Relato: Mi tio y maestro (III)





Relato: Mi tio y maestro (III)

Después de recibir varios correos queriendo saber más cosas sobre la historia de
mis primeras experiencias en el terreno del sexo, por fin me he decidido a contar
lo que pasó con mi padre, que por otra parte nunca ha llegado a saber que
la persona que me enseñó casi todo del sexo fue su propio hermano,
es decir…mi tío.

Mi
padre, al igual que mi tío, es bastante grande, mide 194 y gracias a muchos
años de deporte continuo, tiene un cuerpo que es la envidia de muchos hombres
más jóvenes que él; y eso se nota sobre todo cuando vamos
al gimnasio juntos, en las duchas las miradas son continuas. Por mi parte, tampoco
soy pequeño, pero en aquella época, con 17 años, media sobre
el 180 y tampoco tenía mal cuerpo, en mi casa siempre se ha practicado
toda clase de deportes: natación, fútbol, baloncesto…cualquier
cosa que se pudiera practicar al aire libre.

Primero
decir que mis padres están separados desde que yo era muy pequeño,
y que eso no me ha creado ningún trauma, sólo alguna incomodidad
por tener que ir de una casa a otra. Mi madre se volvió a casar, pero mi
padre no, ha tenido varios líos, pero cuando sucedió todo estaba
entre dos relaciones.

Desde que
empecé a conocer cosas sobre el sexo siempre me ha llamado la atención
el cuerpo de mi padre, es bastante parecido al de su hermano, pero no sé
por qué, quizá por lo prohibido, es mucho más atrayente para
mí. El problema estaba en que al ser mi padre era todo mucho más
complicado.

Una tarde estaba viendo
una película en el vídeo, era sobre una relación entre dos
hombres y una mujer, con todo tipo de escenas, y no me di cuenta de que entraba
en casa, así que seguí pasándome la mano por la polla y los
huevos sin reparar en que mi padre estaba en la puerta de la sala de estar mirando
la televisión y mirándome a mí; no sé por qué,
pero en un momento dado giré la cabeza y me encontré a mi padre
en la puerta tocándose por encima del pantalón del traje exactamente
lo mismo que hacía yo, es decir, sobándose la polla. Nos quedamos
mirándonos, yo rojo como un tomate y él con una cara muy extraña
y no nos dijimos nada, él se dio la vuelta y se fue hacia su cuarto. Yo
pensé que esta vez se había enfadado de verdad, pero a la hora de
la cena no me comentó nada y yo empecé a montarme mi propia película,
es decir, a buscar la forma de que lo prohibido fuera algo real. Ni que decir
tiene que durante toda la cena estuve con las piernas cruzadas, porque mi polla
parecía querer salirse del pantalón del pijama.

Al día
siguiente, por la noche, mi padre estaba acostado ya en su cama y yo en la mía,
cuando se me ocurrió la forma de sacar la conversación. Me fui a
su cuarto con un preservativo en la mano y él me pregunto que si me pasaba
algo. Le dije que no, pero que como siempre me había dicho que podíamos
hablar de cualquier tema sin ningún tipo de problema quería decirle
dos cosas; la primera era que sentía que se hubiera enfadado por el tema
de la película porno, a lo que él me contestó que no se había
enfadado, simplemente había comprendido de repente que con 17 años
su hijo ya no era
ningún niño, sobre todo porque había
podido ver que en algunas cosas había salido a la familia, y riéndose
me pasó la mano por los huevos.


