Historia de Juan (I)
La verdad es que yo pensaba que ese a�o no hab�a tenido
suerte, trabajaba en una consultor�a de Zaragoza y en julio de 2002 mis jefes me
trasladaron a Madrid a abrir un nuevo despacho y sin vacaciones en agosto. Para
mi fue una crisis en todos los aspectos pues mi vida en Zaragoza era muy c�moda.
Me llamo Juan y a mis 26 a�os hab�a terminado hac�a tiempo la
carrera de econ�micas, hab�a hecho un master y llevaba dos a�os trabajando en la
empresa, en Zaragoza ten�a un peque�o apartamento donde llevaba a mis ligues y
ten�a dinero para todos mis vicios. Los fines de semana eran de locura pues a
partir de las cuatro de la ma�ana pon�a copas en un bar de unos amigos, al bar
ven�an las pibas m�s guapas y los t�os m�s cachas. De hecho yo iba al gimnasio a
diario, con mis 1,85 cms de alto, mis 80 Kgs de peso, unos pectorales tipo
Tarz�n, y unos abdominales marcados con los oblicuos en absoluto desarrollo, me
pon�a unos vaqueros y una camiseta blanca que dejaba ver mis biceps y adivinar
mi torso, mi colonia "egoiste" mi pelo moreno corto y engominado y mis ojos
negros penetrantes y me hac�a el due�o de la noche.
Por mi apartamento pasaba cada fin de semana una piba
distinta que gritaba y se corr�a de placer en el mismo momento en que me
desnudaba y pon�a mis manos sobre ella, adem�s con los colegas ten�amos nuestros
jueguecitos. Estos jueguecitos consist�an en que organiz�bamos peleas en el
almac�n del bar, eran peleas privadas, uno contra uno sin p�blico, pod�a ser a
un combate o al que primero ganara tres combates. El combate era de lucha libre,
prohibidos pu�etazos, tipo grecorromana, perd�a el que tocaba el suelo con ambos
homoplatos, si era a un combate el ganador ten�a derecho a que el perdedor le
hiciera una paja, si era a tres combates el ganador ten�a derecho a que el
perdedor se la mamara, yo pele� varias veces y me tocaba de todo.
Pues bien, como comprender�s la marcha a Madrid fue un palo.
Ten�a que trabajar a lo bestia y en la oficina no hab�a nadie m�s que yo y una
secretaria. Me toc� vivir con unos familiares pues hasta septiembre no pod�a
alquilar un apartamento a mi gusto pues no hab�a nadie y casi todo estaba
cerrado. La verdad es que, al menos, la secretaria estaba muy buena, 21 a�itos
rubia ojos azules, buenas tetas, culo firme y resping�n y una boca por la que
cab�a mi polla de 17 cent�metros. Ligarme a Ana, la secretaria, no fue tan f�cil
como preve�a, la somet� durante una semana a acoso de miradas por la ma�ana y a
permanentes galanter�as todo el d�a, ella estaba casi al caer y cay� el d�a que
nos dejaron en un despacho una mesa sin montar, yo me quit� el traje, me qued�
en boxer, hac�a un calor espantoso, y la mont�, Ana pas� por la puerta
entreabierta y vio mi torso mojado por el sudor pero no entr�.
Como pude me cubr� con la camisa y los pantalones y entr� en
el ba�o a darme una ducha, mientras me duchaba Ana entr� en la ducha nos besamos
y acariciamos, yo le com� los pezones uno a uno, me deslic� entre sus piernas y
le com� el cl�toris mientras ella gem�a. Al salir Ana me llev� a la mesa nueva,
me tumb� desnudo sobre ella y sac� un bote de mermelada de fresa que unt� sobre
mi torso y, en especial, sobre la punta de mi capullo, me chup� todo el cuerpo
mordisqueando mis pezones y culmin� engullendo mi polla en una monumental mamada
en la que acab� corri�ndome en su suave y tersa boquita.
Ante tanta mezcla de mermelada, semen, sudor, fuimos a
ducharnos pero a la salida de la ducha cog� de improvisto a Ana la hice apoyarse
en el lavabo mientras comenzaba a follarla por detr�s metiendo por su co�o mis
17 cent�metros de erecci�n mientras me ve�a en el espejo cabalgar y moverse al
un�sono mis pectorales. Concluida la monumental follada, Ana y yo ligamos un
fuerte pacto sexual de uso diario.
