Cap�tulo 6

Salimos y la noche estaba bastante
fresca, t�pica de finales de agosto. Terri manejaba mientras yo,
en el asiento del acompa�ante, estaba enmudecido. Mis pensamientos
se encontraban dispersos. Despu�s de varios minutos, decid�
romper el silencio.

- �C�mo pudiste ser
capaz de enga�arme? -le pregunt�.

- En primer lugar, �No trates
de ponerme a la defensiva!. �No te debo ninguna explicaci�n
de nada de lo que he hecho!. En segundo lugar, �C�mo te atreves
a juzgarme, cuando t� trataste de buscar placer fuera de tu matrimonio?

Yo la miraba, incr�dulo

- �Cont�stame! -me
orden�.

- Terri �S� razonable!

- Ser� DIOSA para ti, de
ahora en m�s. La �nica vez que te permitir� que me
llames Terri ser� cuando estemos con familiares y amigos. Y solamente
si te comportas bien. Caso contrario comenzar� a avergonzarte frente
a tus amigos. Si persistes en hac�rmela dif�cil, comenzar�
a avergonzarte frente a tus familiares tambi�n. As� que deseo
que te des cuenta que tienes much�simas razones para portarte bien
conmigo. En el futuro, palabras como razonable o l�gico no tendr�n
ya ning�n significado en nuestra relaci�n. �Realmente
te has jodido esta vez, Mike! -r�o.

- Terri, por favor -supliqu�.

- �Qu� idiota eres!.
Reci�n acabo de decirte que me tienes que llamar Diosa y t�
lo ignoras. �Acaso piensas que esto es una especie de juego?. �Esto
es real, Mike! Caiste en una trampa de la que no podr�s salir nunca
m�s. �Sabes cu�ntas veces quise divorciarme de ti?
Pero yo estaba muy asustada. Hubieses tratado de retenerme de cualquier
manera. �S� c�mo eres! Pero, ahora, yo tengo la manija.
Yo tengo todo el control, Mike -dijo, levantando la voz. - - �Que
pasar�a si yo, simplemente, rehuso a seguir con este juego? �Qu�
suceder�a si pido el divorcio? -pregunt�, ignorando su enojo.

- �Ya sabes cu�l es
la respuesta! �O porqu� te has comido tu semen hace algunos
minutos? �Quieres que la gente sepa que eres un maldito puto, come
semen, pajero, Mike? -r�o.

- �Qu�...? -respond�

- �No te diste cuenta que
Xenia film� todo en una cinta, mientras t� estabas lamiendo
y chupando todo el semen que acabaste por el piso? -dijo sonriendo.

- �Vete a la mierda! -grit�.

- No, eres t� quien se fue
a la mierda.. -respondi� friamente.

- �Esto es un puto chantaje!
-dije indignado.

- Ah, s�...�qu�
tal?. No hay nada que puedas hacer. Ya est�s demasiado metido en
esto. Adem�s �por qu� est�s tan disgustado
y enfadado? Esto es lo que siempre has querido, Mike. �Realmente
te has olvidado que es lo que t� siempre deseaste?. Y no puedes
negar que eran tus deseos, porque nosotras tenemos las pruebas. �Est�s
derrotado, Mike! Completamente. �Tragaste nuestro anzuelo con l�nea
y todo! Cr�eme, Mike. Nosotras hemos cubierto todas las bases. Resistirse
es in�til. Lo �nico que puedes hacer es someterte. -le explic�.

- Terri, te dar� cualquier
cosa que me pidas, pero por favor para esto -le rogu�, asustado,
entrando en p�nico. - - Muchacho, �eres un reverendo nabo!
T� vas a darme todo lo que yo quiera, de todas maneras. �Tu
oferta no tiene sentido! Adem�s, est�s haciendo muchos m�ritos
para que te castigue. Te atreviste a insultarme y persistes en llamarme
Terri, a�n cuando te he ordenado que no lo hagas. Cuando entremos
a casa, voy a mostrarte con que seriedad estoy tomando todo esto -me advirti�,
mientras estacionaba el auto en la cochera. - Mi cabeza giraba sin parar
y no encontraba palabras. Ni bien entramos a casa, Terri me orden�
que fuera arriba, me desnudara y la esperara. Obedec�, r�pidamente,
y esper� nervioso en nuestra alcoba. Se tom� todo su tiempo
y me hizo sudar de los nervios. Diez minutos despu�s, finalmente
subi�. Me orden� que me tirara en la cama, boca abajo. At�
mis mu�ecas, r�pidamente, al respaldo de la cama, a menos
de quince cent�metros del colch�n.