Cuando me preguntó sobre el segundo tema que quería comentarle saqué
lo que llevaba en la mano y se lo mostré, él me dijo que eso era
un preservativo y yo riéndome le dije que ya lo sabía, pero que
el problema era que no sabía muy bien cómo ponérmelo. Él
me miró sorprendido y me preguntó que cómo lo hacía,
y yo ni corto ni perezoso me bajé el pantalón del pijama y como
la tenía medio levantada, la situación acabo de hacer que mi polla
se pusiera totalmente erecta, con mis orgullosos 18 cm, que con 17 años
no estaban nada mal. Mi padre puso cara de sorpresa, pero salió al paso
y me dijo que le explicase cómo me lo intentaba poner. Cogí el preservativo
y me lo puse tal como yo pensaba, entonces mi padre me dijo que había algunas
cosas que hacía mal, como por ejemplo desliarlo primero y no coger con
un pellizco la punta para que no quedase aire dentro. Para mi sorpresa sacó
otro preservativo de su mesilla y cogiendo mi polla, a punto de estallar, me lo
colocó muy suavemente. Yo no sabía en qué pensar para no
empezar a correrme furiosamente, pero lo mejor estaba aún por llegar.


Mi padre me dijo que ahora practicase yo y cuando iba a colocarme otro preservativo
en mi polla, que se movía sola dándome golpes en el estómago,
me dejó de una pieza diciéndome que era mejor practicar en otra
polla distinta, y que él estaba dispuesto a ayudarme en eso. Le miré
sin comprender bien qué era lo que me estaba diciendo, pero lo entendí
enseguida cuando se sacó los pantalones del pijama y con las piernas medio
abiertas se apoyó en la cabecera de la cama. Mis ojos se salían
de las órbitas, y mi padre me dijo que me acercase. No sabía dónde
mirar, ni en qué pensar, porque la situación era como para correrse
sin ni siquiera tocarme. Me dijo que primero debía ponerse un poco "contento"
y para eso empezó a tocarse muy lentamente sin quitarme la vista de encima,
pero yo no podía mirar a otro sitio que no fuera su mano sacando y metiendo
despacio su capullo, agarrando sus cojones o llegando con un dedo hasta la entrada
de su culo; todo esto sin dejar de mirar mi reacción, que no podía
ser otra que la de estar a punto de sufrir un ataque al corazón, y más
cuando su polla empezó a tomar forma. Si mi tío tenía una
polla respetable, mi padre la tiene de exposición. Ante mis ojos apareció
una polla de unos 24 cm y unos 6-7 cm de ancho, con un par de huevos que completaban
un paquete como para estar adorando toda la vida.


Y cuando más absorto estaba contemplando la polla y los huevos de mi padre,
este me dijo que ahora ya tenía una polla con la que practicar la forma
correcta de poner un preservativo. Me acerqué a él y con mucho cuidado
le cogí la polla con las yemas de los dedos, entonces él me indicó
que tenía que cogerla bien para que el condón no se deslizase con
aire ( como si en el preservativo hubiera sitio para algo de aire con esa polla
dentro), así que le cogí la polla por la mitad del tronco, pero
él me dijo que era mucho mejor hacerlo más cerca de los huevos,
por lo que deslicé mi mano por su polla hasta ponerla justo al lado de
sus huevos, los cuales tocaba con mi dedo meñique, y notaba cómo
el vello de su pubis me hacía cosquillas en mi mano. Me dijo que lo primero
era llevar la piel hacia atrás, de forma que el capullo quedase al descubierto;
así lo hice y ante mí apareció un capullo rojo brillante
y con forma de flecha. Apoyé el preservativo en la punta de su capullo
e intenté deslizarlo, pero no podía, a lo que mi padre me dijo que
era mejor mojarlo un poco con saliva, y yo pensé que eso era una invitación,
por lo que me puse delante de él y me metí su capullo en la boca,
no sin cierta dificultad dado el tamaño del mismo. Mi padre se quedó
muy sorprendido y empezó a reírse, le pregunté que de qué
se reía y me dijo que el había pensado en darle un poco de saliva
con la mano, pero que esta forma era mucho más agradable.


