Como me folle a mi vecina y su hermanita peque�a
convirti�ndolas en mis zorritas y gane dinero dejando que se las tirase su
propio padre.
(continuaci�n de "" )
Segu�a enculandola sin parar cuando o� un ruido en la puerta
del comedor. Me di la vuelta y cual fu mi sorpresa cuando vi a un se�or de unos
50 a�os y una morenaza de cuerpo de infarto que llevaba una minifalda y un top
como el de Lidia mir�ndonos con cara de sorpresa. Y no era para menos, est�bamos
en medio del sal�n. Lidia estaba a 4 patas con el culo en pompa y la cara
apoyada en el suelo, le ca�an l�grimas de los ojos y no paraba de soltar
insultos mientras yo no paraba de romperle ese culo de puta. Estabamos los dos
sudando y ella estaba con su melena pelirroja empapada de sudor y su cara
apoyada contra el suelo, con los ojos cerrados, gritando, gimiendo a cada
embestida de mi polla en su culito de zorra. Me imagin� que era su padre y su
hermanita peque�a. La situaci�n se pod�a poner complicada y la puta de mi vecina
no se hab�a dado ni cuenta de los invitados. Segu�a disfrutando de mi polla en
su culo. Gritando. Gimiendo. Ten�a que pensar en algo para que el padre de la
puta de mi vecina no montara una escena al ver a su peque�a en una situaci�n que
solo deb�a haber visto en alguna pel�cula porno�
El padre estaba en estado de shock, callado sin saber como
reaccionar. Sin embargo la jovencita que le acompa�aba miraba con la misma cara
de viciosa con la que me hab�a mirado Lidia en el ascensor.
Sin parar de penetrar analmente a mi nueva vecinita le agarre
del pelo para acercarle su carita a m� y le susurre al o�do:
- Lidia, tu padre esta en el sal�n. Ahora mismo acaba de
descubrir que su hijita, la que siempre consider� una mu�eca de porcelana es
una zorra. Pero a ti no te debe importar porque a ti lo �nico que te debe
importar es que mi polla te siga enculando. �Lo entiendes Lidia?
- Siiiiii, me da igual lo que diga mi padre. Jodeme
Alfonso!!
Impresionante! - Pens� - Dijo esto mirando a su padre y
lami�ndose los labios. Yo estaba fuera de m� y le met�a mi polla hasta el fondo.
Mis huevos golpeaban contra su culito de modelo de pasarela. Mientras su padre
se puso de rodillas y empez� a llorar como un cr�o mientras gritaba:
- Lidia, zorra de mierda. Para que me ha partido la
espalda para pagarte una carrera durante estos 6 a�os sin tu madre. Para que
he luchado. Eres una puta de mierda. Expl�came que voy a hacer ahora!
El hombre sollozaba sin saber que hacer. Mientras la hermana
que estaba all� de pie me estaba mirando con una carita que no reflejaba enfado.
Deb�a medir 1�75, morena con el cabello largo, los ojos verdes como su hermana,
con al menos un 100 de pecho y con el mismo cuerpo de modelo de pasarela que su
hermana a la que estaba rompiendo el culo. Cog� del pelo de nuevo a Lidia y le
susurr� que le dijera a su padre que si pagaba lo que ella val�a se la podr�a
tirar como lo estaba haciendo ahora el nuevo vecino. Ella me sonri� y mirando a
su padre mientras le ca�an gotas de sudor le dijo:
- Papi, no te enfades. No es tu culpa que sea as� de
zorra. Me ense�� mam�. Ella me inici� en esto de follar con cualquiera,
mientras tu estabas trabajando ella se tiraba a los vecinos, a tus amigos,
incluso a tu jefe se tir� m�s de una vez. Pero no debes enfadarte, papi,
siempre lo hac�a cobrando por sus servicios. Ahora si t� quieres puedes
follarme como te plazca, siempre y cuando pagues lo que vale tirarse a una
jovencita de 19 a�os con mi cuerpo. Seguro que hace mucho tiempo que no te
puedes follar a una mujer como yo, �verdad papi?
- �C�mo me puedes decir eso Lidia? �C�mo me puedes decir
que me dejas follarte si te pago como si fueras una vulgar ramera?
