El Infiel, Segunda Parte.
"....Me dirig� al ba�o para asearme un poco y arreglar mi
ropa, despu�s me fui a la mesa con mi pareja y lo que paso ah� es otra historia.
", corresponde al final de la primera parte de
, lo que voy a narrar a continuaci�n sucedi� a partir del momento que
llegue a la mesa donde se encontraba mi pareja Erick con un grupo de amigos.
Cuando llegue a la mesa me di cuenta de que en esos cuarenta
minutos (m�s o menos) mi pareja se encontraba totalmente ebrio, en un estado en
el cual nunca antes se hab�a encontrado, nunca supe cuanto hab�a bebido.
Entonces, por un momento no sab�a que hacer, porque no pod�amos llegar a si a su
casa (los dos vivimos en su casa con su mama) y exponer a que su mama lo viera
en ese estado (mi pareja es muy reservado y un poco chapado a la antig�a). As�
que por un momento pens� en irnos a un hotel, pero un amigo m�o llamado Antonio,
muy amablemente me ofreci� su departamento, as� que partimos en su coche:
Antonio (mi amigo), Alan (el chico con el que fui infiel y que resulto ser primo
de Antonio), Erick (mi pareja) y yo (Julio). No viene al caso contarles todo lo
que paso durante el camino del antro al departamento de Antonio, porque se
imaginaran como es el ambiente entre varios muchachos ebrios y adem�s gays.
Llegamos a su departamento y acomodamos a mi pareja en una de
las recamaras, mientras mi amigo Antonio me ayuda a quitarle la ropa, me hac�a
comentarios de lo bien que estaba Erick, que lo pon�a caliente y que le
encantaban sus pompas, mismas que comenz� a acariciar, y a mi la verdad me saco
de onda porque nunca antes hab�amos tenido este tipo de convivencia y no sab�a
que le pasaba, pero supuse que eran los efectos de la bebida. Despu�s de
terminar de ponerlo c�modo para dejarlo descansar, salimos de la recamara y
cerramos la puerta y al llegar a la sala, nos encontramos con Alan dormido boca
arriba, en uno de los sillones totalmente desnudo y con una tremenda erecci�n (a
pesar de que no tenia ni una hora de que hab�amos cogido como locos en el
antro), yo me quede totalmente anonadado presenciando esa fabulosa verga, que
una hora antes hab�a disfrutado plenamente, Antonio al verme la cara as� me
dice:
- Oye, despierta, que? Te gusto su verga? � dijo Antonio
mir�ndome a los ojos. Me quede sin habla por su insinuaci�n, ya que se supone
que el no estaba enterado de mi infidelidad con su primo Alan.
- Mas bien tu pregunta se refiere a que si me gusto verla no?
�le conteste haci�ndome el tonto ante su insinuaci�n.
- No lo trates de ocultar, ya lo se todo, Alan me lo cont�
�dijo Antonio, que al ver mi cara de preocupaci�n y de miedo continuo
dici�ndome- pero no te preocupes que yo no le dir� nada a Erick pero con una
condici�n.
- Que condici�n? �Le conteste con una interrogante en mi
cara.
- Alan me cont� que le mamastes la verga muy rico y quiero
que mames la m�a ahora, que dices?
- Como crees? �le conteste yo en medio de una confusi�n y
tambi�n un poco de excitaci�n de ver la verga de Alan en total erecci�n y de la
propuesta de Antonio.
- Entonces si no aceptas, tendr� que contarle todo a Erick
�al terminar su frase, se dirigi� a darme un beso en la boca y lo acepte.
Antes de continuar con el relato, d�jenme hablarles de
Antonio: es un chico de 1.70, delgado, el tipo chico que siempre lo veras
delgado, su piel es blanca, cabello ni largo ni corto, su cuerpo es fuerte y
tiene un poco marcados los m�sculos y por �ltimo lo que m�s me pon�a de �l eran
sus manos, me encanta ver como se le marcan las venas sobre las manos y los
brazos, que como son delgados si se le notan much�simo, que a diferencia de las
manos de Alan, no eran grandes. A mi en lo personal desde que lo conoc� me
gusto, pero la verdad nunca hab�a tenido la intenci�n de provocar algo con el,
sobretodo porque el es un gran amigo de mi pareja.
Continuando con el relato, el beso de Antonio me tomo por
sorpresa, pero tampoco hice nada para evitarlo, as� que me entregue a ese beso,
mientras que Antonio no dejaba de acariciarme mis pompas y yo me dedique a
acariciarle la espalda que tantas veces me hab�a imaginado tocar y a pasar mis
manos por todo cuerpo fuerte y delgado. Poco a poco nos fuimos quitando la ropa
hasta quedar solo en ropa interior, ah� en medio de la sala de su departamento y
mientras nos bes�bamos poco a poco nos �bamos dirigiendo hacia el ba�o y sin
decirnos nada, nos metimos a la regadera. Al llegar, Antonio abri� la llave del
agua caliente y mientras el agua ca�a sobre nuestros cuerpos, nuestras manos no
dejaban de acariciarse. No hubo necesidad de decir nada, solo contaban nuestras
caricias y los besos que nos d�bamos, era como si siempre hubi�ramos estado
esperando este momento, ya que exist�a una comunicaci�n tan plena entre nuestros
cuerpos. Nos sentamos bajo la regadera, yo me puse de espaldas y �l comenz� a
enjuagarme la espalda de una manera tan rica que hacia que mi cuerpo se relajara
totalmente y despu�s de un rato yo realice la misma operaci�n con el,
continuamente pasaba mis manos sobre su verga que aun manten�a bajo su b�xer
negro, que lo hac�a lucir realmente muy sexy. Despu�s de estar un rato sentados
y d�ndonos masajes, nos pusimos de pie y nos quitamos totalmente el jab�n de
nuestros cuerpos y procedimos a secarnos mutuamente, realmente era como si ya
llev�ramos mucho tiempo juntos, porque nos comunic�bamos sin decirnos nada, solo
las caricias hablan.
Salimos del ba�o tomados de la mano sin dejar de mirarnos a
los ojos, �ramos como dos enamorados: as� lo sent� y as� me entregue a
disfrutar, ese no era momento para pensar que si lo que estaba viviendo estaba
bien o mal.
