JUGANDO CON MI VECINA II (F/F � ZOO )
Relato de Sarah ampliado y modificado por Peli.
Despu�s de un inicio tan salvaje
estuve un par de d�as sin ver a mi vecina deliciosa M�nica, llegando a creer en
alg�n momento que nuestra relaci�n hab�a llegado ya a su fin. Pero una ma�ana
volvi� a aparecer ante mi puerta, tan sumisa como siempre, y pidi�ndome
disculpas por no haber podido venir antes a verme. Como es normal nos dimos tal
lote que acabamos ambas escocidas, sobre todo ella.
Durante un par de semanas nos seguimos viendo de esta manera,
es decir a escondidas, poco y mal, hasta que un fin de semana me sugiri� que la
acompa�ase a dar un vistazo a la casa de sus padres en el pueblo. Por lo visto
estos se encontraban en un viaje de esos del Inserso y le hab�an pedido que le
echara un ojo a la casa y a los animales del corral colindante que ten�an, pues
aunque ten�an a un vecino encargado de cuidarlos no se iban tranquilos del todo.
Y M�nica, aprovechando que su maridito tenia que viajar, me pidi� que la
acompa�ara para echarle una mano con el cr�o... y para que tuvi�ramos intimidad.
Creo que ni el viaje ni el pueblo le interesa a nadie, as�
que paso directamente a contaros lo que hicimos a la ma�ana siguiente, porque
despu�s de la paliza de coche llegamos las dos tan cansadas que solo nos
quedaron ganas de dormir despu�s de una breve visita tur�stica por la casa y el
corral colindante.
As� que en cuanto me despert� la desagradable escandalera de
uno de esos bichos con plumas que andaban por el corral me asee y me fui a
despertar a mi anfitriona. Para la ocasi�n me hab�a vestido muy ce�ida, con
medias, una faldita de cuero apretada y un jersey muy ajustado marcando pechos.
Debajo solo un min�sculo tanguita y un sost�n abierto que solo realza, pero que
no cubr�a ni mis pezones ni mis areolas.
Cuando entro en su cuarto veo que la muy vaga despu�s de
alimentar al bebe se hab�a vuelto a acostar, as� que me fui derecha para ella y
la destape de golpe.
"��� Despierta M�nica !!!".
"�qu� quieres?". Me pregunta la tontorrona aun medio dormida.
"�qu� que quiero?", "�Te voy a joder!".
Ella me mira con cara de sorpresa, con sus ojitos azules
abiertos de par en par, todav�a sin creerse que vaya en serio. as� que vuelvo al
ataque.
"quitate ese camis�n, tetuda de mierda".
M�nica abre la boquita sorprendida, sin saber que hacer.
"�no me has oido?".
"���fuera el camis�n zorra!!!".
Me acerco a ella, le pongo la mano en un pecho y aprieto con
fuerza. Ella gime y yo aprieto mas fuerte. M�nica se queja e intenta apartar mi
mano. as� que le presiono el pez�n mas fuerte y un poquito de leche mancha el
camis�n, haciendo que se transparente un poco su grueso pez�n.
Creo que ya es hora de contarle algo de mis planes, as� que
me acerco a su o�do y le digo.
"la lecha de puta humana es la mejor �sabes?, hay quien paga
mucho por ella... y yo voy a vender la tuya... pero para ello tengo que
prepararte un poco".
As� que la obligo a ponerse de pie delante m�o y me siento
c�modamente en su cama, la que aun guarda su calorcito. Obligarla a quitarse el
camis�n es f�cil, pero duda un poco antes de quitarse las bragas. Pero le basta
ver mi carita viciosa para terminar de decidirse y baj�rselas hasta las
rodillas.
"M�nica, eres una guarra, tienes la raja sin pelar... pero
vengo preparada".
"��� Abre bien las piernas !!!... pon las manos en la nuca...
y cierra los ojos".
En cuanto lo hace le pongo un papel depilatorio especial en
la rajita y pego un tir�n. Ella gime y chilla pero no le dejo ni un pelito.
Luego cojo un spray y se lo aplico en la rajita para suavizar
el picor, mientras le palmeo la raja para extenderlo.
"Ahora estas mejor, rasurada y lista para acompa�arme".
Pero como la vaquilla es tan idiota que quiz�s no sea capaz
de seguirme la ayudo d�ndole un collar de perra para que adorne su cuello de
marfil.
