Relato: Me enamore del marido de mi madre

Hola a todos, lo que voy a contar es totalmente cierto. Mi hermana y yo somos adoptados, nos trajeron de Peru hace 12 a�os, mi hermana tiene 19 a�os y yo 13, soy gay pasivo y tengo relaciones sexuales desde los 10 a�os. Mi madre se divorcio de su marido hace 2 a�os y conoci� a un argentino con el cual se cas� hace 6 meses, es un hombre muy fuerte, hace mucho deporte, tiene unos ojos verdes hermosos, el es muy atractivo, tiene 53 a�os, es 4 a�os mayor que mi madre y nos llevamos muy bien, vivimos los tres solos ya que mi hermana vive con su novio, un marroqu� de 21 a�os con el que tambi�n tuve relaciones un par de veces, Samir(as� se llama mi cu�ado) tiene una polla bastante larga pero muy delgada, cuando se la he chupado me la met� hasta la garganta y todav�a quedaba un buen pedazo fuera de mi boca, y cuando me la met�a por el culo no me dol�a sino me molestaba el largo, era interminable sentirla como me entraba en el culo, pero me echo un par de buenos polvos en mi ojete. Sebastian(as� se llama el marido de mi madre) es otro tipo de hombre, es imponente, sin quererlo llama la atenci�n, es muy atractivo, muy varonil, tanto mi hermana y yo estamos locos por Sebastian, a mi madre se la ve muy feliz, se les nota muy enamorados, y yo estoy loco por el, siempre conversamos de todo un poco, y yo le cuento de mis aventuras sexuales, lo provoco descaradamente. La primera vez que Sebastian me follo, me hizo ver las estrellas, se perfectamente que tengo mi ojete abierto, dilatado por haber follado con muchos amigos, pero la polla de Sebastian es tremenda, es enorme, gruesa, la cabeza parece una ciruela, casi no me entra en la boca, el d�a que me follo me hizo llorar de dolor, me destrozo el agujero de mi culo, hasta me hizo sangrar y estuve como una semana que el ojete me lat�a, pero fue maravilloso sentir esa enorme polla romperme el ojete, sentirla entrar en mi culo, sentir como se abr�a todo dentro mio para que Sebastian me haga suyo, sentir ese r�o de leche caliente que me dejo en lo mas profundo de mis intestinos. Yo lo provocaba a Sebas, y el se dio cuenta de lo que yo quer�a y yo sabia que el quer�a follarme tambi�n. Una tarde en que est�bamos los tres en casa, Sebas me dijo si lo ayudaba a limpiar el trastero, cuando baj�bamos en el ascensor, me miro y yo me puse a temblar de la emoci�n, sab�a que algo me iba a hacer en el trastero, "afloj�te el pantal�n que te voy a meter un dedo en el culo", me dijo acariciando mis nalgas por sobre mi pantal�n, yo lo mire y r�pido me afloje el pantal�n y el me meti� su mano dentro de mi ropa buscando mi ojete con sus dedos, yo me dejaba hacer en silencio y temblando de la emoci�n, hasta que siento el dedo de Sebastian meti�ndose en mi ojete, me quede quieto para que el disfrute de mi todo lo que quisiera, llegamos al trastero y el no me hab�a sacado el dedo, por el contrario, quer�a meterme otro, "Jeison(as� me llamo yo) que abierto tenes el ojete", me dijo meti�ndome el otro dedo, no tan adentro como el primero, entramos, cerramos la puerta y me desnudo todo, yo saltaba de alegr�a al saber que Sebas me iba a follar, lo que no me imagine era la tremenda polla que tiene, cuando la vi quede mudo, "esto no me va a entrar en el culo, es tremenda, es la mas grande que vi en mi vida", le dije acariciando su polla que se pon�a cada vez mas dura en mis manos, "arrod�llate y ch�pala, s�came la leche con la boca y tr�gatela" me dijo, yo me arrodille y se la empece a lamer toda, desde la punta hasta la base, le lamia la cabezota que tiene y quer�a meterla lo mas que pod�a en la boca, quer�a chup�rsela bien, que le guste mi boca y me deje chuparla siempre que quisiera, la lam�, la chupe, hice todo lo que el me dec�a, hasta que me agarro de la cabeza y empez� a meterla y sacarla de mi boca y cuando no aguant� mas, me empez� a llenar de leche la boca, caliente, espesa, cremosa, nadie me hab�a llenado tanto la boca de leche como Sebastian, no terminaba de correrse mas, tres, cuatro chorros de leche que yo tragaba desesperado, me ahogaba, pero segu�a tragando, cuando termino de correrse totalmente se la limpi� bien con mi boca, no me dejo vestir, yo segu�a desnudo frente a mi hombre, "apronta el culo que te voy a coger", me dijo poniendo un colch�n en el suelo y haciendo que me ponga en cuatro patas, el se arrodillo frente m�o y me meti� la polla en la boca de nuevo para que se la chupe y la haga poner dura de nuevo cuando estaba muy dura, se puso detr�s m�o y echando saliva en mi ojete, apoya esa tremenda cabezota en el agujero de mi culo y haciendo fuerza hace que empiece a entrarme la cabeza, cre� que me estaban partiendo al medio, era tremendo el dolor y Sebas segu�a meti�ndola, "no, para Sebas, sacala, no la aguanto, me duele mucho", le dec�a yo sintiendo como esa enorme polla me destrozaba el ojete. Me gustaba la sensaci�n de dominio que tenia Sebas sobre mi, el la segu�a metiendo y cuanto mas adentro estaba, mas da�o me hacia, "Sebas, por favor, me haces mucho da�o", le dec�a yo sintiendo como me abr�a el ojete hasta lo mas, empece a llorar de dolor, entonces el me agarro de mi cintura y lo que quedaba fuera me lo meti� de una, "haaaaaaaaaaaa, que dolor, haaaaaaaaa, me destrozastes el culo", le dec�a llorando, notaba mi ojete abierto, notaba como me entraba y sal�a, sent�a como me follaba, que dolor, pero que placer estar as�", yo me empece a tocar mi peque�a polla para aliviar un poco el dolor, sus movimientos eran cada vez mas fuertes, mas profundos, envidiaba a mi madre por tener ese animal sexual todos los d�as para ella, yo me tocaba mas r�pido, sab�a que Sebas en cualquier momento me daba su leche, "si Sebas, as�, f�yame fuerte, llename el culo de leche", le ped�a yo abriendo con una mano una de mis nalgas para dejarlo que disfrute de mi culo, y con la otra me masturbaba, su respiraci�n se hacia cada vez mas fuerte, hasta que siento que me la mete lo mas adentro que pudo y empez� llenarme el culo con su deliciosa leche, los chorros sal�an con fuerza dentro de mis intestinos, parec�a que no se hubiera corrido hacia un momento, yo sent�a mi culo lleno de leche, sent�a su polla palpitar dentro mio, me sent�a repleto de leche, la ten�a en mi estomago y ahora en mi culo, cuando Sebas sac� su tremenda polla, sent� mi ojete totalmente abierto, me lat�a, me dol�a, me sangraba, en pocas palabras, Sebas si me hab�a roto el culo, ahora si lo tenia roto de verdad.

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