Para mantenerme en forma y poder satisfacer a Ana me apunt� a
un Gimnasio con piscina pues el mucho calor de Madrid no se pod�a mitigar de
otra manera. Cada d�a, despu�s de tratar con clientes, despachar con los
operarios que montaban los despachos, y montar a Ana y ser montado por ella en
cada nuevo despacho, me iba sobre las siete al Gimnasio.
El Gimnasio estaba bien, no hab�a casi gente habida cuenta la
�poca del a�o, normalmente hac�a pesas y luego iba a nadar, una tarde, estando
en los vestuarios duch�ndome despu�s del ba�o tuve el mayor descubrimiento de
ese verano, mi vista se fij� en un t�o absolutamente cachas, de mi misma
estatura, pelo largo (media melena), anchas espaldas, culo firme, piernas
torneadas, biceps bien desarrollados, y unos pectorales y abdominales de puro
vicio y deseo, el t�o estaba ca��n, bien musculado sin excesos. Lo vi cuando �l
estaba de espaldas y me qued� obnuvilado, cuando se volvi� sus ojos verdes se
fijaron en mi asombro y sonri� de manera p�cara mientras me miraba fijamente.
Yo, que hasta la fecha no hab�a tenido ninguna experiencia homosexual m�s all�
de las peleas antes comentadas, me ruboric� y apart� la vista, me segu� duchando
y sal� casi mareado de la ducha, me sequ� e intent� contener a duras penas
debajo de mi slip una enorme erecci�n de mi pene que hasta lubricaba y lo
mojaba.
Sal� de los vestuarios antes de que saliera mi "visi�n" y me
tom� algo en cafeter�a para calmarme pues no sab�a muy bien qu� me pasaba dado
que s� que hab�a estado con t�os. La imagen de esa espalda, ese torso, esa cara,
esa enorme verga, que en erecci�n ser�a de unos 19-20 cms, esa cintura estrecha
y esos brazos perfectamente musculados, marearon mi mente. Mientras tomaba un
cortado y trataba de poner en orden mis ideas escuch� que alguien me dec�a:
"Puedo sentarme" alc� la vista y v� que era �l, r�pidamente me sobrepuse a la
natural conmoci�n y le dije simplemente "S�". El vest�a unos pantalones chandal
blancos y unas bambas sin calcetines, llevaba puesta una sudadera azul que no le
llegaba a la cintura y dejaba libre la visi�n de su ombligo, de sus abdominales
oblicuos y del el�stico de su calz�n: "Calvin Klein".
El se sent� y me dijo: "Te llevo viendo por aqu� hace poco y
hoy, por lo que me he dado cuenta, me has visto t� a mi" y se sonri�, "As� es"
le dije "la verdad es que te he visto bastante bien �llevas mucho tiempo por
aqu�?" �l me cont� que era de Oviedo, que se llamaba Alberto, que estaba
destinado este mes en Madrid por su empresa, que en Septiembre se iba a Buenos
Aires, y que aqu� viv�a con unos familiares, que estaba muy colgado y que le
vendr�a bien un amigo en el Gimnasio pues se aburr�a un poco. Con gran y
disimulado regocijo le dije que podr�amos quedar cuando quisiera.
Seguimos hablando fuera del Gimnasio y dado que nuestros
domicilios ca�an cerca, fuimos dando un paseo hasta ellos. Al llegar a la puerta
de mi casa y al ir a desped�rseme dijo "Tu casa tiene escalera de incendios"
"Claro que s�" le dije extra�ado, "Estupendo" murmur� y a�adi�: "Me gustar�a
verla, me dedico a este tipo de sistemas de seguridad", entramos, yo le conduje
hacia all�, abr� la puerta y �l, sin previo aviso, me empuj� dentro y cerr� la
puerta, acto seguido me cogi� con su mano derecha los huevos y con la izquierda
meti� su mano entre mi camiseta y mis pantalones del chandal cogi�ndome el culo
y acerc�ndome hacia �l, cuando me quise enterar su lengua se hallaba dentro de
mi boca y mis pantalones y calzones a la altura de mis rodillas, r�pidamente �l
se agach� y se meti� mi verga en su boca. La mamada que me hizo fue de
esc�ndalo, yo estaba apoyado en la pared gimiendo de placer y llevando mi mano a
mis pezones acariciando mi torso, �l en cuclillas comi�ndome la polla hasta el
preciso instante en que no pude m�s y revent� en su boca.