Como dec�a, salimos tomados de la mano y llegamos a la cama y
yo solo opte por recargar mi cabeza sobre sus hombros y Antonio solo me abrazo y
despu�s de unos segundos, me susurr� al o�do:
- He estado esperando mucho tiempo este momento �me dijo
Antonio, mientras me tomaba con sus manos mi cabeza y la dirig�a hacia la suya
�deseo hacer el amor contigo, te amo y te necesito!!!!.
Cuando menciono esta �ltima frase me estremec� por completo y
a la vez no sab�a que decirle, ya que esto era totalmente nuevo para mi, as� que
solo opte por decirle:
- Soy todo tuyo �le dije y nos comenzamos a besar
intensamente mientras nuestras manos se perd�an en nuestros cuerpos. Realmente
era un momento m�gico y �nico y tan �nico que no recuerdo que con mi pareja
Erick en los �ltimos meses haya vivido un momento igual.
Comenz� a deslizar sus labios hacia mi cuello, me llenaba de
besos y solo emit�a breves gemidos del gran placer que estaba sintiendo, poco a
poco llego a uno de mi pezones y comenz� a pasarle la lengua alrededor, lo
besaba y despu�s lo comenz� a chupar, como si quisiera obtener algo de el,
dejaba de sentir su lengua solo cuando se pasaba al otro pez�n, me estaba
volviendo loco con sus caricias. Antonio me tomo y me llevo a la cama para
acostarme y as� quedar totalmente a su disposici�n. Fue entonces cuando pude
apreciar totalmente su cuerpo, el de pie y yo acostado frente a �l, se ve�a
totalmente sensual, su cuerpo delgado y bien formado, sin llegar a ser
musculoso, pero bien duro, su espalda ancha, su cintura peque�a, su vientre
plano lleno de vellos y sus dos piernas largas pero delgadas, era realmente
guapo y sobre todo tenia esa mirada en sus ojos llenos de una sexualidad que
nunca antes hab�a visto en alguien m�s, en pocas palabras era realmente un
hombre que sab�a lo que ten�a y sobre todo como usarlo y lo estaba haciendo al
tenerme ah� a sus pies. Pero realmente lo que mas me llamo la atenci�n fue el
centro de su cuerpo: su verga, que a pesar de no tener el tama�o de la verga de
su primo Alan (24 cm.), ten�a un tama�o de 20 cm., pero eso si era mas gruesa y
lo que me llamo m�s la atenci�n es que era totalmente recta y eso efecto era
demasiado excitante para mi, tambi�n estaba llena de venas y era realmente una
hermosura de verga (como las que salen en las pel�culas de Bel Ami) y sus huevos
parec�an llenos de leche, que yo estaba dispuesto a beber, realmente rea una
verga hermosa, perfecta y muy brillante; pero como no existe un ser perfecto en
le mundo, Antonio tenia un peque�o defecto: no ten�a buenas nalgas.
Continuando con el relato, Antonio se acost� sobre mi y al
sentir su piel caliente sobre la m�a poco falto para correrme, era como si
nuestros cuerpos se estuvieran fundiendo por el calor de nuestras pieles,
comenz� a moverse sobre m�, mientras nuestras labios se tocaban y nuestras
lenguas de cruzan entre s�, mis manos se apoderaron de su espalda, subiendo y
bajando sobre ella hasta alcanzar sus pompas suaves y lampi�as. Era muy rico
sentir su verga sobre la m�a, las dos luchando en medio de nuestros vientres.
Poco a poco me fui abriendo de piernas hasta que estas quedaron totalmente sobre
sus espaldas y al fin pude sentir su verga rozando la entra de mi culo, que en
esos momentos esta caliente y deseoso de sentir su verga, pero sin decirnos nada
aun no era el momento para hacerlo, quer�amos disfrutarlo mucho mas tiempo,
quer�amos conocernos m�s y fundirnos hasta hacernos una sola entidad. Durantes
todos estos minutos, que para m� parec�an horas, nuestras bocas solo emit�an
gemidos de placer y para las personas que han llegado a estos limites del m�s
puro y sensual placer, de mis ojos sal�an unas peque�as lagrimas de gozo. Nos
dimos la vuelta de tal modo que yo quede arriba de el:
- Ahora, m�mame la verga, quiero sentir tu rica boca sobre mi
verga, anda mi amor, pru�bala es toda tuya �dijo Antonio al tiempo que tomaba mi
cabeza entre sus manos y me daba un beso de la boca. Mi lengua fue bajando por
su cuello hasta que me detuve en un pez�n, al cual mord� muy lentamente, ante
los gemidos de Antonio. As� fui bajando por su torso con la punta de mi lengua,
hasta alcanzar su entrepierna, as� estuve recorriendo con la punta de mi lengua
cada rinc�n de esa �rea, me gusto mucho oler su vello p�bico, limpio y
abundante, despu�s tome la verga con una de mis manos y con mi lengua segu�
recorriendo ahora sus huevos, sin tocar su verga aun, los chupaba, me los met�a
en la boca mientras que Antonio solo se limitaba a emitir gemidos y con sus
manos presionando mi cabeza sobre su vientre.
- Ya ch�pame la verga, ya no aguanto m�s, c�metela, ahhhhhh
�dijo Antonio, ante mi tardanza ya que a su verga no le daba ninguna caricia
oral.
Al sentir todo el placer de su cuerpo, comenc� a recorrer
toda la verga con la punta de mi lengua, mientras que mis manos recorr�an cada
uno de los huevos, despu�s me met�a cada uno de los huevos a la boca y les daba
unas peque�as mordidas, volv� a ese pedazo de carne para comerme solo la cabeza
babeante, a mi me gusta chupar la cabeza como si fuera una mamila y acariciar
con una mano el resto de carne, as� estuve chupando unos minutos (como
recordaran en la primera parte de este relato, este es el mismo procedimiento
que yo sigo cuando mamo una verga) y Antonio solo gem�a de placer.
- Ahhhhhh, esto es maravilloso, pero ya c�metela, por Dios
que ya no aguanto!!!!! �dijo Antonio, mientras que todo su cuerpo se
convulsionaba de tanto placer alcanzado.
