Con estampa de ni�a bien, Paty siempre vest�a pantalones ni
siquiera entallados y lo �nico que se le pod�a divisar, si acaso, era un par de
enormes tetas que se perd�an con ese entorno suyo nada agradable a la vista.

Se cas� con un tipo similar, igualmente obeso, tal vez
incluso un poco m�s que ella y cinco a�os mayor. Parec�a que le iba bien en el
matrimonio, al menos eso cre�a, porque su car�cter era risue�o y nunca perdi� el
encanto de la sonrisa. La verdad es que siempre la vi como amiga y nunca como
mujer.

Trabajamos juntos en una casa adaptada como oficina y los dos
ten�amos que ver con el dise�o gr�fico y la administraci�n. La casa era
propiedad de un amigo que ah� mismo viv�a pero en la parte superior del
domicilio, en realidad nunca estaba desde que sal�a por las ma�anas hasta que
llegaba por las tardes generalmente cuando ya ninguno de los dos nos
encontr�bamos.

Recuerdo perfectamente bien que el gordito esposo de Paty al
principio iba a dejarla y al t�rmino de la jornada pasaba por ella pero al paso
del tiempo la mujer se ten�a que ir en taxi sino es que yo mismo me ofrec�a a
darle un "avent�n", como decimos ac� en M�xico cuando nos ofrecemos a llevar a
alguien.

El caso es que la pl�tica siempre giraba en torno a sus
an�cdotas, ten�a muchas, y no paraba de hablar a pesar de que constantemente con
la cara le daba a entender que ya no deseaba charlar o mejor dicho escucharla.

Un buen d�a las cosas iban como todos los d�as: ella hable y
hable, y yo escuche y escuche pero al final se puse medio triste y me confes�
que su marido le andaba enga�ando. Naturalmente quise darle �nimos y por primera
vez vi que la sonrisa se le borr� del rostro. Le dije que quiz�s estaba
exagerando, que tal vez no eran las cosas como ella lo estaba viendo pero fue
contundente cuando me fue dando una larga lista de pruebas de la infidelidad del
marido.

Luego la pl�tica se fue calentando cuando me coment� que no
entend�a la situaci�n ya que a su marido "no se le paraba"� S�lo alcance a
esbozar una muy leve sonrisa porque honestamente se ve�a muy simp�tica aquella
rechoncha amiga m�a tan tierna y tan dulce hablando en esos t�rminos y contin�o
la pl�tica todav�a m�s sorprendente cuando me dijo, de la manera m�s natural,
que para poder "animar" a su marido ella recurr�a al sexo oral:

--Me duele todo lo que est� haciendo porque yo hago todo lo
posible por satisfacerlo� He llegado a mam�rsela hasta tres o cuatro veces al
d�a, y no creas que un poquito, no, un buen rato pero no se le para� No s� que
anda buscando afuera si ni siquiera puede conmigo.

Honestamente cuando salieron esas palabras de Paty sent� un
peque�o tir�n en mi instrumento, como si me hubieran puesto un resorte. La
verdad es que me calentaba escuchar esas palabras en su boca y no pude evitar
imagin�rmela mamando una verga. En realidad no supe que decir. No sal�a del
asombro ni de la calentura que me estaba produciendo su pl�tica sobre todo
porque entraba en detalles muy reveladores para m� como el hecho de que el
gordito "la tuviera" muy chiquita.

Para no incomodar a Paty trataba de darle respuestas m�s o
menos cient�ficas: que el tama�o no es importante, que lo m�s importante es
saberlo mover pero ella insist�a en dar detalles y obviamente yo ya estaba
excitad�simo con aquella pl�tica. Por momentos sent� como si tuviera a una ni�a
enfrente m�o y no quer�a abusar de esa situaci�n pero fue entonces cuando pude
ver mejor ese par de "melones" que ten�a tras la blusa y fue entonces cuando
imaginaba su boca engullendo mi verga. Fueron escenas mentales deliciosas pero
trataba �insisto de no aprovecharme de la situaci�n.

--Eduardo (as� se llama el gordito) cuando la tiene parada
apenas alcanza los siete cent�metros, pero para que se le pare "�uta!" es
estarle mame y mame� �Te parece normal tener un pito de siete cent�metros de
largo?

--S� Paty s� es normal� adem�s yo creo que la debe tener m�s
grande pero como est� gordito pues casi no se le ve (todav�a tratando de
defender a su marido)

--Pero �cu�nto mide un pito?