El subi� por mi cuerpo con la boca llena de esperma y con
cara de vicio me quit� la camiseta y qued� totalmente desnudo, �l se fue
desnudando quit�ndose la sudadera y despu�s el chandal, qued�ndose s�lo con el
calz�n que no pod�a contener su enorme polla y me dijo: "Ahora t�", se tumb� de
espaldas al suelo yo me agach� y me met� sus 19 cms (hab�a calculado bien) de
verga dura en la boca y comenc� a mam�rsela hasta los huevos, Alberto no paraba
de gemir y decir "S� Juan s�, me gusta" "Ya sab�a yo que t� ibas a ser de los
m�os cabr�n, ah� ah�". Lleg� un punto en que su verga revent� en mi boca, yo no
retir� la boca y con el esperma recogido se lo fui desparramando por su pecho.
Terminada nuestra presentaci�n cada cual se fue a su casa si
bien quedamos en llamarnos. Al d�a siguiente me llam� por la ma�ana y me propuso
ir el fin de semana a la Sierra donde hab�a alquilado una habitaci�n en un
Hotel. Yo qued� encantado y me vino a buscar con su coche. El Hotel era genial,
a la entrada del mismo descubr� el motivo de mi turbaci�n frente a Alberto,
hab�a estado con muchos t�os pero no hab�a pasado de las pajas y las mamadas y
ahora estaba deseando follarme a Alberto desde que lo v�.
Subimos a la habitaci�n, entramos en ella, Alberto hab�a
cogido habitaci�n con Jacuzzi y cama de matrimonio y me dijo: "La cosas hay que
hacerlas bien, y para tu iniciaci�n todo tiene que estar previsto" �C�mo "para
mi iniciaci�n"? le pregunt�, me dijo "Es evidente que hasta la fecha no te has
acostado con t�os, lo s� desde que nos tocamos, y voy a ser tu Cicerone" dicho
esto procedi� a desnudarme poco a poco , me quit� la camisa mientras me
mordisqueaba los pezones y me lam�a el cuello, me sent� en la cama, me quit� los
zapatos y calcetines, me quit� el cintur�n, me tumb� en la cama y me quit� los
pantalones, me qued� con un slip azul claro tumbado en la cama, acto seguido
procedi� a subir lentamente por mis piernas y a mordisquearme el paquete sin
quitarme el slip, luego con los dientes me lo quit�, mi polla salt� erecta como
por un resorte, �l qued� en pie, se quit� la camisa y se acarici� el torso a mi
vista, luego se baj� los pantalones y el boxer y se acerc� a mi, puso su pecho
en el m�o y meti� su lengua en mi boca, dimos varias vueltas en la cama
bes�ndonos hasta que me puso a cuatro patas y me dijo "Abrete bien de piernas"
yo me abr�, el me lubric� con saliva el ano, se puso un preservativo y comenz� a
penetrar, al principio fue doloroso pero aguant� como un machote, la primera vez
no se corri� del todo, cuando consider� oportuno sali� , se quit� el
preservativo y culminamos la sesi�n con un 69. Nos duchamos y salimos a pasear.
En la siesta culminamos, �l me foll� y yo comenc� a
disfrutar, luego me ense�� a follar t�os, estuvimos encerrados de cuatro de la
tarde a diez de la noche y acto seguido nos dormimos del puro cansancio. Al d�a
siguiente continuamos nuestro particular entrenamiento, salimos a correr, nos
ba�amos en un pantano, nos tumbamos en la hierba, yo le acarici� el pecho, le
met� mano por su ba�ador, se lo baj�, se lo quit� y comenc� a mam�rsela
lentamente haci�ndole gemir y poner los ojos en blanco, tras la mamada, me
coloqu� entre sus piernas, se las levant� y me doctor� "cum laude" con la super
follada que le hice.
Por la tarde volvimos a Madrid, al d�a siguiente Ana y yo
"inauguramos" el ofice, la tarde de ese d�a me vi con Alberto en el Gimnasio y
me dijo que marchaba a Buenos Aires al d�a siguiente, como despedida fuimos a
cenar.
Despu�s de la cena lo llev� a que viera mi despacho, estaba
todo montado, acababan de montar la Sala de Juntas. Cuando llegu� a la Sala de
Juntas le ped� que me ayudara a llevar la mesa a un lado y despejar la Sala de
sillas, entonces le propuse un juego de despedida.
