Por Yoda

Aparentemente se les ve�a como dos personas de lo m�s
normales. El uno era operario en la acer�a del pueblo y la otra fung�a como
camarera en la cafeter�a cercana a la f�brica; el uno corpulento de aspecto
tosco, siempre sudoroso y grasiento, la otra delgada sin muchas formas ni curvas
procuraba estar lo mejor presentable posible, lo que su precario gusto le
permit�a. El caso es que un buen d�a Dikram decidi� invitar a Magarian a bailar
y pasar una velada juntos para conocerse mejor ya que desde hac�a tiempo se
atra�an y coqueteaban.

El asunto es que la famosa velada no result� todo lo
rom�ntica que hubieran deseado, ninguno de los dos sab�a bailar y cuando lo
intentaron, los pies de Magarian quedaron hechos una lastima gracias a los
pisotones que Dikram; que con sus casi doscientas libras y poco menos de dos
metros de estatura, le propinaban cada tanto, a su vez las canillas de este
quedaron todas moreteadas por los continuos puntapi�s que le regalaba su pareja
de apenas 80 libras y metro y medio de alto.

Debido al dolor; mas el de Magarian que el de Dikram,
decidieron tomar asiento y dejar de hacer el rid�culo en la pista de baile para
dedicarse a beber unos tragos y conversar, pero en esta otra etapa tampoco
tuvieron mucha suerte, el uno hablaba de f�tbol y la otra de costura, pero as� y
todo estaban felices de estar juntos. Ya con algunas cervezas encima Dikram se
solt� un poco m�s y pregunt� a Magarian:

- Oite Magarian �Te gustar�a ser mi novia?

- Sabes Dikram �No crees que es muy pronto?

- Est� bien, entonces dame un beso.

- �No crees que primero deber�amos ser novios?

- �Quieres ser mi novia?

- �No crees que es muy pronto?

En estas se pasaron un buen rato hasta que por fin Magarian
acept� ser la novia de Dikram, sellaron el compromiso �l con un lamet�n que
pr�cticamente lav� la cara de ella y esta con un tir�n de oreja. Tras las
respectivas demostraciones de cari�o la pareja ya mas relajada continuo
divirti�ndose a su manera hasta las tantas de la madrugada en que decidieron
retirarse, Dikram acompa�� a Magarian a su casa y se despidieron de la misma
manera como se juraron amor eterno.

As� pasaron unos cuantos d�as con su ya singular manera de
demostrarse cari�o y conversaciones rom�nticas poco comprensibles para el resto
de los mortales. En una de aquellas tardes en que paseaban al caballero se le
ocurri� la gran idea de proponer a su damisela que afianzaran su relaci�n en uno
de los hoteluchos del pueblo, dici�ndole:

- Oite Magarian �Te gustar�a que hici�ramos el amor?

- Sabes Dikram �No crees que es muy pronto?

- Est� bien, entonces dame un beso.

- �No crees que primero deber�amos hacer el amor?

- �Quieres hacer el amor?

- �No crees que es muy pronto?

Como siempre Dikram termin� convenciendo a Magarian luego de
un buen rato de mantener el ameno dialogo. As� que se dirigieron al hotel m�s
cercano. Ya en la habitaci�n comenzaron con sus caricias acostumbradas,
lametones en la cara para Magarian y tirones de orejas para Dikram mientras
torpemente se quitaban la ropa el uno al otro. Una vez empelotada la dispareja
pareja se quedaron mirando el uno al otro por unos segundos, reconoci�ndose o
mejor dicho conoci�ndose. Dikram actu� primero pinchando con su pulgar una teta
a Magarian, esta le respondi� con un pellizc�n en la tetilla. Acto seguido
Dikram y Magarian comenzaron a pincharse y pellizcarse por todos lados sumando
al extra�o juego los ya conocidos lametones y tirones de orejas.