-- Pues puede ser de entre 9 y 15 cent�metros algo normal
(respond� con donaire de cient�fico y de paso evitar verme muy caliente)

Luego, me aclar� que no quer�a ofenderme (como si lo
estuviera haciendo) pero que quer�a saber algo muy �ntimo de m� y me pregunt�
por el tama�o de mi "tolete". A lo que respond� con naturalidad que 15
cent�metros y de inmediato le aclar�: pero hay tipos que tienen hasta 20 o 22
cent�metros.

--���15 cent�metros!!! Pero s� eso es el doble de lo que
tiene Eduardo� Y lo s� porque ya se lo med�

Luego me dijo que no cre�a que hubiera hombres que la
tuvieran de 22 cent�metros, y como se mostraba incr�dula le recomend� que se
metiera a las p�ginas de internet, y me respondi� que ya lo hab�a hecho pero que
pensaba que todas esas fotos eran truqueadas, y me hablaba con conocimiento de
causa ya que Paty es dise�adora gr�fica

--No puedo imaginarme que t� tengas el doble de lo que tiene
Eduardo y que ese cabr�n ande de "puta�ero" (mujeriego) presumiendo la mitad de
lo que tienes, o por lo menos de lo que dices que tienes�

-- jajajajaja s� Paty claro que los tengo. No tendr�a porque
mentirme� Nos estamos hablando derecho �Qu� no? Pero si no me crees pues
imag�natelo porque yo tampoco me puedo imaginar a una mujer que se la mame a su
marido tres o cuatro veces al d�a�

-- Ahh, entonces me est�s llamando mentirosa??

-- Dej�moslo as� (le respond� con tono evasor)

-- De ninguna manera (me dijo muy molesta) si t� tienes 15
cent�metros de pito yo te regalo una mamada�

Aquella propuesta me dej� helado. La pl�tica me ten�a s�per
excitado y pod�a not�rseme en el pantal�n. Me par� del asiento pero honestamente
no sab�a que hacer, ya eran muchas emociones para un solo d�a. Paty tom� la
iniciativa y como si lo tuviera todo calculado sac� del caj�n una cinta m�trica,
se acerc� a m� y con la mano me acarici� el bulto que se ve�a en el pantal�n. Yo
sab�a que la apuesta la ten�a ganada pero toda esa situaci�n me provocaba
incertidumbre.

Paty, con desesperaci�n me desabotonaba el pantal�n. Luego,
se dio cuenta de la cantidad de l�quido que manchaba el calz�n producto de
aquella conversaci�n y segu�a acarici�ndome el paquete como disfrutando
plenamente cada etapa. Cuando me baj� el calz�n y vio aquel fierro inflamado no
pudo contener su asombro, y es que me hab�a guardado un "peque�o" secreto, el
atractivo m�o no es lo largo sino lo grueso porque la tengo muy gorda. Paty se
olvid� de la cinta m�trica. Me tumb� en un sill�n y empez� a cumplir su palabra.

Era s�per excitante ver esa cara de ni�a gozando una verga.
Quien no la conociera me hubiera calificado de pederasta pero la verdad es que
ella tampoco minti� y era una consumada mamadora de verga. Basta decir que me
vine dos veces en su boca. La primera vez quise retirar mi palo de sus labios
pero ella no me dej� salirme a pesar de las advertencias, de modo que la segunda
lo disfrut� a�n m�s.

No s� cuantos d�as su marido la haya tenido a "dieta" pero me
supongo que hab�an sido varios porque literalmente se la quer�a comer y no
paraba de mamar y de mamar. Parec�a una ni�a comiendo un caramelo.

A la ma�ana siguiente yo no sab�a como actuar. Pens� que
estar�a arrepentida, que quiz�s no iba a volver al trabajo pero no. A las 9 de
la ma�ana estaba ah�, baj�ndose del taxi, me dio un beso en la mejilla (como
amigos) y me dijo que ya no le importaba que su viejo le pusiera el "cuerno"
porque al fin y al cabo ella ya hab�a descubierto otro lugar mucho mejor de
donde tomar "lechita caliente" �y saben una cosa? Tampoco minti� cuando me dijo
que hac�a el sexo oral todos los d�as� Cog�a incre�ble, despu�s me la anduve
tirando por todos lados. Lamentablemente se cambi� de ciudad y perdimos esa
bonita amistad.

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