Le ofrec� una pelea a ganador de tres combates, el ganador
decid�a el premio. Alberto acept� r�pido, se desnud� y qued� con un boxer
blanco, y me desnud� y qued� con un slip rojo. Nos miramos, yo ve�a delante de
m�a a un toro, fuerte, con un pecho amplio, brazos musculosos, cuello firme,
cintura estrecha y una polla tiesa que lubricaba y hac�a un c�rculo en el boxer,
el me miraba con deseo de victoria como me dijo: "Para follarte peque�o
saltamontes, te voy a dar la lecci�n definitiva".
Comenzamos a pelear, nos tomamos de los antebrazos y tensamos
nuestros torsos, Alberto me puso la zancadilla pero yo aguant� la fuerza de su
pierna queriendo tumbar mi cuerpo, nuestros cuerpos se aproximaron, nuestros
pulsos se aceleraron, Alberto me tom� por el cuello, y aument� la fuerza de su
pierna para lograr mi ca�da, yo, perro viejo en estas lides, comprob� que
Alberto estaba invirtiendo demasiada fuerza en el primer combate as� que ced�a
ligeramente y ca� al suelo, Alberto puso mi espalda contra el suelo y se
proclam� vencedor, "Vas a durar poco" me dijo "Te voy a follar hasta que me
digas basta"
En la segunda pelea Alberto se lanz� contra mi cintura, me
cogi� la cintura flexionado las piernas y trat� de elevarme, yo resist� pero
Alberto me elev� del suelo y me tumb�, en el suelo opuse resistencia pero
Alberto consigui� llevar mi espalda al suelo, "Est�s hecho una nena peque�o
saltamontes".
Al comienzo de la tercera comprob� que Alberto estaba m�s
cansado que yo, as� que comenc� a emplearme a fondo, Alberto intent� repetir el
exitoso procedimiento de la segunda pero yo le bloque�, consegu� coger el del
cuello y colocarme detr�s de �l, Alberto estaba en mala situaci�n pero resist�a
con mayor fuerza de la que yo empleaba hasta que cedi� y lo derrib�. "Parece que
el maestro va a tener alguna dificultad" le dije. El resultado era 2 a 1.
As� llegamos a la cuarta, la victoria era al que llegara a
tres, en esta cog�a a Alberto realmente cansado, no me result� dif�cil cogerle
por los antebrazos, hacerle una zancadilla y que cayera al suelo, comprob�, no
obstante, que Alberto estaba comenzando a utilizar mi misma t�ctica y que se
empleaba menos fuerte, si bien quiz� demasiado tarde. En este punto ya nadie
dijo nada. 2 a 2.
En la quinta y decisiva Alberto estaba casi sin resuello, yo
tambi�n estaba cansado pero ataqu� el primero y me equivoqu�, Alberto me par� el
ataque a sus piernas, fui decidido a derribarle, dribl�ndome, qued� en el suelo
y Alberto se avalanz� sobre mi intentando darme la vuelta, estuvimos forcejeando
mucho tiempo hasta que me zaf� de Alberto y nos levantamos , en el forcejeo
Alberto se cans� m�s que yo as� que sin dar lugar a m�s le ataqu� directamente
le cog� de los antebrazos ello me intent� bloquear pero venc�a su fuerza y con
mi brazo derecho rode� su cuello mientras con mi pierna derecha forzaba su
estabilidad hasta que se derrumb� totalmente en el suelo.3 a 2, le venc�.