Comenc� a meterme la verga a mi boca y casi logre trag�rmela
toda, hasta que sent� sus vellos sobre mi nariz haci�ndome una ricas cosquillas
y si logr� meterla toda, la ten�a toda dentro de mi:
- Ahhhhhh, eso es c�metela, es toda tuya, no dejes un
pe...dazo de verga fuera!!!
Al principio fue un mete y cada muy despacito, al meterla a
mi boca la apretaba con los labios y lo mismo le hacia en la cabeza de su verga
cuando estaba a punto de salir, poco a poco fui incrementando la velocidad y era
yo quien controlaba la cogida que me estaba dando por la boca, mientras esto
suced�a mis manos acariciaban su torso y met�a uno de mis dedos a su boca y que
Antonio chupaba como biber�n en medio de los gemidos que emit�a.
- Ahhhhhh Era verdad �dec�a Antonio en medio de gemido- lo
que dijo mi primo, mamas la verga de una manera tan rica que te vas a convertir
en mi pareja sexual a escondidas de Erick.
A diferencia de la experiencia sexual que hab�a tenido a
penas hace como dos horas, donde hab�a sido un poco salvaje, Antonio era todo lo
contrario era muy cari�oso conmigo.
Con sus mano sobre mi cabeza, Antonio la levanto para darme
un beso en la boca y nos pusimos en la posici�n 69, yo quede arriba y continu�
mamado la verga de Antonio, chupando ese rico sabor salado que de su verga
sal�a, mordi�ndola, disfrut�ndola y comi�ndomela toda completa. Al mismo tiempo
que, por primera vez Antonio tocaba mi verga (como recordaran mi verga mide 18
cm. y es delgada) y se la comenz� a chupar, alo cual yo correspond�a chup�ndole
mas la suya, era maravilloso el placer que me proporcionaba su verga y la mamada
que me estaba dando. Despu�s de unos minutos, le pido que se detenga, porque en
esos momentos sent�a que me ven�a y aun no lo quer�a hacer, entonces dirigi� su
lengua hacia mi culo rasurado, con sus manos abr�a m�s mis nalgas y yo proced�
abrir un poco m�s mis piernas, Antonio me ataco con su lengua, sus dientes y sus
labios. Besaba, chupaba y mord�a mi culo como si estuviera comiendo su fruta
favorita (esto era algo que siempre hab�a deseado sentir, ya que mi pareja nunca
le ha gustado la idea de mamarme el culo, aunque yo si se lo he hecho, era lo
m�ximo, el placer solo se compara con una verga dentro), probando el delicioso
sabor de mi culo abierto, tan abierto que pod�a meter su lengua adentro del
esf�nter irritado por la anterior cogida que me hab�a dado su primo Alan,
caus�ndome gemidos cada vez m�s intenso de placer que por un momento olvide de
mamar su verga.
Tuvimos que parar para evitar venirnos, nos pusimos de pie y
nos dimos un beso en la boca.
- Ahora quiero sentir esto �le dije yo mientras tomaba con
una mano su brillante y vibrante verga- dentro de m�, d�mela hasta que reviente.
- �C�mo me calientas, puto! �dijo Antonio totalmente
excitado-. Te voy a coger el culo como yo se que te gusta. �Prep�rate! Desde la
primera vez que te vi he deseado cogerte, puto, y ahora te voy a romper el culo
con mi verga, aunque antes ya te lo haya roto el puto de mi primo. Te voy a
coger como no te han follado en la vida.
Al escuchar esa palabras por un momento sent� algo de miedo,
ya que hasta ese momentos se hab�a comportado conmigo de la manera m�s cari�osa
y ahora le estaba dando otro giro a la situaci�n, pero no me importo, yo lo que
quer�a era ser cogido por su verga, que no dejaba de sobar.
- Ahora ponte a cuatro patas �dijo Antonio, cambiando
totalmente su tono de voz, de cari�oso a un tanto brusco- que ya se que es tu
posici�n favorita, me lo dijo tu pareja y hace un rato mi primo, anda puto que
te voy a clavar mi verga.
Realmente su repentino tono de voz me comenz� a preocupar,
pero era tanta la excitaci�n que sent�a que prefer�a dejarme llevar por la
calentura que sent�a en ese momento, as� que me puse a cuatro patas al borde la
cama. Cuando me tuvo a su disposici�n, me paso su verga por todo mi culo
rasurado y caliente y me la dejo ir hasta el fondo de mi culo.
- Ahhhhhh, esperate que me duele, ahhhhhh, - lance un grito
de dolor al tiempo que me estremec�a todo mi cuerpo, mientras aumentaba la
velocidad y la violencia del mete y saca de Antonio.
Antonio me sujetaba de la cintura con una mano y con la otra
me solt� un violento manotazo sobre una de mis nalgas, mientras que yo solo me
limitaba a gemir. Ese fue el detonante para que yo comenzara a disfrutar de las
embestidas que esta siendo sujeto, porque el placer que sent�a incrementaba con
el mete y saca que me ten�a como coloquialmente se dice "me tenia babeando" y
comenc� a mover disfrutar moviendo mi cadera y apretando mi culo.
- Mu�vete m�s �dijo Antonio-. As�, as�... mu�vete como una
puta. As�, aprieta el culo fuerte maldita puta, para que notes mejor como te lo
destroza mi polla. C�metela por el culo, mu�vete, Ahhhhhh, as� .... sigue....
muy pronto vas a conseguir que me corra. As� te la meti� mi primo Alan? No creo
verdad?. Dime que conmigo lo disfrutas mas, anda d�melo, dime que yo tengo la
mejor verga y que te gusta mas la m�a, anda puta, d�melo, ahhhhhh como te
mueves, as�.... �mientras continuaba d�ndome de nalgadas, y yo estaba totalmente
excitado.
- Ahhhhhh, si, si papacito, tu la mueves m�s rico que Alan,
ahhhhhh, dame m�s verga �dije sin importarme el tono de voz ni las palabras que
dec�a, al contrario eran palabras que me prend�a mucho m�s.
Mientras Antonio y yo nos encontr�bamos en ese mete y saca
riqu�simo, no percib� en ning�n momento que Alan se encontraba parado en la
puerta de la recamara con una de sus manos subiendo y bajando de su enorme
verga.
