UN VIAJE A MALLORCA.
Haciendo las paces. I.
Me dirigo al armario y guardo el bikini en la troley; t� que
no me quitas los ojos de encima reparas en el y me preguntas:
Ya s� que estuviste ba��ndote en la piscina...El chico que
est� en recepci�n me lo acaba de decir. Fuiste tu sola?.
Mi coraz�n se sobresalta al o�rte hablar, s� que debo decirte
que me enrroll� con el director, quiero ser totalmente sincera y honesta
contigo, pero a�n no estoy preparada...necesito un poco m�s de tiempo.
Me acerco a la cama y sent�ndome en la esquina te digo que s�
mientras te acaricio la pierna diestra.
Me alargas la caja mientras me dices:
El recepcionista parece un buen t�o. Cuando antes he
llegado con todos los paquetes enseguida me ofreci� su ayuda y me dio una
llave de repuesto porque me dijo que t� deb�as estar arriba y...
Te corto y me intereso por los paquetes a los te refieres.
Abro la caja y veo su contenido: un ramo de once rosas rojas
y una blanca; en el lenguaje de las flores significa SIENTO LO QUE PAS�, TE
QUIERO...Me pongo muy seria �aunque interiormente estoy feliz por este
detalle- y s�lo te digo "Gracias". Y vuelvo a preguntarte por los paquetes. Me
dices con un triste tono de voz:
Que mala eres!, ni un besito ni nada me d�s. Despu�s del
trabajo que me cost� elegirlo...
Me r�o y te llamo exagerado. Te "defiendes" diciendo:
Vale, soy algo exagerado, pero lo pas� algo mal porque tuve
que pedirle informaci�n a Mildred y ya sabes que yo para eso soy muy
independiente, prefiero perderme a pedir ayuda. En fin...y eso lo hice por t�,
mi dulce amorcito!.
Al o�rte llamarme con el apodo por el me llamaste el primer
d�a que hicimos el amor (virtualmente hablando) me tumbo sobre t� y sori�ndote y
con voz sensual te vuelvo a decir: "Muchas gracias".
Y te beso dulcemente en la boca, pero enseguida me separo de
t� y te pido perd�n por haberte golpeado. Con una sonrisa �eres tan guapo como
un angelito- me dices:
Me lo merec�a...yo tambi�n te hice da�o a t� y no sabes
cuanto me pesa. Toda la ma�ana estuve pensando en eso; t� estabas conmigo en
todos los lugares donde fui: al centro m�dico, a la farmacia, a la
florister�a, a la pasteler�a, a...
Vuelvo a interrumpirte y te pregunto que fuiste a hacer al
horno?. Me respondes:
Recog� los encargos que hiciste ayer: las 5 ensaimadas
(todas apiladas en forma de torre y atadas con un cordel azul y rojo), una
bolsa con las 3 sobrasadas y tu amiga, la dependienta Mila tambi�n me dio una
coca de verduras as� de grande �se�alas el cuadro que tiene un tama�o
bastante considerable- y una palmera de chocolate para m�. Por cierto me
encarg� darte recuerdos suyos...
Dej� los paquetes abajo en recepci�n; Ram�n me ayud� y por
eso digo que parece majo...
Te digo que en efecto es un hombre muy agradable y a
continuaci�n te cuento mi "cita" con �l y tambi�n te hablo de Javier, el chico
de Navarra �por supuesto me reservo los detalles morbosos-; sin embargo no te
explico nada (obviamente) de lo que ocurri� en el despacho.
Me levanto de encima tuya y me acerco a la silla; cogo la
toalla, la desdoblo y te la ense�o. Me miras de ariba a abajo y me dices:
Es muy bonita, pero nada es comparable a tu belleza.
Te extra�� tanto...tus besos, tus ojos, tu pelo...todo tu
cuerpo!.
En la farmacia me dieron un t�nico para la inflamaci�n de
la lengua, lo tom� y ya estoy bien, pero yo creo que si bebo tu dulce n�ctar
me curar� del todo porque como dice la canci�n de Carlos Baute, "T� eres mi
medicina".
Te amo!.
Dejo la toalla sobre la silla, me acerco un poco y muy
lentamente me desato el cintur�n del albornoz; me doy la vuelta y me lo quito.
Mi espalda y mi culito quedan frente a t�.
El albornoz se queda en el suelo y en esa posici�n me saco
tambi�n la toalla de la cabeza y al voltearme cubro muy sensualmente con ella
mis pechos y el co�ito.
Hago �o por lo menos lo intento- un striptease sin m�sica. Me
pides:
No me hagas sufrir m�s. Te deseo much�simo...te necesito!.
Al o�rte tengo un orgasmo y noto como mi chocho se encharca
de flujo. Estoy a 101...