Después de eso el preservativo bajó por toda su polla, quedándose
más o menos a la mitad. Yo ya no podía más y mi padre debió
darse cuenta, porque se sacó el condón y me dijo que si necesitaba
correrme podía hacerlo, que estabamos en familia y que no era nada malo,
a lo que yo le contesté que sí, que no podía esperar a ligarme
a alguien y poder sacar toda la leche que se me había acumulado en los
huevos. Él me miró y me dijo que eso no sería necesario,
me cogió la polla y empezó a moverla muy despacio sacando y metiendo
mi capullo, mientras que con la otra mano acariciaba mis huevos y llegaba hasta
mi culo; yo no sabía qué hacer, así que abrí mis piernas
y le dejé hacer. De pronto noté que mi padre ya no tenía
la mano en mi polla sino que la había sustituido por su boca y estaba jugando
con su lengua en mi capullo mientras que intentaba que un dedo se metiera en mi
culo, cosa que consiguió después de mojárselo. No pude aguantar
más y le avisé, pero él empezó a chuparme más
fuerte y me corrí dentro de su boca, notando cómo mi semen salía
con más fuerza que nunca. Me quedé tirado encima de la cama de mi
padre y con una sonrisa estúpida en los labios, cuando vi que había
vuelto a apoyar su espalda en el cabecero de la cama y seguía con su polla
tiesa apuntando al techo.

Me arrodillé
delante de él y empecé a acercarme a su polla que estaba como la
mía hacía sólo unos momentos, dando golpes contra el estómago
de mi padre. Le cogí la polla y la sujeté, de forma que sus huevos
quedaron delante de mi cara; acerqué mi boca y por fin pude probar lo que
tantas veces había servido para que me hiciera pajas. Eran gordos y velludos,
así que primero me metí uno en la boca y después el otro,
intenté hacerlo con los dos pero no pude, así que dejé que
mi lengua siguiera camino y llegué con ella a su culo; pude notar su sorpresa
al sentirme allí, pero parece que le gustó, porque abrió
más las piernas dejándome hacer. Después volví a sus
huevos y empecé a subir mi lengua por la polla hasta llegar al capullo.
Abrí mi boca todo lo que pude, pero sólo logré meterme en
la boca una cuarta parte. Comencé a mover mi lengua rápidamente
por todo su capullo mientras le intentaba meter un dedo en el culo como había
hecho él conmigo. Al final conseguí meterle el dedo y con esa misma
mano le sujetaba los huevos y con la otra le sujetaba la polla mientras le hacía
una mamada de la forma en la que me había enseñado mi tío,
su hermano.

De pronto noté
cómo mi padre se ponía más rígido y me decía
que se iba a correr, que si quería sacarla de la boca, pero yo le metí
más profundo mi dedo en su culo y comencé a mover mi lengua más
rápido. Él levantó su culo, como queriendo enterrar más
profundamente su polla en mi boca y empezó a soltar una cantidad enorme
de semen. Me gustó su sabor entre dulce y salado, pero tuve que sacármela
de la boca porque me estaba ahogando y los últimos chorros me dieron en
la cara.

Mi padre se quedó
mirándome y me dijo que lo que había pasado le había gustado
y no le había parecido nada malo. Yo no dije nada, pero creo que me lo
notó en mi cara de felicidad, porque me abrazó fuerte y me dio un
beso en los labios.

Después
de esto le dije a mi madre que era mejor que fuera a vivir con mi padre para dejarles
a ella y a su nuevo marido más intimidad, además tampoco sería
mucho drama, porque mis padres viven relativamente cerca unos del otro.


Desde ese momento vivo con mi padre y gracias a él, a mi tío y a
sus amigas…ahora disfruto del sexo en todas sus variantes y ninguna me parece
mejor que la otra. Entre todos me han enseñado que en el sexo, todo lo
que te da placer es valido.

Espero
que os haya gustado, y me escribáis sobre lo que os ha parecido a:
POR CUESTIONES DE PRIVACIDAD ESTE EMAIL FUE REMOVIDO


Por favor vota el relato. Su autor estara encantado de recibir tu voto .