- Que espect�culo m�s caliente, primito �dijo Alan, mientras
caminaba hacia la cama- que dir�a tu pareja si viera lo puta que eres? �lo dijo
mientras se pon�a enfrente de m�.
- Tenias raz�n, primo, esta puta si que sabe mamar la verga y
mover el culo �dijo Antonio, mientras no dejaba de moverse dentro de mi culo- y
yo que me enamore de ti, para ver sabido lo puta que eras, desde hace mucho
tiempo ya te hubieras convertido en mi puta favorita.
La verdad yo no le preste mucha atenci�n a todas estas
palabras, que no dejaban de incrementar mi placer, solo me limitaba a disfrutar,
sin importar la humillaci�n a la que estaba siendo objeto.
- Ya te hab�as tardo primito, ya estoy a punto de venir,
quieres continuar cogi�ndote este rico culo caliente? �dijo Antonio, mientras
que Alan pon�a a la altura de mi boca esa verga de 25 cm. que ya hab�a probado
hace como horas.
As� que saque mi lengua y comenc� a recorrer con mi lengua
esa rica y enorme verga, yo iba a comenzar a realizar mi tan acostumbrada forma
de mamar una verga, pero Alan ten�a otros planes, tomo mi cabeza con sus dos
manos y comenz� a cogerme por mi boca, tomando el mismo ritmo que llevaba
Antonio en mi culo y de pronto me encontr� dentro de lo que hasta ese momento
hab�a sido mi mayor fantas�a sexual reprimida: un tr�o y que yo me encontrara en
medio de los dos, como ahora lo estaba haciendo, dije reprimido, porque nunca mi
pareja hubiera aceptado hacer uno, y ahora me encontraba con su mejor amigo y
con el primo de este, una verga en el culo y otra en la boca. Era como estar en
un sue�o.
- Ahhhhhh, ahhhhhh ya no aguanto voy a terminar dentro de
este culo, aprieta m�s tu culo. . . as� ... ahhhhhh te voy a llenar el culo con
mi lechita, ahhhhhh eres maravilloso, te quiero, siempre te he querido � dijo
Antonio, ahora con el mismo tono de voz que me hab�a enloquecido al principio.
- Si, �chamelos, quiero sentirte hasta dentro de m�, d�melos
�dije yo sac�ndome la verga que ten�a en la boca.
- No te la saques, sigue chap�ndola � dijo Alan, bajando la
velocidad de su mete y saca de mi boca.- No Antonio no se los eches en el culo
los dos vamos a ba�arlo con nuestra leche.
En ese momento Antonio saco su verga de mi culo dej�ndome una
gran vac�o en mi ya adolorido culo y puso tambi�n su verga a la altura de mi
boca, entonces ah� estaban esos dos sementales sob�ndose la verga mutuamente en
mi cara mientras que yo le pasaba la lengua a cada verga, hasta que la primera
en venirse fue Antonio y los primeros cayeron en mi lengua y el resto fue
cayendo en mi cara y a los pocos minutos Alan tambi�n se corri� en mi cara,
llen�ndome la cara de esa rica leche caliente que ustedes ya han probado. Yo
solo me limite a limpiarles la verga a cada uno de ellos y exprimi�ndoles las
�ltimas gotas. Que sensaci�n tan rica sentir como una verga va regresando a su
tama�o normal dentro de la boca (era la verga de Antonio), de la habitaci�n solo
se escuchaban gemidos y mientras los primos se besaban, yo me levante y me un� a
ellos y terminaron de limpiarme mi cara con sus lenguas, eso realmente termino
por excitarme m�s de lo que ya estaba, yo aun no me hab�a venido y me estaba
masturbando.
Pero Alan aun ten�a planes conmigo, ya que a pesar de haberse
venido hace unos minutos, su verga aun manten�a aun su erecci�n (como
recordaran, paso lo mismo en la primera parte de mi relato) y se acost� en la
cama boca arriba sujet�ndose la verga por la base con las dos manos para no
perder su erecci�n.
- Aun no terminamos contigo, puta �dijo Antonio- Voy a seguir
reventando tu culo caliente, porque se que tu eres una golosa que no tiene para
cuando llenarse de verga. Voy hacerte llorar de dolor, as� que no te quedes ah�
parada y vente a montar a este semental. Esas palabras agresivas me pon�an a
mil.
- Anda mi amor �dijo Antonio, susurrando a en mi o�do y
empuj�ndome hacia donde se encontraba Alan acostado, y con el tono de voz mas
cari�oso que nunca- Si�ntate en esa rica verga y h�ndela en tu culo hasta que
sientas cosquillas en tus huevos con esa mata abundante de vellos que tiene.
- Anda, puta que te voy a partir el culo en dos, que de por
si ya lo has de tener bien abierto por las dos cogidas que ya llevas esta noche
verdad? �dijo Alan, moviendo sus manos de arriba abajo sobre su verga.
Puse una pierna a cada lado de su cuerpo y ayudado por
Antonio me fui poniendo en cuclillas, hasta que me deje caer lentamente y mi
culo entro en contacto con la verga de Alan, que era dirigida ahora con la mano
de Antonio y me fui metiendo con cuidado la enorme cabeza de la verga de Alan,
(la verga de Alan era mas larga en cambio la de Antonio era mas corto pero mucho
mas gorda) as� que por le grosor no tuve problemas al momento de empezar a
meterme el cuerpo de la verga, pero el largo era demasiado para m�, hasta que
entro en su totalidad todos esos 25 cm. de vergota. Empec� a moverme primero en
c�rculos con mi cadera sin sacar ni un cent�metro de esa rica verga, hasta que
me acostumbre a su tama�o
- As�, as� �gem�a Alan-. Comienza a cabalgar, puta, anda
brinca sobre mi verga, mu�vete- dijo Alan.
As� que comenc� a subir y bajar sobre ese pedazo de carne
palpitante. Al mismo tiempo Antonio comenz� a chuparme la verga y fue algo que
no se puede describir la sensaci�n de tener una verga en tu culo rompi�ndolo y
una boca en tu verga, quien lo ha sentido sabe a lo que me refiero, te pierdes
del mundo, no sabes nada, no piensas en nada, solo quieres seguir gozando y
apretando tu culo.
