Me vest�, me maquill� y fuimos a cenar todas juntas

- Que ruleeee esa sangr�iiiiaaaaa � dije.

- Si que ruleeeeeee � dijo mi amiga, que se sentaba a mi
lado.

Salimos del restaurante que todo nos hac�a gracia, nos
metimos en una discoteca y totalmente desinhibidas comenzamos a bailar
contorsion�ndonos y ri�ndonos. La discoteca estaba a reventar, hasta los topes.
Entonces es cuando Carla entr� en acci�n y comenz� a lazarles besos a unos
chicos que estaban sentados en la barra que comenzaron a devolvernos esos besos
y gui�os de ojo, cuchiche�bamos entre nosotros y devolv�amos los gestos.

Eran chicos bastante m�s mayores que nosotras, supongo que se
lo tomaban como un juego, hasta que comenzaron a hablar entre ellos se acercaron
y comenzaron las presentaciones y a bailar con nosotras, poco a poco se fueron
formando parejas. Yo estaba con Carlos, un chico alto, de manos grandes, y una
mezcla de timidez y decisi�n, no hac�a m�s que decirme que si estaba muy guapa,
que si ten�a unos ojos muy bonitos y un pelo muy suave, total que me parec�a un
chico super encantador. Todo iba perfecto hasta que estall� una pelea en la
discoteca, menudo mal rollo se respiraba, yo perd� de vista a mis amigas y
Carlos me invit� a su casa que estaba pegada a la playa, a pocos metros de donde
est�bamos. Estaba un poco aturdida despu�s de la pelea que acab�bamos de ver,
as� que Carlos comenz� a besarme y me dijo que podr�amos seguir en su casa.

Dud� un poco, pero acepte, me convenci� su carita de
cachorrillo abandonado, as� que les envi� un sms a mis amigas dici�ndoles que me
hab�a ido con Carlos y que si alguien preguntaba por mi ellas decir que estaba
con ellas.

Mientras sub�amos por el ascensor de la casa de Carlos me
pregunt�:

- �Estas nerviosa?

- Un poco

- Porque? no tendr�s novio y te estar�s sintiendo culpable,
verdad?

- No, no tengo novio

- No me lo creo... � me dijo mientras met�a la llave en la
cerradura.

Era un apartamento bastante modesto, me dijo si quer�a beber
algo y encendi� una l�mpara que poca luz daba la verdad, nos sentamos en el sof�
y sin decir nada seguimos con lo que hab�amos dejado a medias.

Poco a poco nos fuimos tumbando sobre el sof� y mis manos
t�midas recorr�an su cuerpo, �l hac�a lo mismo conmigo. Hab�a comenzado un poco
dudosa, pero la cosa iba a m�s, era como una bola de nieve que iba creciendo a
medida que descend�a. Fue acarici�ndome los pechos por encima de la ropa, luego
por debajo de la ropa y luego sin ropa. Con tanto roce mi falda hab�a quedado
hecha un buru�o en mi cintura y sus manos se acercaban a lugares m�s �ntimos
sobre mis braguitas. Ah� no pude llegar, me daba un poco de verg�enza tocarle a
�l, Carlos se dio cuenta de eso.

- Qu� pasa? nunca, vaya, eres virgen?

- Si, espero que no te importe

- No, no, claro que no me importa, adem�s no vamos a hacer
nada que tu no quieras.

Esas palabras me tranquilizaron.

- Quieres tocarme � me dijo Carlos

- Si, me gustar�a.

- Pues es muy f�cil � me dijo mientras se deshac�a de sus
tejanos y liberaba su polla.

Me sorprend� al ver una polla en vivo y en directo, era algo
nuevo para mi, comenc� a tocarla t�midamente, a rodearla con mis deditos y
Carlos comenz� a gemir, eso me indicaba que lo estaba haciendo bien, as� que me
relaj� y segu� haciendo mientras Carlos me tocaba, sus dedos comenzaron a
investigar dentro de mis braguitas, que pronto me desprend� de ellas, me
encantaba como me tocaba y su mano dentro de ellas era torpe, funcionaba mejor
sin sentirse oprimida entre la ropa y yo.

- Quieres que te masturbe? � me dijo Carlos � te va a gustar.

Yo asent� con la cabeza y Carlos se puso encima m�o como si
quisiera met�rmela, entonces puse cara de sorpresa:

- No, no, no te preocupes me pongo as� porque roza mi mano
con tu pierna y eso me da placer, tranquila.

Comenz� a mover sus dedos dentro de mi, acariciando mi
cl�toris a la vez, notaba como estaba muy mojada, no sabr�a decir si me met�a un
dedo, dos o tres y ve�a la cara de Carlos disfrutando mientras me masturbaba,
sent�a un calor concentrado en la parte baja de mi ombligo, de pronto sent� como
un pellizco, no s� algo raro:

- Uh! me has hecho da�o!

- Lo siento, perdona he hecho un giro raro de mu�eca, estas
bien? continuamos?

- Si, si estoy bien, sigue por favor

Carlos sigui� masturb�ndome, cuando sent� que el orgasmo me
ven�a, era el mejor orgasmo de toda mi vida, gem�a y jadeaba sin control, me
hab�a masturbado millones de veces pero nunca pens� que que lo hiciera otra mano
ser�a tan placentero, Carlos segu�a masturb�ndome, mientras los �ltimos
escalofr�os del orgasmo me recorr�an, Carlos comenz� a convulsionarse levemente,
se iba a correr, cuando not� algo que me ard�a en mi interior, en alg�n momento
Carlos hab�a cambiado sus dedos por su polla y se corr�a dentro de mi, dej�ndome
una enorme lechada dentro de mi reci�n estrenado co�ito, entonces record� aquel
peque�o pellizco, no pod�a reaccionar y Carlos acab� de vaciar sus huevos dentro
de mi y sali� despacito.

- Lo siento, no he podido evitarlo � me dijo, mientras yo
misma me tocaba y notaba que hab�a semen no s�lo dentro, sino a los alrededores
de mi co�ito, hab�a dejado casi toda la leche dentro, la sent�a caliente,
recorriendo y ba�ando todo mi interior con el riesgo que aquello conllevaba. �
bueno, si hubiera querido me hubiera corrido fuera, pero a las putitas de
discoteca como tu hay que darles una lecci�n de vez en cuando, v�stete que te
acerco a tu casa.

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