Tomamos resuello, y eleg�, puse a Alberto apoyado a la mesa
de juntas, le abr� las piernas, me puse un preservativo, le puse a Alberto su
corbata sobre su cuerpo totalmente desnudo y yo me puse la m�a y comenc� a
follarle lentamente mientras con mi mano derecha le hac�a una paja a la misma
cadencia, Alberto gem�a "Cabr�n, eres un perro, cuando vuelva de Buenos Aires te
voy a matar a polvos", yo gem�a "S� , s�, eso ser� si puedes, tu disc�pulo ha
aprendido mucho en el arte del folleteo, espero que aprendas algo m�s de lucha
para dosificar tus fuerzas". La verdad es que la visi�n de su espalda, la
excitaci�n de sus palabras y las m�as, la follada que le estaba metiendo y el
contacto con esa maravillosa verga de 19 cms, hicieron que me corriera antes que
�l, esto no obstante, no renunci� a mi privilegio de ganador y le permit� que me
follara, as� que Alberto me puso sobre la mesa de Juntas, abri� mis piernas y
comenz� a follarme, su corbata se mov�a r�tmicamente y dejaba ver y entrever su
bello torso y su musculado abdomen, yo segu�a provoc�ndole: "Alberto has peleado
como una ni�a, espero que en Buenos Aires te vuelvan un hombre" Alberto se
tomaba a bien la broma y me dec�a "Eres un cabr�n yo te he ense�ado todo y t� te
lo guardas para, ah�ah� ah� " y no dijo m�s, sac� su polla, se quit� el
preservativo y se corri� en mi abdomen. La corbatas se mancharon, el suelo se
manch�, y nosotros nos ca�mos uno encima de otro, nos besamos, nos vestimos y
nos despedimos c�lidamente hasta su vuelta de Buenos Aires..
Tras la marcha de Alberto a Argentina me qued� sin compa�ero
de batallas y comenz� el mes de Septiembre.
En Septiembre el despacho estaba montado, se contrat� al
personal, vinieron los jefes y yo qued� reducido a mis funciones de asesor
comercial. En el despacho ya no se pod�a entrar pues a todas horas hab�a gente y
su "uso" se restringi�.
Pese a lo anterior la buena noticia es que me alquil� un
apartamento, un �tico de una habitaci�n sal�n, cocina y amplio ba�o, todo
exterior y con terraza no visible pues estaba en el tejado. El apartamento lo
"inaugur�" con Ana pues el d�a en que me dieron las llaves, met� la cama, esa
noche llev� champ�n, y halado de frambuesa. Ana vino toda sexy con un top que
dejaba adivinar sus lindas tetas que bailaban sin ser controladas por un
sujetador, tras cena rom�ntica, nos besamos y acariciamos lentamente hasta que
la temperatura fue subiendo y Ana me quit� la camisa, rugi� al ver mis
pectorales, me quit� el cintur�n y me arranc� los pantalones, mi polla salt� con
fuerza pues, para la ocasi�n, no me hab�a puesto slip, Ana se abalanz� sobre
ella y se la empez� a comer lentamente, notaba su lengua, sus labios, su humedad
sobre mi polla y mis huevos, cuando ten�a la polla a punto de reventar par� la
mamada con suavidad. Acto seguido comenc� a desnudarla, le com� los pezones uno
a uno, y tomando sus nalgas con ambas manos acerqu� su sexo al m�o, nos
acostamos y la penetr� suavemente "ah�ah..oh.." gimi�, yo comenc� a follarla,
ella se revolv�a y me cambi� de postura situ�ndose encima de mi as� me mont�
cual caballo hasta que ella lleg� al orgasmo.
Sal� de ella y con la polla en erecci�n la puse a cuatro
patas y se la met� por su lindo co�ito mientras pon�a mis manos sobre sus
hombros y la follaba con tal lujuria que mis cojones se bamboleaban d�ndole en
su trasero, as� segu� hasta que not� que me ven�a impetuosa una enorme y
placentera corrida. Nos tumbamos al lado y para enfriar nuestra lujuria nos
dimos al helado y al champ�n y todo culmin� comiendo helado sobre nuestros
cuerpos y chupando el champan que asimismo derramamos encima de nuestros torsos,
con un �ltimo polvo en el que gritamos a placer.
Ana era mi vicio permanente, y Alberto mi deseo m�s profundo
con el que me comunicaba por mail, Alberto segu�a advirti�ndome que me entrenara
porque a la vuelta me deb�a una paliza.
Los d�as pasaban tranquilos, un s�bado de septiembre en que
no pude quedar con Ana andaba un tanto aburrido y baj� al Sex Shop de la esquina
a buscar alg�n v�deo o DVD, entr� me dirig� al encargado y me registr�, el
encargado estaba bueno, llevaba una camiseta de esas de agujeritos que
trasparentaba su torso musculado y su terso y firme abdomen, de cara era bello,
bello, moreno, pelo corto, con un piercing en la barbilla en forma de punta, me
qued� gratamente impresionado. Pas� a buscar un v�deo de Ryan Idol o de Chad
Knight que son mis actores preferidos, mientras estaba buscando not� una
presencia a mi lado que exudaba sexo a raudales, me di ligeramente la vuelta y
vi a un joven de unos 23 a�os, 1.70 ms, moreno, pelo corto, con perilla, gafas
oscuras, collar, una camiseta blanca sin mangas, pantalones de chandal blancos,
y zapatillas sin calcetines, deb�a tener una gruesa y larga polla dado que se le
marcaba en el pantal�n.