Ella lo coje, pero no se decide a pon�rselo, as� que le
sujeto un grueso pez�n entre los dedos y empiezo a apret�rselo hasta que se pone
duro entre mis u�as.
M�nica enseguida se da prisa en ponerse el collar, pero no lo
bastante para mi gusto.
"mira M�nica, se te sale el pez�n... yo te ayudo a ponerlo en
su sitio... y con un dedo le empujo el pez�n hacia dentro... empuj�ndole fuerte
con mi u�a.
Mi vecina gime, as� que paro y le apuro:
"�date prisa perra!".
Se lo coloca al fin, pero sus pechos son tan sensibles que no
resisto la tentaci�n y le aprieto el pez�n un poco mas hacia dentro mientras le
susurro al o�do:
"se una buena perra, jodida imbecil".
Luego me doy la vuelta con la correa cogida, y sin
miramientos salgo. Lo he hecho tan de improviso que la torpe apenas me puede
seguir. as� que dando tirones de la correa obligo a M�nica a acelerar el paso
mientras me dirijo hacia la puerta de atr�s. Provocando de ese modo que se caiga
a cuatro patas antes de llegar afuera, golpeando con las rodillas y el pecho en
el suelo de un modo tan c�mico que se me escapa la risita.
No le doy tiempo ni a quejarse, as� que me tiene que seguir a
cuatro patas mientras cruzo el patio y entro en el corral.
Fuera hace algo de fr�o, por lo que se me ponen los pezones
duros. as� que no tengo ni que girarme para saber que los de M�nica estar�n ya
como piedras.
Dentro del corral me dirijo directamente hasta un poste con
una argolla para atar a las vacas que hab�a visto la tarde anterior y en el que
hab�a estado pensando toda la noche.
La ato a la argolla, corto, muy corto, tanto que tiene que
seguir agachada a cuatro patas.
Entonces le pongo un cubo peque�o debajo y le digo:
"ahora, vaca de mierda, te voy a orde�ar... y espero que tu
leche sea buena".
Empiezo a apretarle las ubres, estrujando fuerte con mis
manos. Ella gime un poquito pero yo no le hago caso y aprieto y aprieto.
- "me estas dando poca leche, guarra".
Le cojo de los pezones y le bamboleo las tetas un poco. Luego
vuelvo a apretarla y esta vez sale un poquito mas.
- "mmmh... a ver como sabe...".
Recojo un poco en una copita y la pruebo.
- "mh... sosa....".
Ella me mira extra�ada.
- "�no me crees? ������pru�bala tu misma!!!!!!! ����abre la
boca!!!!.
Cojo todo el cubo, se lo pongo entre los labios y lo empiezo
a inclinar... y ella intenta beber a dudas penas. La desgraciada esta bebi�ndose
su propia leche.
Pero lo inclino mas y mas hasta lograr que se le desborde por
la cara, y que le resbale por el cuello hasta que le moje las tetas. Es una
delicia verla cubierta con su propia leche.
- "ah zorra, te encanta tu propia leche, ��eh??... seguro que
no es la primera vez que te la bebes. A ver, ens��ame como te orde�as solita,
hazlo tu misma... y con fuerza".
M�nica me mira extra�ada, como si no supiera realmente que
hacer, hasta que se coge un pecho con cuidado, se lo acerca a la boca y lo
aprieta con suavidad.
Esto no es lo que tengo en mente, as� que le doy un golpe con
la palma en la teta, haciendo saltar un chorrito directo a sus labios
gordezuelos.
- "��hija de puta!! aprieta fuerte, �vaga!... ��como si no
supieras orde�arte!!... ��ll�nate la boca de leche!!".
Al final lo hace y chupa sin parar hasta que la leche le
rezuma por los labios. Entonces la cojo de la correa del cuello, la acerco a mi
cara, le abro la boca... y le aprieto las mejillas haciendo que derrame su leche
en mi boca.
- "mhhhh... lo supon�a.... ahora sabe mucho mejor... vas
aprendiendo a usar tu cuerpo, cerda... ���no me crees???".
Chupo sus ubres con ganas, estruj�ndoselas con malicia hasta
que no me cabe mas y luego le doy un beso en la boca de lo mas apasionado...
enroll�ndome con ella hasta que se traga toda la leche.
Al acabar veo que sigue sonrojada... pero ya tiene la
respiraci�n agitada... se�al de que ya esta lo bastante cachonda como para pasar
a algo mas fuerte.
