Relato: Las aventuras de Josefina (2) Las aventuras de Josefina. II
Hola como ya saben mi nombre es Josefina, tengo 30 a�os, soy
casada, tengo dos hijos de 4 y 7 a�os, y me gusta el sexo� y les seguir�
contando mi historia�
despu�s de mi despedida de soltera, y del encuentro con mi
suegro, sucedi� el momento mas importante de mi vida, mi boda, para esa ocasi�n
utilice unas prendas intimas peque�itas de encaje muy coquetas�. ese d�a de la
fiesta, todo fue felicidad, celebraci�n y dem�s� al terminar el festejo Sergio y
yo nos fuimos a Acapulco, guerrero a pasar una noche inolvidable, Sergio me hizo
el amor como nunca y yo fui la mas feliz del mundo� aunque no sabia todav�a lo
que me deparaba el destino�
Pasamos pr�cticamente una noche y un d�a encerrados en
nuestra suite, cogiendo, comiendo, so�ando, muy rico� pero yo tenia ganas de
tomar algo de sol, as� que al tercer d�a decid� bajar a la piscina del hotel,
mientras que Sergio prefiri� dormir en la suite, pues debo admitir que yo lo
dejaba bastante agotado�
Para salir me puse un bikini nuevo color lila, con tanguita
de hilo dental y un top que hacia que mis senos casi, casi reventaran� as�
llegue a una camilla, me recost� ped� un refresco de naranja y ve�a como jugaban
unos ni�os en la alberca, mientras un par de viejitos, como de 60 a�os, los
cuidaban� los viejitos estaban jugando ajedrez� yo me acerque a ellos, para
preguntarles como estaban tan entretenidos con ese juego� ellos me miraron de
arriba abajo y me dijeron que era un juego apasionante, y que si quer�a me
ense�aban� yo acced� jugu� un par de juegos con cada uno de ellos mientras el
otro me explicaba, pero los dos me barrieron, luego les dije que me tenia que ir
que mi reci�n marido me esperaba� ellos me invitaron a su cuarto para celebrar
por mi matrimonio� yo les dije que eso estaba mal, pero luego de sus ruegos
acepte tomar una copa e irme a mi habitaci�n al lado de mi querido esposo�
Los viejitos dejaron al mayor de los ni�os a cargo� en el
camino a mi habitaci�n me dijeron que eran los nietos de uno de ellos y que el
otro no tenia familia, pues nunca tuvo hijos, llegamos a su suite, que estaba al
lado de la m�a y de mi esposo, eso me dio mas seguridad a mi, pues cualquier
cosa que intentaran esos viejitos coscolinos pod�a marcharme inmediatamente o
gritar a mi esposo�
nos sentamos en el sof�, ellos me miraban con verdadero
deseo, me gustaba calentar a esos viejos rabo verdes� sirvieron un co�ac muy
rico, pero �spero� tome una copa y les dije que ya me tenia que ir� ellos me
dijeron que la ultima, as� que me sirvieron otra y eso me prendi�, entonces uno
de ellos prendi� el stereo y me saco a bailar, no me pude negar y empezamos a
bailar una cumbia muy sabrosa muy pegaditos, cada vez que pod�a el viejito,
aprovechaba para manosear mi culo y para rozarme con su tranca� luego se sent�
en el sill�n junto al otro y me miraban bailar, yo ya estaba caliente, por el
co�ac y el baile� ellos me admiraban, y de repente los dos ya ten�an sus penes
en sus manos mientras me ve�an extasiados� se acabo la m�sica y les dije bueno
se�ores me tengo que ir� ellos me rogaron que me quedara un poquito mas, y el
menos viejito me pidi� que les ense�ara los senos, que probablemente seria la
ultima vez que ambos pudieran tener a una mujer as� de tan cerca� el otro con
pene en mano puso un merengue, comenc� a bailar y me saque el top del bikini�
ellos se levantaron ya encuerados y empezamos a bailar todos, si como cuando mis
cu�ados, el menos viejo me quito la tanga, mientras el otro me chupaba bien rico
mis melones� entre los dos me cargaron y me subieron a una cama.. Yo les dec�a
que ya era suficiente que era una mujer c a s a d a.. pero uno de ellos meti� su
verga en mi boca y no pude seguir reclam�ndoles� el otro aprovecho, apunto con
