Un encuentro inesperado, pero muy deseado.
Hola, mi nombre es Carlos y les voy a contar una historia
verdadera que siempre he querido que se repita que me pas� hace 6 meses. D�jenme
contarles un poco, tengo 37 a�os, soy de contextura atl�tica y siempre he tenido
suerte con mujeres. Tengo siete a�os de casado y trabajo para una transnacional
en M�xico y soy jefe de departamento.
Hace dos a�os contrat� a una mujer para mi departamento, ella
era muy inteligente y sumamente hermosa. Su nombre era Ana, tendr� ahora 39
a�os, pero siempre aparentaba menos. Ten�a tremendo cuerpo, unas tetitas firmes
y de regular tama�o, una cinturita delgada, pero sobretodo un culo bien puesto!.
A esta mujer le llev� ganas desde el principio, pero como trabajaba para m�, era
muy seria y adem�s casada pues me contuve. Al a�o le ofrecieron un puesto
similar al m�o en otra transnacional y se fue, no volviendo a tener noticias de
ella.
Hace 6 meses andaba yo de viaje de negocios en Panam� y
cuando iba para mis reuniones me encuentro a Ana en el hotel, ella segu�a igual
de hermosa. Voy la saludo y me cuenta que tambi�n est� en viaje de negocios y
que tambi�n va saliendo a sus cosas, por lo que quedamos de cenar en la noche en
el restaurante del hotel para platicar un poco m�s. Camino a m� reuni�n me doy
cuenta que esa noche tengo la oportunidad de cogerme a esta hembra y que tal vez
sea la �nica.
Despu�s de la cena, en la que hice que tomara mucho vino,
ambos subimos al ascensor y como buen caballero ofrec� a acompa�arla hasta su
cuarto, en donde nos despedimos con un beso en la mejilla. Sabiendo que esta era
mi �nica oportunidad la empuje suavemente hacia adentro y trat� de besarla en la
boca, por un momento vi un brillo en sus ojos de que me corresponder�a el beso,
pero al �ltimo instante quit� sus labios, pero no se alej� de m�. Me pregunt�
qu� estaba haciendo y sin contestarle trat� de besarla de nuevo e igual evit� mi
beso dici�ndome que eso no era correcto. Volv� a intentarlo de nuevo y esta vez
no quit� su boca pero tampoco me correspondi� y me empuj� suavemente.
Yo sab�a que no ten�a la batalla perdida y le dije "dame s�lo
un beso y ya", se me qued� mirando y levemente asinti� con su cabeza y se dej�
que le diera un beso al que ella me correspondi� con su lengua. No fue un beso
apasionado, pero s� fue sabroso. Ella me separ� y me dijo "ya te di tu beso,
ahora vete", trat� de besarla nuevamente y no se dej�, pero nuestros cuerpos
quedaron pegados, por lo que proced� a besarla en el cuello, ella no se
resist�a, pero no paraba de decir que me detuviera y que me fuera pero
claramente estaba disfrutando, yo segu�a bes�ndola en su cuello y sent�a como lo
disfrutaba cada vez m�s, ya sus reclamos hab�an cesado y pod�a ver que sus ojos
estaban cerrados.
Entonces di un paso m�s y mientras segu�a besando su cuello
empec� a acariciar su cuerpo, primero la cintura y su espalda, luego segu� con
sus dos hermosas nalgas, vaya que eran duras como roca!. Ya en este momento
pens� que esta hembra era m�a y empec� a desabrocharle la blusa lentamente; ella
segu�a con los ojos cerrados, entonces agarr� sus tetitas hermosas que ya ten�an
sus pezones erectos a trav�s de la blusa y fue cuando me empuj� y me dijo
"basta!, esto no es correcto, ambos somos casados".
Por un breve instante me detuve, me la qued� mirando y su
mirada expresaba que me fuera, pero yo no quer�a desperdiciar esta �nica
oportunidad. Me le acerqu� lentamente y empec� a besarla en su cuello nuevamente
y le susurr� en sus o�dos "esto ser� nuestro secreto", ella respondi� "te dije
que basta!, esto est� mal, yo no soy una mujer infiel" y se opon�a con sus
brazos pero sin mucha fuerza, yo empec� nuevamente a acariciar su cuerpo y fue
cuando su oposici�n tom� m�s fuerza y dijo "es suficiente, yo no soy una
cualquiera, le soy fiel a mi esposo", entonces, temeroso de perder esta
oportunidad empec� a acariciar su sexo suavemente mientras segu�a besando su
cuello y ah� su resistencia y reclamos fueron disminuyendo poco a poco.
Finalmente, termin� de abrirle su blusa y la bes� en la boca y me correspondi�
lujuriosamente.
