Primero quiero contarles como es mi prima. Su nombre es Camila, tiene 15
a�os, cabello casta�o, y f�sicamente tiene un cuerpo que todo hombre quisiera
poseer. Tiene un rostro de angelito, sus tetas son de un tama�o normal pero bien
redondeadas y con unos pezones duritos que se les notan a trav�s de sus remeras.
Su cola es espectacular, bien paradita y durita. Con solo verla uno cae
desmayado.
Esta historia comenz� un d�a que ella se quedo a dormir en mi casa. Est�bamos
en mi pieza mirando la tele acostados en la cama. Yo siempre hab�a so�ado con
cogerla pero nunca cre� que pod�a llega a pasar algo.
Bueno, como les dec�a est�bamos mirando la tele en mi cama, debido a que mi
cama es chica nos encontr�bamos muy juntos uno del otro. Fue entonces que ella
giro para acomodarse quedando de costado y delante m�o. En esa posici�n yo pod�a
ver todo su culo bien de cerca. Hasta ah� lo �nico que yo hacia era imaginarme
mi pene dentro de su ano. Pero fue entonces cuando ella giro su cabeza y me
pidi� que estando detr�s de ella como lo estaba me colocara en la misma posici�n
en la cual se encontraba y me acercara. De esta manera, al acercarme mi pene
qued� apoyado sobre su hermoso culo. Luego me pidi� que pasara una mano por
debajo de cuerpo para que quedara delante de ella, yo obedec� sin saber que era
lo que pretend�a. Para mi sorpresa ella tomo mi mano (la que pasaba por debajo
de su cuerpo) y se la llevo hasta unos de sus pechos. Yo alcance un grado de
excitaci�n enorme, pod�a sentir como mi mano tocaba una de sus delicadas
tetitas. Ella sin decir nada apret� mi mano y empez� a mov�rmela como dici�ndome
que quer�a que se las masajeara, yo inmediatamente pas� mi otra mano por arriba
de su cuerpo y agarre su otro pecho. De esta manera yo ten�a mis dos manos en
sus tetas. Sin dudar un segundo empec� a masajearle sus tetas mientras observaba
como ella se excitaba y su cara mostraba gestos de placer hacia mis actos.
Estuve masajeando sus tetas durante unos minutos cuando note que una de sus
manos se mov�an hacia atr�s hasta llegar a tocar mi verga, la cual para este
entonces ya estaba totalmente erecta y bien dura. Ella empez� a masaje�rmela y a
medida que iba pasando el tiempo sus movimientos empezaban a ser cada ves mas
r�pidos. Yo, viendo como ella me masajeaba el miembro, decid� bajar la mano que
estaba por encima de ella hasta llegar a su concha. Una ves que mi mano llego
all� empec� a masajearle el cl�toris mientras ella emit�a unos suspiros de
excitaci�n. Yo pod�a notar como su concha estaba empapada por sus jugos de la
excitaci�n que ten�a.
Pero lamentablemente ese d�a no pudimos seguir avanzando m�s en la situaci�n
debido a que mi mam� toco a mi puerta para pedirle a mi prima que la ayudara a
cocinar. Los dos nos miramos con una cara de decepci�n. Pero ella se fue sin
decir nada, imag�nense con la calentura que me hab�a quedado. No aguante m�s y
me fui al ba�o a masturbarme pensando en lo que hab�a pasado.
Despu�s cenamos, y cuando nos fuimos a dormir yo pens� que la historia
continuar�a pero mi prima se fue a dormir sin siquiera mirarme.
Los d�as fueron pasando y yo no pod�a quitarme de la cabeza la imagen de mi
prima toc�ndome la verga. Pero sorpresivamente una tarde recib� un llamado
telef�nico, era mi prima invit�ndome a dormir a su casa con la excusa de que
hab�a alquilado una pel�cula para que veamos. Yo obviamente acepte.
Su familia esta compuesta por mis t�os, ella y sus dos hermanas una mayor y
una menor, las tres son muy pero muy lindas pero Camila segu�a siendo la mejor
de todas. Esa noche cenamos todos juntos y al terminar la mayor de mis primas se
fue a bailar con unos amigos, quedando en la casa sus padres, Melina que era la
menor de las tres hermanas, ella y yo. Mis t�os y Melina se fueron a dormir, y
Camila y yo fuimos a su habitaci�n para ver la pel�cula que hab�a alquilado. A
pesar de ser tres hermanas cada una tiene su propia habitaci�n, por lo cual en
la pieza de Camila solo hab�a una cama. Pusimos la pel�cula y nos acostamos los
dos juntos en su cama. Despu�s de un tiempo ella se a coloc� de costado y me
pidi� que yo tambi�n me colocara igual. Empezamos a tocarnos mutuamente. Tal
como hab�a pasado en mi casa yo con la mano que estaba por debajo de su cuerpo
le tocaba una teta y con la otra acariciaba su cl�toris sintiendo como este se
humedec�a mientras ella con su mano me frotaba la verga con movimientos hacia
arriba y hacia abajo. (por ahora todo los manoseos se produjeron por encima de
la ropa), pero en el momento en que ella alcanzaba una gran excitaci�n pude
sentir como una de sus manos iban entrando en mis pantalones y mi ropa interior
para tocarme el pene. Una vez que llego a el lo apret� y comenz� a masajearlo
con fuerza. Yo sub� la mano con la que le acariciaba en ese entonces su h�medo
cl�toris y junto con la otra las introduje dentro de su remera y su corpi�o para
poder tocarle las tetas. Acarici� sus tetas por un largo rato y luego deslic�
nuevamente la mano que estaba por sobre su cuerpo hasta su concha, pero esta vez
introduje mi mano dentro de sus shorts y su bombachita dejando que mis dedos
disfruten al humedecerse con sus jugos. Empec� acarici�ndole el cl�toris y luego
me atrev� a introducirle un dedo dentro de su concha. Este trabajo llevo un
largo tiempo ya que ella era virgen y hab�a que introducirlo con cuidado, pero
una vez que entro el primer dedo met� el segundo y despu�s un tercero. Ella
pod�a disfrutar al sentir mis dedos entrando y saliendo de su concha. Fu
entonces cuando me pidi� por favor que nos deshici�ramos de nuestras ropas para
poder disfrutar mucho m�s de la situaci�n. Yo acepte su petici�n y nos
deshicimos de nuestras ropas hasta quedar los dos totalmente desnudos. Yo me
sent� en el borde de la cama y ella sin decirme nada se arrodillo en el suelo y
con una de sus manos masajeaba mi verga, luego acerco su boca y se la meti�
hasta que le llegara a la garganta. Me la chupo toda durante en largo tiempo
hasta que acab� en su boca y ella se trago toda mi leche sin derramar una gota.