- "�sabes que har� ahora contigo?. Ahora vas a empezar a ser
�til en esta cuadra zorra. No se porque pero me da la impresi�n de que las vacas
deben estar ya agotadas de su trabajo... y tengo la impresi�n de que ese
ternerito del fondo esta sediento... as� que lo vas a amamantar".
M�nica no lo tiene muy claro, pero en cuanto la agarro del
pelo se deja llevar sumisa hasta una bala de paja cercana al animal.
Luego, por si las moscas, le hago levantar los brazos y se
los ato con la correa del cuello al poste de madera que tiene detr�s, para que
no le den tentaciones de huir.
Despu�s voy a por el ternerillo y lo traigo cojido de su
propia correa hasta llegar al regazo de la nueva vaquita.
La cual esta espantada, con los ojos abiertos como platos,
pues cuando llego a su lado se da cuenta de que el bicho es bastante grande, con
una cabeza enorme.
- "amam�ntalo... y que este bien satisfecho o me voy a
enfadar".
El ternero no sabe por donde empezar, as� que le levanto un
poco su voluminoso pecho con una mano y le acerco la cabeza todo lo posible. Me
tiene algo decepcionada, porque al principio se limita a darle solo unas cuantas
lametadas a la teta con su larga lengua.
Y, cuando ya pensaba que me hab�a equivocado, adelanta de
repente su cabezota y aplica sus fauces a la areola. Enseguida empieza a mamar
duro, dobl�ndole el pecho hacia arriba de los tirones que le da. Le cabe un buen
trozo de teta dentro de la boca, mientras succiona cual mala bestia, como si
masticase el pez�n con sus enc�as.
Mi amiga gime y gime sin parar.
- "��baaastaaaaaaa!!... ���oooooooooooooohhhhhhhhhhh!!!".
- "yo se que te gusta M�nica, menuda putaza estas hecha".
Mientras le hablo el bicho sigue chupando como el animal que
es, y me da la impresi�n de que si le dejo mucho rato le va a estirar el pez�n.
Es una delicia escuchar como gime sin poder evitarlo, con su
sabrosa leche desbord�ndose por la boca del ternero, as� que no puedo evitar
echarle una mano... a la teta, y le aprieto el pecho con ambas manos para
derramarla a mayor velocidad.
Me da la impresi�n de que la �nica que esta algo pasiva es
ella, as� que le suelto los brazos del poste y le digo:
- "ahora divi�rtete masturbando al ternero... que ya tiene
leche de sobra en su interior".
- "venga, vamos... que en cuanto se corra el bicho te lo
quito de encima".
M�nica me hace un moh�n de rechazo con su naricilla, pero
esta vez se muerde la lengua y, algo cabreadilla, le agarra de la verga y
empieza a casc�rsela.
Lo hace con cierta desgana, as� que le cojo de la mano y hago
que vaya mas r�pida.
Aunque lo cierto es que el ternero es demasiado joven para
apreciar los trabajos manuales de mi amiga y esta mucho mas concentrado en
vaciarle la teta.
Aun as� el bicho se corre enseguida, demasiado pronto para mi
gusto, lanzando una buena carga de semen que chorrea por todo el brazo de
M�nica.
Despu�s me mira con carita de suplica y yo, fiel a mi
palabra, asiento con la cabeza, para que aparte al ternero de su suculenta
fuente de alimento.
Ella se lo quita a duras penas, a base de tirar de sus orejas
para atr�s, pero sin poder evitar que le de un ultimo mordisco con sus enc�as al
pez�n. No es que le muerda, pero se queda enganchado el tiempo suficiente como
para llevarse un nuevo chorro.
Cuando mi amiga, bastante jodida, lo consigue alejar, aun
gotea un poco del irritad�simo pez�n... el cual, por cierto, da la impresi�n de
que se ha alargado un poco.
Quiz�s ese sea el motivo de que, en cuanto se cree que no
miro, le da una patada al ternero� pero yo la pongo enseguida en vereda.
- "�maltrato a los animales? �PUTA!... te lo har� pagar, te
vas a disculpar del ternero".
- "������ l�mpiale el falo con la boca!!!!!.
Como no veo que M�nica vaya a hacerlo le cojo del pelo hasta
ponerla de rodillas a la altura adecuada, luego le abro la boca con una mano y
le meto la polla dentro con la otra.
Cuando veo que mi zorrita se resigna a su suerte y no se
escapa le agarro las pelotas al bicho para vaciarlo bien en su boquita. Me
asombra que todav�a siga duro, pero enseguida se me ocurre una buena forma de
aprovecharme de eso.