Me situ� un poco atr�s fingiendo mirar pel�culas mientras le
observaba, �l miraba pel�culas gay lo cual me dio pie a pensar en un plan, pero,
sin m�s ni m�s se fue escaleras abajo hacia las cabinas de v�deo. Yo decid�
seguirle si bien era algo absurdo dado que se habr�a metido en una cabina y no
lo ver�a pero el inconsciente es peligroso as� que le segu�.
Baj�, entr� en la zona de cabinas y me lo tropec�, me estaba
esperando, "�Me buscabas?" "S�", "Pues aqu� me tienes" percib� su intenso
perfume "Brumel", su acento cheli y que estaba empalmado, el empalme me llev� a
pensar que pod�a haber plan pero �l me dijo "�Qu� quieres?" yo le dije "Nada"
"�C�mo que nada? Admite que me mirabas y que deseas follar conmigo" "Lo admito
si te parece mejor", se gener� una situaci�n un poco tensa, yo le dije "�Qu�
pasa? �No te lanzas?" el chaval se lanz� , se acerc� a mi, nos besamos, sent� su
lengua y sabor a tabaco negro, su lengua rugosa me daba enorme placer, su
perilla rascaba mis labios y sus manos se dirigieron directamente a mi culo, las
m�as se metieron por su pantal�n y palparon el suyo, o�mos un ruido en la
escalera y nos metimos en una de las cabinas.
All�, �l ech� una monedas y puso una pel�cula cualquiera, yo
me sent�, �l se desnud�, el chaval no estaba mal, buenos pectorales, con un
piercing en uno de los pezones, un tatuaje en la espalda, unos abdominales
perfectos y marcados y una polla de unos 16 cm (tengo obsesi�n con la medida)
pero francamente gruesa y que ya lubricaba, yo me desnud� y mi polla salt�
eniesta, me puse un preservativo y el chaval clav� su culo en mi polla y comenz�
a bailar sobre ella impuls�ndose con la fuerza de sus brazos marcando enormes
biceps y triceps, �l gem�a: "Uh�Ufff, ah� ah.." y yo disfrutaba como un enano
hasta que increment� su movimiento y el semen vino a mi capullo con una rapidez
de v�rtigo "oh�oh�me corrooo", me corr� y cambiamos la posici�n, �l se subi� al
asiento y puso su poll�n (era muy gruesa) a la altura de mi boca, comenc� a
com�rmela mientras �l me increpaba: "Me gusta que me la coma un pijo", "Come
cabroncete nunca has sentido un hombre como yo" puede verse que el ni�o era
gilipollas as� que le di su merecido, con la boca fui lentificando la mamada de
modo que experimentara tremendo placer, el chaval no se corri� r�pido, de tanto
placer se balance� y tuvo que sentarse pues no se ten�a en pie, mi t�cnica
consist�a en centrar la mamada en el capullo y en el momento que sent�a que se
corr�a dedicarme a jugueterar con la lengua y los labios sin tan siquiera mover
la piel de su polla, el chaval comenz� a no hablar y s�lo a gemir hasta que lo
remat� y se corri�.
De todo el placer y liberaci�n de endorfinas se qued�
traspuesto, yo me vest� y sal�, el local estaba desierto y el guapo
recepcionista cerraba, le dije "Creo que tienes a alguien en una cabina", baj�
abri� y descubri� a nuestro h�roe en pelotas y le orden� vestirse y largarse,
entre tanto, yo contemplaba la escena de aturdimiento y estupor desde una
cabina, cuando se fue sal� y el recepcionista me dijo: "Te habr�s divertido"
"S�, el chaval lo hac�a bien pero era un imb�cil" "Eso es verdad lo conozco de
alguna que otra vez", y nos despedimos hasta otra que espero sea pronto y
c�lida.
El trabajo era un poco rollo, muy serio, salvo mi l�o
creciente y apasionado con Ana y ciertas escapadas. Ese invierno me toc� ir a un
pueblo de la sierra a hacer una gesti�n, me pusieron coche con chofer.