Yo escuchaba la conversaci�n sin dejar de joder el culito de
mi vecina, la situaci�n se estaba poniendo demasiado morbosa y yo no iba a poder
aguantar mucho. As� que comente:
- Se�or, no se lo piense demasiado y pague. Su hija tiene
un culo que bien vale lo que pida. Yo no voy a aguantar demasiado�
El hombre sin dejar se sollozar, se levant�, se bajo el
pantal�n y se acerc� a su hija. Le dio una bofetada y le introdujo la polla en
la boca. Lidia se la com�a al ritmo de mis enculadas mientras su padre iba
cambiando los sollozos por gemidos. Como yo estaba a punto de acabar le dije a
su padre si me dejaba la boca de la zorra de su hija. El acept� y cambiamos de
posici�n. El padre se puso donde estaba yo y le dijo a Lidia:
- Hija, zorra, desde que se muri� tu madre te he ido
viendo crecer y vi�ndote como te ibas convirtiendo en una mujer de bandera.
Te he visto como ibas con tus amigos con esa ropa de ramera. Te he visto
como te lo montabas en tu habitaci�n con tus novios. Y yo mientras s�lo, me
conformaba con hacerme pajas imaginando lo que ser�a meterle la polla a mi
ni�a. Ahora te voy a follar como a una perra. Vas a hacer lo que te pida y
despu�s te pagar� porque eres una puta de mierda. �Entiendes Lidia?
- C�llate padre! F�llame si tu polla se pone dura. Seguro
que soy demasiado mujer para un viejo verde como tu, cabr�n.
Esto fue demasiado para el padre, que le meti� la polla en su
co�o encharcado de golpe. Ella gimi� como una ramera y yo aprovech� que abri� la
boca para meterle mi polla y comenzar a correrme. La muy zorra se fue tragando
mi semen, mientras su padre la follaba, mir�ndome a los ojos. Se lo trag� todo,
sin dejar ni una gota y acab� limpi�ndome la tranca y dej�ndomele limpia.
Mientras su padre le met�a la polla y le insultaba y le dec�a que hac�a tiempo
que ten�a ganas de tirarse a su hija. Yo estaba bastante cansado, as� que me
sent� en el sof� para seguir contemplando como a la pelirroja de mi vecina se la
iba tirando su propio padre mientras la insultaba y escup�a. Cambiaron de
posici�n y Lidia se sent� encima de su padre y empez� a cabalgar mientras su
padre le agarraba ese par de melones. Lidia gem�a, gritaba y cabalgaba a su
padre de forma brutal.
- Padre, que bien lo haces� me voy a correr si sigues
as�. Que polla tienes! Cu�nto tiempo has perdido de disfrutar de tu hija
mayor! A partir de ahora si pagas bien, podr�s follarme cuando quieras papi
- C�llate zorra. Me voy a correr dentro de ti. Te pagar�
y te follar� cuando quiera. Tienes un cuerpo de infarto hija. Que co�ito m�s
dulce!
Yo me estaba empalmando de nuevo viendo la escena, el padre
jodiendo a la ni�a con cuerpo de modelo. Sus tetas se mov�an al ritmo de la
polla del padre. En ese momento el padre le dio la vuelta le abri� de piernas y
se la volvi� a meter mir�ndole a los ojos y dici�ndole:
- Puta! Ramera! �Qu� te parece que te folle tu padre?
- C�llate cabr�n! Tu me insultas, pero bien que me estas
follando. Te pod�as haber negado. Pero, �hac�a tiempo que deseabas tirarte a
tu hijita verdad?
- Hac�a demasiado tiempo, Lidia. Con tu cuerpo todos mis
amigos te miran con cara de salidos. Y yo siempre te he tenido que ver en
casa con esos shorts y con esas camisetitas sin poder no mirarte mal. Cuando
vemos la tele y te pones apoyada en m� siempre ten�a ganas de desnudarte
delante de tu hermana y follarte como lo hago ahora�
- Mmmmmmmm, estoy a punto de correrme papi.
- Yo tambi�n, mi hijita
La situaci�n era totalmente morbosa. Mi polla se hab�a
empalmado de nuevo. De repente sent� que alguien me acariciaba la polla. Mir� y
era la hermanita peque�a de Lidia. Se hab�a quitado la ropa y estaba de rodillas
mir�ndome con cara de ni�a que no ha roto un plato, pidi�ndome permiso para
chuparme la polla. Era preciosa. Con un cuerpo de esc�ndalo como el de su
hermana pero con una carita de ni�a buena que te hac�a volverte loco.
- Me llamo Susana, esta escena me ha puesto muy caliente.
�Te apetece follarme como lo est� haciendo mi padre a mi hermana Lidia?
