mi cabecilla en la entrada, y dada mi inexperiencia se la empuje toda de
un jal�n tan fuerte que ella dio un grito de dolor y yo otro, nunca pens� que
fuera tan apretado ese lugar que casi sent� que el cuero de mi pito se iba hasta
la ra�z pero pronto pas� el dolor y comenc� a bombearla duro y constante, la
maestra gritaba, - as�, as� rico, m�s duro, dale,- y de pronto otra vez un
fuerte lechazo dentro del cuilto, y vaya contracciones de este al sentir dentro
todo mi l�quido, la maestra se desmanej� diciendo cosas que apenas escuchaba yo,
luego me pidi� que le prometiera que lo sucedido quedar�a entre nosotros y nadie
m�s, me comento (a�n que no lo creo) que tambi�n hab�a sido su primera vez por
el culito, d�as despu�s me regal� el panty que us� ese d�a lavadito y perfumado.
Y desde luego a�n conservo y que era como parte del pacto de no decir nada,
hasta el d�a de hoy que se los cuento a ustedes amigos.

Lo chistoso de todo esto es que su hija me fajaba en la
calle, le agarraba las tetas, las nalgas y hasta llegue a tocar sus pelillos
pero siempre me dejaba caliente y nunca se dejo coger, yo creo que la maestra
pago por lo que su hija me hac�a.

Espero les haya gustado, recuerden que es la primera vez que
escribo. Hasta la pr�xima. (espero mejorar)