M�nica chorrea y chorrea semen por la comisura de sus labios,
esta dejando en el suelo un buen charco de leche y semen.
Al finalizar la limpieza la empujo con una mano y la tumbo
boca abajo, haciendo que reboce sus enormes tetas en el charco de su propia
leche mientras deja su p�treo culo en pompa.
M�nica esta ya tan agotada que no hace ni el mas m�nimo
conato de rebeli�n, lo que de todas formas no le habr�a servido de nada porque
enseguida me siento en su espalda y le abro con fuerza las nalgas, dejando bien
a la vista su diminuto agujerito posterior.
Luego agarro la correa del ternero y lo atraigo hacia mi
vecina, haciendo que su dura polla la roce por toda la intimidad.
Dejo que la ingenua de M�nica se crea que se la voy a meter
dentro del co�o, pero en cuanto tengo al ternero en la posici�n adecuada se la
agarro fuerte y se la meto por el culo apretadito.
Como a�n la tiene tiesa y esta chorreando de semen vacuno y
de la saliva de mi vecina le resbala bien y se le mete mas de la mitad en el
primer empuj�n. Ella gime y se queja.
- "no quiero ser follada por este ternero cabron".
- "calla y dale placer, so vaca". �� Deja que te joda a gusto
�!.
Me imagino que tiene que ser la primera vez del animalito,
porque en cuanto el bicho logra met�rsela del todo dentro del culito se vuelve
loco y se l�a a entrar y salir con la fuerza de una locomotora, d�ndole tales
culadas que casi me derriba de su espalda.
Ni que decir tiene que me lo estoy pasando en grande, al
igual que supongo que mi vecina, porque la muy golfa hace rato que dejo de
quejarse.
No se cuanto tiempo duro la cabalgada, pero se me hizo muy
breve, aunque lo que mas me sorprendi� fue que ternero aun le quedara semen en
las pelotas. Y vaya si le quedaba, pues cuando al final se corri� el bicho
dentro le lanzo tal descarga que v� como le rebosaba por el culo y se le
escurr�a entre los muslos hacia el suelo.
Los continuos jadeos de placer de M�nica adem�s de excitarme
me estaban cabreando, as� que hice como que me levantaba y en cuanto mi vecina
intento incorporarse me deje caer de nuevo sobre su espalda, haciendo que sus
pechos chocaran violentamente contra el suelo y que sus melones se quedaran
aplastados en el suelo, saltando chorros de leche que le dan en la cara.
Sin hacer caso de sus quejas le grito.
- ������� aun no has acabado de ser jodida !!!!!!!!.
Empujo al ternero a un lado y cogiendo a M�nica de la correa
le doy la vuelta y la pongo boca arriba. Esta echa un autentico pringue.
Separo sus piernas abofeteando sus muslos, agarro al ternero
y lo pongo sobre ella. El falo del bicho, bastante tieso aun para mi sorpresa,
golpea en su rasurada raja un par de veces hasta que se cuela dentro, haciendo
que se le escape un suspiro involuntario de placer.
Pero como la muy golfa se ha tenido que estar corriendo como
una guarra mientras la enculaba el bicho esta encharcada por dentro, ya que veo
que entra demasiado f�cil.
Eso no es divertido, as� que permito que el bicho salga
fuera, arranc�ndole un moh�n de pesar a M�nica y la arrastro por los pelos hasta
una de las grandes balas de paja que hab�a en el corral, donde la tumbo boca
arriba y le ato las mu�ecas de nuevo a la viga, y dejo al bicho mamandole las
ubres con las enc�as. Ahora si que M�nica gime y se queja.
- ��hijo de putaaaaa!! �� �tu puta madre no te alimentaba?
�!.
Ese comentario me parece muy ofensivo, as� que pienso
enseguida en la mejor forma de castigarla por su fea ofensa. A la madre no la
sacar�a ning�n provecho, pero voy a buscar al padre, que lleva un buen rato
mirando desde un cercado muy pr�ximo y seguro que tambi�n esta ofendido.
Si el d�a anterior mi vecina no me hubiera demostrado lo
manso que era el toro ni se me habr�a ocurrido acercarme, pero como ya lo sabia
el le traigo sujet�ndole de la anilla de la nariz, como hab�a visto a M�nica
hacer la v�spera.