- Cabalga m�s de prisa, puta. Aprieta duro el culo.
Ahhhhhh!!!! Que rico culo como lo aprietas as�, que bien lo mueves. A partir de
ahora no vas a querer mas verga que la m�a y la de Antonio, ser�s nuestra puta,
mu�vete como puta, as�.
- Sigue, papacito, sigue! �exclam� -. Que rico, que rico,
dame toda tu lechecita dentro de m�. �breme el culo, p�mpemelo, p�rteme en dos
mi culo y tu dejes de chuparme la verga, ahhhhhh, que me vengo, me vengo,
ahhhhhh, en ese momento Antonio saco de su boca mi verga y me vine sobre el
pecho de Alan, era delicioso venirme mientras que mi culo apretaba aun m�s su
verga, hasta lo huevos me dolieron cuando me vine.
- Ah� te van puta, ah� estame leche, ahhhhhh �dijo Alan, poco
despu�s de mi venida, sent�a como su leche sal�a de mi culo y escurr�a sobre su
vientre.
Me deje caer exhausto sobre su cuerpo, quien totalmente
extenuado y cubierto de mi leche, me recibi� con un abrazo. Los dos quedamos as�
durante unos momentos, abrazados, llenos de leche y muertos por el cansancio y
la violencia de la cogida que me hab�an dado los dos primos, tambi�n Antonio se
uni� al abrazo y nos quedamos los tres totalmente abrazados hasta que me acorde
que mi pareja esta durmiendo en la otra habitaci�n.
Escr�banme si les gusto: POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO, este es un
relato de la vida real a partir de estos dos d�as mi vida cambio totalmente, aun
sigo con mi pareja, pero como disfruto de esos momentos de infidelidad. Despu�s
voy a continuar relatando otros hechos que me han sucedido, porque ahora aprend�
a disfrutar de mi sexualidad.
Mi nombre es Julio y tengo 24 a�os, actualmente tengo una
relaci�n de aproximadamente 8 a�os con mi pareja de nombre Erick, quien tiene la
misma edad que yo. El s�bado pasado salimos a un antro con un grupo de amigos,
ah� es donde comienza este relato.
En la mesa donde nos encontr�bamos todos, llego un tipo de
nombre Alan, el cual cumpl�a con todos los requisitos que me gustan de un
hombre: delgado, mide 1.74, su cuerpo fornido y espaldas anchas, las manos
grandes y con la venas muy notorias (eso es algo que me gusta mucho ver en las
manos de los hombres), llevaba un pantal�n entallado del cual sobresal�a un gran
bulto, de la cara no era muy guapo, pero en general para mi era muy atractivo.
Durante el tiempo que estuvo en la mesa yo notaba que el me
miraba con insistencia, pero en ese momento no le preste mucha atenci�n a eso,
fue hasta que una vez en la pista, cuando yo bailaba con un amigo (a mi pareja
no le gusta bailar y el disfruta mas estando en la mesa sentado platicando con
los amigos y a mi en lo personal me fascina bailar) a nuestro lado llego Alan
con otro tipo bailando y ah� fue donde ya comenz� el coqueteo conmigo. En una de
esas canciones muy bailables me toma de la mano y se acerca mas para bailar
pegado a mi, yo lo tome como relajo, ya que ese tipo de juegos los hago con mis
amigos. El chiste es que varias veces intento bailar conmigo a si pegadito y
queriendo abrazarme, nada mas que el muchacho con el que Alan bailaba, le dec�a
que se estuviera quieto, que yo ten�a pareja. Despu�s de bailar un buen rato, me
fui a sentar con mi pareja y llego tambi�n Alan a sentarse a mi lado. Comenz� a
hacerme la platica, preguntadome lo cl�sico: a que te dedicas? que te gusta
hacer?, etc., estuvimos platicando un buen rato. Entre la platica yo notaba que
Alan intentaba acariciarme la pierna o las manos, pero yo temiendo que mi pareja
lo notar�, me hacia el loco. Ya a estas alturas de la platica cada vez mas me
iba interesando mas el. En eso comienza una canci�n que me gusta mucho y yo
bailaba ah� sentado y Alan noto mi entusiasmo por bailar, as� me invita y yo le
pregunte a mi pareja si no hab�a problema de que fuera a bailar con Alan, ya que
era la primera vez que lo conoc�amos y contesto que no, entonces me fui a bailar
con el.
Llegamos a la pista y comenzamos a bailar, varias veces
intento acercarse para poder bailar pegado a m�, pero yo se lo imped�a, por
temor a que mi pareja se diera cuenta, despu�s de un rato se acerca a mi o�do
para decirme algo y fue cuando se me lanzo.
- Oye, Julio, me encantas, desde que llegue y te mire, lo
�nico que quiero es besarte, lastima que vengas acompa�ado� dijo Alan. Yo solo
comenc� a re�rme de nervios y tambi�n porque me daba cuenta de que me gustaba
mucho.
- Tu tambi�n me gustas mucho, pero hay que ser discretos, si
mi pareja se entera me voy a meter en un problema.
Bailando nos fuimos hacia el lado opuesto de la pista para
estar los suficientemente lejos de la mesa en donde estaba mi pareja, de repente
me toma con sus dos manos la cara y se dirige hac�a a m� con la intenci�n de
darme un beso y yo con miedo, pero tambi�n con deseo, comenzamos a besarnos y
ese beso se me hizo eterno, fue un beso m�gico, caliente y lleno de pasi�n,
realmente aun puedo sentirlo, no supe cuanto tiempo duro. El beso estuvo lleno
de caricias, yo tuve la oportunidad de sentir su piel caliente al acariciar toda
su espalda y yo no supe como, pero ya tenia una mano acariciando mis nalgas
intentando llegar a mi culo, pude sentir toda su erecci�n sobre mi vientre. En
eso est�bamos cuando escuchamos una voz que dice:
- Pens� que yo era la mas puta de este antro, pero ya me di
cuenta de no � esto lo dijo un amigo de la mesa, al escuchar esta frase
inmediatamente nos separamos y yo tuve que arreglarme la camisa y el pantal�n,
con muchos nervios � cuidado Julio que tal que si hubiera sido Erick quien te
hubiera sorprendido.
