Hola! Ya les conte quien es Jey en mi relato anterior. Ahora
les presento otra experiencia que vivi con �l... espero que la disfruten...
El dia en cuesti�n nos dormimos, era domingo y habiamos
estado bailando la noche anterior por lo que llegamos al departamento cansados,
nos dimos una ducha y nos acostamos (dorm�amos abrazados con el aire
acondicionado al m�ximo), desnudos obvio.
Luego de tres horas el reloj son� (ten�amos que tomar un
colectivo para ir a una excursion en las afueras de Bangkok), yo me levante a
apagar el despertador, como todas las ma�anas ten�a la verga dura y muchas ganas
de tener un poco de sexo pero Jey dijo que no hab�a tiempo y me tuve que quedar
con las ganas...
Viajamos alrededor de una hora y al llegar hab�a much�sima
gente, los gu�as organizaban grupos para recorrer el complejo (era muy grande,
ten�a zoologico, templos, ruinas etc), nos unimos a un grupo y comenzamos a
recorrer los distintos lugares.
Al mediod�a nos dieron una hora libre para comer y sacar
fotos; nos metimos en una especie de iglesia medio destruida, no habia nada
interesante para ver, ten�a muchas galerias y pasillos pero sin estatuas ni
pinturas ni nada, cuando me di cuenta que est�bamos solos, aprovechando que
estabamos en un pasillo angosto agarr� a Jey de los brazos lo levante y lo puse
contra la pared y le di un beso.
Aunque ya se estaba acostumbrando a mis arrebatos no dejaba
de sorprenderse, por supuesto que enseguida me contesto el beso y al instante
estabamos tocandonos por todos lados. Coloque mis manos en su hermoso culito y
el contest� levantando sus piernas y abrazandome con ellas. Estaba sentado en
mis manos y apoyado contra la pared, yo meti las manos por debajo de la ropa
para sentir su piel suave.
Empez� a frotarme y eso me calentaba tanto que ya no pude
aguantar m�s y saqu� un cond�n para cogerlo, enseguida busco en su mochila y
saco su gel con una sonrisa c�mplice.
Volvimos a la posici�n en que est�bamos y lo empec� a
penetrar suavemente hasta el fondo. En su cara pod�a ver cuanto lo disfrutaba y
con cada embestida me susurraba que no parara de hacerlo gozar (en realidad
gozabamos los dos ya que ese tibio hoyo parec�a estar hecho especialmente para
mi).
El estar en ese lugar, con el peligro de que alguien nos
viera nos exitaba a�n m�s y la adrenalina nos hizo tomar el ritmo de un metesaca
fant�stico. Estabamos recalientes, yo no pod�a creer lo que estabamos haciendo,
cada vez que mis bolas chocaban con su culito el me contestaba con un gemido
hasta que aaahhh!!!! acab� con todas las ganas dando un grito de placer (ten�a
toda la leche contenida desde la ma�ana).
Jey se puso colorad�simo y me tapo la boca enseguida ten�a
miedo que alguien nos oyera y nos viera, yo le saqu� la mano y le di un beso
para demostrarle cuanto habia disfrutado esa cogida. Escuchamos la voz de la
gu�a llamando a los turistas y nos acomodamos la ropa.
El problema fue que Jey tambien hab�a acabado y se hab�a
manchado el pantal�n, por suerte yo ten�a una remera extra y como le quedaba
grande le tapaba la mancha de leche. Nos re�mos de la que nos habia pasado y
volvimos con el grupo.
Por la tarde volvimos al departamento pero eso ya es para
otra historia
si les gust� escribanme
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