Una vez finalizada esta tarea se acost� en la cama boca arriba y separ� sus
piernas dej�ndome ver el tesoro prohibido que ser�a m�o.
Yo me acerqu� y empec� a chuparle el cl�toris y luego empec� a introducirle
la lengua dentro de su concha. Yo pod�a escuchar como ella gem�a de placer.
Haaaaaaay, como me gusta, por favor metemela. Ella segu�a gritando pero yo no
par� de hacer lo que estaba haciendo y segu� chup�ndole la concha. Ella sin
poder aguantar acab� en mi boca dej�ndome disfrutas de sus m�s sagrados jugos.
Yo me par� y me acost� sobre ella, agarre mi pene y lo introduje fuertemente
dentro de su concha. Haaaaaaaa, sus gritos de dolor se pudieron haber escuchado
en toda la casa, pero no le importaba, yo segu�a penetr�ndola y ella segu�a
gritando, haaaaaa, haaaaaa, m�s, dame m�s duro, as�, as� dale. Cuando estaba por
acabar, para no correr el riesgo acab�ndole adentro, retir� mi pija de su concha
y le ped� que se sentara en el borde de la cama. Una vez que se sent� all� yo me
puse de pie frente a ella, coloqu� mi verga entre sus tetas y las apret�
quedando mi pija atrapada entre esas dos preciosuras. Me empec� a mover hacia
arriba y hacia abajo asta que explote y acabe entre sus tetas llegando hasta su
cuello y su cara.
Ella me miro y con sus manos se desparramo por todas sus tetas el esperma que
estaba en ellas, se arrodillo y agarr� mi pija con una mano para llev�rsela a la
boca. Una vez que me la limpi� se volvi� a acostar en la cama pidi�ndome que le
volviera a chupar su concha. Yo obedec� y la chupe hasta hacerla acabar
nuevamente dentro de mi boca. Una ves que acab� yo le ped� que se colocara en
cuatro patas dici�ndole que quer�a probar una posici�n diferente. Al principio
ella se neg� dici�ndome que no quer�a que la penetrara por el culo. Yo
inmediatamente le dije que si ella no quer�a no la iba a penetrar por el culo,
pero si que quer�a penetrar su concha por atr�s. Conforme con mi respuesta
acept� y se puso en cuatro patas. Yo, tal cual le hab�a prometido introduje mi
verga en su concha, cuando estaba por acabar retir� nuevamente mi pija y le
acabe en los cachetes de su lindo trasero. Pero despu�s de tener ese culo tan
hermoso frente a mi pens� que ser�a un est�pido si no la penetraba analmente,
entonces le dije que se quedara quieta en esa posici�n que le quer�a volver a
penetrar la concha por atr�s. Ella obedeci� y se quedo en esa posici�n, fue
cuando entonces yo coloque mi verga en el borde de la entrada de su ano la
agarre de las tetas con mis manos y empuje hasta met�rsela toda dentro de su
culo.
Ella grito de dolor y me pidi� que la sacara, pero yo no la escuchaba y
segu�a culeandomela. Ella gritaba y gritaba pero ya no ped�a que la sacara
porque se hab�a dado por vencida y estaba dejando que yo haga con su culo lo que
quiera. Se la met�a y se la sacaba y ella segu�a gritando pero ahora ya no m�s
de dolor sino que lo estaba gozando. Haaaaaa, as�, segu�, m�s. M�s, as� me
gusta, dale, m�s. Yo no pod�a creer que estaba penetrando el culo de mi prima.
En eso mi di cuenta que estaba por acabar entonces acelere los movimientos y le
acabe dentro de su culo. Al sentir mi semen caliente dentro de ella suspiro de
placer, se recost� en la cama y me dijo que esta experiencia se iba a volver a
repetir.
Pero no todo termina ah� ya que al voltear la cabeza observamos que Melina
estaba parada en la puerta toc�ndose sus tetas y su concha y nos dimos cuenta de
que hab�a observado todo. En eso entr� a la habitaci�n se coloc� de rodillas en
la cama tal como lo hab�a hecho Camila y con su mano tom� mi verga y se la puso
en la boca,... Pero eso es otra historia.