- Por favor, no.. no le comentes nada � dije yo lleno de
miedo y nervios, pero aun con la excitaci�n de la sensaci�n vivida.
- No te preocupes por m� Julio, pero ten mas cuidado, �por
qu� no se van a terminar lo que empezaron al rinc�n de all�? � dijo se�alando un
peque�o cuartito solo y oscuro del antro � mientras yo cuido que Erick no te
descubra
- Vamos Alan �dije yo lleno de excitaci�n y tom�ndolo de la
mano lo lleve a ese lugar sin importarme nada ni nadie, mas que satisfacer mi
deseo sexual.
As� llegamos a ese peque�o cuartito lleno de envases de
refrescos y bebidas alcoh�licas, con tan solo una silla y sin luz, nada mas la
que entraba de afuera. Entramos y comenzamos a besarnos intensamente mientras el
met�a sus manos a mi pantal�n para tocarme las nalgas, yo intentaba
desabrocharle el cintur�n y bajarle el pantal�n, nuestras lenguas se enredaban y
nuestras manos intentaban calmar esa pasi�n que brotaba de la piel, nuestras
bocas solo se separaron para poder quitarnos la playeras que llev�bamos. Comenc�
a besarlo por el cuello y le di un peque�o mordisquito, al cual respondi� con
una exclamaci�n de gozo, que me estremeci� aun mas que lo que ya me encontraba.
Recorr� todo su pecho con la punta de mi lengua, poniendo mas atenci�n en sus
pezones, continu� bajando hasta llegar al vientre para encontrarme con una
grande y hermosa verga rosada llena de liquido preseminal. D�jenme hacer un
par�ntesis, como ya hab�a mencionado tengo 8 a�os con mi pareja y nunca antes
hab�a gozado con otra persona que no fuera �l, ya hab�a visto todo tipo de
vergas solo en revistas, fotos o videos, pero nunca antes hab�a acariciado otra
que no fuera la de mi pareja.
Continuando con el relato, al ver su gran verga me quede
pasmado por unos segundos sin hacer otra cosa que no fuera la de observar ese
gran trozo de carne palpitando, babeando y dispuesta a dar batalla. Era una
verga como de 24 cm. de largo y un poco gruesa, llena de venas por todos lados
(as� como sus manos), cabezona y con una larga punta; le colgaban dos huevos de
tama�o normal, pero velludos; su olor era indescriptible, a hombre deseoso y
ardiente; la mata de vellos me pareci� hermosa, al reaccionar lo primero que
hice fue acariciar todo el vientre lleno de vellos, los que se encuentran por
los huevos, por el inicio de las piernas, en fin toda sus partes velludas.
- Te gusta la verga verdad? � me dijo mientras que la tomaba
con una de sus manos y se la frotaba, yo ah� hincado, sin camisa, lo ve�a como
se acariciaba la verga.
- Esta hermosa, puedo? � le dije mientras abr�a mi boca para
poder mamarla.
- Es toda tuya, mi amor, pero antes d�jame ver y acariciar la
tuya � me tomo de lo hombros para levantarme y nos dimos otro gran beso lleno de
calor, mientras que mis manos intentaban abarcar todo el tama�o de su verga. Lo
que mas me excitaba de Alan era la forma en que me trataba y las cosas que
dec�a. Entonces el se agacho y me desabrocho el pantal�n.
-Oye, tu si que vienes preparado �dijo Alan, porque yo no uso
ropa interior � mira que bonita vergita tienes, d�jame saludarla como se debe �
mi verga mide 18 cm. y es no es muy gruesa y entonces comienza a darle peque�os
besitos en la puntita, mientras que sus manos recorr�an mis nalgas y poco a poco
sus dedos iban acariciando la entrada de mi culo, hasta que con un solo dedo
comenz� a masajear la entrada de mi culo, que ya para esos momentos se
encontraba ardiendo y deseando una verga.
- Haber date una vueltecita, mi reina, d�jame ver que tienes
aqu� atr�s � dijo Alan, mientras que me guiaba para quedar a espaldas de el �
mira que par de nalgas tan ricas tienes, desde que te vi bailar dije que ese par
de nalgas serian para mi.
- Son todas tuyas papacito, has con ellas lo que quieras � le
respond�.
- Ya veras que as� ser�, las voy a usar como nunca antes lo
han hecho � me contesto, mientras que pasaba su lengua por la entrada de mi culo
y lo �nico que hice fue lanzar un gemido de gozo � pero si que estas ardiendo,
tu culito esta bien caliente, desde cuando no te dan de comer? � continuo
diciendo, mientras que yo no daba cr�dito a todo el placer que estaba recibiendo
y que para ser honestos, un placer que mi pareja no me proporcionaba desde hace
como un mes que no hab�amos tenido ning�n contacto sexual.
- Mmm, ahh, - era lo �nico que pod�a decir. � m�teme la
verga, ya la quiero sentir �dec�a en medio de quejidos y suspiros.
- Con calma, mi reina, es toda tuya � contesto mientras
continuaba metiendo su lengua en mi culo ardiendo � ya veras que vas a tener
toda la verga dentro de ti, pero antes no te gustar�a darle unos besitos? � se
pone de pie y me voltea y coloca sus manos sobre mis hombros y me presiona para
hincarme.
Mi cara quedo a la altura de su enorme verga y la toma con
una mano y con la otra me toma de los cabellos y me obliga a met�rmela a mi
boca, esa agresividad hacia que me excitara mas; entonces saque la lengua y
comenc� a recorrer la cabeza de la verga, pero Alan me obligo a meterme la mayor
parte de su verga y empez� un mete y saca en mi boca y cuando logre safarme de
la fuerza que manten�a sobre mi cabeza, le dije:
- Oye papacito, t�malo con calma, a mi me encanta mamar la
verga, pero me gusta hacerlo a mi modo, aunque as� como �bamos tambi�n me gusta
� mientras que con mis manos sub�an y bajaban por aquel pedazo de carne que me
ten�a extasiado.
- Y como la mamas tu?, int�ntalo y si no me gusta regresamos
a mi manera � contesto
- Ahora veras que te va a encantar � conteste lleno de deseo
por mamar la verga babeante que tenia ante mis ojos.
