Relato: Juan Ten�a 16 a�os. Viv�a en una peque�a casa con mis padres y 3
hermanos mayores, Esto sucedi� con Juan un a�o y medio mayor con el que
compart�a todo: amigos, cuarto, etc. Mis otros dos hermanos dorm�an en otra
habitaci�n. Juan, desde su cama me dec�a sin alzar la voz que quer�a hablar
conmigo, como ya lo hab�a hecho otras noches, porque podr�an escuchar mis padres
que dorm�an en el cuarto contiguo, y se paso a mi cama diciendo adem�s, que
ten�a fr�o, y se me acercaba tanto a mi que escuchaba los latidos de su coraz�n
y empez� a contarme las experiencias que ten�a con algunas amigas y su novia. A
m� me gustaba escucharlas, cada d�a eran m�s er�ticas, eso me emocionaba y
quer�a escuchar m�s, porque cuando mi hermano se pasaba para mi cama, sent�a
calor en mis senos, los acariciaba y me tocaba mi cuca hasta humedecerme y luego
pod�a dormir pl�cidamente.
En una de esas noches cambi� mi vida. Me dec�a que le hab�a
acariciado los senos a su novia, que quiso bes�rselos, pero que ella le impidi�
que siguiera. De esta manera y ya acostados en mi cama me dijo que mis senos
eran similares a los de su novia y que le dejara tocarlos. Asustada pero deseosa
sin pensarlo, le dije que s�, los acarici� y bes� intensamente, parec�a que mi
hermano com�a un helado, luego me abraz� peg�ndome contra su cuerpo, por ello
sent� su pija dura en mi pubis que ya estaba h�medo.
Despu�s de un rato se fue a su cama. No me qued� otra que
acariciarme sola hasta saciarme. Fue la primera vez que experimentaba algo tan
cercano con un hombre, aunque era mi hermano.
Fue as� como continuaron sus "visitas" a mi cama, con sus
historias y besando mis senos y arrimando su pene a veces a mi pubis y otras
veces a mi culito cuando se situaba abras�ndome desde atr�s, hasta que un d�a,
�l se hab�a vuelto a pasar a mi cama, mientras yo dorm�a pero esta vez, se situ�
por mi espalda dibujando la misma forma como dorm�a, despert� pero fingiendo
estar dormida lo dej� que hiciera conmigo lo que �l quisiera; empez� a tocar mis
senos y caderas mientras sent�a su pija en mi trasero, eso hizo que mi coraz�n
latiera como si se fuera a salir, luego me baj� la pijama y qued� sin nada
porque no acostumbro dormir con tangas, a menos que sean los d�as dif�ciles;
sent� que coloc� su pene duro en medio de mis piernas, en un segundo, pens�
mucho sobre lo que estaba haciendo, si tal vez mi hermano ser�a capaz de
penetrarme, si era incorrecto lo que hac�a, pero mi cuerpo ya no respond�a a
nada sino al placer, �l empez� a pajearse sobre mi cuca mojada, mientras que su
mano tocaba mi cl�toris, yo fingiendo seguir dormida, mov�a mis caderas
lentamente, hasta que Juan se derram�, y moj� mi cuca, mis piernas y mi cola de
una manera deliciosa y se retiro.
Por m�s de un mes no volvi� a "visitarme", yo no pod�a
decirle nada porque ten�a verg�enza, adem�s supuestamente estuve dormida y no me
hab�a enterado de lo que pas�, lo que me daba algo de tranquilidad. Pero una
noche volvi� mientras dorm�a, me sac� la pijama me bes� mis senos, lam�a mis
pezones paraditos, acarici� mi cuerpo, luego baj� lentamente bes�ndome hasta
llegar a mi cuca, disimuladamente abr� mis piernas, tratando de aparentar un
movimiento natural de sue�o, y empez� a besarla, a meterme la lengua entre mis
entra�as mojadas.
Yo "dormida" empec� a acariciarle su cabeza, e hice un
intento de jalarlo para que me montara, porque ya no aguantaba m�s el inmenso
cosquilleo, �l sin pensarlo se subi� y me coloc� la punta de su pija en mi cuca
haci�ndome sentir aun m�s placer y luego de unos minutos donde ya las ganas de
que me metiera su pene eran intensas, lo coloc� en mi mojado hoyo y me fue
penetrando suavemente, para no despertarme, con un fuerte dolor pero delicioso,
lo met�a y sacaba muy despacio, como si supiera el dolor que me causaba, luego
empez� m�s r�pido y el dolor ya era placer. Hasta que de pronto sac� su pene y
moj� mi cuerpo.
Estuvo all� un rato bes�ndome mis senos, yo no quer�a que se
fuera de mi lado nunca m�s, luego de un rato regreso a su cama. Fue algo lindo
aunque por fingir que dorm�a, no pude decirle lo maravilloso que lo que pas� esa
noche.
Cuando amaneci� y vi la mancha de sangre de mi desvirgaci�n
fing� que la toalla higi�nica se hab�a ca�do y por eso hab�a manchado con mi
regla. Esto se repiti� varias veces pero nunca le dije nada, porque al d�a
siguiente, era como si no hubiera pasado nada. Por su puesto para prevenir un
embarazo una amiga a la que le dije que lo har�a con Javier mi novio me acompa�o
a una cl�nica de salud donde me dieron, luego de una larga pl�tica,
anticonceptivos.
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Relato: Juan
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