Al cabo de un rato de estar con el curioso juego precoital,
�l pincho cerca de la vagina y lami� la cara de Magarian y ella le pellizc� un
huevo y le dio un tir�n de oreja, el asunto fue que Dikram logr� una erecci�n y
a Magarian se le pusieron duros los pezones, al experimentar estas reacciones a
ella se le ocurri� la idea de hacerle sexo oral con la condici�n de que �l
tambi�n se lo hiciera a ella, luego de discutirlo con su curioso dialogo
quedaron de acuerdo, Dikram se acost� y Magarian se coloco encima de �l formando
un sesenta y nueve. Pero debido a la inexperiencia de los dos en este tipo de
aventuras, �l de la manera que se le ocurri� meti� un dedo en la vagina de
Magarian y comenz� a escarbar y palpar el interior mientras ella le daba
mordiscos a la polla de regular tama�o de Dikram, como podr�is imaginaros esto
no excitar�a a nadie, pero esta singular pareja estaba muy a gusto y logrando el
objetivo deseado.

M�s adelante y m�s excitados, instintivamente comenzaron a
lamerse y chuparse sus genitales, �l concentrado en el cl�toris de Magarian y
esta en el glande de Dikram. En determinado momento a ella se le ocurri� tener
un orgasmo y mordi� el glande de �l, el pobre sujeto ante el dolor respondi� de
la misma manera, mordiendo el cl�toris de ella, el grito de dolor que lanzo la
mujer fue entendido por �l como un grito de placer, en parte tenia raz�n, pues
ella acababa de experimentar un orgasmo o lo que ella asum�a como tal.

Tras un rato de caricias m�s sutiles y placenteras nuestro
macho decidi� que era hora de la penetraci�n y mientras se acariciaban a su
manera para no perder las respectivas excitaciones discut�an la posici�n en que
lo har�an:

- Oite Magarian �De perrito o misionero?

- Sabes Dikram �No crees que es muy pronto?

- Est� bien, entonces dame un beso.

- �No crees que primero deber�amos elegir la posici�n?

- �De perrito o misionero?

- �No crees que es muy pronto?

Como de costumbre tras la deliberaci�n acompa�ada de las
caricias propias de la pareja y otras mas amorosas decidieron que lo har�an de
misionero, se acomodaron en dicha posici�n pero debido a la gran diferencia de
tama�os y de la manera como hab�an elegido colocarse la penetraci�n era casi
imposible as� que luego de otra deliberaci�n escogieron, de perrito, Magarian se
arrodill� en la cama y Dikram se par� en el suelo, esta vez tuvieron suerte todo
estaba bien y lograron copular de manera mas o menos normal, �l con movimientos
bastante torpes la sacaba a cada rato y pinchaba las nalgas de Magarian con su
pene, a lo que esta le respond�a con un pellizco en donde pod�a, finalmente
lograron controlar la situaci�n de tal manera que el movimiento de mete y saca
era coordinado y constante, claro que la poca creatividad de Dikram si le daba
para hacer alguna caricia tosca en las tetas o espalda de Magarian y esta
tambi�n hacia lo que pod�a.

Al fin y a la postre cada cual tubo su respectivo orgasmo
totalmente descoordinado, Magarian primero, lo que le dio tiempo a volverse y
recibir el semen de Dikram en sus casi inexistentes tetas. Con el agotamiento
experimentado por la pareja tras las deliberaciones de posiciones, caricias y
orgasmos quedaron rendidos, Magarian sobre el pecho de Dikram.

Tras dormir juntos por un par de horas la pareja despert�, se
visti� y Sali� rumbo a casa de Magarian, en el camino iban haci�ndose sus
cl�sicas caricias y manteniendo las amenas conversaciones que tanto disfrutaban,
hasta que a Dikram se le ocurri� otra brillante idea que coment� a Magarian:

- Oite Magarian �Te casar�as conmigo?

- Sabes Dikram �No crees que es muy pronto?

- Est� bien entonces dame un beso.

- �No crees que primero deber�amos casarnos?

- �Te casar�as conmigo?

- �No crees que es muy pronto?