Entonces con una mano tome la verga desde la base y abr� mi
boca para comenzar uno de los juegos que mas me encantan. Comenc� a recorrer
toda la verga con la punta de mi lengua, mientras que mis manos recorr�an cada
uno de los huevos, despu�s me met�a cada uno de los huevos a la boca y les daba
unas peque�as mordidas, volv� a ese pedazo de carne para comerme solo la cabeza
babeante, a mi me gusta chupar la cabeza como si fuera una mamila y acariciar
con una mano el resto de carne, as� estuve chupando unos minutos y Alan lo �nico
que hacia era lanzar gemidos de gozo por el placer que yo le estaba
proporcionado:
- As�, putita que rico, mmm, as�, ahh, de verdad ... ahh que
tu boca es una experta, ahh nunca antes hab�a gozado tanta una mamada � dec�a en
medio de gemido y sus manos solo acariciaban el cabello de mi cabeza.
- Mas rico sabe esta verga, ahh � le dije yo.
Despu�s de unos minutos de chupar solo su cabezota babeante,
intente meterme el resto de su verga, pero solo pude meterme una tercera parte
de su tama�o y al principio fue un mete y cada muy despacito, al meterla a mi
boca la apretaba con los labios y lo mismo le hacia en la cabeza de su verga
cuando estaba a punto de salir, poco a poco fui incrementando la velocidad y era
yo quien controlaba la cogida que me estaba dando por la boca, mientras esto
suced�a mis manos acariciaban sus huevos y sus nalgas, intente abrirme camino
hacia su culo, pero el varia veces me lo impidi�, as� que nada mas me enfoque a
mamar esa verga que me estaba proporcionando un placer que solo me hab�a
imaginado hasta entonces, despu�s de un rato de estar dirigiendo la mamada, que
me toma de la cara para inmovilizarme y fue el quien ahora tomo el mando y
comenz� a penetrarme por la boca de una manera salvaje, pero que no dejaba de
ser excitante (de esa manera nunca antes lo hab�a hecho con mi pareja, ya que el
suele ser mas tierno conmigo en todo momento), despu�s de un rato de estar
sintiendo esa sensaci�n de ahogo por todo lo que me estaba intentando devorar:
- Mmm, ahh, ya siento que me vengo � dijo en medio de
quejidos y suspiros.
- Si, �chamelos en la cara, quiero comerme toda tu rica leche
� le dije, entonces el suspendi� la mamada y se sent� en una silla que estaba
cerca de unos envases de refresco.
- No, aun no mu�eca, me falta probar es par de nalgas �
contesto Alan, mientras que ah� sentado se acariciaba su verga y tocaba unos de
sus pechos. Entonces me levante y me acerque hacia para darle un beso, durante
el tiempo que duro, Alan meti� un dedo a mi culo, que se encontraba mas que
lubricado por el calor y el deseo que desprend�a de todo mi ser � Haber dime
chiquita, �cu�l es tu posici�n favorita para coger? � me dijo lleno de lujuria,
sus palabras hac�an que me excitara aun m�s
- Me gusta mucho de perrito, sentado sobre la verga, con los
pies sobre los hombros, son las que mas practico y a ti?� le conteste mientras
me hincaba para volver a mamarle la verga.
- Pero si eres bien golosa verdad? � me contesto cuando vio
quer�a seguir mam�ndole la verga � yo disfruto todas por igual, as� que volt�ate
e incl�nate.
Entonces me levante y me incline lleno de deseo y tambi�n con
un poco de temor al tama�o de su verga, sent�a que me iba a lastimar mucho. Alan
se levanto y puso un poco de saliva en su verga y tambi�n con su mano toco la
entrada de mi culo, a lo que este respondi� inmediatamente con una contracci�n
que Alan sinti� en su mano.
- Mira como esta tu culo de dilatado, estas hirviendo,
ahorita lo voy llenar de placer � dijo Alan. Fue cuando sent�a la punta de su
verga sobre mi culo intentando entrar.
- Me puedes hacer un favor? � le dije.
- Otro? Ya te estoy haciendo uno no? � contesto y solt� una
peque�a risa.
- Es que antes de que me la metas, quiero que me hagas dos
cosas con tu verga, me gusta que me desde de palazos con la verga y que me la
talles como si fuera un desodorante en la entrada de mi culo.
- No cabe duda de que eres una golosa y de que te encanta la
verga verdad? � contesto Alan y en ese momento me dio una fuerte nalgada con su
mano, haci�ndome arrancar un quejido mas de placer que de dolor.
Entonces tomo su verga y me da unos golpes con ella, de mi
boca solo sal�an quejidos de placer y antes de comenzar a cogerme, me talla la
verga alrededor de mi culo, haci�ndome estallar de placer.
- Ya metemela toda, por favor, la quiero toda dentro de mi,
no dejes nada afuera, tambi�n m�teme los huevos, ahh ... ya no aguanto mas
d�mela toda � dije en medio de suspiros y de placer.
- Ah� te va, es toda tuya, g�zala, apri�tala � diciendo esto
y me la deja ir toda de un solo golpe haci�ndome lanzar un fuerte grito que al
principio fue de dolor, pero que se convirti� en un quejido de placer � mmm, que
apretadito tienes el culo, tal parece que no le has dado uso �ltimamente, ahh...
mmm g�zala, es toda tuya.
- As� d�mela, la quiero sentir toda, ahh, que rica esta, ahh
... ya tenia mucho tiempo que no gozaba, ahh. mmm � estaba sintiendo una mezcla
de placer y de dolor, porque como ya hab�a mencionado antes, mi pareja me ten�a
un poco abandonado en este sentido.
Alan me tomaba de las caderas para sujetarme mientras estaba
en el mete y saca, para que la verga no se saliera de mi culo totalmente
relajado debido a las embestidas que me estaban llenado de placer, varias veces
con una de sus manos tomaba mi verga y la masturbaba y esto provocaba en mi un
placer que es muy dif�cil explica con palabras, lo �nico que recuerdo es que
sent�a que me encontraba en el cielo, sent�a que en cualquier momento me iba a
venir.
