Vivo en un edificio, tengo como vecinos a una familia muy
sociable, compuesta por Juan que es de mi edad, por tanto disfrutamos viendo el
f�tbol los fines de semana en la sala de su casa; tiene como esposa a Karina una
hermosa mujer de 38 a�os due�a de un hermoso rostro, una cintura breve, piernas
bien torneadas, pechos grandes y unas nalgas que quitan el aliento cuando se les
contempla, todo gracias a que asiste regularmente al gimnasio.

Tienen una hija de 18 a�os llamada In�s, que a pesar de su
edad heredo de su madre su belleza, una linda chica de piel blanca, con unas
nalgas y unos pechos preciosos, con unas piernas largas, duras y bien torneadas,
ojos color aceituna y un rostro bonito..

Un lunes a medio d�a iba regresando del trabajo cuando me
encontr� a In�s sentada en las escaleras, le hice la pl�tica.

-�Hola In�s!-

-Hola...-

-�Qu� haces?-

-Estoy esperando a mis padres, sal� temprano de la escuela y
se me olvidaron las llaves, y ellos salieron, no se a que horas lleguen-

-Si quieres te invito a mi departamento, en lo que los
esperas-

-Bueno-

Pasamos al cuarto, se sent� en un viejo sof� negro, ella
venia vestida con una blusa blanca, una falda a cuadros y en la cintura su
su�ter escolar gris...

Trate de hacerle pl�tica.

-�Tienes novio In�s?- le pregunte-por que una chica tan linda
como tu debe de recibir muchas propuestas-

Se sonrojo.

-Pues no, no tengo novio aun-

Coloque mi mano sobre su rodilla desnuda mientras la miraba a
los ojos.

-�No?, �Te gustar�a tener uno? �Has tenido alguno?-

-No, no he tenido ninguno, es que me siento preparada-

Al ver que no rechazo mi mano, la sub� por su muslo, debajo
de su falda.

-�Quieres jugar?- me pregunto

-�A que In�s?-

-A que me ense�as cosas de mayores, pero sin llegar al final-

Sin pensarlo puse una mano en su nuca y bese sus labios,
descend� por su barbilla, su cuello, su escote, lentamente fui desabrochando los
primeros botones de su blusa.

Estaba excitada, comenc� a chupar el l�bulo de su oreja, su
respiraci�n se notaba entrecortada, sin dejar de besarla la levante en mis
brazos y la lleve a mi habitaci�n, la deposite sobre mi cama.

Separe sus piernas y me coloque sobre ellas, con ansia
termine de desabrochar su blusa, la levante un poco y se la quite por completo,
le baje los tirantes del brassier y deje sus pechos desnudos.

-�Te hab�an dicho que eres una mujer hermosa?- le comente
mientras sobaba sus pechos, los lam�a y me sujetaba a ellos, los tenia duros,
cuando separaba los labios de ellos se ergu�an aun mas.

Con la mano lo acariciaba sus piernas, le rozaba la vagina
con la punta de los dedos. Me desabroche los pantalones, me los quite al igual
que la ropa interior mi pene ya supererecto apunto hacia ella.

La tome por los brazos y le di la vuelta, como si fuera una
mu�eca la sujete de las manos y las coloque sobre su cabeza amarr�ndolas por las
mu�ecas y comenc� a acariciar otra vez su cuerpo contra el m�o, mientras besaba
su nuca.

Con la respiraci�n entrecortada me dijo que ya no quer�a
seguir jugando, ignorando sus palabras puse mi mano en su cintura y la toque
hasta encontrar sus pantaletas, las que arranque de un solo tiron, frote mi
verga entre sus nalgas.

Le di la vuelta de nuevo y ate sus mu�ecas a la cabeza de la
cama con mi cintur�n quite la sabana y la deje desnuda totalmente, acaricie su
vello pubico con mi nariz impregn�ndome de su agridulce sabor.

-Ahora vuelvo- le dije levant�ndome.

En segundos regrese con un rastrillo para afeitar, sin decir
nada me coloque de nuevo entre sus piernas de rodillas, puse una toalla bajo su
culo y separe bien sus rodillas.

-No te muevas- le dije

Comenc� a deslizar el rastrillo el fri� acero sobre su monte
de Venus

-Te lo dejare como el de una ni�a-

Una vez que acabe limpie con agua los restos de jab�n, estaba
muy excitada. Retire el rastrillo y la toalla, me puse entre sus piernas.

-In�s, te voy a hacer mujer-

Con la punta del pene busque su vagina, hasta que la encontr�

-No por favor, no lo hagas- me dijo mir�ndome a los ojos, sin
embargo en el brillo de sus ojos me dec�a que deseaba que siguiera adelante una
vez que met� la verga dentro de ella, le murmure al o�do.

-Eres preciosa In�s, me siento orgulloso de ser el primero-

De un golpe se la met� hasta el fondo, grito, apret� la
correa que le sujetaba y sacudi� la cintura pero en su rostro se notaba que lo
estaba disfrutando...

Comenc� a moverme, una vez abierto el camino, bombeando poco
a poco unos minutos, cuando sent� su primer orgasmo, los m�sculos de su vagina
me apretaron la verga, dio un grito de gozo y en su rostro se notaba una plena
satisfacci�n. Como no quer�a acabar dentro de ella saque mi verga de su vagina

Aturdida aun desate sus mu�ecas, la coloque de rodillas en la
cama, met� en su boca mi verga con sus fluidos y empec� a moverme mientras ella
me lo leng�eteada feliz. Comenc� a met�rsela y sac�rsela de la boca, estaba
demasiado excitado, finalmente me separe de ella y mi semen salio a borbotones
sobre su boca y cayo sobre la barbilla. Con los dedos recog� algunos restos y se
los met� a la boca, ella como ni�a buena los chupo con ansia hasta tragarlo
todo.

Nos vestimos y ella se fue a su casa, sus padres ya estaba
ah�. Estaba feliz, al igual que ella. Con el paso de los meses se convirti� en
una excelente amante...