- �Qu� vas a hacer?
-le pregunt�, nervioso.

- Ya ver�s. �Arrod�llate
ahora! -me orden�.

Subi� a la cama y se coloc�
detr�s m�o. Como mis manos estaban atadas, mis hombros y
mi cabeza quedaron por debajo y mi culo qued� totalmente expuesto
hacia ella. Gir� la cabeza por encima de mi hombro, para ver que
estaba haciendo.

- �Te di permiso para mirar?
-me pregunt�.

- No, pero... -trat� de explicarle,
pero me interrumpi�.

- �Pero Nada! -exclam�.

Dio una palmada a mi culo con una
autoridad sorprendente. Yo salt� cuando el sonido reson�
en la habitaci�n.

- �Ouchh! -grit�. No
pod�a creer lo que estaba sucediendo. Aunque yo hab�a fantaseado
con situaciones como estas, docenas de veces, nunca hab�a considerado
que ser�a con mi esposa.

- Este fue el primero de los miles
que recibir�s por a�os. Despu�s de todo tu deseabas
que te dieran chirlos y palizas cuando te lo merec�as, �no
es as�? -pregunt�.

- S�, pero... -trat�
de explicar, pero me interrumpi� nuevamente.

- �Pero? Me parece que eres
un poco lento para aprender -exclam�.

Entonces, golpe� mi culo
a�n mas fuerte

- "Oww.." -reaccion�.

- Probemos nuevamente. �Deseas
que te d� chirlos y palizas cuando te lo merezcas? -pregunt�
con tono sarc�stico.

- S� -respond�.

- Bien, a menudo desear�s
recibir estos castigos porque no te perdonar� ni la m�s ligera
infracci�n. -explic�.

Luego abri� mis nalgas y
coloc� una buena cantidad de fr�o lubricante a lo largo de
mi culo.

- Pero, primero voy a colocar este
tap�n en tu culo. Lo mantendr�s puesto hasta que yo te de
permiso para que te lo saques. �Me has entendido? -pregunt�.

- S� -respond�.

- Estos tapones tambi�n eran
parte de tus fantas�as. �No es as�? -pregunt�.

- S� -admit�. Dado
que ella ya sab�a la respuesta no ten�a ning�n sentido
mentir. Ella embadurn� el tap�n con el mismo lubricante que
hab�a utilizado para mi culo.

- �Te has dado cuenta lo
afortunado que eres de que est� usando este lubricante? -me pregunt�.

- No lo he tenido en cuenta -contest�

- Podr�a sacarte todo el
lubricante, as� lo tomas en cuenta la pr�xima vez -me advirti�.

- Ok, ok. T� ganas. Me he
dado cuenta lo afortunado que soy -le dije.

- Yo siempre gano, puto. Este es,
relativamente, un tap�n peque�o. Tengo dos m�s grandes
que tendr�s que usar muy pronto. Xenia me dijo que tendr�a
que comenzar despacio con tu culo virgen, porque si llegara a rasgarlo
estropear�a nuestra diversi�n por un buen tiempo -me explic�
e insert� totalmente el tap�n. - - Ahora, agregar�
cosas muy desagradables a tu castigo, si llegas a quit�rtelo �me
has entendido? -pregunt�.

- S� -respond�.

- Bien, ahora quiero saber �por
qu� has peleado conmigo durante estos 12 putos a�os por las
tareas de la casa, cuando t� estabas ofreci�ndote para hacerlo
a una perfecta extra�a? -me pregunt� con un tono bastante
irritado.

- Ehh.... -comenc� a responder,
pero ella chasque� mi culo cinco veces. - - �Qu� estabas
por decir? -volvi� a preguntar haci�ndose la distra�da.
Mi culo estaba al rojo vivo.

- Lo siento, dulce -me lament�.

- �Yo NO SERE tu dulce, nunca
m�s!. Soy tu DIOSA y cr�eme, no ser� nada dulce. �M�s
bien ser� como vinagre! Tal vez esto te ayude a recordar -dijo y
nuevamente sopape� mi cola cinco veces m�s. - - �Qu�
castigo piensas que mereces por querer hacerle las cosas de la casa a una
perfecta extra�a, mientras ayudabas a tu esposa lo menos posible?.
Pi�nsalo cuidadosamente, porque si me das la respuesta equivocada
golpear� tu culo tan fuerte que no podr�s sentarte por una
semana -me advirti�.