- Ahh, que rico culo tienes mi reina, apri�tala as� de rico �
dec�a mientras que me daba una nalgada, que provoco en mi un placer y un gozo
nunca antes sentido, adem�s de un fuerte gemido.
-Mmm, Ahh as� d�mela toda, dame otra nalgada que siento que
me vengo sin haberme tocado � dec�a entre gemidos y mi cabeza se llenaba de
adrenalina, extasiada de tanto placer recibido de un pedazo de carne que me
llenaba en todos los sentidos.
Cuando me encontraba a punto de venir, Alan se detuvo y se
fue a sentar en una peque�a silla que estaba hasta el rinc�n de ese peque�o
cuarto.
- Ac�rcate cari�o, mira lo que tengo aun para ti � dijo Alan
mientras se acariciaba su verga � es que aun no quiero venirme, quiero seguir
gozando de tu rico culito � ya cerca de el, acariciaba con la otra mano mis
nalgas calientes.
- Estoy gozando como nunca antes lo hab�a hecho � me acerque
a dale un beso en la boca y despu�s pase mi lengua por toda su verga y por cada
uno de sus huevos, sin importarme que estuviera un poco sucia por haber estado
dentro m�.
- Ahora ven, si�ntate aqu� � dijo Alan apuntando a su verga y
acomod�ndose sobre la silla � quiero ver que tan bueno eres montando a caballo.
Entonces coloque mis piernas afuera de las de Alan y me
acomod� para empezar a sentarme de frente a �l, mientras que Alan tomaba su
verga, que ya rozaba con mis nalgas.
- �brete las nalgas chiquita que aqu� hay algo que quiero que
sigas probando � con las dos manos me abr� las nalgas, mientras me inclinaba
para que la verga ya estuviera en la entrada de mi culo lubricado por la cogida
que ya me hab�a dado.
Coloco la verga en la entra de mi culo y poco a poco me fui
sentado sobre ella y ahora ya no sent�a nada de dolor, solo sent�a placer hasta
que mi culo se lleno de ese pedazo de carne, al cual apretaba para gozo de Alan,
quien no dejaba de vibrar y de gemir de placer.
- Ahh, tu culo me esta dando mas de lo que me hubiera
imaginado, eres un puto de primera, ahh ... como la aprietas � dec�a Alan
mientras me tomaba con sus manos las nalgas para abrirlas m�s � ahh .. ahora
mu�vete sabroso, quiero que cabalgues este caballo.
- Lo que tu quieras, papito, ahora soy todo tuyo � le
conteste.
Comenc� a subir y a bajar sobre ese pedazo de carne que me
estaba matando de placer (aun ahora a casi 8 d�as de ese encuentro, puedo sentir
como su verga atravesaba mi culo), primero lo hice despacito, disfrutando de
cada cent�metro y haci�ndolo lo mas placentero posible; poco a poco fui
incrementado de la velocidad, lo que mas disfrutaba era subir hasta casi
sacarla, dejando solo su cabeza dentro de mi, y dejarme caer sobre la verga,
hasta sentir sobre mis nalgas el golpe de sus huevos y en verga el contacto de
su vello abundante; a cada subida y bajada adem�s del gozo de mi culo, tambi�n
mi verga gozaba al pasar por su estomago y bajar hasta su vientre. As� estuve
subiendo y bajando, gozando, apretando y mordiendo de vez en cuando sus pezones,
cuando yo estaba completamente ensartado en su verga, me gustaba que Alan mamaba
mis pezones y de vez en cuando me soltaba unas nalgadas, provoc�ndome mas
placer.
- Ahh, mmm, que rico estoy sintiendo, ahh, d�mela toda, m�s,
ahh, estoy a punto de venirme � estaba a punto de correrme sin haberme tocado
- Yo tambi�n, estoy a punto, ahh, mmm - exclamo Alan � donde
quieres que te los eche.
- Ah�, dentro de m�, �chamelos mi amor � le conteste mientras
le apretaba aun m�s su verga con mi culo, haciendo un esfuerzo por complacer a
ese hombre que me estaba matando de placer
Entonces note que Alan comenz� a acelerar sus embestidas y
lanzaba palabras y gemidos entrecortados, indic�ndome que estaba a punto de
venirse
- Ah� te van, son todos tuyos, g�zalos � Alan sin poder
contener ya su venida � ahh, aprieta mas tu culo, ahh.
Entonces saque por completo su verga e inmediatamente me puse
de rodillas y con mi boca pesque algunos chorros de semen caliente que estaban
brotando como manantial de su verga, mi lengua segu�a recogiendo su leche
caliente que aun sal�a; cuando termino de eyacular, mi lengua limpio su verga
recorriendo su vientre y sus huevos, realmente el sabor era �nico, era muy
dulce; aun despu�s de eyacular su verga segu�a manteniendo su dureza.
- Ahh, as� l�mpiala bien. Ahora d�jame a mi probar tu leche.
Me levante y mi verga quedo a la altura de su cara, lo que hizo a continuaci�n
fue la culminaci�n de todo el placer que hab�a estado sintiendo.
Alan tomo mi verga con una mano y la llevo a su boca, no
tardo ni dos minutos mam�ndola cuando tuve una venida explosiva, en medio de
gemidos, se trago cada una de los chorros de semen que lance sobre su cara y
boca, tambi�n tuvo la delicadeza de dejarme la verga limpia de semen,
recorriendo mi vientre y mis huevos. Debo mencionar que tuve una corrida
abundante, creo que desde la primera vez que tuve relaciones con mi pareja,
nunca antes me hab�a venido de tal forma.
Despu�s de mamarme la verga, se levanto y aun con mi leche en
mi boca, nos dimos un beso compartiendo mi liquido.
Comenzamos a vestirnos inmediatamente y fue hasta entonces
cuando reaccione y me di cuenta de que ya hab�a pasado cerca de cuarenta minutos
desde que me levante a bailar con este chico. Nos despedimos no sin antes
intercambiar nuestros n�meros telef�nicos y decirnos lo mucho que lo hab�amos
gozado. Ahora despu�s de ocho d�as no se si hice mal, tal vez tengo algunos
remordimientos, pero tambi�n pienso en todo el placer que sent� y en cuando me
doy cuenta de que tan solo goc� y eso no es malo. Ustedes j�zguenme.