La verdad es que da miedo ver esa mole de carne tan de cerca,
y a ella deber�a de darle p�nico cuando sus cuatro patas la flanquean y le ato
de la argolla al poste que esta encima de M�nica.
El �nico que no se ha dado por enterado es el ternero, que
continua mamando y dando tirones de su grueso pez�n, con su r�gida poya
enterrada en el co�o de mi vecina pero sin copular con ella, como si M�nica solo
fuera una calida funda para su cipote.
Enseguida me pongo manos a la obra, nunca mejor dicho, y me
l�o a masturbar el enorme miembro del toro con ambas manos, haciendo uso de mis
habilidades manuales para lograr que asome una poya descomunal entre las patas
del animal.
La verga es gigantesca y la posici�n de M�nica es la ideal,
pues seg�n crece va cayendo entre sus tetas hasta que la punta queda a escasos
cent�metros de sus labios gordezuelos.
Con tanto manoseo un liquido pringoso y asqueroso sale ya por
la punta, mojando los labios de ella, que no se lo cree, y que casi ni respira
del miedo que tiene.
El ternero sigue mamando con su enorme cabeza, empujando la
dolorida teta de mi vecina contra el descomunal cipote de su papa�to.
Yo me pongo al lado de M�nica de rodillas, y con mi mano
empujo el otro pecho, sin dejar de masturbarle con la que me queda libre.
Por incre�ble que parezca empezamos a hacerle una cubana al
bichazo, porque el ternero involuntariamente empuja bien la teta y me ayuda en
mi grata labor.
Cuando menos me lo espero un liquido pringoso sale a chorro,
llenando el cuello, la cara y los pechos de M�nica.
Enseguida le suelto el miembro al toro y le abro la boca con
mi mano libre, riendo como una loca al ver como el liquido entra a borbotones
dentro.
Veo que mi vecina hace adem�n de apartarse de debajo, as� que
agarro su pez�n y se lo retuerzo muy muy fuerte.
M�nica grita y se retuerce, pero el grito es amortiguado por
el espeso liquido que la llena, as� que ha de tragar para no ahogarse.
Al agitarse los enormes huevos negros del bicho golpean su
barriga, animando aun mas al animal, que empujando con su verga como si copulara
le da en la boca varias veces con el extremo de su cipote. Y al contacto fuerte
con sus labios eyacula mas y mas para mi goce.
Con algunos esfuerzos obligo a M�nica a aplicar los labios a
la punta del inmenso palo, pues ya se ha tragado casi todo el semen que tenia
dentro y tiene la boca libre.
Mi vecina empieza a tragar a duras penas; obligada, claro
esta, por mis manos y por los continuos y dolorosos retortijones que le doy a su
pobrecito pez�n.
Tiene la boca llena hasta la garganta, pero solo es la punta
del falo, aunque es tan grueso que no hay forma de que pueda meterle nada mas
dentro.
as� que entonces empiezo a moverle aun mas fuerte las tetas,
bien agarrada del pez�n para que eyacule por segunda vez el cabron del toro.
Me cuesta unos deliciosos minutos, pero al final lo consigo,
y la bestia se corre bramando y empujando mas aun contra la cabeza de M�nica.
La presi�n del semen hace que salga a borbotones por las
comisuras y las narices de mi vecina; la cual, no se si por la asfixia o el
placer se corre por los pezones, lanzando unos largos chorritos que hacen feliz
al ternerito que traga sin parar.
M�nica se moja tanto que cuando le hago dar marcha atr�s los
huevazos del toro resbalan por su barriga hasta deslizarse entre sus labios
vaginales.
No les negare que enseguida pens� cosas malas, pero dos
polvos seguidos ya eran una buena recompensa para el toro por las ofensas de mi
vecina, as� que me lo lleve a su cerca.
Luego coji el camis�n de M�nica y con el le limpie el falo a
la bestia por si venia alguien que no viera nada raro. Lo mismo hice con el
ternerito antes de llevarlo, la mar de satisfecho, con las vacas, despu�s de
haberse dado un soberano atrac�n como desayuno.
Como supondr�n quedo empapado de un liquido pringosisimo,
hecho una autentica baba.
as� que desato e incorporo a M�nica y le obligo a pon�rselo,
a pesar de que queda todo transparente, mojando de semen vacuno todo su cuerpo.
Y me la llevo dando traspi�s para la casa, mientras pienso
que otras cosas le puedo hacer para divertirme... �me las puedes sugerir tu?.
Fin del capitulo
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