- Har� todas las tareas de
esta casa, de ahora en m�s -respond�. - �Respuesta
correcta, t� ganas!. �No pondr� un dedo m�s
aqu�, nunca m�s!. Adem�s, desde ahora, yo controlar�
el dinero. �Todo!. Transferir�s las chequeras a mi nombre
y yo te dar� una peque�a pensi�n cada semana. Salvo
para gastos menores, yo tomar� la decisi�n sobre cada compra
de ahora en m�s. Ahora, �qu� castigo piensas que mereces
por ocultar esos 20 d�lares en efectivo, cada semana, durante los
�ltimos doce a�os? -pregunt�.

- Pero s� yo te daba a ti
todo el dinero -respond�. - - �No me digas! �Ya s�!
Durante los pr�ximos 12 a�os recibir�s un latigazo
por cada d�lar que me ocultaste. La cuenta es f�cil, 20 latigazos
por semana durante 12 a�os, si yo no te descarto antes. S�lo
pi�nsalo, tus marcas reci�n sanar�n justo para tu
pr�xima flagelaci�n. Parece apropiado -ella medit�.
- A continuaci�n le dio cinco cachetazos m�s a mi culo. Mis
piernas estaban comenzando a temblar, y me costaba cada vez m�s
soportar el tap�n.

- As� que la idea de feminizarte
tambi�n te despertaba fantas�as, �no es as�?
-pregunt� sarc�sticamente.

- S� -admit�

- Bien, tengo buenas noticias para
ti, puto. Despu�s que te desate, voy a empezar tu feminizaci�n.
Voy a quitar todo el pelo de tu cuerpo, del cuello para abajo. Con el tiempo,
voy a convertir tu culo en una concha, Mike. Y las putas necesitan su concha
para coger regularmente, �no es cierto? -pregunt�.

Permanec� en silencio

Terri perdi� la paciencia
y cachete� mi culo con furia repetidas veces, insultando y gritando
para que le contestase.

- �S�! -finalmente
admit�. Mi cuerpo entero estaba temblando. No podr�a soportar
mucho m�s.

- Tu nuevo nombre ser� Michelle.
Y Michelle se convertir� en una puta, �no es cierto? -pregunt�
con tono agrio.

- �S�! -inmediatamente
respond�, tratando de no correr riesgos. Mis piernas temblaban visiblemente
y yo ten�a que apretar las nalgas con mucho esfuerzo para impedir
que el tap�n se escapara. Sab�a que no pod�a sostenerlo
mucho m�s tiempo.

- Bien, puta Michelle. Vivir�s
para dos causas. Para servirme a mi y a quien yo te diga y para tener tu
concha ocupada tan a menudo como sea posible. Si demuestras ser una puta
obediente, no te exigir� que tomes hormonas femeninas. Pero si eres
desobediente, te obligar� a que las tomes. Eso significa que te
crecer�n los pechos y tus pelotas se encojer�n. Hasta tu
verga se volver� m�s peque�a. As� que te conviene
portarte bien y seguir mis mandatos. Har�s todo lo que yo te diga,
cu�ndo te lo diga y sin vacilaciones, �me entiendes? -exigi�,
con un tono mortalmente serio.

- S� -respond� gesticulando.
Mis rodillas se estaban partiendo y ella ignoraba mis ruegos.

- Una cosa m�s. Si permaneces
obediente, te dar� el privilegio de que contin�es trabajando.
Pero recuerda esto: si haces trampa, Xenia y yo podemos arreglar que chupes
15 vergas por d�a para reemplazar tus ingresos. Si piensas que estoy
exagerando, simplemente �INT�NTALO! �Has entendido?
-pregunt�. - Se hab�a convertido en una loca con poder. No
pod�a pensar en nada que pudiese hacer salvo someterme a sus antojos
o abandonar vergonzosamente el pueblo, con la cola entre las piernas.

- S� -contest�. Pero
ya no pod�a soportar m�s. Finalmente me rend� y me
dej� caer en la cama. El tap�n salt� y cay�
al piso.

- Despreciable puta -maldijo. -
Lo siento, es que.... -trat� de explicarle, pero me interrumpi�.

- �C�llate y abre tu
sucia boca! -me orden�.

Levant� el tap�n y
lo insert� en mi boca.

- Ahora mantenlo ah� hasta
que yo te diga que hagas otra cosa -orden�

Ten�a un sabor amargo y �spero,
por el lubricante. Ella me desat�, entonces.