Número de votos: 0
Media de votos: 0


Si te gusta la web pulsa +1 y me gusta






Relato: Mi tio y maestro (III)
Leida: 829veces
Tiempo de lectura: 8minuto/s





Participa en la web
Envia tu relato







Contacto
Categorias
- Amor filial
- Autosatisfacci�n
- Bisexuales
- Confesiones
- Control Mental
- Dominaci�n
- Entrevistas / Info
- Erotismo y Amor
- Fantas�as Er�ticas
- Fetichismo
- Gays
- Grandes Relatos
- Grandes Series
- Hetero: General
- Hetero: Infidelidad
- Hetero: Primera vez
- Intercambios
- Interracial
- L�sbicos
- MicroRelatos
- No Consentido
- Org�as
- Parodias
- Poes�a Er�tica
- Sadomaso
- Sexo Anal
- Sexo con maduras
- Sexo con maduros
- Sexo Oral
- Sexo Virtual
- Textos de risa
- Transexuales
- Trios
- Voyerismo
- Zoofilia


Encuestas

Afiliados



























Relatos eroticos de padre e hijasoofilia cjiendo con perro y queda abotoada culo con culorelatos eroticos abuelos nuerasRelatos porno de mujeres perdiendo la virginidadrelatos swingerrelatos lesbicos pornoRelatos de e hijas follando 7Relatos de como me follo mi suegrorelatos morbosos de mujeres en el metroIncesto con la abuela relatadosRelatos de insesto gaysrelatos porno dmbarace a mi madre y mis hermanitasRelatos la rajita caliente de mi hermanaRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatoporno gay en claseMi hermanita de 11 no usa pantaletas relatosRelatos porno hijastraHistorias de putitas y zorritasRELATO EROTICO MI S HIJAS DE OCHO Y NUEVERelatos eroticos gay entre hermanosrelatos xxx compadresRelatos porno de amar filial abuelo aprovechado 2 bdlol.ruRelatos Hombres gay mi abuelorelatos zoofilia de mujerRelatos eroticos de padre e hija/relato33628_Haciendole-un-favor-a-la-vecina.htmlhistorias crossdresserViolaciones disfrutadas relatos xxxmi hijita de 9 añitos relatofollando vecina tetonamii hija me la chupaba confesiónrelarosporno despedida de solterosla hija de mi novia relatosrelato erotico mi hija de 10pornogratis abuelasrelatos porno sobrinadrogue a mi hermanarelatosrelatos porno de zoofilia no consentidorelatos eroticas de papisrelatos eróticos de mama e hijorelatos eroticos trio a mi esposa en una reunionrelatos gay hermanosmi novia follada por su jefe relatorelatos gay el camionero del campoRelato porno del joven negrorelatos la verga de mi hermanorelatos porno gays con morosxxx de animalesabuelo "no rompas la magia del" relato eroticoRelatos eróticos hombres que han desvirgado culitos gaysrelatos xxx las violabanlas mejores pajas gaymaduras vecinasrelatos de sexo gey un adolesente me rompio el culorelato me coji ami tia el culo de gohan relatorelatos cachondos mis hermanas guarras y yoRelato enseñamelo primo relato papa cojenepor el culito a una nina bdlol.ru/relatoRelatos aCuliar catirasrelato manoseando a mi madre dormida xxxrelatos eróticos de incesto gay- mi compadre se convirtió en el macho de mi familiarelatos xxx primitarelatos eróticos realesrelatos orgias familiar xxxtios musculosos follandorelatos pornos de viejos gaysRelato Pornos De Dominacion A Chicos TodoRelatome folle a mi nietaRelato erótico club con sobrinita de siete años mi papi me folla ricobuscador de relatos eróticos de tios eyaculando en la vaginita de sus sobrinasrelato me violo hasta no dar mas pornorelatos hot nenitorelatos de papàs maduros e hijos gaysrelatos eroticos hay cojeme cojeme papiIncesto con la abuela relatadosMe cogi mi hija de diez relatosRelatos porno amor filial mi hija de 11 bdlol.ruMi primita de seis años me toco mi pene relatosRelatos de incesto entre madre hijorelatos sexuales cojida xmi yernoFollando a mi hija de 11 relatos