Mientras nos bes�bamos le desabroch� su pantal�n y met� mi
mano sintiendo su panty todo mojado, para entonces ella gem�a suavemente. Le
quit� su blusa y pantal�n e igual hice yo, quedando ambos en ropa interior y fue
cuando me separ� para ver ese hermoso cuerpo y le dije: "que hembra m�s rica
eres!", ten�a el cuerpo de una quincea�era, es m�s, cualquier muchacha
envidiar�a tener ese cuerpazo.
Nos besamos nuevamente y sus manos acariciaban mi espalda y
mi cabeza. Le quit� su ropa interior y nos volvimos a separar, pudi�ndola ver
totalmente desnuda, mostrando sus hermosas tetas con sus pezones parados. Su
sexo apenas estaba cubierto de pelos y sus piernas eran firmes.
Yo tambi�n me desnud� y nos besamos nuevamente, mis dedos se
hundieron en su sexo que estaba todo mojado, su respiraci�n se aceler� e inclin�
la cabeza para atr�s, dejando escapar suaves gemidos.
Yo la llev� a la cama y mientras mis dedos segu�an hundidos y
acariciando su sexo, yo le empec� a mamar sus tetas, las chupaba, le mord�a los
pezones, la besaba nuevamente y volv�a a sus tetas.
Entonces, ella tom� mi cabeza y la empuj� hacia abajo,
comprendiendo claramente que quer�a y sin pensarlo mucho me lanc� a mam�rselo.
Sent�a sus jugos correr por mi boca, le mord�a el cl�toris, le met�a la lengua,
sent�a su cuerpo retorcerse de placer. Estuvimos en esto un buen rato y sent�a
como su cuerpo se retorc�a y electrizaba cada vez m�s.
De repente me toma la cabeza nuevamente y me dice: "m�temela,
m�temela", entonces siendo yo un poco sado le contest�:
- "quieres?, realmente quieres?, no te veo pedirlo con
fuerza",
- "te lo ruego, te quiero sentir adentro m�o, quiero ser
tuya!"
- "y tu marido, no te importa ahora?"
- "no me importa, quiero ser tuya hoy!"
Al escuchar estas palabras no aguant� m�s y se la clav� de
golpe y la empec� a cabalgar salvajemente y ella gem�a con mucha fuerza y su
cara era toda lujuria y placer, ella me dec�a "si, si, dame, dame" y yo segu�a
congi�ndomela; luego le dije "te gusta que te est� cogiendo otro que no sea tu
marido y le seas infiel?!" y simplemente me respondi� "siii!" y fue cuando ella
tuvo un orgasmo salvaje y prolongado. Yo estaba en las nubes cogi�ndome a esta
mujer que tanto tiempo hab�a deseado y quer�a que esto durara, no quer�a venirme
pronto, por lo que la saqu�.
Ella me dec�a "dame otra vez, dame otra vez, quiero sentirte
adentro, c�geme por favor", entonces la puse de cuatro patas meti�ndosela de
nuevo, ella me dec�a "dame m�s duro, m�s duro", yo la complac�a estrellando mis
bolas contra ella, d�ndole salvajemente. Ella no paraba de gemir, era una
salvaje!.
Un poco cansado, la volte� y yo me puse abajo, dejando que
ella siguiera encima m�o. Fue entonces cuando mostr� su maestr�a en la cama, su
cuerpo sub�a y bajaba mientras yo le agarraba sus tetas y se las apretaba, le
dec�a "eres una zorra, eres una zorra!". Se acercaba a mi cara y me pasaba su
pelo y se alejaba nuevamente, me restregaba sus tetas en la cara y se alejaba.
Yo la puse nuevamente en la cama y empec� a clav�rsela
fuertemente, ella no paraba de gemir, su cara era todo placer, entre gemidos me
dec�a "sigue, sigue", "as�, as�" . Yo le dec�a "eres una puta!" y se estremec�a
de placer, lo cual me volv�a loco y hac�a que me la siguiera cogiendo con
fuerza, "tu marido seguro est� durmiendo y tu cogiendo como una puta!" y m�s se
excitaba, "no te importa?", le dec�a y me respond�a "no, no", -"quieres que te
siga cogiendo puta?!" y solo dec�a "no pares, no pares, que me est�s cogiendo
riqu�simo!". Yo no paraba de met�rsela y met�rsela... entonces le dije:
- "que eres?"
- "soy tu puta"
- "no te o�go"
- "soy tu puta" dec�a m�s fuerte, mientras su cuerpo se
sacud�a.
- "qui�n te coge m�s rico, tu marido o yo?"
- "tu me coges m�s rico, porque me coges como puta!"
En ese momento no aguant� m�s y me empec� a venir a chorros,
descargando toda mi leche adentro de ella y provoc�ndole otro orgasmo salvaje..
Ca� exhausto a su lado qued�ndonos dormidos. Al d�a siguiente
despert� y ella segu�a dormida. Empec� a acariciarla nuevamente porque quer�a
otra sesi�n de sexo... pero esta parte la dejo para otro d�a.