- �Entra al ba�o! -me
orden�.

R�pidamente obedec�
y esper� por ella. Entr� y comenz� a colocar una espuma,
cremosa y espesa, sobre mi cuerpo, del cuello para abajo. En instantes
empez� a picarme todo el cuerpo. Despu�s de algunos minutos
la sustancia comenz� a irritar mi piel. Ella me hizo esperar algunos
minutos m�s. Cuando me orden� que me enjuagara, realmente
me sent�a muy inc�modo. Vi con angustia como todo el pelo
se desprend�a de mi cuerpo junto con la sustancia espumosa, pero
por lo menos el enjuague me alivi� f�sicamente.

Mi piel se hab�a suavizado
como la de un beb�. Terri inspeccion� que no quedase ni un
pelo sobre mi cuerpo. Satisfecha, me dio una toalla para que me secara.
Luego, aplic� un aceite perfumado sobre mi cuerpo, el cual, completamente
pelado, brill�.

Finalmente me permiti� sacar
el tap�n de la boca. Ten�a much�sima saliva acumulada
ya que no hab�a podido tragar. Me dirig� hacia el lavabo
y la escup�.

- Puedo lavarme los dientes -pregunt�

- C�mo castigo por haber
escupido sin permiso, �No puedes! -contest�

- �Pero c�mo hubiese
podido pedir permiso con la boca repleta de saliva? -le cuestion�

- Simplemente, trag�ndola
primero. De ahora en adelante, vas a usar muy seguido tu lengua para limpiarme
el culo. Incluso la usar� para reemplazar al papel higi�nico,
as� que m�s vale que te vayas acostumbrando al sabor. -respondi�.

Yo la miraba incr�dulo, pero
ella s�lo se re�a de m�.

- Me alegra saber que Xenia tiene
planes similares a los m�os en lo que respecta a la limpieza de
su culo. Me encantar�a saber qu� sabor tendr� el culo
de Xenia, luego de todo un d�a de trabajo -se pregunt� sonriendo.

- �S�gueme! -me orden�.

Nos dirigimos al dormitorio principal.
Abri� uno de sus cajones y sac� varios vestidos femeninos.
Me dio un par de bragas francesas de seda negra.

- �P�ntelas aqu�!
-orden�

Me las puse r�pidamente.
La seda se ve�a muy sexy contra mi piel totalmente rasurada. Varios
minutos despu�s me encontraba vestido con un sost�n y ligas
negras. Mi verga, apretada por la seda, comenz� a hincharse.

- �Qu� puta que eres,
Michelle! -dijo, d�ndose cuenta

Puso una peluca sobre mi cabeza
y demor� unos segundos arregl�ndola.

- Te dejar�s crecer el pelo.
En pocos meses tendr�s el largo suficiente como para no tener que
usar m�s peluca -coment�. Y estaba en lo cierto. Mi pelo
ya estaba alcanzando sobrepasando el cuello de las camisas. En pocos meses
m�s no necesitar�a usar pelucas.

- No me molestar� en maquillarte
esta noche. De todas maneras el maquillaje se echar�a a perder cuando
pases la pr�xima hora rindi�ndole culto a mi culo y a mi
concha con tus labios y tu lengua. �Ahora date vuelta y ag�chate!
-me orden�. Nuevamente me coloc� lubricante por toda la raya
de mi culo.

- No lo hiciste nada bien la �ltima
vez que te puse el tap�n. As� que ahora probaremos con uno
m�s grande. �Abre las nalgas! -orden�.

Lentamente, fue introduciendo el
tap�n. Gem� y me estremec� ligeramente cuando ella
introdujo la parte m�s ancha dentro de mi culo. El resto del tap�n,
luego, se introdujo f�cilmente.

- �As�, Ouuuu!. A mi
putita le gusta, �no es as�? -dijo en tono burl�n.
Se puso frente a m� y me acarici� ligeramente la verga, notando
su dureza, por lo que ri� perversamente. - - Ahora s�bete
las panties y aseg�rate de retener el tap�n esta vez -me
advirti�.

Me las sub�, pero mi verga
estaba demasiado dura como para ser contenida por la seda. Mi verga resbal�
sobre la pierna izquierda y qued� erecta formando un �ngulo
de 45 grados.

Terri ri� nuevamente.