Suelto la toalla y mi cuerpo queda desnudo ante tus ojos: mis
peque�os, pero redondos pechos con mis pezones marrones ya erectos y duros, mi
estrecha cintura, el vientre, mis anchas y curvadas caderas, mis muslos
llenitos, las piernas flexibles y los pies, muy peque�os como los de una geisha.
Absolutamente toda para t�.
Te miro intensamente y al ir a decirte que yo tambi�n te
necesito y que te quiero, tu reloj suena y anuncia las 12:30 horas.
Me acerco a los pies de la cama y deslizando mis manos sobre
tus muslos voy subiendo muy despacio; con mis u�as �que peligro- te rasco en la
parte interna y te provoco cosquillas.
Me r�o suavemente y te digo: "Que gallumbos m�s monos". Con
voz entrecortada me dices:
Es un regalo de mi abuela Juliette, me los envi� por mi
pasado cumplea�os desde Lille (Francia).
Mientras hablas acerco mis dedos a tus caderas, te bajo el
boxer y te lo quito; me froto las tetas con el y textualmente digo: "Otro
fetiche para mi colecci�n".
Tu pene a�n no est� al 100%, pero no me importa; yo s� como
ponerlo tan duro como el Titanio...
Me subo encima de t� y d�ndome la vuelta me coloco en la
famosa postura del 69.
Abro las piernas y mi depilado chochito queda dispuesto para
tu boca en bandeja de plata; me lames lenta y profundamente de abajo a arriba.
Mmmmmm!.
Yo mientras tanto beso la punta de tu glande...est� tan
caliente como yo...la lamo con todas mis ganas.
Tengo ganas de t�...
Introduces tu lengua en mi ano, o lo que es lo mismo me d�s
un beso negro que me hace estremecer de gusto.
Sigo chup�ndote la polla, me gusta tanto...sabe a t�.
Joder, que bueno est�s!.
Con tus labios absorbes mi cl�toris; doy un saltito y un
jadeo descomunal por el orgasmo que me has provocado.
Cogo tu pene como si fuera una piruleta (me viene a la mente
mi relato de la felaci�n) y chupo con vicio....como la putita que soy. TU
PUTITA!.
Te deseo tanto...
Levantas tu mano derecha y primero metes tu dedo �ndice y
luego el coraz�n en mi lubricada vagina. Los mueves dentro de m� y lentamente
los sacas y vuelves a penetrarme con ellos. Mmmmmm!.
Ardo por t�...
Introduzco tu erecto y duro falo entre mis labios y lo sorbo,
cu�l calyppo de lima-lim�n...adentro, afuera, una, otra y otra vez.
No me canso. Quiero m�s.
Muy suavemente acaricio tus test�culos y paso mi traviesa y
glotona lengua sobre ellos.
Me encantan!. Est�n riqu�simos!.
Siento como retiras tus largos dedos de dentro de m�. Al
segundo me dices en un gemido:
Eres muy...muy dulce!.
Voy a correrme, hazlo conmigo, por favor.
Acercas tu boca a mi co�o y yo me quedo con tu polla metida
en mi boquita.
Me inundas con tu caliente leche; te inundo con mi tibio
n�ctar.
Nos llenamos por entero.
Suspiramos, jadeamos y gemimos comos locos. Ha sido
incr�ible...
Me tumbo a tu lado, me abrazas por la cintura y despu�s de
besarme apasionadamente en los labios me dices mir�ndome fijamente:
Esto significa que has perdonado mi infidelidad?.
Te sonr�o y te devuelvo el beso, pero no te digo ni s� ni no.
Dicen que "Quien calla, otorga" y puede que yo sea algo
mentirosa, rencorosa y vengativa �ya s� que no soy una joya-, pero lo que NO soy
es hip�crita; yo tambi�n he sido infiel contigo...y no me arrepiento.
Si no hubiera sido por el tel�fono, hubiera llegado hasta el
final con el director.
Te abrazo fuertemente por la cintura, cierro los ojos y me
quedo dormida.
Me despierto sobresaltada con una pesadilla: t� me pillas
mientras estoy bes�ndome con el director en un economato cerca de la cocina.
Uf, que apuro!.
Me froto los ojos y como las otras veces t� no est�s conmigo
en la cama, pero tampoco estoy "sola": me hallo cubierta por doce frescas y
perfumadas rosas. Que maravilla!.
Enciendo la luz y veo mi reloj: las 13:05 horas.
Te llamo, aunque sin muchas esperanzas de que respondas; eres
un culo de mal asiento...
Para mi sorpresa o�go tu sexy voz de nuevo. Me dices:
Pili, mi amor ven al ba�o, corre...
Mmmm. Qu� rico!.
Y te ries como un estudiante cuando saca un 10 en
matem�ticas. Creo que de felicidad...
Continuar�...