Cuando vino a buscarme el ch�fer me encontr� con un joven de
unos 30 a�os, alto (1,85 cm), pelo corto, torax amplio, cintura estrecha, culo
firme y resping�n, y largas y musculadas piernas. Vest�a un impecable traje azul
marino que le ca�a de miedo pero me cautiv� su voz firme y aterciopelada.
Fuimos hablando en el viaje sobre nuestras parejas femeninas,
�l sosten�a y yo asent�a que las t�as eran m�s complicadas con un gusto sexual
m�s lento y alambicado y que los hombres �ramos directos. El ten�a pareja
femenina estable desde hac�a 10 a�os y afirmaba que no ten�an monoton�a pues
hab�an decidido de mutuo acuerdo hacer tr�os de vez en cuando.
Si el tr�o era con una mujer la eleg�a su pareja, si era con
un hombre lo eleg�a �l. Su procedimiento de elecci�n no era muy complicado, se
met�a en la web y ve�a fotos, contactaba y quedaba en un hotel, all� proced�a a
un examen f�sico consistente en que se la mamara, en follar y ser follado y en
que le hiciera una lenta y sabrosa paja. Si era de su gusto quedaba con �l para
el tr�o.
Sus historias me pon�an cachondo, me imaginaba al semental
que ten�a delante montando a su pareja mientras se la mamaba al boy, y la polla
se me sal�a del slip.
Llegamos al pueblo, mis gestiones se alargaron y comenz� a
nevar, nos quedamos incomunicados, busqu� un Hotel y s�lo ten�an una habitaci�n
con cama de matrimonio, le propuse al ch�fer aceptarla y dijo que s�. En ese
momento fue a llamar a su pareja y me di una ducha con la puerta entreabierta.
Cuando �l subi� me dijo "Le he comentado la situaci�n a mi
pareja y me ha dicho que haga el favor de no follarme al cliente", yo me re�, �l
entr� en el ba�o cuando yo sal�a y se qued� parado mirando mi torso, brazos, y
el bulto que sal�a debajo de la toalla y dijo "Pens�ndolo bien creo que no le
voy a hacer caso" "Creo que har�s bien" vino hacia mi, yo le arranqu� la camisa,
�l me baj� la toalla, fuimos hasta la cama, lo tir� en ella y le quit� los
pantalones, le cog� la polla y se la comenc� a chupar, �l se revolvi� y form�
conmigo un 69, yo sent� sus labios en mi capullo y un estremecimieto feroz, mis
sienes estaban a punto de reventar, mi polla se expandi� al m�ximos, hubo un
momento que dej� de chuparle la suya, recobr� la noci�n pese al gusto de su
lengua llegando a mis Huevos y el placer de sus suaves labios moviendo la piel
de mi cipote y me apliqu� con la misma intensidad a su sexo.
Antes de corrernos dejamos al postura y nos empezamos a
besar, yo sent� el sabor de mi l�quido seminal y el suyo en mi boca, su larga
lengua y su rostro en el que apuntaba una dura barba que ser�a liquidada en el
afeitado de la ma�ana siguiente, su cuerpo ol�a a suave sudor mezclado con un
perfume seco que no pude adivinar, �l me tir� a la cama y cogi� mi polla con su
mano haci�ndome una paja, cuando la tuvo tiesa me puso un preservativo y se
mont� encima mir�ndome, yo ve�a c�mo sub�a y bajaba y c�mo sus pectorales se
estremec�an de enorme placer en cada penetraci�n, yo gem�a como un loco
"Ah..ah.. ah� Rafa (era su nombre) qu� bueno cabr�n, vaya polvo", as� seguimos
hasta que cambiamos, deshicimos la postura y fuimos al ba�o, �l se apoy� en el
lavabo y yo lo foll� por detr�s quer�a experimentar el placer de ver su cara y
la m�a en el espejo, en esta pose me iba a correr y queriendo que acab�ramos
juntos le cog� la polla y lo masturb� a la vez que lo follaba y as� hasta que se
oy� por duplicado:"Ah�ah�. S�, s�, me viene, me corro, ya, ya, yaaaa.." y recog�
su esperma en notable carga en mi mano.
Fuimos a dormir, al d�a siguiente nos levantamos juntos, nos
duchamos juntos y nos fuimos a Madrid quedando en vernos �para un tri�? Quiz�.