- �Me agrada que Michelle
se sienta tan sexy! Si el s�lo tener un tap�n en "su
concha" lo pone tan duro, no veo la hora de observar c�mo va
a responder cuando se la est�n cogiendo. -medit� en voz alta.

Lo que dijo me hizo pensar que Xenia
no ser�a la �nica que romper�a mi culo. Sent�
nuevamente esa, ya familiar, sensaci�n de humillaci�n y sumisi�n.
La hab�a sentido ya muchas veces antes, durante mis fantas�as
sumisas. Una gota de semen se asom� en la punta de mi verga.

Ella me observ� por un momento
y pareci� haber le�do mi mente.

- Esto es REALMENTE lo que quer�as,
�no es cierto? -pregunt�, a�n con un poco de incredulidad.

Permanec� en silencio, con
mi verga parada.

- Aunque no me has contestado, �lo
puedo ver en tus ojos! -exclam�

Di vuelta la cara, totalmente avergonzado.

- �M�rame! -me orden�

Volv� a girar la cabeza hacia
ella, evitando mirarla a los ojos.

- �M�rame a los ojos!
-volvi� a ordenarme.

Cuando lo hice, sent� lo
expuesto que me encontraba, as�, sumiso, ante alguien que iba a
sacar cualquier ventaja de m�, hasta que se cansase. Se r�o.
En ese momento, me di cuenta que ninguno de los dos sab�a hasta
d�nde pod�amos llegar. Hab�a un largo juego por delante.
Un juego muy excitante para ella y muy humillante para m�.

- �Ohhh. Amo comenzar a hacerte
pagar por estos doce a�os de mierda! -me dijo. De pronto, tomo con
sus manos el corpi�o relleno que yo ten�a puesto y apret�
mis pezones con tal fuerza que por un momento pens� que me los arrancar�a.

- �Ow, ow, ow, ow! -grit�
repetidamente de dolor.

Cre� en su amenaza. Aunque
ella estaba empezando a asustarme, mi verga continuaba erecta.

- As� que t� fantaseabas
sobre el culto del culo, �no es as�?. Bien...�prep�rate
para la primer sesi�n, puta! -dijo, mientras quitaba su equipo,
lentamente. �Dios, ella era tan bonita!

Se tir� en la cama, boca
abajo, de manera felina y seductora. Instintivamente, sub� a la
cama y me coloqu� sobre ella.

- Quiero que tu primer sesi�n
de culto del culo sea una experiencia especial e inolvidable para ti, as�
que comenzaremos por all�. Pero cuando fantaseabas con dar ba�os
de lengua a tu Ama, �pensaste en el placer que puedes brindar entreg�ndote
a las axilas, las tetas, la concha, el culo y los pies? -pregunt�

Me qued� callado.

- �As� que t�
lo has pensado! �Eres realmente una puta! Bien, me imagino que debo
entender que lo disfrutar�s -r�o.

Permanec� en la cama y esper�.

- �Mete tu nariz, aqu�!
-me orden�, mientras abr�a sus piernas. Me coloqu�
en posici�n y la punta de mi nariz toco su culo.

- �Detente ah�! �Respira
profundamente, puta! Respira despacio y profundamente durante un tiempo
-me instruy�.

Su culo era perfecto y yo comenc�
a embriagarme con toda esa lujuria sumisa. Me hizo oler su culo por m�s
de un minuto. Luego me hizo lamerle la raya en toda su longitud, trabajando
m�s concentradamente en el orificio anal. Ten�a un gusto
amargo, pero la intensa fiebre de humillaci�n y sumisi�n
me permiti� disfrutar la experiencia.

Pronto, ella ten�a mi lengua
profundamente metida en su culo. �vidamente, comenc� a penetrarle
con mi lengua durante largos minutos, hasta que ella se dio vuelta y me
orden� que rindiera culto a su concha, tambi�n. Lleg�
al orgasmo muchas veces.

Debido a mi elevada excitaci�n,
el tap�n volvi� a caerse, antes de su �ltimo orgasmo.
Cuando ella acab�, yo acab� con ella mojando toda la cama.
Cuando se dio cuenta �se enfureci� totalmente! Para entonces
la mayor parte de mi semen hab�a mojado las s�banas. Me hizo
lamer todo el semen y me prometi� un ejemplar castigo, para el pr�ximo
d�a, por haber acabado sin su permiso. Nuevamente puso el tap�n
en mi boca y me oblig� a tenerlo all� durante toda la noche.
Me hizo dormir la noche entera en el suelo, a los pies de la cama, con
el tap�n en la boca.