- Ser� un placer, Susana�
En estos momentos o� los gritos de Lidia y su padre� estaban
corri�ndose como cerdos. Era una corrida espectacular. A Lidia se le ca�an las
l�grimas de placer y su padre estaba fuera de s�. Mientras miraba la escena
Susana, la hermanita peque�a empez� a meterse mi polla en su boca mientras me
miraba con un poco de rubor. Sin duda a sus 18 a�os parec�a no tener la carrera
de ramera de su hermana, pero por algo se debe empezar y mientras Lidia y su
padre se encontraban abrazados en el medio del sal�n, yo me dispon�a a darme un
fest�n con la hermanita peque�a de mi vecinita. Para empezar quer�a que
entendiese que aunque tenia un cuerpo de puta de lujo el control lo llevaba yo.
As� que le agarr� con dulzura del cabello para que mi polla entrara hasta el
fondo de esa boquita y empec� a follarle la boca sin descanso. Ella estaba a 4
patas entre mis piernas y por momentos parec�a que se iba a ahogar pero no se
quejaba en ning�n momento. Yo le recordaba que era tan zorrita como su hermana y
que su padre iba a darse cuenta que hab�a criado a un par de rameras de lujo.
Susana empez� a gemir, parec�a que mis palabras la hab�an calentado. Su padre
dej� de abrazar a Lidia, se dio la vuelta y se sorprendi� de ver ante �l a su
ni�a peque�a limpi�ndole el rabo al vecino. Esta vez no se puso a sollozar,
supongo porque intu�a que tras de m� �l se podr�a beneficiar a su hijita de 18
a�os. Susana parec�a fuera de s�, no ten�a demasiada experiencia pero si un
cuerpo que quitaba el hipo. Sin poder evitarlo, me solt� la polla, su subi�
encima de mi y se clav� la polla de un solo golpe mientras gritaba como una
verdadera zorra. Ante mis ojos quedaban ese par de melones que r�pidamente me
puse a saborear mientras Susana me cabalgaba sin descanso. Ella gritaba y gem�a
sin importarle la presencia de su padre. Mientras tanto a su padre la visi�n de
su hija de 18 a�os cabalg�ndome le hab�a vuelto a calentar y sin dar tiempo a
Lidia a reaccionar, le dijo:
- Lidia, hija, Ponte a 4 patas que hace tiempo que le
ten�a ganas a tu culito. Y no te preocupes que pagar� el plus de romperte el
culo guarra.
-
Lidia sonri� y se puso a 4 patas r�pidamente. Susana que
segu�a cabalgando se empez� a correr como una verdadera puta. Gritaba y me
ara�aba y finalmente cayo exhausta encima de mi. El padre ya hab�a empezado a
encular a Lidia y me dio un poco de envidia, as� que hice bajar del sof� a
Susana y la puse a 4 patas y sin mediar palabra le clav� mi polla en ese culito
que deb�a ser virgen porque estaba muy apretado. Ella grit� como una zorra pero
pronto empez� a acompa�ar el vaiv�n de mis acometidas. La cara de Susana, a
quien yo le estaba dando por el culo, y la de Lidia, que estaba siendo en
enculada por su padre desde el otro lado, quedaron justo una enfrente de la
otra, as� que aprovecharon las dos para morrearse mientras nosotros las
enculabamos. Su padre se volvi� loco al ver la escena y empez� a encular con
fuerza a Lidia mientras escup�a e insultaba a las dos hermanas.
La situaci�n estaba llegando al l�mite, mi polla ya estaba a
punto de acabar y el viejo no deb�a estar mucho mejor. Las dos hermanas pararon
de morrearse y se acostaron boca arriba esperando que nos corri�semos en sus
bocas. El primero en correrse fue su padre, pero en realidad hubo poco margen
entre nuestras corridas, con lo que casi pareci� un solo chorro multiplicado por
dos. Me preocup� de observar bien como nuestros chorros iban a parar a sus caras
y sus tetas, que quedaron todas llenas de aquel l�quido blanco y viscoso.
Las dos zorritas nos limpiaron las pollas y el padre se
empez� a vestir y sac� un fajo de billetes que tir� encima de las dos hermanas
que se estaban morreando de nuevo. Se alej� y sali� del piso. Mientras yo,
desnudo y con dos bellezas morreandose a mis pies pensaba en todas las aventuras
que pod�a disfrutar teniendo a dos vecinas sumisas con cuerpo de modelos
dispuestas a obedecer todas mis �rdenes.
Pero esa ser� otra historia�
Si cualquier chica quiere mantener conversaciones o hacerme
sugerencias que se ponga en contacto conmigo en
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