su verga y me cogio� y ah� estaba a un lado de mi suite, donde estaba mi esposo,
siendo cogida y gozada por dos vejetes repugnantes� uno de ellos me pregunto que
si me hab�an hecho el sexo anal, a lo que yo conteste que no, entonces ambos se
miraron, sonrieron me voltearon y me prepararon, mientras uno me lam�a mi
puchita el otro ensaliva mi ano, yo estaba nerviosa, la situaci�n, la pasi�n y
sobre todo era la primera vez que me la iban a meter por el ano, y eran dos
viejitos desconocidos, de hecho ni sabia sus nombres, como se han dado cuenta�
entonces uno de ellos me la fue clavando poco a poco yo grite, de dolor en un
principio y de placer despu�s.. Mis gritos eran muy fuertes, y eso me excitaba
que mi esposo escuchara como su esposa gozaba con otros hombres, en este caso
viejitos� despu�s los dos se hicieron unas tremendas chaquetas y se vinieron en
mis pechos� ahhhhhhhhhh que rico les dije�
ellos cayeron al lado de la cama rendidos�. en eso fui al
ba�o me lave, me puse mi diminuto bikini y cuando iba a salir del cuarto, entro
un joven como de 15 a�os, era otro nieto de los viejitos, me dijo que qu� estaba
haciendo ah�, le dije que hab�a ayudado a sus abuelitos a acostarse, el me miro
incr�dulo, le di un besito en la frente y me sal� para ir con mi esposito a
seguir gozando de mi luna de miel�
Luego de que regresamos de la luna de miel, mientras Sergio
tenia un trabajo de tiempo completo que nos mantuviera decid� buscar uno de
medio tiempo� entre a una empresa que vende computadoras v�a tel�fono, como
asistente del director general con muy buen sueldo, por cierto� aunque de
antemano le avise a mi jefe el se�or garza que solo era moment�neo� un viernes
llegue muy temprano para adelantar unos oficios y unas facturas, pues ese fin de
semana sal�a con mi esposo a Cuernavaca.. Llevaba una faldita arriba de la
rodilla, una blusita blanca y un saquito.. no hab�a nadie pues llegue antes de
que entraran todos� estaba agachada buscando unos papeles en mi escritorio
cuando alguien me toma de la cintura, volteo y era el se�or garza, me dijo que
haces aqu� tan temprano, le record� que me iba temprano, es cierto me contesto,
te vas a cuerna verdad?� le dije si, me dijo �todav�a me tenia tomada de la
cintura- te has de ver muy bien en bikini, me sonroje y le dije que si, me dijo
que si le mostraba un poquito, yo le dije que era casada, pero el me beso con
gran pasi�n, me apret� las nalgas, me cargo me acost� en su escritorio, me
levanto mi faldita, hizo mi tanguita a un lado y me empez� a chupar con demencia
mi puchita� yo estaba bien caliente, esa forma de tomarme, la determinaci�n y lo
bien que me lam�a, me hizo decir las palabras m�gicas para cualquier hombre:
pen�treme se�or garza�. el sigui� chupando mientras yo le exig�a que me la
metiera� saco su verga y me clavo con fuerza� ahhh exclame, que rico pene tiene
se�or garza� el me dijo pues es todo tuyo putita� ahahah!!!! ahhhh!! que rico lo
hacia�. despu�s de que termino se sent� en su silla y me dijo que se lo mamara,
yo agradecida por la cogida que me hab�a dado no me negu� y le chupe su pene de
no menos de 20 cm a conciencia, se lo chupe de leng�etazo y luego me lo com�
enterito, ya exhausto me dijo que me sentara en el, y yo lo cabalgue ahhhh ahhh
que rico se�or garza, que rico dec�a yo�. el no dec�a nada�. sent� como sus
chorros de semen ba�aban, otra vez, mi interior� y terminamos.. depues de eso me
dio permiso de salir temprano.. para irme a Cuernavaca donde mi suegro tiene una
casa en la que he pasado momentos muy ricos�
Nos vemos en la siguiente entrega, donde mi suegro, mis
cu�ados y� bueno ya les contare
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Relato: Las aventuras de Josefina (2)
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